La misión de los apicultores marroquíes para preservar la abeja amarilla del Sáhara


Cambiar el destino de una extraordinaria especie de abeja en beneficio de todos

La FAO, el gobierno marroquí y los apicultores locales tienen como misión salvar a la abeja amarilla del Sáhara, cuya importancia para los ecosistemas y la biodiversidad de la región no se puede subestimar. © FAO/Hassan Chabbi

01/07/2022

Aquí, en Er-rich, situada en una llanura en medio de la imponente cordillera del Atlas en Marruecos, mujeres y hombres se acomodan en una sala repleta mientras comienza una capacitación en apicultura de la FAO una tarde de marzo. Sus susurros y risas se entremezclan en un trasfondo de expectación. Pero su propósito es serio: hacer todo lo posible para garantizar la supervivencia de una especie. A lo largo del día, los apicultores de todas las edades aprenderán sobre la abeja amarilla del Sáhara, una especie resistente, no agresiva y bien adaptada a las condiciones climáticas y de cría locales.

“No tengan miedo”, les tranquiliza el instructor, M’hamed Aboulal. “Esta es la raza más tranquila. Eso hace que su vecina del norte, la abeja negra, amarillee de celos”, dice con una sonrisa. “No solo es hermosa con su largo manto amarillo, también es dócil, produce una miel excelente y es mejor recolectora, ya que puede recorrer hasta 8 km frente a los 3 km de la abeja común”.

A pesar de todas estas cualidades, los apicultores saben que la abeja amarilla del Sáhara está en peligro de extinción debido a las sucesivas sequías, a los efectos colaterales negativos de la necesaria lucha contra las plagas y a las consecuencias de la introducción de otras variedades de abejas en la zona.

Los participantes están impacientes por plantearle sus preguntas: “¿Cómo se producen más reinas?”, “¿Cuáles son las técnicas de inseminación artificial?”, “¿Cómo se puede ayudar a las reinas a multiplicarse?”. Sobre todo, los asistentes quieren saber cómo salvar la vida de las abejas, que para algunos de ellos representan su propio medio de vida.

La apicultura: una pasión desde la infancia

La pasión de M’hamed por las abejas se remonta a la época en que su padre, apicultor, les dejaba a él y a sus hermanos probar la miel que apenas asomaba de las colmenas de madera sobre las que se sentaban. Hoy en día, M’hamed es presidente de una cooperativa apícola regional y de una asociación nacional, y dedica su tiempo a impartir capacitación teórica y práctica a los apicultores, acrecentando también la valoración de la abeja amarilla del Sáhara.

Todas las mañanas, M’hamed comienza su jornada acudiendo a las alturas de Er-rich para inspeccionar el colmenar y sus colonias de abejas y evaluar su estado de salud. Al acercarse a la docena de colmenas que hay allí, el zumbido de las abejas anuncia su presencia. Para M’hamed, la experiencia le despierta un sentimiento de humildad.

“Por ellas y gracias a ellas, tengo la oportunidad de poner en valor y perpetuar el saber hacer de mis antepasados y hacer un trabajo que me apasiona y que me impulsa a levantarme cada mañana para que todo esté hecho”.

La FAO, el gobierno de Marruecos y otros socios han creado un centro técnico de apicultura, cuya misión es mejorar los conocimientos apícolas y seleccionar, multiplicar y difundir las abejas reinas para salvaguardar el futuro de la raza de la abeja amarilla del Sáhara. © FAO/Hassan Chabbi

Un centro de renombre nacional

M’hamed es un visitante habitual del Centro en el que se imparten capacitaciones teóricas y prácticas y que es el resultado de una fructífera colaboración entre múltiples partes interesadas. Aquí es donde la FAO colabora estrechamente con el gobierno de Marruecos y otros socios para salvaguardar esta raza particularmente interesante y adaptada a las zonas de oasis. Los esfuerzos combinados han llevado a la creación de este Centro técnico apícola para el desarrollo y la salvaguarda de la abeja amarilla del Sáhara y la biodiversidad, cuya misión es mejorar las habilidades apícolas y seleccionar, multiplicar y difundir las abejas reinas.

La Oficina Regional de Desarrollo Agrícola de Tafilalet acoge este Centro y lo pone a disposición de la Cooperativa Apícola Chifae de Errachidia, de la que M’hamed es fundador. El Centro que alberga forma parte del proyecto de la FAO “Revitalización de los agroecosistemas de los oasis mediante un enfoque integrado y sostenible del paisaje en la región de Draâ-Tafilalet”.

Salvaguardar, preservar y desarrollar la abeja amarilla del Sáhara es clave para estos objetivos. Son cruciales para mejorar y proteger la agrobiodiversidad local, mejorar los ingresos de los pequeños agricultores y proporcionar empleo a las mujeres y los jóvenes.

Entre las funciones del Centro están la selección de las abejas, la producción de reinas mediante inseminación artificial, su promoción y distribución para ayudar a reconstituir las poblaciones de abeja amarilla del Sáhara y la capacitación de los apicultores en la creación y gestión de cooperativas y microempresas.

La abeja amarilla del Sáhara es importante para el medio ambiente y los apicultores. Aumentan y protegen la agrobiodiversidad local, mejoran los ingresos de los pequeños agricultores y proporcionan empleo a mujeres y jóvenes. © FAO/Hassan Chabbi

El riesgo de colapso

Recientemente, las poblaciones de abejas han sufrido pérdidas espectaculares, nunca antes vistas. En países de Europa, América y África se ha observado un fenómeno conocido como “trastorno de colapso de las colonias de abejas”. Los apicultores han informado de la desaparición repentina e inexplicable de colonias de abejas, seguida de la muerte de las obreras, la supervivencia de la reina sola y, en consecuencia, la pérdida de las colmenas.

El fenómeno suscita una creciente inquietud entre los criadores y especialistas, como M’hamed, que afirma: “Si esto continúa, las consecuencias de esta inesperada desaparición serían graves, dada la importancia de los colmenares y las abejas en el equilibrio ecológico y agrícola y en el desarrollo económico, así como la relevancia del sector en términos de puestos de trabajo”.

Se culpa a varios factores, como las lluvias insuficientes, la mala alimentación de las abejas por falta de pastos, la salud de las colmenas y las prácticas de cría de abejas, y los gobiernos redoblan sus esfuerzos para investigar y determinar las causas. Según M’hamed, la abeja amarilla parece relativamente menos afectada por este fenómeno de colapso de las colonias. Pero dadas las muchas otras amenazas a las que se enfrenta, la FAO y sus socios tienen claro que no deben cejar en sus esfuerzos para preservar y revitalizar la especie.

A través de la labor del Centro, la FAO y sus socios siguen luchando por la abeja amarilla del Sahara. Mediante la creación de una red de apicultores profesionales y el establecimiento de una serie de viveros para la multiplicación y distribución de la abeja amarilla del Sáhara, el programa se esfuerza por preservar esta especie y anima a otras cooperativas y microempresas a hacer lo mismo, compartiendo esta misión con la comunidad y en otros ámbitos.


Para obtener más información

2. Zero hunger, 8. Decent work and economic growth, 15. Life on land