• FAO mediante la Cooperación Sur-Sur aporta experiencia internacional a través de curso de bioseguridad facilitados por SENASICA, México.

Managua, Nicaragua. A nivel mundial, entidades como la Organización Mundial del Comercio (OMC), la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), se encargan de mejorar la sanidad animal y vegetal, aplicando las medidas fitosanitarias y sanitarias para el comercio internacional de productos y subproductos agropecuarios.

En tal sentido, el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA), en coordinación con la FAO Nicaragua, desarrolló el taller de “Bioseguridad en granjas de producción pecuaria”, dirigido a funcionarios de la dirección de salud animal del IPSA, con el objetivo de fortalecer los servicios veterinarios en cuanto a la aplicación de la herramienta de bioseguridad en las unidades de producción pecuarias (UPP) de bovinos, porcinos, aves, abejas y acuícolas para la reducción de riesgo de enfermedades.

Al respecto, SENASICA, México, tiene una vasta experiencia en la aplicación de la herramienta de bioseguridad y en el marco de la Cooperación Sur-Sur, la FAO gestionó este intercambio, en materia de vigilancia epidemiológica para la prevención, el control de las principales enfermedades y la protección de la condición sanitaria en nuestro país.

La facilitación del taller estuvo a cargo de Álvaro Bello Pastor y Miguel Ángel Camacho, médicos veterinarios, zootecnistas del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), quienes explicaron de qué manera la aplicación de esta herramienta repercute en beneficio del productor, mejorando su producción animal y la calidad de los alimentos.

Álvaro Bello aseguró que “actualmente, el tema está tomando mayor importancia y con este intercambio de conocimientos esperamos que las técnicas utilizadas en México sean de utilidad para los técnicos del IPSA”, indicó.

Por su parte Miguel Ángel Camacho, coordinador de zona en el estado de Querétaro, México, destacó que Nicaragua tiene bastante experiencia en el tema de bioseguridad. “Esta herramienta básica es de suma importancia para el IPSA, ya que ellos son los precursores de la salud en el país y tienen ese acercamiento con el sector pecuario, lo que les permitirá tener mayor acceso a nuevos mercados, evitando la diseminación de problemas sanitarios”, expresó Camacho.

Durante los 4 días que duro el taller, los técnicos del IPSA lograron identificar oportunidades de mejora en la aplicación de medidas de bioseguridad en el país, a través de la experiencia nacional en UPP de bovinos, porcinos, aves, apícolas y acuícolas. También, elaboraron un plan de fortalecimiento de capacidades y coordinación de actividades vinculadas a garantizar, mantener y fortalecer la sanidad agropecuaria, acuícola y pesquera del país.

El taller permitió a los técnicos del IPSA, evaluar las técnicas de bioseguridad empleadas en el país y, a partir de la experiencia de SENASICA, México, reorientar los procedimientos de bioseguridad en las UPP y equipo de protección personal, para mayor control y protección de la condición sanitaria de Nicaragua. Así mismo se facilitaron recomendaciones para fortalecer la labor del IPSA en el tema.