Reunión bilateral con el Excmo. Sr. Paulo Rangel, Ministro de Estado y de Asuntos Exteriores de Portugal

©FAO/Giulio Napolitano
Roma - El Sr. QU Dongyu, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se reunió con el Excmo. Sr. Paulo Rangel, Ministro de Estado y de Asuntos Exteriores de Portugal, en la Sede de la FAO en Roma.
El Ministro expresó el agradecimiento de Portugal a la FAO, describiéndola como una organización mundial fundamental para proteger el derecho humano más básico, a saber, el derecho a la alimentación de todas las personas. El Excmo. Sr. Rangel agradeció especialmente al Sr. QU la labor de la FAO durante la pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), al haber desempeñado un papel esencial para prevenir la inseguridad alimentaria grave. El Ministro profundizó en la cooperación con la Organización en 2025 y mencionó el Foro Mundial de la Alimentación, previsto para octubre, como una prioridad especial para lograr una gran participación. Asimismo, se refirió a la Alianza Mundial contra el Hambre y la Pobreza, de la que Portugal es miembro fundador, y señaló que el país estaba comprometido a apoyar su secretaría, albergada en la FAO.
El Director General dio la bienvenida al Ministro y le dio las gracias por sus firmes palabras de apoyo. Asimismo, reconoció el papel efectivo que desempañaba Portugal en el escenario mundial como fuerza para el bien y recalcó la oportunidad histórica que brindaba la Alianza Mundial contra el Hambre y la Pobreza para ayudar a los más necesitados. A continuación, afirmó que la inversión temprana de Portugal en la Alianza Mundial fue fundamental y manifestó que esperaba que se garantizara su éxito a través de un apoyo generalizado.
El Sr. QU agradeció el apoyo de Portugal al Foro Mundial de la Alimentación y describió el importante deber de la FAO de reunir a los países con inversores y otras partes interesadas, en particular los jóvenes, los agricultores y los Pueblos Indígenas.
Ambos se mostraron de acuerdo en la urgente necesidad de contar con inversiones e innovación para transformar los sistemas agroalimentarios mundiales a fin de lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible y garantizar las cuatro mejoras, a saber, una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor, sin dejar a nadie atrás.