Afaf Qaddouh se ha beneficiado de un proyecto de la FAO en el Líbano destinado a aumentar la productividad agrícola y mejorar las prácticas de ordenación de tierras. ©FAO/Ralph Azar
Afaf Qaddouh había ayudado a su padre a trabajar sus tierras en Zawtar El Sharkiyeh, en el sur del Líbano, desde que era niña. Cuando su progenitor falleció, ella las heredó. No sabía entonces lo importante que sería esta herencia para ella.
En 2019, Afaf fue despedida de su empleo en el municipio de su pueblo. Como mujer soltera en el Líbano, era difícil encontrar otro trabajo. La agricultura pasó a ser crucial para obtener ingresos.
Sin embargo, Afaf sabía que iba a tener que invertir en mejorar la productividad de su explotación si quería que se convirtiera en su medio de vida. Al no contar con fondos para esta inversión de su propio bolsillo, buscó ayuda en un proyecto de la FAO.
El proyecto, financiado por el Reino de los Países Bajos e implementado por la FAO, opera en todo el Líbano para ayudar a los agricultores a hacer que sus tierras sean productivas e invertir en sus infraestructuras agrícolas, incluida la construcción de depósitos de agua para el riego. Dado que el Líbano alberga a gran número de desplazados de Siria, el proyecto busca también crear oportunidades de empleo para ellos, así como para los libaneses de las comunidades de acogida.
Las mujeres campesinas son pocas y se enfrentan a más retos que los hombres, por lo que se les dio prioridad en las solicitudes de financiación. Hasta la fecha, han participado en el proyecto 254 mujeres.
Con la ayuda de un proyecto de la FAO para mejorar sus tierras, Afaf ha comenzado a cultivar melones y otras hortalizas. ©FAO/Ralph Azar
Con la financiación que recibió, Afaf pudo incorporar prácticas de gestión del agua más sostenibles y realizar las mejoras necesarias en sus tierras. Es lo se denomina recuperación de tierras e incluye la extracción de piedras y la nivelación y terraplenado en las laderas, para hacerlas más productivas. Afaf construyó además muros de contención, que son necesarios en muchas zonas del Líbano donde abunda la tierra suelta y las laderas empinadas.
Los métodos de recuperación de tierras son importantes conocimientos heredados, y se consideran un patrimonio cultural en las zonas montañosas del Líbano. Estos métodos tradicionales ayudan a conservar el suelo y el agua e incluyen crear infraestructuras para controlar la erosión del suelo y la degradación de la tierra en las laderas de las montañas. Sin embargo, por lo general, debido a los elevados costos que entraña, esta forma ancestral de aprovechamiento de la tierra está fuera del alcance de la mayoría de los agricultores.
Gracias a esas inversiones y mejoras, Afaf aumentó considerablemente la productividad de sus tierras. Ahora ha comenzado a cultivar melones, orégano, fríjoles y otras hortalizas. El depósito de agua permite regular con éxito el riego de estos cultivos para aumentar el rendimiento, pero también mejora la salud de sus olivos, obligados antes a depender del agua de lluvia.
Caminando junto a sus árboles de hojas plateadas, Afaf se ve feliz y satisfecha. “Vengo aquí no sólo a trabajar, -dice- sino también a disfrutar de mi tiempo en la naturaleza y poder volver a casa relajada”.
Los métodos de bonificación de tierras como los utilizados en la explotación agrícola de Afaf se consideran un patrimonio cultural en las zonas montañosas del Líbano. ©FAO/Elie Harfouch
Impacto de la COVID-19
La pandemia de COVID-19 y las subsiguientes medidas de contención -que incluyen el cierre de las fronteras y una disminución de la actividad comercial-, han agravado el impacto de la grave crisis económica que el Líbano ha sufrido desde finales de 2019. En el caso de Afaf y muchos otros, algunos de los mayores problemas han sido el aumento de los precios de los alimentos y los insumos agrícolas, así como la hiperinflación general impulsada por la fuerte devaluación de la moneda local.
Sin embargo, Afaf sigue siendo optimista. Encuentra consuelo en su trabajo y confía en su tierra para superar esta época de crisis. Ahora está plantando más olivos, tomates y melones, aprovechando el depósito de agua y los muros de contención que la subvención del proyecto le ayudó a construir. Además, prepara según métodos tradicionales su mouneh, una reserva de alimentos en conserva para el invierno.
Acceso equitativo
Afaf es también una defensora del empoderamiento de la mujer y de su independencia financiera, sobre todo teniendo en cuenta los problemas particulares a los que se enfrentan las agricultoras en el Líbano. A las mujeres les resulta más difícil acceder a derechos sobre la tierra, al crédito, los insumos agrícolas y los mercados. Sólo el 9 por ciento de las explotaciones agrícolas están dirigidas y gestionadas por mujeres y, aunque ellas constituyen el 43 por ciento de la mano de obra agrícola, se les paga un 43 por ciento menos que a sus homólogos masculinos.
Afaf cree que sostener a las mujeres productoras es crucial para la supervivencia de la agricultura en el Líbano. “Amo mi tierra y jamás la podría vender. Mi tierra es mi vida”. En las comunidades rurales vulnerables, las mujeres no suelen tener acceso a las mismas oportunidades. Una de las metas centrales de la FAO y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible es empoderar a las mujeres y mejorar su situación, a nivel social, en el trabajo y la agricultura. Para que más mujeres como Afaf puedan acceder a las oportunidades que se merecen.
Nota de la redacción: Este artículo fue escrito antes de la explosión en Beirut del 4 de agosto de 2020. La FAO continúa su labor de apoyo al Líbano en estos momentos difíciles. Le invitamos a visitar el sitio web de la FAO en el Líbano o su cuenta de Twitter para obtener más información.
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