Aprovechando sus amplias redes de información y las competencias y experiencia de su personal técnico, la FAO presta un asesoramiento independiente en materia de política y planificación agrícolas, y de las estructuras administrativas y jurídicas necesarias para el desarrollo. La Organización asesora también en materia de estrategias nacionales para el desarrollo rural, la seguridad alimentaria y la mitigación de la pobreza. Con respecto a la biotecnología, la FAO puede prestar asesoramiento jurídico y técnico a los gobiernos en esferas como la elaboración de estrategias nacionales en materia de biotecnología, los derechos de propiedad intelectual y la bioseguridad:
Estrategias nacionales en materia de biotecnología
La FAO puede asistir a los países miembros en el establecimiento de las prioridades para la biotecnología dentro del amplio contexto de sus necesidades y políticas de investigación agrícola o en la identificación de biotecnologías apropiadas, habida cuenta de todos los impactos negativos posibles, y orientar sobre su uso. Algunos países han pedido la asistencia de la FAO en la elaboración de políticas en materia de biotecnología y, para fines de 2006, se han terminado o se están ejecutando proyectos de cooperación técnica (PCT) en algunos países como Bangladesh, Nicaragua, Paraguay y Swazilandia, mientras otros se encuentran en diferentes fases de formulación. Las estrategias nacionales de biotecnología incluyen elementos de política de bioseguridad. En la elaboración de una estrategia nacional de biotecnología, la FAO alienta a los países a utilizar un método participativo.
Derechos de propiedad intelectual
Los derechos de propiedad intelectual (DPI) sobre los productos (por ejemplo, las variedades vegetales) y procesos biotecnológicos (por ejemplo, las técnicas usadas en la generación de variedades vegetales o en la selección del ganado) pueden influir en la aplicación de la biotecnología a la alimentación y la agricultura, por ejemplo repercutiendo en la investigación agrícola. Es un hecho reconocido que los DPI son decisivos para el crecimiento de la industria biotecnológica, en cuanto incentivo clave para las inversiones, y que la falta de protección de los DPI en un país puede limitar el acceso a los resultados de la biotecnología que proceden de otras partes. Por otro lado, el hecho de que muchas de las nuevas tecnologías sean mantenidas por el sector privado suscita una cierta preocupación acerca del impacto de los regímenes actuales en materia de derechos de propiedad intelectual en la entrega de bienes públicos en la investigación agrícola. Además, como la frontera entre el descubrimiento y la invención se ha ido desdibujando, la protección de los DPI se ha vuelto particularmente controvertido en lo que se refiere al uso de los recursos genéticos, así como al intercambio justo y equitativo de los beneficios derivados de tal uso. Para satisfacer las necesidades y cumplir las prioridades nacionales, la FAO presta asistencia y asesoramiento técnicos en relación con las opciones actuales en materia de protección de los DPI.
Bioseguridad
La bioseguridad es un término general que se usa para describir los marcos de políticas, reglamentaciones y gestiones de lucha contra los riesgos potenciales relacionados con la entrega, el uso y el movimiento transfronterizo de los OMG. Para los sectores de la alimentación y la agricultura, los riesgos potenciales que han de considerarse en el contexto de la bioseguridad son los que se refieren a la salud humana a través del consumo de alimentos o la exposición a productos agrícolas; los impactos en la preservación de las plantas y/o la salud y vida de los animales; y las repercusiones ambientales, tales como los posibles efectos negativos en la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica, incluidos los recursos genéticos para la alimentación y la agricultura. La FAO sostiene que, en cuanto contribución a una producción agrícola y alimentaria sostenible, la bioseguridad puede abordarse adecuada y eficazmente con el método holístico de Bioseguridad elaborado por la Organización, que permite el anñalisis y gestión de los riesgos biológicos para la inocuidad de los alimentos, la preservación de los vegetales, y la vida y salud de los animales, así como los impactos de importancia en la diversidad biológica. En este contexto, la FAO alienta un enfoque participativo de todas las partes interesadas en los diferentes componentes del marco de bioseguridad.
Última actualización de la página: mayo de 2007
