¿Qué es la inocuidad de los alimentos?

La inocuidad de los alimentos es una disciplina, proceso o acción de carácter científico que ayuda a prevenir que los alimentos contengan sustancias que puedan perjudicar la salud de las personas. La finalidad de la inocuidad de los alimentos es garantizar que los alimentos sean inocuos.

¿Por qué es importante la inocuidad de los alimentos?

La alimentación es la tercera necesidad humana más básica, tras el aire y el agua. Solo cuando los alimentos son inocuos, pueden contribuir a nuestra salud y seguridad alimentaria. Cuando no lo son, las personas no pueden desarrollarse, no pueden reducirse el hambre y la pobreza y no es posible llevar una vida sana. Si un alimento no es inocuo, no es un alimento.

¿Quién se encarga de garantizar la inocuidad de nuestros alimentos?

Todas las personas que producen, elaboran, transportan, almacenan, preparan, sirven y consumen alimentos deben emplear prácticas que permitan mantener su inocuidad. Los gobiernos desempeñan un papel fundamental en la elaboración de legislación, la aplicación de políticas, la realización de inspecciones, el cumplimiento de la reglamentación, la educación y la comunicación con el público y la respuesta a incidentes y situaciones de emergencia relacionados con la inocuidad de los alimentos cuando se producen. Como reza el lema el lema del Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, “La inocuidad de los alimentos es un asunto de todos”

¿Cómo puede tornarse no inocuo un alimento?

Los alimentos pueden volverse no inocuos en cualquier punto de la cadena de suministro. Los contaminantes pueden penetrar en los productos alimenticios a través del suelo, el agua, el aire o el equipo utilizado durante la producción y la elaboración. El almacenamiento inadecuado de los alimentos, su manipulación de manera antihigiénica y su transporte a una temperatura incorrecta pueden contribuir a que se vuelvan nocivos. El consumidor también puede ser el causante si, por ejemplo, no cocina los alimentos  de forma apropiada.

¿Cómo ayuda la inocuidad de los alimentos a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible?

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) exigen que todas las personas, en particular las que son pobres y vulnerables, tengan acceso a alimentos inocuos, nutritivos y suficientes durante todo el año. La inocuidad de los alimentos es una parte fundamental de la seguridad alimentaria (ODS 2) y contribuye a la salud humana (ODS 3). La inocuidad de los alimentos contribuye asimismo a Objetivos económicos y de otra índole.

¿La inocuidad alimentaria forma parte de “Una salud”?

¿Cómo se aplica la ciencia en la inocuidad de los alimentos?

Los estudios de microbiología, toxicología, química, epidemiología, biología, genética y muchas otras disciplinas científicas aportan evidencias de los peligros que existen para la inocuidad alimentaria y sus riesgos y ayudan a elegir formas (políticas, normas, prácticas) de gestionarlos.

¿Afecta el cambio climático a la inocuidad de nuestros alimentos?

Sí. El cambio climático acrecienta cada vez más el riesgo de exposición de los consumidores a los peligros transmitidos por los alimentos, ya sea a través del aire o del mar. Los cambios en el clima influyen directamente en los peligros biológicos (patógenos y parásitos) y químicos (metales pesados, plaguicidas, micotoxinas y biotoxinas de algas), al alterar su incidencia, distribución o virulencia. (Si desea más información, vea Climate Change: Unpacking the burden on food safety [El cambio climático: análisis de sus consecuencias sobre la inocuidad de los alimentos] [en inglés únicamente].)

¿Qué se entiende por un enfoque de la inocuidad de los alimentos basado en el riesgo?

Es imposible inspeccionar y analizar cada producto alimenticio del mercado para detectar posibles peligros. En cambio, sí es posible aplicar la ciencia para priorizar y anticipar los peligros para la inocuidad de los alimentos y adoptar medidas preventivas y controles en diferentes fases o etapas de la elaboración a lo largo de la cadena alimentaria, con el fin de reducir la probabilidad de que surjan problemas de inocuidad alimentaria y sus consecuencias negativas.

¿Es la resistencia a los antimicrobianos una cuestión de inocuidad alimentaria?

Sí. Muchas de las bacterias que contaminan nuestros alimentos se han hecho resistentes a los antimicrobianos, lo que hace más difícil el tratamiento de enfermedades transmitidas por los alimentos. Utilizar sabiamente los antimicrobianos en la producción de carnes, productos alimentarios marinos, huevos y leche, así como frutas y verduras, puede reducir el riesgo de bacterias resistentes a los antimicrobianos en los alimentos.