De la Oficina Regional de la FAO para el Cercano Oriente y África del Norte
Tierras de cultivo e infraestructura agrícola dañadas en Gaza. Se prevé que los indicadores de seguridad alimentaria y nutrición se deterioren aún más debido a los conflictos en curso, junto con las sequías persistentes en muchas partes de la región árabe.
©FAO/Yousef Alrozzi
El Cairo. En 2023, el hambre se agravó en la región árabe en medio de crisis cada vez más profundas, según un informe de las Naciones Unidas presentado hoy por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia Occidental (CESPAO).
En el informe, titulado Near East and North Africa – Regional Overview of Food Security and Nutrition 2024 (Panorama regional de la seguridad alimentaria y la nutrición en el Cercano Oriente y África del Norte [2024]), se advierte que la región árabe sigue lejos de cumplir las metas en materia de seguridad alimentaria y nutrición de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) antes de 2030.
En 2023, 66,1 millones de personas, aproximadamente el 14 % de la población de la región árabe, padecieron hambre. Según se señala en el informe, el acceso a una alimentación adecuada sigue siendo un objetivo inalcanzable para millones de personas. Alrededor de 186,5 millones de personas —el 39,4 %de la población— se enfrentó a inseguridad alimentaria moderada o grave, un incremento de 1,1 puntos porcentuales con respecto al año anterior. Resulta alarmante que 72,7 millones de personas experimentaran inseguridad alimentaria grave.
Según se desprende del análisis realizado en el informe, los conflictos son la causa principal de la inseguridad alimentaria y malnutrición en la región. También contribuyen a estas significativamente las dificultades económicas, las grandes desigualdades de ingresos y los fenómenos climáticos extremos. El incremento de los precios de los alimentos ha agravado la crisis. En 2023, la subalimentación en los países afectados por conflictos alcanzó el 26,4 %, es decir, una tasa cuatro veces mayor respecto del 6,6 % registrado en las zonas que no sufren conflictos.
Lamentablemente, se prevé que los indicadores de inseguridad alimentaria y nutrición se deterioren aún más como consecuencia de los conflictos actuales, unidos a las persistentes sequías en muchas partes de la región.
Principales conclusiones más allá del hambre
El acceso económico a dietas saludables continúa siendo un problema crucial, que afecta a más de un tercio de la población en la región árabe. En 2022, los nuevos datos sobre los precios de los alimentos y las mejoras metodológicas pusieron de manifiesto que 151,3 millones de personas no podían permitirse una dieta saludable. Las tasas más altas se registraron en los países afectados por conflictos, donde el 41,2 % de la población tuvo dificultades para permitirse una dieta saludable.
En el informe se pone de relieve el persistente sufrimiento padecido en la región árabe como consecuencia de la triple carga de la malnutrición, es decir, las tendencias al alza de la obesidad en niños y adultos, la emaciación y la carencia de nutrientes, por ejemplo, la anemia en las mujeres.
Aunque se han realizado avances en la reducción de las tasas de retraso del crecimiento, que pasaron del 28,0 % en 2000 al 19,9 % en 2022, sigue siendo difícil alcanzar las metas en materia de nutrición en la región árabe. La prevalencia de la emaciación en los niños también superó la media mundial, registrándose las tasas más altas en los países de ingresos bajos, donde alcanzaron el 14,6 %.
En 2022, un 9,5 % de los niños menores de cinco años tenían sobrepeso, casi el doble de la media mundial. Esto representa un aumento del 8 % desde 2000 y las tasas más altas se registran en Libia, Túnez y Egipto.
Según el informe, la prevalencia de anemia en las mujeres de entre 15 y 49 años alcanzó el 33,2 % en 2019, una proporción superior a la media mundial, registrándose la tasa más alta, del 43,9 %, en los países de ingresos bajos.
Pese a algunas mejoras, las tasas de obesidad en adultos en los estados árabes siguen siendo alarmantemente altas, con una prevalencia del 32,1 % en 2022, más del doble de la tasa mundial. Los países de ingresos medianos altos registraron las tasas más elevadas, es decir, del 33,8 %, y Egipto, Qatar y Kuwait se situaron a la cabeza en lo referente a las tasas de obesidad desglosadas por país.
Impulsar la transformación agroalimentaria por medio de una financiación innovadora
El tema de este informe de 2024, titulado Financing the transformation of agrifood systems for food security and nutrition (“La financiación de la transformación de los sistemas agroalimentarios para la seguridad alimentaria y la nutrición”), subraya la necesidad de adoptar una estrategia integral para alcanzar el ODS 2 (Hambre cero). En el informe se pone de relieve la necesidad de transformar y fortalecer los sistemas agroalimentarios, abordar las desigualdades y velar por que las dietas saludables sean asequibles y accesibles para todos.
En el Panorama regional de la seguridad alimentaria y la nutrición en el Cercano Oriente y África del Norte (2024) se pide con urgencia una financiación mayor y más eficaz en función de los costos. Se recomiendan mecanismos de financiación innovadores —por ejemplo, garantías del capital, financiación basada en los resultados, financiación para el clima, canjes de deuda, compromisos anticipados de mercado y centros de innovación— para subsanar el déficit de financiación. En el informe se subraya la necesidad de adaptar estos enfoques a las capacidades financieras de cada país y armonizar los objetivos de las partes interesadas para salvaguardar los sistemas agroalimentarios. Además, en el informe se aboga por entornos reglamentarios propicios y mejoras en materia de políticas para atraer capital a estos vehículos innovadores.
“Ahora es crucial optimizar la utilización de los recursos públicos existentes y obtener financiación adicional para impulsar efectos positivos en el conjunto de los sistemas agroalimentarios, socioeconómicos y ambientales. Los instrumentos financieros innovadores son fundamentales para transformar los sistemas agroalimentarios en los estados árabes y subsanar el déficit de financiación”, dijo el Sr. Abdulhakim Elwaer, Subdirector General de la FAO y Representante Regional para el Cercano Oriente y África del Norte, en el prólogo conjunto del informe, firmado también por la Sra. Dina Saleh, Directora Regional de la División del Cercano Oriente, África del Norte y Europa del FIDA; el Sr. Edouard Beigbeder, Director Regional de la División del Cercano Oriente y África del Norte del UNICEF; la Sra. Corinne Fleischer, Directora Regional para Oriente Medio, África del Norte y Europa oriental del PMA; el Sr. Hanan Balkhy, Director Regional para el Mediterráneo oriental de la OMS, y la Sra. Rola Dashti, Secretaria Ejecutiva de la CESPAO.
Los organismos de las Naciones Unidas sostienen que las conclusiones del informe generarán nuevo impulso para la transformación de los sistemas agroalimentarios en la región árabe, creando sistemas agroalimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles para las personas y para el planeta.
Sobre la base de las conclusiones del informe, los organismos de las Naciones Unidas emitieron la “Declaración de El Cairo sobre la financiación de la transformación de los sistemas agroalimentarios en la región del Cercano Oriente y África del Norte” durante el acto de presentación de hoy. En la declaración, reafirman el compromiso de aumentar su colaboración recíproca y con los bancos de desarrollo internacionales y regionales, el sector privado y los gobiernos nacionales. El objetivo de este esfuerzo colaborativo es desarrollar, ampliar y desplegar recursos financieros adicionales para apoyar la transformación de los sistemas agroalimentarios regionales con el fin de lograr seguridad alimentaria y afianzar la nutrición.
Además, los organismos de las Naciones Unidas proponen poner en marcha plataformas colaborativas de financiación. Estas iniciativas se llevarán a cabo en colaboración con gobiernos beneficiarios, asociados para el desarrollo y asociados financiadores a fin de alcanzar el ODS 2.
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Nota de la redacción: Panorama regional de la seguridad alimentaria y la nutrición en el Cercano Oriente y África del Norte
Cada año, la FAO publica estadísticas esenciales sobre la seguridad alimentaria y la nutrición en el Cercano Oriente y África del Norte a través de su Panorama regional de la seguridad alimentaria y la nutrición. En este informe no solo se presentan datos sobre los progresos realizados para poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y mejorar la nutrición, sino que además se proporciona un análisis en profundidad de los principales desafíos regionales para alcanzar esas metas en el marco la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
El primer Panorama regional de la seguridad alimentaria y la nutrición en el Cercano Oriente y África del Norte, publicado por la FAO en 2015, ofreció una visión de los avances de la región hacia las metas relativas al hambre de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y la Cumbre Mundial sobre la Alimentación. Desde 2019, este informe regional se ha elaborado conjuntamente con los organismos hermanos de las Naciones Unidas: el FIDA, el UNICEF, el PMA, la OMS y la CESPAO.
Glosario de términos clave
Dietas saludables: Consta de cuatro aspectos fundamentales: diversidad (dentro de un mismo grupo de alimentos o entre grupos de alimentos), idoneidad (nivel suficiente de todos los nutrientes esenciales en función de las necesidades), moderación (alimentos y nutrientes que están relacionados con problemas de salud) y equilibrio (ingesta de energía y macronutrientes). Los alimentos consumidos deben ser inocuos.
Hambre: sensación física incómoda o de dolor, causada por un consumo insuficiente de energía alimentaria. En este informe, el término “hambre” es sinónimo de subalimentación crónica y se cuantifica mediante la prevalencia de la subalimentación.
Malnutrición: estado fisiológico anormal debido a una ingesta insuficiente, desequilibrada o excesiva de macronutrientes o micronutrientes o por enfermedades que causan pérdida de peso. La malnutrición incluye la desnutrición (retraso del crecimiento y emaciación infantiles) y carencias de vitaminas y minerales (también conocida como deficiencia de micronutrientes) así como el sobrepeso y la obesidad.
Inseguridad alimentaria moderada: nivel de gravedad de inseguridad alimentaria en el que las personas afrontan incertidumbres sobre su capacidad para obtener alimentos y se ven obligadas, en ciertas épocas del año, a reducir la calidad o la cantidad de los alimentos que consumen por carencia de dinero u otros recursos. Se define como una falta de acceso continuado a los alimentos, lo cual disminuye la calidad de la dieta y altera los hábitos alimentarios normales. Se mide con la escala de experiencia de inseguridad alimentaria y contribuye al seguimiento de los avances hacia la meta 2.1 de los ODS (indicador 2.1.2).
Inseguridad alimentaria grave: nivel de gravedad de inseguridad alimentaria en el que las personas, en ciertas épocas del año, se han quedado sin alimentos, sufren hambre y, en el caso más extremo, pasan uno o más días sin comer. Se mide con la escala de experiencia de inseguridad alimentaria y contribuye al seguimiento de los avances hacia la meta 2.1 de los ODS (indicador 2.1.2).
Subalimentación: condición en la que el consumo habitual de alimentos de un individuo es insuficiente para proporcionarle la cantidad de energía alimentaria necesaria a fin de llevar una vida normal, activa y sana. Para medir el hambre y los avances en relación con la meta 2.1 de los ODS (indicador 2.1.1 de los ODS) se utiliza la prevalencia de la subalimentación.
2024 NENA Regional Overview of Food Security and Nutrition
Puede leerse la publicación: Repurposing agricultural subsidies for sustainable and resilient agrifood systems in the Near East and North Africa region
Oficina de Prensa, FAO (+39) 06 570 53625 [email protected]