Una cadena de valor incluye toda la variedad de actividades requeridas para llevar un producto o servicio desde su obtención inicial hasta los consumidores finales. Esto comprende actividades tales como el diseño, la producción, la comercialización, la distribución y servicios de apoyo. Las cadenas de valor comprenden mercados locales, regionales y mundiales. Las actividades fundamentales de las cadenas de valor de la pesca pueden incluir la producción, la elaboración, el transporte y la comercialización al por mayor y al por menor de productos pesqueros y acuícolas.

La pérdida y el desperdicio de alimentos tienen lugar a todos los niveles de la cadena de valor de la pesca y la acuicultura. Comprender el motivo por el que se producen, y determinar dónde ocurren, es esencial para proporcionar a los encargados de la toma de decisiones información que permita reducir y prevenir estos fenómenos. Además, la reducción de la pérdida y el desperdicio es cada vez más importante a medida que aumenta la demanda de pescado como alimento.