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La slivicultura en un país del Himalaya - Bhután

Esta entrevista para Unasylva ha sido realizada en Bhután por Jenny Devitt, periodista independiente británica que colabora habitualmente en la prestigiosa serie de la BBC, Farming World. La misma periodista ha realizado las otras dos entrevistas más breves incluidas aquí y ha escrito la introducción y los comentarios.

Entrevista con Dasho Chenkhap Dorji, ex Director de Montes del Gobierno de Bhután (A. LE GARSMUER)

· El pequeño reino de Bhután, en el Himalaya, ha emprendido una política forestal orientada hacia el futuro que resulta poco común, quizás por tratarse de un país rico en recursos forestales que podrían aprovecharse comercialmente y convertirse en una importante fuente de divisas.

Los bhutaneses conceden máxima prioridad a la conservación de sus bosques y recursos naturales. Casi el 70% de este reino montañoso está cubierto de vegetación natural y bosques, con una gran variedad que va desde las zonas tropicales del sur, donde una pequeña parte del país limita con las llanuras meridionales del Ganges, hasta la vegetación subalpina al norte, ya en el Himalaya, pasando por las variaciones de subtropicales caducifolias, coníferas mixtas y alpinas y templadas caducifolias.

La actual política del Gobierno, aplicada desde 1974, nació en parte como consecuencia de las preocupantes observaciones sobre el agotamiento de los recursos forestales en los países vecinos y en otros países asiáticos. Dasho Chenkhap Dorji, hasta hace poco Director de Montes del Gobierno de Bhután fue, por tanto, quien se encargó más directamente de formular la política oficial. En esta entrevista con Unasylva explica esa política y sus antecedentes.

Unasylva: ¿Podría describimos la actual política forestal de Bhután?

Dasho Chenkhap Dorji: Nuestro objetivo fundamental es la conservación. Para nosotros es lo principal, ya que vivimos entre montañas y nuestra explotación forestal no va ni debe ir nunca dirigida exclusivamente a la obtención de ingresos directos. Damos más importancia a los ingresos y beneficios indirectos, como el equilibrio ecológico, la ordenación de las aguas y la conservación de los suelos. Para lograr en parte ese objetivo hemos iniciado proyectos forestales de carácter social en los que el Gobierno distribuye gratuitamente plantines y los agricultores tratan de plantar el mayor número posible de árboles en las tierras de su propiedad.

Pero, ¿por qué se adoptó una política tan clarividente ya a principios del decenio de 1970?

A pesar de que el Gobierno de Bhután no es muy rico y de que necesitamos ingresos, al ver las consecuencias de la anterior explotación forestal y los destrozos causados en los lugares accesibles por la agricultura migratoria, los incendios forestales y - en algunos lugares - el pastoreo abusivo, llegamos a la conclusión de que, por el momento, no era aconsejable una explotación forestal en gran escala. Preferimos esperar y tratar de dar a la ordenación forestal una base sólida para luego desarrollarla en el futuro. Por supuesto, en todo momento hemos tratado de aprender con los errores ajenos, sobre todo los cometidos en las zonas próximas del Himalaya. En esas zonas, la desaparición de los bosques ha originado numerosas inundaciones y otros desastres naturales. No queremos que esto vuelva a ocurrir en nuestro país.

BHUTAN

Evidentemente, una de las principales razones de que ustedes conserven todavía la mayor parte de sus bosques es la baja densidad demográfica. (La población de Bhután se calcula en poco más de un millón de habitantes; la superficie es de casi 47 000 km2.) Pero si aumentara la población, ¿habría fuertes presiones para una explotación prematura de esos bosques?

Creo que la escasez de población ha contribuido al éxito de los esfuerzos de conservación. Indudablemente, cuando aumente la población, aumentará la presión sobre los bosques. Sin embargo, el Gobierno está adoptando medidas para que la población se aparte un poco, en sentido profesional, de las actividades agrícolas y dependa menos de los bosques. Algunos pueden dedicarse a actividades industriales y creo que la presión no será tan fuerte, aunque algo si aumentará.

No obstante, ustedes dependen casi totalmente de la madera como fuente de combustible, calor y luz, ¿no es cierto?

Hasta ahora hemos dependido por completo de los bosques para satisfacer nuestras necesidades energéticas. Sin embargo, el Gobierno considera que cuando se ponga en marcha nuestro primer gran proyecto hidroeléctrico de Chukka (realizado con ayuda del Gobierno indio y destinado a suministrar electricidad a Bhután y, sobre todo, a/norte de la India NdR), serán muchas las aldeas que puedan tener alumbrado y calefacción eléctricos. En las aldeas del interior, donde los elevados costos impiden la llegada de las líneas de transporte de energía, vamos a construir pequeñas plantas hidroeléctricas, capaces de atender las necesidades de cada aldea, y de esta manera reduciremos la presión sobre los bosques.

¿Cuál es la política en cuanto a la corta de árboles para leña?

Los campesinos pueden recoger madera de árboles muertos, caducos y secos de los bosques próximas sin pagar ningún impuesto. Para ello no necesitan solicitar permiso. En las zonas urbanas, la población tiene que pagar un impuesto y además conseguir un permiso. Creo que, en comparación con otros países, el costo de la madera no es demasiado elevado; es muy razonable.

En cuanto a la plantación de árboles, ¿se conceden subvenciones a los agricultores para ayudarles a cubrir los gestos?

No existen subvenciones en efectivo. Lo único que podría considerarse como subvención es que les ofrecemos gratuitamente asesoramiento y plantines, que pueden obtener en los viveros próximos a sus casas.

¿Qué proporción de la superficie forestal pertenece al Estado y cuál a la población de las aldeas?

Básicamente, en Bhután todos los bosques pertenecen al Estado. Sin embargo, hay algunas parcelas muy pequeñas, quizá de una hectárea por hogar, que se mantienen para la recolección de hojarasca, es decir montes o bosques totalmente privados. El resto, quizás el 99% del total, es propiedad del Estado.

En uno o dos valles próximos a la capital hamos observado señales de lo que parece una grave deforestación. ¿Esa deforestación es antigua o reciente?

Todas las superficies que presentan una deforestación grave o total datan al menos de hace 70 u 80 años. Ahora las estamos recuperando con plantaciones y programas de conservación, dejando que el bosque se regenere naturalmente.

¿Qué se hace para que esa política oficial de conservación y de aprovechamiento prudente de los bosques tenga aceptación entre los habitantes de las zonas más alejadas, que quizás carecen de la debida educación o información? Por otra parte, ¿cómo puede el Gobierno evitar la deforestación y los incendios forestales?

Para evitar los incendios y otros peligros - deliberados o accidentales - debemos sobre todo establecer una red de guardias forestales que cubra todo el país. Dada la falta de preparación y de instalaciones, es muy difícil utilizar los medios de comunicación para llegar a la población y por eso hemos tratado de dar algunos conocimientos de silvicultura a los guardias forestales, los cuales recuerdan continuamente a los campesinos los inconvenientes de las cortas excesivas y de otras prácticas.

Uno de los principales problemas de su país es la gran escasez de mano de obra. ¿Cómo puede asegurarse una vigilancia adecuada de las reservas de caza?

Desde luego, el problema es ahora tremendo, pues la extensión es enorme y el personal con que contamos muy reducido. Para paliar esta escasez, estamos intentando conseguir la ayuda de la población a través de los contactos que antes he mencionado. Además buscamos la colaboración de los agricultores y de otras personas a quienes proporcionamos subvenciones en forma de productos forestales. Ellos, por su parte, nos dan información que nos ayuda a proteger los bosques y la fauna en general.

MUJER Y NIÑO BHUTANESES la leña es casi su único combustible (F. MATTIOLI/PMA)

¿No es posible que estas políticas gubernamentales sean niel vistas por la población local? ¿No pueden interpretarse como una interferencia del Gobierno central en asuntos que son tradicionalmente de competencia local?

Desde luego hubo cierto malestar entre la mayoría de la población de Bhután cuando se creó el Departamento de Montes, pues hasta entonces todos habían actuado con plena libertad. Podían conseguir toda la leña que necesitaban cerca de sus casas sin tener que solicitar ningún permiso. Pero ahora, después de un período de más de diez años de aplicación de las actuales políticas, se han convencido de que lo que el Gobierno está haciendo es acertado y redunda en su provecho; de que, al proteger sus bosques y crear otros nuevos junto a sus casas, en definitiva ellos ahorrarán mano de obra y el bosque mejorará.

Escuela de montes de Taba

PINOS EN EL BHUTAN CENTRAL una política orientada a la conservación (F. MATTIOLI/PMA)

Bhután posee una sola escuela de montes. Se encuentra en Taba, en el extremo norte del valle de Thimphu. Consta de un pequeño grupo de edificios de una sola planta y de terrenos perfectamente cuidados con pequeñas parcelas experimentales donde se cultivan plantines y plantas para consumo humano y comerciales. En ese centro. un pequeño número de bhutaneses realiza cursillos de capacitación básica en silvicultura. antes de convertirse en guardias y técnicos forestales.

A diferencia de los complicados cursos con gran número de disciplinas que se imparten en los países occidentales. los cursos de Taba son sencillos y tratan de enseñar. los rudimentos de la silvicultura y de la ordenación forestal. El curso para los guardias forestales dura sólo seis meses y el de técnicos forestales un ano. Algunos de los alumnos proceden de departamentos de la administración y ya tienen ciertos conocimientos sobre la materia, pero otros vienen de la enseñanza primaria y sus conocimientos son escasos o nulos.

La escuela se estableció originariamente en 1971. en el sur de Bhután. pero por problemas de comunicación y de asistencia médica se trasladó a su emplazamiento actual en 1977. Hasta 1984 se habían concedido 364 títulos de guardia forestal y 36 de técnico forestal. y 24 de los guardias habían realizado nuevos cursos de repaso.

Como dice el director de la escuela. Tikaram Giri. «cuando salen de aquí, la principal misión de los alumnos es ir a las zonas rurales y fomentar la participación pública en las actividades forestales. explicar a la población por qué es preciso proteger los bosques. por que y cómo saldrán beneficiados ellos mismos. Damos especial importancia a las principales causas de la destrucción forestal: el fuego, la agricultura migratoria, la corta abusiva y el pastoreo excesivo. Nuestro país es sumamente montañoso y la superficie se erosiona muy rápidamente dado lo escarpado del terreno. Si hay abusos en el pastoreo o en las cortas o se produce un incendio. nuestro personal puede avisar. por ejemplo, al jefe de la aldea. Este puede convocar a un grupo de aldeanos a quienes se explicará por qué el Departamento de Montes pide a la población que proteja los bosques».

En las aulas hay gráficos ilustrados y carteles donde se representan los distintos tipos de plantas y de arboles, la germinación de las semillas, los sistemas de raíces, etc., y frases llamativas que explican las terribles consecuencias de un aprovechamiento indebido y negligente de las tierras y montes. En una de las clases hay una serie de maquetas pintadas, de escayola y de tierra, que representan gráficamente los resultados de la destrucción del monte: pequeñas cárcavas atraviesan un paisaje desnudo. ilustrando la erosión del suelo: en otra maqueta, llamas de papel atacan a los árboles reproducidos a escala. Fue el mismo Tikaram Giri quien hizo esas maquetas. por considerar que son un material didáctico sencillo y eficaz.

«Nuestro programa de capacitación - dice «consta de un 40% de teoría y un 60% de prácticas sobre el terreno. Lo que hacemos es lo siguiente: por la mañana temprano, damos las clases teóricas. y por la tarde tratamos de ocuparnos del mismo tema pero sobre el terreno. Además, los alumnos realizan un viaje de formación de dos meses: los llevamos a distintas zonas forestales para que puedan identificar las especies locales y les explicamos cómo pueden cuidar las plantaciones y cómo clarearlas. Examinamos los efectos de la erosión de los suelos, donde se produce. y las posibilidades de la ordenación fluvial.»

«En Bhután debemos ocuparnos ahora de las zonas que están todavía rasas. Por ejemplo. cuando llegue aquí a Taba en 1977, esta colina estaba casi completamente desnuda, como casi todas las que rodean el valle de Thimphu. Ahora. como puede ver. están cubiertas de árboles y de vegetación natural. Ello no se debe a una actividad de plantación, sino a la protección y a la regeneración natural subsiguiente. En Bhután no pretendemos obtener mayores ingresos de nuestros montes. Lo que nosotros queremos son buenos bosques: ese es nuestro objetivo.»

ANTE UN CENTRO DE ASISTENCIA SANITARIA se procura fomentar el interés por la silvicultura (FAO)

Así ha ocurrido, por ejemplo, en las plantaciones destinadas a leña que el propio Gobierno ha establecido en las aldeas y en sus alrededores.

En cuanto a la protección de los bosques, creo que en un pasado reciente los campesinos tenían todavía la impresión de que la cuestión no era de su incumbencia. En algunos sectores causaron ciertamente daños descortezando y destruyendo árboles. La ley dispone que los árboles muertos, caducos o secos pueden cortarse y aprovecharse con cualquier fin; por eso, había algunas personas que descortezaban los árboles para provocar su muerte. Para solucionar este problema, hace poco pusimos en marcha un experimento consistente en dividir el bosque en dos partes, una perteneciente a la población del distrito y otra al Estado. El bosque perteneciente al distrito será objeto de planificación y ordenamiento sistemáticos y será supervisado por los organismos correspondientes del distrito. Los ingresos que se obtengan de ese bosque se volverán a invertir en actividades de desarrollo del distrito. En cuanto a la explotación maderera, las nuevas normas disponen que se aplicará el mismo criterio a los posibles beneficios de esa actividad. La población recibirá los beneficios obtenidos de sus propios bosques. De esta manera, en el futuro se preocuparán mucho más de los bosques existentes en sus propios distritos.

¿Cuáles han sido los principales problemas planteados por la política forestal del Gobierno, si es que los ha habido?

Creo que no se puede hablar de graves problemas en la aplicación de esta política, pero naturalmente todavía sigue existiendo el de la agricultura migratoria. El Gobierno ha prohibido estas prácticas, pero es algo que no puede resolverse de la noche a la mañana. Será muy difícil erradicar la agricultura migratoria en un breve plazo, pues se viene practicando desde tiempo inmemorial y afecta al sector más pobre de la comunidad. Para tratar de acabar con ella, el Gobierno ha puesto en marcha un programa ordinario de reasentamiento y creemos que en los cinco o diez años próximos podremos resolver el problema.

Usted insiste mucho en la conservación de los bosques. ¿Qué opina de la conservación de la fauna y flora forestales? [Bhután tiene una gran abundancia de fauna y flora silvestres, con numerosas especies raras que sobreviven en número elevado, por lo que podemos deducir de la escasa información disponible.] En algunos países hay un conflicto directo entre los intereses forestales y los de la fauna y flora silvestres; ¿ocurre también eso en Bhután?

Bhután se encuentra en una posición singular, ya que la fauna y flora silvestres y la silvicultura dependen del mismo departamento y por lo tanto de un solo ministerio. Creo que sin la conservación de los bosques no es posible la conservación de la fauna y flora silvestres, cuyo hábitat es el bosque. En la actualidad un 20% aproximadamente de la superficie del país está formado por zonas destinadas a la conservación de la fauna y flora silvestres. De momento no es previsible un conflicto entre esa conservación y el aprovechamiento de la madera, pues hemos creado reservas, parques y zonas de conservación distribuidas por todas la regiones, desde las tropicales y subtropicales hasta las alpinas. En esas zonas está prohibido cortar madera con fines comerciales. Además, creo que la población en general no tiene ningún tipo de resentimiento contra nuestra política, pues la mayoría de los bhutaneses son budistas, por lo que no desean matar.

La fábrica de contrachapados de Gedu, única industria de Bhután basada en la madera

EN LA FÁBRICA DE CONTRACHAPADOS DE GEDU se intenta lograr la autosuficiencia (A. LE GARSUMUER)

En 1981 Bhután inició la construcción de una fábrica de chapa y de contrachapados en Gedu, al sudoeste del país. Al ano siguiente la fábrica había comenzado la producción de chapa con maquinaria obtenido mediante un proyecto PNUD/FAO. La producción comercial de contrachapados y tableros enlistonados esta prevista para 1985. La FAO ha prestado también asistencia en la capacitación de personal para el manejo de la maquinaria utilizada en la construcción de caminos forestales en el denso bosque que rodea la fábrica.

La fábrica de la Compañia de Manufacturas Madereras de Gedu, cuya gestión depende del Ministerio de Comercio, Industria y Montes, está emplazada en un terreno pendiente y bellísimo. cubierto de denso bosque tropical que en algunos puntos ha sufrido grave deterioro, sobre todo en las proximidades de las aglomeraciones de chozas y tugurios surgidos en los últimos diez años como resultado del plan hidroeléctrico de Chukka.

Hay unas 140 especies de árboles, muchos de ellos frondosas de gran valor, en un radio de diez millas a partir de la fábrica, aunque en la actualidad sólo se aprovechan unas 35 especies, entre ellas el nogal. el castaño, el abedul, el aliso, el palo rosa, la teca y el roble. Unos 120 bhutaneses se encargan de las labores más especializadas de la fábrica, mientras que 50 trabajadores extranjeros realizan las tareas no especializadas.

El director, Nawang Gyetse, espera que la fabrica. que en la actualidad sufre considerables pérdidas. comience a ser rentable para el país dentro de pocos anos.

«Estamos comenzando, y hemos tenido que sufrir los lógicos problemas de la puesta en marcha. por ejemplo los relacionados con la mano de obra o con el suministro de trozas, pues los encargados de ese suministro son técnicos forestales y tienen sumo interés en conservar el bosque. Por eso, a veces surgen conflictos entre ellos y nosotros. En la actualidad. ésta es la única fábrica y creo que el Gobierno no tiene en proyecto ninguna otra.»

«Nuestro objetivo básico en este país es conseguir una buena ordenación forestal. no agotar los bosques para atender las exigencias de la industria. Por eso, en primer lagar se utilizan los árboles muertos, caducos y enfermos y luego los de más edad, para que así los jóvenes puedan crecer con más fuerza.»

«Antes, lo que hacíamos era vender madera en rollo a la India, para luego volverla a comprar en forma de contrachapados, lo que, evidentemente. resultaba más caro. Por eso el Gobierno decidió que, en vez de vender la madera en rollo debíamos construir una fábrica y hacer nosotros mismos productos caros y de lujo, para así obtener de ellos más beneficios directos.»

«Pero la conservación de los bosques sigue siendo fundamental y por ello esta industria es en cierto modo incidental' y de escala muy reducida. No vamos, en modo alguno, a construir 7 ó 10 u 11 fábricas. Según algunos informes, con los recursos forestales que tenemos y los beneficios que podríamos obtener de ellos. seria posible establecer unas 15 ó 20 fábricas enormes de contrachapados, pero no lo vamos a hacer. En este país todos aman los bosques, que han ocupado siempre un lugar muy importante en la vida de Bhután, y creo que la situación seguirá así.»


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