©Patrick Zachmann/Magnum Photos / FAO

A finales de 2018, el Consejo Nacional de Política Económica y Social (CONPES) de Colombia, mediante Documento CONPES 3951/18, autorizó al Gobierno del país a celebrar dos operaciones crediticias, una con el Banco Mundial (BM) por 100 millones de dólares y otra con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por 50 millones de dólares. La finalidad de estas operaciones es poner en práctica el Catastro Multipropósito llevando a cabo en municipios seleccionados un inventario sistemático, actualizado y permanente de la información física, jurídica, económica y social de los predios, armonizado con el sistema de registro de la propiedad. El Centro de Inversiones de la FAO participó en la formulación de este proyecto y ahora brinda asistencia técnica en diferentes temas.

La superficie total de Colombia es de 114 millones de hectáreas, y existen alrededor de 17 millones de predios, de los cuales 3.3 millones se encuentran en áreas rurales, según el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC). La Superintendencia de Notariado y Registro (SNR) estima que el 39% de la superficie se ubica en áreas productivas de tenencia privada, y que 4% pertenecen a tierras comunitarias de afrodescendientes, 29% a comunidades de 106 pueblos indígenas, 13% son Parques Nacionales Naturales y el 15% no presenta ninguna información sobre la propiedad. De acuerdo con los datos del Banco Mundial, el índice de Gini de la distribución de la tierra es de 0.85, lo que sugiere que la inequidad en la propiedad sigue siendo alta en relación a los estándares internacionales (80% de la tierra está en manos del 10% de los propietarios). Tal y como apunta la CEPAL, los ritmos de crecimiento del sector agropecuario colombiano en el último cuarto de siglo fueron muy inferiores a los de otros países latinoamericanos como Brasil, Chile, Costa Rica, Ecuador, Nicaragua, y Perú; y por debajo del promedio de América Latina.

El Consejo Nacional de Política Económica y Social (ver CONPES 3958/2019) indica que el catastro no cuenta actualmente con procedimientos eficientes de actualización. La información catastral del 66 % del territorio nacional está desactualizada, no hay datos sobre más de un 28% adicional, y tampoco existe una integración o interoperabilidad del catastro con el registro, ni de estos con otras fuentes de información geoespacial. Esto último representa uno de los principales impedimentos para transicionar hacia un catastro multipropósito. De mantenerse esta situación, se verían comprometidos la seguridad jurídica de miles de predios, los programas de ordenamiento social de la propiedad impulsados por la Agencia Nacional de Tierras (ANT), la eficiencia del mercado inmobiliario, y la generación de capacidades e instrumentos para una adecuada priorización y asignación de las inversiones públicas, entre otros. Además, contar con un catastro multipropósito permitiría impulsar el progreso hacia las buenas prácticas internacionales, como las mencionadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), las de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), y las Directrices Voluntarias sobre la Gobernanza de la Tenencia.

Por otra parte, el acuerdo firmado en noviembre de 2016 entre el Gobierno Nacional y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC),  señalaba el catastro como un instrumento necesario para el desarrollo de la Reforma Rural Integral, en particular, el punto 1.1.9 de ese acuerdo sobre la “Formación y actualización del catastro e impuesto predial rural”.

Las metas de los créditos del BM y el BID buscan actualizar 1.5 millones de hectáreas en 72 municipios, que equivaldrían a aproximadamente 170.000 predios, así como asignar 56.000 nuevos títulos de propiedad, y otorgar a mujeres rurales al menos el 40% de ellos. Paralelamente con otras fuentes de financiamiento, incluyendo los propios municipios, el Gobierno avanzará en el resto del territorio, de tal forma que en 2025 todo el país contaría con una información catastral actualizada y con procesos de formalización masiva de la propiedad rural-urbana en marcha. Para ello se aplicarán rutas diferenciadas en función de las capacidades institucionales y financieras de los municipios para asumir su propia gestión catastral.

Por su parte, las operaciones crediticias financiarán en gran parte los cambios estructurales necesarios para fortalecer institucional y tecnológicamente al IGAC, la SNR y la ANT, en coordinación con el Departamento Nacional de Planeación (DNP). 

El Catastro Multipropósito de Colombia ha aprendido de las lecciones de ejercicios piloto realizados en el país, así como de la experiencia internacional. Los principales enfoques del Catastro Multipropósito colombiano son: 

• Promover un mayor articulación de las entidades de administración de tierras a nivel nacional, en particular IGAC, SNR y ANT, en los procesos de atención a las entidades territoriales en materia catastral y de formalización de la propiedad. 

• Revisar y ajustar las especificaciones técnicas para el levantamiento catastral, formalización de la propiedad y validación de la información recogida en campo para simplificar los procedimientos, así como redefinir los estándares y las especificaciones técnicas de producto.

• Promover los procesos participativos en diferentes niveles con la finalidad de vincular adecuadamente las partes interesadas en el proceso catastral, facilitando el trabajo de campo y una mayor apropiación de los resultados por parte de comunidades y territorios. Para ello es necesario considerar variantes metodológicas que sean aplicables según las características de los municipios y de los actores presentes en el territorio (p.ej. grupos étnicos, áreas protegidas, catastro de bienes públicos, entre otros).

• Ajustar el Modelo de Dominio para la Administración del Territorio (LADM, por sus siglas en inglés) para Colombia, lo que permitirá contar con un estándar para la estructuración e intercambio de información geoespacial.

• Implementar el Número Único Predial Registral (NUPRE) que permitirá a los actores identificar de manera unívoca los predios tanto en los sistemas de información catastral como en el sistema de información registral, y que se constituye como primer paso hacia la adecuada articulación e integración del catastro-registro.