Reducir la pobreza rural

Como lo hacemos

Invertir en agricultura tiene una mayor repercusión en la reducción de la pobreza que invertir en otros sectores, ya que ofrece la ruta más directa para que población rural se beneficie de sus principales activos: tierra y mano de obra. Sin embargo, esto no representa el panorama completo.

Abordar los medios de subsistencia agrícolas es el punto de partida, pero la reducción la pobreza rural también requiere:

  • aumentar la productividad de las pequeñas explotaciones y mejorar sus acceso a los mercados
  • promover cadenas de valor más eficientes
  • crear empleo, especialmente para los jóvenes
  • fomentar la diversificación económica
  • invertir en las personas y fomentar competencias que puedan usarse en actividades agrícolas y no agrícolas

Los 193 países que conforman las Naciones Unidas han fijado 17 objetivos guiarán las medidas de la comunidad internacional de cara a los 15 próximos años (2016-2030). La Agenda 2030 ofrece una visión de un mundo más justo y pacífico en el que nadie se quede atrás.

Podemos ayudar a erradicar la pobreza extrema y el hambre en nuestro tiempo de vida. La alimentación y la agricultura son vitales para el desarrollo sostenible y fundamentales para luchar contra la pobreza y el hambre. El trabajo de la FAO se centra en las causas subyacentes de la pobreza y el hambre mediante la introducción de cambios fundamentales y estructurales que puedan asegurar el éxito a largo plazo.