Crear sistemas agroalimentarios resilientes para los PEID en respuesta a los crecientes desafíos climáticos

Praia (Cabo Verde) - La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha estado ampliando y continuará incrementando su apoyo a los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) para transformar sus sistemas agroalimentarios y permitirles formar parte de las soluciones climáticas y contribuir eficazmente a la disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de los alimentos, aseguró hoy QU Dongyu, Director General de la FAO, en su intervención en una conferencia organizada por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente de Cabo Verde bajo el título “Acelerar la transformación de los sistemas agroalimentarios en Cabo Verde”.

Según el Director General, la transformación eficiente de los sistemas agroalimentarios requiere cuatro factores clave. En primer lugar, el compromiso político a todos los niveles y en todos los sectores. En segundo lugar, señaló la necesidad de una política propicia para atraer inversiones tanto internas como extranjeras, en particular una política agraria a largo plazo y una política fiscal que favorezca el uso de la tecnología. En tercer lugar, QU subrayó la importancia de cambiar el modelo empresarial y promover una política de recursos humanos eficiente para animar a los ciudadanos a regresar a sus países y contribuir a su prosperidad. Por último, destacó el papel de la innovación, en particular en la adaptación de los cultivos a las condiciones locales, atrayendo al mismo tiempo el conocimiento científico.

El Director General subrayó la necesidad general de una acción coordinada y una financiación con metas definidas por parte de los sectores público y privado, con la orientación y las aportaciones de la sociedad civil y el mundo académico.

Centrarse en los países más vulnerables

La FAO se centra en proporcionar apoyo a los países más vulnerables, incluyendo los PEID, los países menos adelantados y los países en desarrollo sin litoral, y asimismo el acceso a la financiación a través de mecanismos como su programa de Cooperación Sur-Sur y Triangular. Por ejemplo, a través del Fondo fiduciario de cooperación Sur-Sur de la FAO y China, la FAO contribuye a la digitalización del sector agrícola, al desarrollo de cadenas de valor de productos específicos, y a la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos en el sector pesquero.

En el marco de este proyecto, Cabo Verde se beneficia no solo del apoyo a la reducción del desperdicio de alimentos en el sector pesquero, sino también de la asistencia técnica y el desarrollo de la capacidad en la gestión del suelo y el agua, los métodos innovadores para el manejo integrado de plagas, la acuicultura de algas marinas, la mejora de la producción animal y el fortalecimiento a nivel genético, entre otros.

La FAO está colaborando con el Banco Mundial en los desafíos socioeconómicos y medioambientales a los que se enfrenta Cabo Verde como resultado de una industria turística en auge en el contexto de vulnerabilidades crecientes, como la exposición a perturbaciones climáticas, la desertificación, los fenómenos meteorológicos extremos y la subida del nivel del mar.

El Director General elogió a Cabo Verde por ser un líder entre los PEID, promoviendo cuestiones como la economía azul, la gestión de los recursos hídricos y el empoderamiento de las mujeres, y agradeció al Gobierno su fructífera asociación de colaboración con la FAO.

Otros participantes fueron Ulisses Correia e Silva, Primer Ministro de Cabo Verde, y Gilberto Silva, Ministro de Agricultura y Medio Ambiente.

La conferencia abordó la urgente necesidad de transformar los sistemas agroalimentarios en Cabo Verde y reunió a los principales responsables de las políticas, asociados para el desarrollo, organizaciones internacionales, expertos y profesionales. Los participantes destacaron los logros y las enseñanzas adquiridas en casi 50 años de cooperación entre la FAO y Cabo Verde, sentando las bases para la colaboración futura.

QU recibió además, en nombre de la FAO, la Orden Amílcar Cabral en reconocimiento a la inestimable contribución de la Organización al desarrollo de Cabo Verde. Al aceptar el galardón, QU puso de relieve que “nuestros logros no habrían sido posibles sin un eficaz trabajo en equipo y el esfuerzo colectivo de todos”, señalando que el premio es “reflejo de una participación eficaz y una asociación sincera. Es la suma de nuestros conocimientos técnicos especializados, nuestra dedicación conjunta y nuestra pasión compartida”.