Erradicación de la gripe aviar en Egipto


Desde laboratorios de bioseguridad hasta animaciones en 3D, el aumento de las capacidades y las comunicaciones mejora la respuesta a los brotes

En 2006, la crisis de la gripe aviar azotó Egipto, lo que repercutió considerablemente en la avicultura y afectó a la salud pública. Con la creación del Centro de Emergencia de la FAO para la Lucha contra las Enfermedades Transfronterizas de los Animales, han valido la pena los esfuerzos de control y prevención del Gobierno egipcio, la FAO y sus asociados. © FAO/Giulio Napolitano

28/06/2021

Cuando la gripe aviar —conocida informalmente como gripe de las aves— azotó Egipto en 2006, provocó importantes pérdidas económicas y afectó tanto a las aves como a las personas.

La enfermedad, que es altamente infecciosa en algunas formas, puede provocar la muerte masiva de especies de aves domésticas y silvestres, como pollos, patos, pavos, gansos y codornices. También puede transmitirse a las personas por medio del contacto directo o indirecto con aves infectadas y causar enfermedades graves o la muerte. 

Los esfuerzos para frenar la propagación de la gripe aviar fueron enérgicos e incluyeron la vacunación masiva de aves de corral y el sacrificio de más de 40 millones de aves. Con todo, se registraron más de 350 infecciones en seres humanos y murieron unas 120 personas entre 2006 y 2017.

La enfermedad también tuvo graves repercusiones en la avicultura. La cría y la venta de aves de corral constituyen la principal fuente de ingresos para la mayoría de los pequeños productores egipcios y pueden suponer hasta el 30 % de sus ganancias. Por tanto, que pierdan a sus animales es como que pierdan los ahorros de toda una vida.

Para respaldar los esfuerzos en la lucha contra la gripe aviar, en 2007 la FAO estableció una unidad del Centro de Emergencia para la Lucha contra las Enfermedades Transfronterizas de los Animales en Egipto. ¿Su finalidad? Trabajar con el Gobierno de Egipto para hacer frente a las enfermedades transfronterizas de los animales, como las enfermedades zoonóticas (aquellas que pueden propagarse entre animales y seres humanos), mejorando la prevención, la detección temprana y la respuesta mediante la adopción de un enfoque “Una salud”

“Una Salud” reconoce que la salud de los animales, las personas, las plantas y el medio ambiente guarda relación entre sí y que las amenazas sanitarias como la gripe aviar deben abordarse de forma integral, con la colaboración de expertos de múltiples sectores.

Detener el avance de la gripe aviar solo es posible si los avicultores —tanto los pequeños productores como los productores comerciales— comprenden cómo prevenir su introducción y propagación. Izquierda/Arriba: © FAO/Mohamed Moussa; Derecha/Abajo: © FAO/Giulio Napolitano

Lo que sucedió después y en el último decenio y medio supuso la creación de 230 unidades epidemiológicas en todo el país, la capacitación de cerca de 15 000 miembros de personal veterinario en muchos aspectos relativos al control de los brotes de la enfermedad y el establecimiento de laboratorios nacionales o el fortalecimiento de los existentes, entre muchas otras cosas.

Por ejemplo, la FAO ha prestado apoyo al Gobierno en el diseño y la puesta en marcha de un programa de vigilancia de la gripe aviar para comprender mejor la epidemiología de la enfermedad.

El programa permitió que la autoridad veterinaria detectara varias cepas nuevas o incipientes del virus de la gripe aviar de forma temprana y respondiera a ellas con rapidez. Además, la Organización Mundial de Sanidad Animal ha acreditado recientemente al Instituto de Investigación en Sanidad Animal —el laboratorio veterinario nacional— como laboratorio de referencia internacional para la gripe aviar.

A fin de reducir el riesgo de que la gripe aviar se introdujera y se propagara en las granjas avícolas y expusiera a los seres humanos al virus, la FAO y sus asociados mejoraron progresivamente las medidas de bioseguridad en las granjas y capacitaron a más de 600 veterinarios sobre el terreno, a 260 proveedores de servicios de sanidad animal, a más de 100 equipos de vacunación y a más de 1 000 productores de granjas avícolas. 

Los cursos de capacitación incluyeron la transmisión de prácticas seguras de cría y sacrificio que llegaron a granjeros y otros grupos en más de 800 aldeas. Los actos de sensibilización realizados en centros sanitarios, agrícolas, juveniles y religiosos, escuelas y clínicas veterinarias ayudaron a las comunidades a comprender mejor la importancia de estas prácticas y contribuyeron a frenar la propagación de la gripe aviar y su contagio a los seres humanos.

En resumen, con el apoyo financiero de asociados como la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Suecia, el Reino Unido, el Canadá, Alemania, España y la Unión Europea, el Centro de Emergencia de la FAO para la Lucha contra las Enfermedades Transfronterizas de los Animales y el Ministerio de Agricultura y Bonificación de Tierras de Egipto vienen poniendo en marcha desde 2007 actividades esenciales para salvar vidas, tanto de animales como de seres humanos, con un presupuesto total de 24 millones de USD.

Si bien la gripe aviar sigue siendo endémica en Egipto, estos esfuerzos han valido la pena. La incidencia y la propagación de la gripe aviar en las poblaciones de aves de corral se han reducido notablemente; el sector de la salud animal ha reforzado su capacidad, y no se ha encontrado a ningún ser humano infectado con el virus desde 2017. 

No obstante, “los esfuerzos deberían proseguir, a fin de mantener los avances realizados y, a la larga, erradicar la gripe aviar en el país”, advierte Nasredin Hagelamin, Representante de la FAO en Egipto.

La FAO y el Gobierno han venido trabajando con los avicultores, difundiendo mensajes sobre la necesidad de comprar aves de corral solo de fuentes conocidas y de adoptar prácticas de cría seguras y medidas de bioseguridad adecuadas. © FAO/Mohamed Moussa

El efecto de las redes sociales

Detener la gripe aviar solo es posible si los avicultores —tanto los pequeños productores como los productores comerciales— comprenden cómo prevenir su introducción y propagación.

Es por este motivo que la FAO y el Gobierno han estado trabajando con los avicultores, difundiendo mensajes sobre la necesidad de comprar aves de corral solo de fuentes conocidas y de adoptar prácticas seguras de cría y sacrificio.

Para perfeccionar este mensaje y compartirlo fácilmente, la FAO y sus asociados desarrollaron un vídeo animado en 3D sobre buenas prácticas ganaderas y medidas de bioseguridad, que alcanzó en Facebook casi 3 millones de visitas de Egipto en un mes.

También colaboraron con el Gobierno para que los avicultores cuyas aves hubieran sido sacrificadas recibieran una compensación económica.


“Juntos, en más de 14 años de colaboración, hemos superado numerosos desafíos para potenciar la capacidad de los servicios veterinarios y controlar la gripe y otras enfermedades transfronterizas de los animales de forma sostenible, con el objetivo final de mejorar la salud pública, la seguridad alimentaria y los medios de vida de las personas vulnerables”, concluye Abdelhakim Ali, Presidente de la Organización General de Servicios Veterinarios y Jefe del Servicio Veterinario en Egipto. 

En Egipto, y ahora en otros 26 países de África, Asia y Oriente Medio, el Centro de Emergencia de la FAO para la Lucha contra las Enfermedades Transfronterizas de los Animales sigue poniendo en marcha actividades vitales de emergencia y en relación con la sanidad animal.

Para más información

3. Good health and well-being, 8. Decent work and economic growth, 9. Industry innovation and infrastructure