El análisis histórico y la situación actual de la acuicultura de aguas interiores y costera, en los países de América Latina, muestra que su desarrollo ha ocurrido bajo diferentes condiciones y en áreas diferentes con objetivos y orientaciones diversas. En un numero de países, el cultivo de peces en escala rural se ha desarrollado como un medio para mejorar la nutrición de las comunidades económicamente deprimidas que viven en las áreas montañosas del interior. Estos proyectos parecen haber recibido gran significación social y política, algunas veces desproporcionada con relación a su importancia económica. En algunos países se han hecho esfuerzos considerables para mejorar o aumentar las poblaciones de peces en lagos y embalses por medio de repoblación. Aunque no se dispone en todos los casos, de evaluaciones críticas de los resultados de tales operaciones, existe evidencia para demostrar que, por lo menos, en algunos países ellos han contribuido a incrementar considerablemente los recursos pesqueros. En países como Brasil, las operaciones de repoblamiento son obligatorias cuando se implementan proyectos de desarrollo hidro-eléctricos o de cuencas hidrográficas. El manejo ambiental a través de proyectos de obras hidráulicas, como en las lagunas en México, para incrementar las poblaciones naturales de camarones y otras especies y aumentar así su productividad y rendimiento, son realizados como formas de acuicultura.
A pesar de estos desarrollos, la Reunión noto que la acuicultura no había recibido, en muchos de los países, el nivel de reconocimiento e importancia como una actividad económica nacional. La responsabilidad de las actividades de su desarrollo esta dispersa, a menudo en diferentes agencias y ministerios y aun dentro de la misma agencia en distintas instituciones o divisiones. Esto hace difícil el formular e implementar programas integrados. No se ha proporcionado atención adecuada para demostrar la factibilidad económica y el potencial de ' producción de la acuicultura. Estos factores pueden originar un círculo vicioso; un apoyo inadecuado resultaría en la incapacidad de las agencias para demostrar el valor de la acuicultura, llegando a constituir una limitante para atraer ese apoyo. Para remediar esta situación, se precisa entonces de un plan bien diseñado y orientado a hacer un mayor impacto en la producción.
Se discutió la necesidad de la acuicultura en los países de la región, que son mayores productores y exportadores de carne. Se anoto que a pesar de los altos niveles de producción de carne y de desembarques de pesquerías marítimas, las tasas de consumo nacional de proteínas eran bajas, particularmente en las áreas rurales y entre los sectores pobres de la sociedad. Aun con mejoramientos en el mercadeo y transporte, puede no ser factible incrementar el consumo de proteína animal a los niveles requeridos, a causa de la producción inadecuada o las necesidades de exportación. Por otra parte, muchas industrias actualmente requieren diversificación y la acuicultura ofrece oportunidades excelentes en este sentido.
Aun cuando la acuicultura permanece en varios países en estado experimental, existen sistemas de cultivo que han alcanzado niveles de desarrollo que van desde la escala piloto hasta aquella de producción comercial. Estas incluyen cultivos en estanques grandes de truchas, tilapia (principalmente híbridas), carpas; cultivo en balsas o cuerdas de ostras y mejillones en zonas costeras y el cultivo de tilapia en jaulas. El repoblamiento de los reservorios de irrigación o de múltiple propósito con especies nativas y el cultivo extensivo de camarones en lagunas costeras, pueden ser considerados en escala de producción. Los estudios experimentales de los cultivos en estanque de algunas especies nativas de peces como Cichla ocellaris, Colossoma bidens, Mylosoma bidens, Pimelodus spp.,. Prochilodus spp., y Mugil spp., están cerca de la etapa de operaciones en escala piloto. Dado que muchos de estos desarrollos han ocurrido solo en ciertos países y áreas, la importancia de la transferencia horizontal y vertical de tecnología, tiene especial significado dentro de la región. Transferencias similares de tecnología de otras regiones como Asia y su modificación a las condiciones y exigencias locales, son también de importancia considerable.
Muchas de las comunidades a ser atendidas con programas de producción de acuicultura pueden no ser actualmente grandes consumidores de productos pesqueros y en esos casos serán necesarias campanas efectivas de promoción del consumo. La experiencia parece indicar que si esas campanas son propiamente planificadas e implementadas pueden contribuir a establecer la aceptación del pescado como alimento. Cuando se cultivan especies de alto valor como la trucha, el producto se destina generalmente para la venta en restaurantes y mercados especiales. Sin embargo, su aporte económico a las comunidades rurales es considerable.
Las discusiones en la Reunión señalaron que se esta acumulando experiencia valiosa en muchos centros de la región y la recolección y distribución de esa información puede contribuir sustancialmente al desarrollo de la industria. El Simposio de CARPAS sobre Acuicultura en América Latina (Montevideo, Uruguay, 1974), reconoció la necesidad de esa actividad informativa a escala regional. Sin embargo, considerando el personal y las facilidades requeridas para establecer un sistema eficiente de recolección, análisis y distribución de información, la Reunión acordó que esta debería ser una actividad principal del Centro Regional de Acuicultura a ser establecido (ver pág. 9). Al mismo tiempo, los organismos regionales de pesca, CARPAS, WECAFC y la Comisión Latinoamericana de pesca en aguas interiores, a ser establecida por FAO, deberían ser utilizados por medio de grupos de trabajo para aunar experiencias y datos. Los participantes de varios países expresaron los deseos e intereses de sus gobiernos en compartir sus experiencias con otros países de la región y ofrecieron las facilidades de sus instalaciones para este propósito.
La escasez de personal adecuadamente capacitado especialmente para los programas de producción fue enfatizada repetidamente como un problema grande para el desarrollo de la acuicultura en la región. Se describieron los cursos de capacitación organizados en algunos de los países de la región. Se reconoció además, la necesidad de cooperación regional en la capacitación de acuiculturores de alto nivel.
