COMUNIDAD DE ESTADOS INDEPENDIENTES
ARMENIA* (1 de agosto)
Unas fuertes lluvias y granizadas caídas en junio causaron daños importantes a la infraestructura y algunos daños a los cultivos.
En 1996, el estado arrendó a los agricultores otras 16 000 hectáreas de tierras. En respuesta a unos buenos incentivos a través de los precios (el precio del trigo importado ha fluctuado en torno a 220-260 dólares EE.UU. por tonelada a lo largo de todo el año), y a un aumento de la ayuda para el desarrollo del sector agrícola (incluido un crédito a la producción a corto plazo), la superficie sembrada con cereales que se cosecharán en 1997 se expandió en un 9 por ciento a 201 000 hectáreas. La sembrada con cereales de invierno, principalmente trigo, aumentó a 104 000 hectáreas, y también aumentaron las plantaciones de cereales de primavera. Sin embargo, debido a las malas condiciones del tiempo imperantes al principio de la primavera y a los daños causados a los cultivos en algunos lugares durante el verano los rendimientos deberían ser menores que en 1996. Según las previsiones oficiales, la cosecha de cereales y legumbres de 1997 no igualará la cosecha buena obtenida en 1996 (328 000 toneladas).
La cadena de distribución de trigo/pan se ha (en gran medida) privatizado. El Gobierno ha quedado con el control de algunas fábricas de harina, y las poblaciones que reúnen las condiciones pueden conseguir en los mercados estatales pan subvencionado (0,36 dólares EE.UU. por kg, tres cuartas partes del precio de mercado). La utilización interna de cereales en 1997/98 se calcula en alrededor de 635 000 toneladas: 440 000 toneladas para el consumo humano y el resto para semillas, piensos y otros usos. Si la cosecha de cereales de 1997 fuera del orden de los 295 000 toneladas, se necesitarían importar unas 340 000 toneladas. Ha aumentado la capacidad para importar comercialmente. Tras la liberalización de los precios, y ha disminuido la necesidad de ayuda alimentaria para programas. En comparación con las 105 000 toneladas entregadas en 1996/97, en 1997/98 la necesidad de ayuda alimentaria podría descender a 60 000 toneladas, de las cuales ya se han prometido 39 000 toneladas.
Después de haber descendido considerablemente en 1991-1993, a partir de 1994 el PIB ha ido creciendo en forma lenta pero constante. No todos se han beneficiado del proceso de reforma, sobre todo las poblaciones que viven en lugares transitorios a raíz del terremoto de 1988, las familias con un solo progenitor y otros grupos vulnerables, como los ancianos, los pensionados, los refugiados y los individuos alojados en instituciones estatales. El Gobierno estima en 400 000 las personas vulnerables (sobre una población de alrededor de 3 millones de habitantes). Pero las necesidades humanitarias pendientes ya no se consideran una situación de urgencia.
Siguen necesitando ayuda alimentaria selectiva unas 300 000 personas, de las cuales el PMA presta ayuda a 220 000 personas vulnerables, (refugiados y personas desplazadas en el interior del país) con raciones complementarias de productos alimenticios básicos que forman parte del programa de ayuda de socorro y alimentos por trabajo actualmente en ejecución. Las necesidades del PMA hasta mediados de 1998 totalizan 20 000 toneladas y el resto no cubierto se sitúa en 16 500 toneladas, por un valor aproximado de 7,7 millones de dólares EE.UU.. Como la distribución de alimentos de socorro es segura solamente hasta septiembre, se pide urgentemente a los donantes que presten una ayuda adicional.
AZERBAIYAN (8 de agosto)
El país ha pedido la ayuda de los donantes internacionales para combatir el efecto de las inundaciones que tuvieron lugar en julio y causaron víctimas, destruyeron 7 000 casas y provocaron daños considerables a la infraestructura, incluidos la red eléctrica, caminos, puentes y cultivos. El Gobierno ha estimado que de resultas de las inundaciones quedaron parcial o totalmente dañados los cultivos del 15 por ciento de la superficie de cereales y el 1 por ciento de la superficie de algodón. Otros cultivos también sufrieron daños. Además, se prevé que los rendimientos medios de las cosechas serán bajos debido a la escasez de semillas mejoradas, maquinaria y piezas de repuesto, la escasa aplicación de fertilizantes y el deterioro de la infraestructura de riego. Entre los desincentivos a la producción pueden mencionarse el ritmo lento del proceso de privatización de las tierras y el pago irregular a los miembros de las fincas estatales. Ello no obstante, la superficie sembrada con cereales que se recogerán en 1997 aumentó en 80 000 hectáreas, o sea 13 por ciento. Para el 8 de agosto se había cosechado un millón de toneladas de trigo y cebada, 33 000 toneladas más que en el período correspondiente del año pasado. Según los indicios, la producción podría ser algo mayor que el año pasado en el que de acuerdo a los datos oficiales se había recogido casi un millón de toneladas, cuando en realidad se había cosechado un 10 por ciento más, si se tiene en cuenta que la producción de las tierras estatales se destina al uso privado.
La privatización de la Corporación estatal del pan y la liberalización de la producción y distribución de trigo/pan han dado lugar a un fuerte incremento de las importaciones comerciales de cereales por parte del comercio privado, que en los cuatro primeros meses de 1997 ha duplicado las importaciones de harina (unas 123 000 toneladas) con respecto al mismo período de 1996, y ha importado además alrededor de 75 000 toneladas de trigo. En 1997/98, la necesidad de importación de cereales se estima en menos de 535 000 toneladas de cereales, principalmente trigo. La mayor parte se importará comercialmente, pero las poblaciones vulnerables seguirán necesitando ayuda de socorro.
Actualmente, el PMA asiste con raciones alimentarias complementarias a 155 000 personas, principalmente personas desplazadas en el interior del país que viven en edificios públicos y campamentos. La distribución de alimentos de socorro del PMA está asegurada hasta principios de 1998, y las necesidades del PMA hasta mediados de 1998, aún no cubiertas, son de 5 000 toneladas de alimentos, por un valor de 2,7 millones de dólares EE.UU..
BELARUS(1 de agosto)
Las perspectivas para la cosecha de granos (cereales y legumbres) de 1997 han empeorado algo pero en general siguen siendo satisfactorias. En junio unas lluvias torrenciales acompañadas de vientos fuertes han causado víctimas, daños considerables a la infraestructura y daños localizados a cultivos en 70 000 hectáreas. En cuanto a los aspectos positivos, la superficie sembrada con cereales de invierno y primavera ha aumentado marginalmente. Hasta finales de junio las condiciones de crecimiento han sido en general beneficiosas, con un tiempo lluvioso que proporcionó suficientes reservas de humedad para el desarrollo de los cultivos de primavera, pero ahora hace falta con urgencia un tiempo más seco para facilitar la recolección. La disponibilidad de fertilizantes y otros productos agroquímicos ha mejorado respecto al año pasado, pero sigue siendo escasa y limitando los rendimientos. Por lo que se refiere a los aspectos negativos, las pérdidas de cosechas podrían aumentar este año ya que los cereales están aplastados y la posibilidad de conseguir maquinaria agrícola en buen estado sigue siendo problemática. Mientras no se disponga de nuevas informaciones, la FAO continúa pronosticando la cosecha de cereales de 1997 en alrededor de 6,3 millones de toneladas, frente a los 6 millones de toneladas del año pasado.
FEDERACION DE RUSIA (1 de agosto)
Los primeros resultados de la cosecha apuntan a una producción de cereales mayor que en 1996, pero la persistencia de las lluvias y la escasez de combustible están impidiendo las labores de recolección. La situación de los cultivos en pie es buena y los pronósticos oficiales relativos a la cosecha oscilan entre 70 y 80 millones de toneladas, pero el resultado definitivo dependerá en último término de las condiciones del tiempo hasta el final de la cosecha, la disponibilidad de combustible y maquinaria en buen estado, y la puntualidad de las actividades de recolección. Si bien el crédito agrícola ha sido sumamente limitado este año, la mayoría de las fincas se las han arreglado para sembrar cereales a expensas de otros cultivos menos rentables. Para facilitar las operaciones de recolección hace falta que el sistema bancario comercial ponga a disposición créditos adicionales. Pero como más del 70 por ciento de las fincas están endeudadas, puede ser que algunas no reúnan las condiciones para obtenerlos. Además, algunas de las grandes industrias están invirtiendo en la producción agrícola para asegurar suministros alimentarios a los empleados o para transacciones de trueque.
La superficie total sembrada con cultivos disminuyó en un 4 por ciento a 95,7 millones de hectáreas, pero la de cereales descendió en solamente 400 000 hectáreas, o sea el 1 por ciento, debido a los precios remunerativos y a la buena demanda de cereales alimenticios. La superficie sembrada con trigo se mantuvo estable en 25,7 millones de hectáreas, mientras que la de cereales forrajeros siguió disminuyendo debido a una ulterior reducción de los inventarios de animales y la escasa demanda de cereales para pienso, a pesar de que la cosecha del año pasado fue pequeña. Este año las condiciones de crecimiento han sido buenas en la mayoría de las principales zonas productoras, si bien en la Siberia oriental y en Altay Krai los cultivos han tenido poca humedad y se prevén rendimientos menores que el año pasado. La aplicación de fertilizantes y plaguicidas ha aumentado, pero sigue siendo reducida. Aunque el agotamiento de los suelos debido a varios años consecutivos de insuficiente fertilización y escasez de liquidez debería mantener los rendimientos en un nivel bajo, los primeros resultados de la cosecha apuntan a una producción que podría ser notablemente mayor y de mejor calidad que la del año pasado. La cosecha de 1996 se estima oficialmente en sólo 69,3 millones de toneladas, pero probablemente fue un 10 por ciento mayor. Salvo la persistencia de lluvias durante el período de la recolección y teniendo en cuenta las previsiones de rendimientos buenos, el pronóstico de la FAO relativo a la cosecha de cereales y legumbres de 1997 es de 77 millones de toneladas, alrededor de un millón de toneladas más que la producción estimada en 1996. Se pronostica que la producción de trigo aumentará a 40 millones de toneladas respecto de los 38,5 millones de toneladas del año pasado, debido a unas perspectivas mejores para la cosecha tanto de invierno como de primavera. La producción de cereales secundarios podría superar ligeramente el nivel de 34 millones de toneladas del año pasado, ya que la disminución de la superficie sembrada se ve compensada por la mejora de los rendimientos. La producción de arroz debería seguir disminuyendo, a 340 000 toneladas, bajo la presión de las importaciones, que son más baratas, y la de legumbres podría aumentar a alrededor de 2 millones de toneladas a causa de la mejora de los rendimientos. Con todo, el resultado final dependerá decisivamente de las condiciones atmosféricas que imperen hasta la terminación de la recolección.
La demanda de cereales ha descendido de forma pronunciada en los últimos años debido a una fuerte disminución del número de animales, la utilización mayor de gramíneas forrajeras y el aumento de las importaciones de productos pecuarios en lugar de cereales para pienso. Se estima que en 1996/97 las importaciones netas de cereales han disminuido a alrededor de 1,3 millones de toneladas, principalmente trigo y cebada procedentes de Kazajstán y Ucrania, y en 1997/98 el comercio de cereales no debería ser mayor.
El PMA está terminando el suministro de ayuda alimentaria complementaria a unas 90 000 personas desplazadas en las zonas circundantes de Chechenia. Sus operaciones se suspenderán en septiembre de 1997.
GEORGIA* (4 de agosto)
Se prevé una cosecha muy buena, a pesar de algunos daños a los cultivos causados por las lluvias torrenciales caídas en junio. Este año es más fácil que los productores puedan conseguir semillas, fertilizantes y microcréditos, y la liberalización de la cadena de producción y distribución de cereales/pan ha sido un buen incentivo para aumentar la producción. Las informaciones oficiales sobre la superficie sembrada son muy contradictorias, pero concuerdan en que la sembrada con trigo ha aumentado de forma pronunciada. La diferencia en los precios ha animado a los productores a sembrar trigo en vez de frutales y viñedos. La superficie arada en el invierno para la siembra de cereales aumentó en al menos 50 000 hectáreas y las condiciones de crecimiento para los cultivos de invierno han mejorado notablemente respecto al año pasado. Según los pronósticos oficiales iniciales, la cosecha de cereales de invierno de 1997 (principalmente trigo) alcanzó las 400 000 toneladas, superando con mucho la producción récord de 177 000 toneladas del año pasado. También debería aumentar la producción de maíz.
Se prevé que la cosecha de trigo de 1997 satisfará más del 50 por ciento de la demanda interna, por lo que las importaciones de cereales deberían disminuir en 1997/98 de forma pronunciada. Las promesas de ayuda alimentaria para 1997/98 ascienden a poco más de 100 000 toneladas; el resto, estimado en 300 000 toneladas, debería importarse comercialmente.
Tras un descenso muy pronunciado registrado al principio de los años noventa, el PIB y la producción agrícola se están recuperando, pero la falta de una infraestructura adecuada para la elaboración sigue siendo un obstáculo importante para la expansión. La tasa de desempleo sigue siendo alta y se sigue necesitando ayuda alimentaria para su distribución selectiva a las poblaciones más vulnerables, entre las cuales se cuentan los refugiados y las personas desplazadas en el interior del país. El grupo beneficiario de la ayuda de socorro del PMA ha pasado de 300 000 a 120 000 beneficiarios, a los que hay que agregar 50 000 personas que se beneficiarán de las actividades de alimentos por trabajo. La distribución de alimentos del PMA está asegurada hasta mediados de octubre, después de lo cual se necesitarán otras 12 000 toneladas (5,3 millones de dólares EE.UU., aproximadamente) para seguir distribuyendo alimentos hasta mediados de 1998.
KAZAJSTAN (4 de agosto)
Las perspectivas para la cosecha no están claras debido sobre todo a la falta de crédito. Las explotaciones agrícolas privatizadas recientemente no pueden obtener crédito de los bancos, ni se cumplen las directivas dadas por el gobierno a la industria petrolera de suministrar, a crédito, combustible a los agricultores. En consecuencia, la superficie sembrada con cultivos de primavera disminuyó a 14,5 millones de hectáreas. La superficie total sembrada con cereales y legumbres para la cosecha de 1997 ha descendido en 1,6 millones de hectáreas a 15,5 millones de hectáreas, nivel muy inferior a los 17 millones de hectáreas que se habían previsto. La superficie sembrada con trigo pasó de 12,2 millones de hectáreas en 1996 a 11,4 millones de hectáreas. Los rendimientos previstos para los cultivos secundarios de trigo de invierno son satisfactorios y en conjunto los cultivos de primavera se han beneficiado de las lluvias, que llegaron en el momento oportuno. El resultado de las plantaciones de primavera dependerá, en último término, del tiempo que haga en los próximos meses pero también de la disponibilidad de combustible y maquinaria para la recolección. Aunque las condiciones del tiempo y los rendimientos fueran mejores que el año pasado, es posible que no se alcance el objetivo de producción fijado en 14 millones de toneladas de cereales debido a la disminución de la superficie sembrada y a los problemas financieros que tienen muchas fincas. Según los indicios actuales, la cosecha de cereales se acercará a los 12,5 millones de toneladas estimados por la FAO para el año pasado.
Según los informes oficiales, la cosecha de cereales de 1996 fue de 11,6 millones de toneladas, pero extraoficialmente se estima que ha sido de hasta 3 millones de toneladas más, debido a que los agricultores tratan de obtener la mayor cantidad posible de ingresos en dinero y en especie. Se considera que en 1996/97 el país ha exportado alrededor de 3 millones de toneladas, y que el próximo año seguirá siendo un país exportador.
KIRGUISTAN, REPUBLICA DE (9 de agosto)
Ha comenzado la recolección de la cosecha de trigo de invierno y se prevé otra cosecha buena, superior a la de 1,4 millones de toneladas del año pasado. La superficie sembrada con cereales de invierno aumentó en un 14 por ciento a 370 000 hectáreas y este año las condiciones de crecimiento han sido en general satisfactorias si bien es probable que debido a la escasez de insumos y créditos y a una inadecuada rotación de cultivos el rendimiento sea inferior al potencial en las fincas pequeñas.
La situación general de los suministros de alimentos es satisfactoria, pero el nivel de vida ha ido descendiendo de forma pronunciada desde 1991. Aunque la economía está empezando a recuperarse respecto al impacto producido por el proceso de transición, la pobreza sigue siendo un fenómeno generalizado debido al subempleo y los bajos ingresos. El país ha llegado a ser autosuficiente en cereales.
MOLDOVA (1 de agosto)
Las condiciones de crecimiento han favorecido las cosechas de 1997 pero ahora se necesita un tiempo más seco para recoger la cosecha de trigo de invierno. La cosecha de cereales y legumbres debería ser marcadamente mejor que el nivel reducido por la sequía del año pasado (1,8 millones de toneladas). Pero el endeudamiento de las explotaciones agrícolas limita sus recursos para comprar insumos y puede ser que no se alcance el objetivo de producción fijado en 2,9 millones de toneladas en 850 000 hectáreas. Aunque la primavera tardía y la escasez de liquidez y combustible retrasaron la siembra de los cereales de invierno, reduciendo probablemente la superficie sembrada, se espera que los rendimientos sean mejores que el año pasado. Los cultivos de maíz de primavera se han beneficiado de unas buenas condiciones de humedad. La FAO estima provisionalmente la cosecha de cereales de 1997 en alrededor de 2,5 millones de toneladas.
TAYIKISTAN* (6 de agosto)
Este año se espera una cosecha muy buena como consecuencia del aumento de la superficie sembrada con trigo, las buenas condiciones de crecimiento y una disponibilidad algo mejor de insumos proporcionados a través de programas de ayuda. Ya ha comenzado la recolección, y teniendo en cuenta las condiciones tan variadas de la actividad agrícola, el rendimiento del trigo de invierno en las fincas provistas de insumos oscila entre 5 toneladas por hectárea en tierras de regadío buenas y 900 kg por hectárea en suelos salinos y malos. Dado que una cantidad cada vez mayor de tierras de regadío se están desplazando del algodón al trigo y que ha aumentado, según se estima, la superficie total sembrada con cereales, la cosecha de cereales de 1997 se pronostica provisionalmente en 600 000 toneladas, frente a 400 000 toneladas obtenidas el año pasado.
Si este pronóstico llega a concretizarse, la necesidad de importación de cereales en 1997/98 podría descender a alrededor de 250 000 toneladas, para lo cual ya se han prometido 35 000 toneladas de ayuda alimentaria para programas. Además, el país necesitará ayuda alimentaria humanitaria para distribuirla a las poblaciones vulnerables, dada la enorme pobreza que cunde como consecuencia de muchos años de receso económico y de constantes disturbios civiles.
Unas 750 000 personas particularmente vulnerables siguen necesitando asistencia humanitaria. Entre ellas, las poblaciones desplazadas como consecuencia de los disturbios civiles, los ancianos y pensionados, las viudas de la guerra con hijos, las familias numerosas con un solo progenitor, los huérfanos y los incapacitados/inválidos. El PMA presta ayuda de urgencia a 485 000 personas vulnerables, mientras otras 220 000 reciben ayuda de otros organismos. Además, unas 15 000 personas recibieron ayuda del PMA en el marco de programas en régimen de alimentos por trabajo. El PMA estima que las necesidades totales de alimentos de socorro para 1997 son de 46 580 toneladas, por valor de alrededor de 22 millones de dólares EE.UU., de las cuales el PMA proporcionaría unas 29 000 toneladas, por valor de 16 millones de dólares EE.UU. Se prevé que el resto será proporcionado por las ONG en el marco de los programas que están ejecutando. El PMA seguirá coordinando actividades con esas organizaciones para asegurar que no haya superposición o duplicación de tareas y para abarcar la mayor cantidad posible de personas afectadas.
TURKMENISTAN (1 de agosto)
Está casi por terminar la cosecha de cereales de invierno (principalmente trigo y algo de cebada) y, según informes oficiales, la producción será de 640 000 toneladas, volumen considerablemente mayor que la mala cosecha del año pasado (400 000 toneladas), debido a una disminución de la superficie de regadío marginal sembrada con trigo y un aumento de los precios al productor (en el caso de que fueran poco remunerativos). La cosecha secundaria de primavera (maíz y arroz) podría llevar la producción total hasta alrededor de 750 000 toneladas, pero así y todo seguiría siendo una producción inferior a la media. El ambicioso objetivo de alcanzar la autosuficiencia en cereales está resultando irrealista dada la escasez de tierras de labrantío, la falta de fertilizantes e insumos y los bajos precios al productor, todo lo cual, unido a unas técnicas de cultivo deficientes y un bajo nivel de rendimiento, ofrece pocos incentivos para que los agricultores cultiven. El país ha ido realizando muy gradualmente el proceso de reforma, tanto es así que recién en diciembre de 1996 (mucho después del período de siembra de los cereales de invierno) se han tomado algunas disposiciones que podrían servir de estímulo para los agricultores privados, como el aumento del precio de compra a casi 80 dólares EE.UU. por tonelada.
El país cuenta con suficiente gas natural y el déficit de trigo debería enjugarlo con importaciones comerciales. En 1996/97, es probable que se hayan importado alrededor de 500 000 toneladas de cereales. La utilización interna de cereales en 1997/98 se calcula en alrededor de 1,1 millones de toneladas de cereales, incluidas 650 000 toneladas destinadas al consumo humano directo. Teniendo en cuenta que la cosecha de cereales es de alrededor de 735 000 toneladas (con arroz en equivalente de elaborado), la necesidad de importación de cereales en 1997/98 se estima en torno a las 360 000 toneladas, principalmente trigo. La utilización de cereales para pienso ha disminuido debido al fracaso de la cosecha del año pasado, y el número de los animales acusa un descenso pronunciado.
UCRANIA (4 de agosto)
La situación actual de los cultivos y los primeros resultados de la cosecha justifican los pronósticos oficiales que señalan para la cosecha de cereales de 1997 una notable mejoría. Según los últimos informes, la superficie sembrada con cereales ha aumentado de forma pronunciada, a 15,3 millones de hectáreas, (1996: 13,2 millones de hectáreas) de las cuales debería cosecharse la mayor parte a menos que las condiciones del tiempo comprometan la recolección. En las fincas estatales reorganizadas se han sembrado unos 11,2 millones de hectáreas y el resto en el sector privado. Este año las condiciones de crecimiento han sido buenas, con humedad suficiente para los cultivos tanto de invierno como de primavera en la mayoría de las zonas. Fue necesario resembrar solamente 650 000 hectáreas de los 7,5 millones de hectáreas de cultivos de invierno, y el 90 por ciento de los cereales de invierno están madurando en condiciones buenas o satisfactorias. También los cereales de primavera se están desarrollando bien: el 80 por ciento está en buenas condiciones. En consecuencia, los rendimientos medios de los cultivos deberían ser notablemente mejores que el año pasado y la cosecha de cereales de 1997 (cereales y legumbres) se pronostica provisionalmente en torno a los 35-37 millones de toneladas. La producción de trigo podría aumentar a 19-20 millones de toneladas (con respecto a los 15 millones de toneladas estimados en 1996), debido también al aumento de 1,2 millones de hectáreas de la superficie sembrada. Se prevé que aumentarán tanto la superficie como el rendimiento de los cereales secundarios y la producción podría girar en torno a los 14-15 millones de toneladas (1996: 10 millones de toneladas), según la proporción de superficie de maíz que se cultive para grano y no para ensilado. También debería recuperarse la producción de arroz y legumbres.
Estas estimaciones son provisionales y podrían tener que rebajarse si la recolección se viera obstaculizada por lluvias o insuficiente disponibilidad de maquinaria, combustible y piezas de repuesto.
Pese a la decepcionante cosecha de 1996 y a las restricciones impuestas al transporte de cereales después de la cosecha, algunas fuentes bien informadas señalan que se han exportado hasta 2,6 millones de toneladas de cereales a otros estados de la CEI o de fuera (Polonia). Si se llega a concretizar el pronóstico sobre la cosecha, la situación de los suministros alimentarios debería mejorar considerablemente en 1997/98, lo que permitiría la reposición de las existencias después de la reducción del año pasado, el aumento de las exportaciones y una mayor disponibilidad de piensos.
El Gobierno ha aprobado una ley mediante la cual se establecen contingentes de importación e impuestos a los productos agrícolas, como cereales y productos pecuarios. Los contingentes de importación no pueden superar el 10 por ciento de la producción interna del año anterior.
UZBEKISTAN (4 de agosto)
A pesar de la disminución de la superficie de regadío sembrada con cereales y de los informes anteriores sobre las malas condiciones de crecimiento para los cereales de invierno de regadío registradas durante el otoño, loa informes provisionales sobre la cosecha señalan que los rendimientos medios han mejorado. Los últimos informes oficiales señalan que se sembraron 1 490 000 hectáreas con dichos cereales y que el rendimiento medio (peso en silo) de los 1,1 millones de hectáreas cosechadas hasta ahora es de 2,4 millones de toneladas por hectárea, 9 por ciento más que el año pasado. Según la proporción de las tierras de regadío y de secano cultivadas, los indicios actuales señalan que la producción de trigo y cebada de 1997 podría ser del orden de los 3,0-3,3 millones de toneladas, y la producción total (incluidos el maíz y arroz sembrados en primavera), del orden de los 3,5-3,7 millones de toneladas, frente a los 3,4 millones de toneladas estimados en 1996.
El país necesita alrededor de 5 millones de toneladas de cereales por año para satisfacer las necesidades del consumo interno de cereales, y el déficit de 1,5 millones de toneladas debería importarse comercialmente. En julio el precio regulado del pan aumentó en un 42 por ciento a 20 soum (0,31 dólares EE.UU.) por 600 gramos.
CE (10 de agosto)
Los últimos indicios siguen apuntando a otra producción de cereales superior a la media en la Comunidad en 1997 aunque la calidad de muchos cultivos podría ser menor de lo normal. El último pronóstico de la FAO cifra la producción de cereales de la CE en 1997 en 202 millones de toneladas, nivel inferior a la producción sin precedentes de 208 millones de toneladas del año pasado pero, así y todo, muy superior a la media de los últimos cinco años. Se estima que la superficie total ha aumentado en alrededor del 2 por ciento, pero los rendimientos deberían ser inferiores a los niveles extraordinarios del año pasado. El potencial de los cultivos se vio afectado en muchas partes por las condiciones secas imperantes al principio de la temporada; además unas precipitaciones fuertes caídas recientemente, particularmente en el sur del Reino Unido y Alemania, están impidiendo la maduración y recolección de los cultivos, y existe la preocupación de que disminuyan el rendimiento y la calidad. La mayor parte de la disminución de la producción de cereales de este año se da en el trigo, que ahora se pronostica en alrededor de 95,5 millones de toneladas, poco menos de lo previsto y unos 4 millones de toneladas menos que el año pasado. Según los pronósticos, la producción total de cereales secundarios descenderá sólo marginalmente, de 105 millones de toneladas en 1996 a alrededor de 104 millones de toneladas.
ALBANIA (1 de agosto)
Las perspectivas para las cosechas de cereales de 1997 se mantienen inalteradas con respecto al último informe. La producción de cereales estará muy por debajo del potencial pero algo más arriba que el año anterior. La producción de trigo se pronostica entre 340 000 toneladas y 350 000 toneladas, aproximadamente, frente a sólo 316 000 toneladas en 1996. De esta cantidad, sin embargo,se prevé que sólo una parte pequeña entrará al mercado interno y el resto quedará en manos de los productores para consumo, piensos o semillas que se utilizarán en la próxima cosecha. En consecuencia, en la campaña comercial 1997/98 el país seguirá dependiendo mucho de las importaciones de trigo para la producción de pan, especialmente en las zonas urbanas y en las poblaciones rurales de la montaña. Tras las dificultades experimentadas el año anterior para cubrir las necesidades de trigo, también en 1997/98 será problemático conseguir las importaciones necesarias. Aunque el nivel de las importaciones de trigo y harina de trigo que ingresaron por el puerto de Durres han aumentado algo en junio, fueron muy inferiores a lo que se necesita cada mes y además las cuatro fábricas principales no están funcionando. Por lo demás, el tamaño pequeño de los envíos de trigo importado hace que los costos de manipulación sean relativamente altos y repercutan en los precios al consumidor.
Según los primeros indicios, si los agricultores pueden realizar sus intenciones la superficie que se sembrará en otoño con trigo de invierno seguirá recuperándose. Sin embargo, la mejora de la producción dependerá en gran medida de que se puedan conseguir semillas de calidad durante el período de siembra.
BOSNIA Y HERZEGOVINA* (8 de agosto)
La producción agrícola sigue recuperándose como consecuencia de la gradual normaliza-ción de las actividades económicas y de mercadeo, unida a mayor disponibilidad y menores costos de los insumos. Las perspectivas para la cosecha de trigo de 1997 siguen siendo favorables y la producción total podría aumentar en un 4 por ciento a 328 000 toneladas. Esto se debe totalmente a la mejora de los rendimientos en la república de SRPSKA, ya que en la Federación de BiH, que no tiene ventaja comparativa en cuanto a la producción de trigo, la producción debería descender a causa de la disminución de la superficie sembrada y de los rendimientos. Se prevé que en ambas repúblicas aumentará de forma pronunciada la superficie sembrada con maíz como reacción a la gradual recuperación de la industria pecuaria y el trastorno de las actividades industriales y, si predominan condiciones atmosféricas normales, se pronostica que la producción será mucho mayor. También es probable que la producción de papa continúe su tendencia ascendente.
La situación de la seguridad alimentaria ha mejorado pero queda un gran déficit estructural de trigo, el principal alimento básico. Las importaciones de trigo necesarias en 1997/98 se pronostican provisionalmente en unas 265 000 toneladas, principalmente para la Federación de BiH, lo que representa un aumento del 24 por ciento con respecto al año anterior. El aumento se debe a un incremento de las necesidades de consumo a raíz de un crecimiento del 10 por ciento de la población residente y a una disminución de la producción en la Federación de BiH que, en conjunto, han compensado con creces la disminución de las necesidades de consumo de trigo per cápita.
El PMA presta ayuda a 1,5 millones de personas afectadas por la guerra (incluidos refugiados y personas desplazadas) a quienes distribuye alimentos de socorro. Durante el período comprendido entre el 1º de agosto y el 31 de diciembre de 1997 el PMA necesita para esta población 46 000 toneladas de alimentos, de las cuales quedan pendientes 21 000 toneladas por un valor de 11 millones de dólares EE.UU.
BULGARIA (1 de agosto)
En las últimas semanas han mejorado algo las perspectivas para la cosecha de cereales de 1997. Los resultados obtenidos hasta ahora de la cosecha de cereales de invierno apuntan a unos rendimientos mayores de lo previsto, y la llegada de algunos chaparrones aislados en la segunda quincena de julio mejoraron la disponibilidad de humedad para el desarrollo de los cultivos de verano que habían quedado afectados por la sequía anterior. Según los informes, para el 20 de julio se había recolectado un tercio de la cosecha de trigo de invierno, con un rendimiento medio de alrededor de 3,25 toneladas por hectárea. Todavía es demasiado pronto para hacer una estimación exacta de la cosecha de trigo, ya que cualquier empeoramiento de las condiciones atmosféricas podrían afectar los cultivos en pie, y los rendimientos varían mucho de región en región. Sin embargo, es probable que la producción final sea muy superior a lo que se había previsto anteriormente (entre 3,5 millones de toneladas y 4,0 millones de toneladas), lo que reducirá bastante o eliminará del todo la necesidad de importaciones en la actual campaña comercial.
CROACIA (7 de agosto)
La cosecha de cereales de 1997 podría ser mayor que la del año pasado, ya que la superficie sem-brada con cereales ha aumentado de forma pronunciada con la reintegración de territorios anterior-mente inaccesibles. Las condiciones de crecimiento para la cosecha de trigo han sido variadas, pe-ro la disminución de los rendimientos del trigo se ha visto compensada parcialmente por el aumento del 20 por ciento de la superficie sembrada, a 250 000 hectáreas, y la producción se estima oficial-mente en 884 000 toneladas, 19 por ciento más que el año pasado y suficiente para satisfacer las necesidades internas. Hasta ahora las perspectivas para los cereales de primavera son satis-factorias. El Gobierno ha proporcionado fondos para la campaña de siembra, con el fin de ayudar a los agricultores estatales y privados a comprar combustible, fertilizantes y productos agroquímicos.
ESLOVENIA (28 de julio)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 1997 son satisfactorias y la producción debería ser semejante al nivel de alrededor de 500 000 toneladas del año pasado.
ESTONIA (1 de agosto)
La superficie sembrada con cereales ha disminuido ligeramente, pero hasta ahora las condiciones de crecimiento han sido en general satisfactorias y la cosecha de cereales de 1997 podría alcanzar las 600 000 toneladas, que la acercarían al nivel bueno del año pasado. En general, los suelos son bastantes malos y el país cuenta con poca ventaja comparativa en cuanto a producción de cereales. Aunque la productividad podría aumentar gracias a una cierta recuperación en la utilización de insumos y la adopción de tecnologías mejores, ello llevaría bastante tiempo. La demanda de alimentos ostenta signos de recuperación, pero el exceso de capacidad de la industria pecuaria mantiene en un nivel bajo la demanda de cereales y los ingresos agrícolas.
EX REPUBLICA YUGOSLAVA DE MACEDONIA (1 de agosto)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 1997 son satisfactorias y la producción debería recuperarse del nivel reducido por la sequía del año pasado a un volumen situado entre 550 000 y 600 000 toneladas.
HUNGRIA (1 de agosto)
Unas lluvias torrenciales caídas en julio han impedido la recolección del trigo pero mejoraron las condiciones para el desarrollo de la cosecha de maíz. Si bien por ahora el retraso de la recolección es moderado, es probable que la calidad de la cosecha de trigo se vea afectada por la humedad y la relación entre el trigo panificable de alta calidad y el trigo forrajero debería ser menor de lo normal. El último pronóstico oficial relativo a la producción de trigo en 1997 es de 5 millones de toneladas, muy superior a la cosecha reducida por la sequía de 1996 (3,9 millones de toneladas). A raíz de las últimas lluvias, han mejorado las perspectivas para la cosecha de maíz de verano, y ahora se espera que la cosecha sea igual, al menos, a la cosecha buena de 6 millones de toneladas del año pasado.
LETONIA (1 de agosto)
Las perspectivas son variadas. Este año, las cosechas de cereales de 1997 se han beneficiado de unas condiciones de humedad favorables, por lo que se puede esperar un rendimiento bueno de los cereales de invierno. El aumento de los precios de los cereales en 1995/96 y 1996/97 ha dado a los agricultores una mayor capacidad para autofinanciarse la producción, y una utilización de fertilizantes y créditos agrícolas podrían beneficiar los rendimientos. Sin embargo, la industria pecuaria sigue en receso y es probable que este año siga bajo presión debido a la extensión del acuerdo de libre comercio de los países bálticos a los productos agrícolas de la región. Como en los países vecinos los precios de los alimentos al por menor tienden a ser más bajos, ello podría disuadir a los agricultores de aumentar la producción de cereales de primavera.
LITUANIA (1 de agosto)
Las perspectivas iniciales para la cosecha de cereales de 1997 siguen siendo satisfactorias. La siembra de los cereales de primavera ha terminado en condiciones buenas y ha aumentado la superficie sembrada. Según las estimaciones oficiales, la superficie total sembrada con cereales que se cosecharán en 1997 ha aumentado en un 4 por ciento a 1 160 000 hectáreas, pero en 1997 los rendimientos de los cultivos deberían ser algo menores que el año pasado. Las proyecciones oficiales cifran la producción total entre 2,6 millones de toneladas y 2,8 millones de toneladas, cercana al nivel del año pasado. Es probable que los ingresos de los agricultores disminuyan a raíz de la eliminación de la subvención al trigo panificable comprado en el marco de contingentes determinados por el estado, y de la cantidad considerable de existencias de harina y productos pecuarios que se han acumulado.
POLONIA (10 de agosto)
Unas lluvias torrenciales seguidas de inundaciones, caídas en julio, han retrasado la recolección y causado importantes pérdidas de cosechas en las zonas meridionales más afectadas. Según las últimas estimaciones, han quedado destruidas unas 12 000 hectáreas de cereales, lo cual teniendo en cuenta el rendimiento medio previsto, podría mermar la cosecha potencial de 1997 en unas 500 000 toneladas a un millón de toneladas, principalmente trigo y cebada de primavera y, en menor medida, centeno. El potencial anterior de los cultivos apuntaba, sin embargo, a otra cosecha buena, de suerte que aún teniendo en cuenta las pérdidas recientes el último pronóstico oficial de agosto cifraba la producción de cereales de 1997 en alrededor de 24,5 millones de toneladas, frente a 25 millones de toneladas en 1996. El Gobierno ha asegurado que no debería haber riesgo de escasez de cereales en el corriente año ya que, incluso después de las pérdidas previstas, la producción total de cereales de 1997 alcanzaría un nivel bueno y el organismo del mercado agrícola estatal (ARR) y los mayoristas poseen una gran cuantía de reservas.
REPUBLICA CHECA (1 de agosto)
Las intensas precipitaciones caídas desde principios de julio han causado grandes inundaciones en la parte oriental del país. Se estima que unas 130 000 hectáreas de tierras agrícolas han quedado lavadas en las localidades más afectadas, y que las lluvias torrenciales han provocado el encamado de los cultivos y el retraso de la recolección en una extensión muy amplia. Antes de las lluvias e inundaciones, el último pronóstico oficial de junio relativo a la cosechas de cereales de 1997 había cifrado la producción en cerca de 7 millones de toneladas. Aunque todavía es demasiado pronto para evaluar con precisión el alcance de los daños, hay indicios de que las pérdidas sufridas en la región podrían ser de 500 000 toneladas a un millón de toneladas. El Gobierno ha informado que no se preveía una gran escasez en el mercado interno en conjunto, ya que el país contaba con reservas suficientes para compensar una cosecha menguada. Se están adoptando, sin embargo, algunas medidas provisionales para el caso de que se necesiten aumentar mucho las importaciones. Además, el Gobierno está organizando una forma de compensación a los agricultores afectados por los desastres para que el próximo año sigan produciendo.
REPUBLICA ESLOVACA (1 de agosto)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 1997 han empeorado a raíz de las lluvias torrenciales seguidas de inundaciones caídas en julio. Se señala que al 24 de julio alrededor del 4-5 por ciento de los cultivos de cereales estaban inundados, y que la región de Trnava (sudeste de Eslovaquia) era la más afectada. Antes de los fenómenos atmosféricos mencionados, la cosecha de cereales de 1997 se calculaba en poco más de 3,6 millones de toneladas, lo que representa un aumento del 10 por ciento aproximadamente respecto a 1996. Todavía no se conocen las consecuencias totales de los daños causados a los rendimientos medios de los cereales, pero es improbable que se vuelvan a alcanzar los niveles superiores a la media anteriores, y la producción será inferior a lo que se había previsto.
RUMANIA (10 de agosto)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 1997 han empeorado algo a raíz de las lluvias torrenciales y las inundaciones de principios de agosto. Los últimos pronósticos oficiales cifran la cosecha de trigo de 1997 en 6,9 millones de toneladas, frente a los 7,1 millones de toneladas previstos anteriormente. Pero si las condiciones del tiempo no mejoran rápidamente para el resto de la recolección, las pérdidas podrían ser mucho mayores. Ello no obstante, es improbable que la producción de trigo descienda tanto como la cosecha tan menguada del año pasado (3,1 millones de toneladas), además de que la situación de los suministros de cereales del país podría mejorar algo en la presente campaña comercial.
YUGOSLAVIA, REP. FED. DE (SERBIA Y MONTENEGRO)* (11 de agosto)
Pese a las fuertes lluvias y granizadas caídas en junio y los primeros días de julio, que ralentizaron la recolección y redujeron la calidad de los cereales, la cosecha de trigo de 1997 se pronostica en 2,8 millones de toneladas, considerablemente mayor que la del año pasado debido a unos mejores rendimientos medios y a un brusco aumento de la superficie sembrada con trigo, que de 200 000 hectáreas pasó a 818 000 hectáreas.