El proyecto RIGA ha creado una base de datos internacional y comparable de fuentes de ingreso de los hogares rurales utilizando encuestas de hogar. La mayor parte de las encuestas utilizadas por el proyecto RIGA han sido desarrolladas por los ministerios de estadísticas de cada país en colaboración con el Banco Mundial como parte del proyecto de las Encuestas de Condiciones de Vida (LSMS). Los micro datos a nivel de hogar construidos por el proyecto RIGA están disponibles para diseminación pública (base de datos de RIGA). 

Durante la primera fase del proyecto se crearon variables a nivel de hogar describiendo sus diferentes patrones de ingreso, y participación en actividades productivas. Este trabajo se expandió para generar también variables comparables a nivel de los individuos, con énfasis particular en las variables relacionadas al empleo rural asalariado.

Al mismo tiempo, dentro del ámbito del proyecto se ha completado una serie de estudios que explotan esta base de datos y actualmente se están realizando estudios adicionales. Estas monografías pretenden mejorar nuestra comprensión de la economía rural no agrícola, así como sus vínculos y sinergias con el sector agrícola. El objetivo principal es de ayudar informar, fomentar e implementar políticas públicas eficaces y estrategias de desarrollo rural que incluyan la economía rural no agrícola como un componente significativo.

Contexto
Los hogares pobres, entre sus estrategias de supervivencia, no sólo trabajan en agricultura sino también en numerosas actividades industriales, de comercio y de servicios. Como resultado, este tipo de  economía rural no agrícola es una importante fuente de ingresos para las familias rurales. Estudios anteriores (El estado mundial de la agricultura y la alimentación, 1998) han mostrado que la importancia relativa de este sector en la economía rural (alrededor del 20% al 60% del ingreso rural) aumenta a medida que los países de desarrollan. Por lo tanto, es importante, al pensar en desarrollo rural, el considerar toda la variedad de actividades rurales que generan ingresos (RIGA) realizadas por las familias rurales. 

Con todo, en el ámbito de las políticas se ha dejado de lado la promoción de la economía rural no agrícola. Por una parte, existe un vacío institucional con relación al sector RNA. Los gobiernos por lo general no tienen un ministerio "rural", y nadie apoya un sector que atraviesa los distintos ministerios. 

El otro obstáculo restringiendo el fomento del sector rural no agrícola es que, a pesar de la gran cantidad de trabajo reciente al respecto, todavía quedan considerables vacíos de conocimientos. Las diferencias entre las metodologías y las definiciones hacen casi imposible comparar entre países, ya que el sector rural no agrícola se ha definido y medido en formas muy distintas. Es más, ya que no es posible hacer comparaciones significativas, aún no existe una teoría plenamente desarrollada sobre este sector.

Algunas cuestiones fundamentales al proyecto RIGA son:

  ¿Qué relaciones hay entre las diversas actividades rurales generadoras de ingresos (RIGAs)?
  ¿Qué tipos de RIGAs se asocian a la reducción de la pobreza?
  ¿Qué relación hay entre las diversas actividades de la economía rural no agrícola y la agricultura?
  ¿Qué relaciones existen entre las RIGAs y la seguridad alimentaria?

El estudio sistemático de las fuentes de los ingresos de las familias rurales tiene como objetivo llenar algunas de las lagunas del conocimiento de la economía rural no agrícola. El proyecto RIGA analizará, a través de una metodología congruente, las fuentes de ingresos de las familias rurales en más de 15 países, a través de más de 25 encuestas de hogares. El proyecto tiene como finalidad ayudar a la comunidad interesada en el desarrollo rural a elaborar generalizaciones rigurosas y con base empírica sobre la economía RNA, y determinar instrumentos normativos que se puedan utilizar para promover actividades RNA paralelas a la agricultura, a fin de facilitar la reducción de la pobreza rural.