Las técnicas nucleares pueden desempeñar una función crucial en el establecimiento de normas alimentarias mundiales basadas en criterios científicos

Viena (Austria). El Sr. QU Dongyu, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), destacó la necesidad de controlar la inocuidad de los alimentos desde el inicio, desde nuestros suelo, agua y prácticas agrícolas y posteriores a la cosecha, haciendo hincapié en la función crucial que las tecnologías nucleares pueden desempeñar en el establecimiento de normas alimentarias basadas en criterios científicos.

“Las tecnologías nucleares son herramientas muy importantes para la medición, la gestión y el control de la inocuidad de los alimentos, y son complementarias con el enfoque de Una sola salud,” dijo el Sr. QU, y agregó que la inocuidad y el suministro de alimentos son “fundamentales para la transformación de los sistemas agroalimentarios”.

Pronunció esta declaración en un mensaje emitido por vídeo en la apertura del Simposio internacional sobre la inocuidad y el control de los alimentos, hoy en Viena (Austria). El acto está organizado por la FAO y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) por conducto del Centro Conjunto FAO/OIEA (Técnicas Nucleares en la Alimentación y la Agricultura).

En su mensaje, el Director General de la FAO señaló que el centro se había fundado en 1964 con el objetivo de realizar avances en materia de seguridad alimentaria y desarrollo agrícola sostenible en el plano mundial mediante la aplicación segura y adecuada de la ciencia y las tecnologías nucleares. “La colaboración visionaria de nuestros laboratorios de investigación en común es única dentro del sistema de las Naciones Unidas”, dijo.

Además, enfatizó la urgencia y pertinencia de los esfuerzos compartidos: “Las consecuencias de las subidas repentinas de los precios de los alimentos y la energía, los desastres de origen natural o antrópico, la crisis climática, así como los conflictos en curso, están afectando de manera importante la disponibilidad y asequibilidad de los alimentos, así como el acceso a ellos en todo el planeta”.

El objetivo del simposio celebrado del 27 al 31 de mayo de 2024, cuyo tema fue “Alimentos inocuos para una vida mejor”, es destacar la función fundamental de las técnicas nucleares en la mejora de la inocuidad de los alimentos y la productividad agrícola, así como facilitar el intercambio de información entre investigadores, funcionarios y otros asociados clave de los países desarrollados y en desarrollo.

Las tecnologías nucleares ofrecen soluciones competitivas y a menudo únicas para combatir el hambre, reducir la malnutrición, mejorar la sostenibilidad ambiental y garantizar la inocuidad y autenticidad de los alimentos. La FAO y el OIEA mantienen una alianza estratégica a fin de ayudar a los países Miembros a utilizar estas tecnologías de manera segura y eficaz.

El Centro Conjunto FAO/OIEA, junto con su Laboratorio de Biotecnología Agrícola, coordina y apoya la investigación aplicada a través de más de 25 proyectos anuales de investigación coordinada. En estos proyectos participan más de 400 instituciones de investigación y estaciones experimentales internacionales y nacionales.

Asimismo, el Centro brinda apoyo a más de 200 proyectos de cooperación técnica de ámbito nacional y regional cada año con miras a transferir estas tecnologías a los países Miembros. Los laboratorios únicos de la FAO y el OIEA realizan actividades de investigación y desarrollo aplicadas y adaptativas a fin de ofrecer normas, protocolos, directrices, capacitación y servicios especializados.

El Centro Conjunto FAO/OIEA ha sido decisivo en el aprovechamiento de las tecnologías nucleares para hacer frente a cuestiones cruciales como la fertilidad del suelo, la gestión de los recursos hídricos, el control de plagas y la inocuidad alimentaria. Esta alianza dio lugar a varios avances, entre otros, el desarrollo de mejores variedades de cultivos, unas estrategias de gestión de plagas más eficaces y mejores protocolos de inocuidad de los alimentos.

El simposio marca un hito importante en la colaboración en curso entre la FAO y el OIEA, mostrando la repercusión profunda que ejerce la tecnología nuclear en la alimentación y la agricultura a escala mundial.

El papel de la FAO

La FAO se compromete a mejorar la colaboración con las ciencias y tecnologías nucleares a fin de ayudar a los Estados Miembros a lograr las “cuatro mejoras”: una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor para todos.

Garantizar la inocuidad alimentaria es un proceso complejo que empieza en la explotación agrícola y termina con el consumidor. La FAO es la única organización internacional que supervisa todos los aspectos de la cadena alimentaria, lo que le permite ofrecer una visión única y exhaustiva de la inocuidad de los alimentos. Esta perspectiva holística se amplía aún más gracias a una asociación de larga data con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Con sus mandatos complementarios, la FAO y la OMS abordan una serie de cuestiones en apoyo de la inocuidad de los alimentos a escala mundial y de la protección de la salud de los consumidores. La OMS es principalmente responsable de la salud pública, en tanto que la FAO en general encara cuestiones vinculadas a la inocuidad alimentaria a lo largo de la cadena de producción de alimentos. El Codex Alimentarius, un programa conjunto de la FAO y la OMS, ofrece desde hace 60 años una plataforma para realizar consultas técnicas y normativas, y ha sentado una base sólida de referencia internacional en materia de inocuidad de alimentos y protección del consumidor.