FAO en Venezuela

COP15: FAO apoya a países en la restauración y conservación de la biodiversidad en América Latina y el Caribe

15/12/2022

En la Reserva Forestal Imataca de Venezuela se implementa desde el año 2016 un proyecto con enfoque de género junto a la comunidad, para la preservación y aprovechamiento sustentable de los recursos del bosque.

Entre el 7 y el 19 de diciembre se está realizando en Montreal, Canadá, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica (COP15), cuyo objetivo central es lograr la aprobación del Marco mundial de la diversidad biológica posterior a 2020, en el que se describirá lo que los países tienen que hacer, individual y colectivamente, para conservar, proteger, restablecer y gestionar de forma sostenible la biodiversidad durante los próximos ocho años.

La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en calidad de entidad observadora, se encuentra prestando apoyo a los Estados Miembros mediante asesoramiento técnico tanto en el marco de las negociaciones como al margen de estas.

Actualmente, la FAO da asistencia a una serie de proyectos en América Latina y el Caribe, que buscan fortalecer el resguardo a la biodiversidad, la que cumple un rol fundamental para la alimentación y la agricultura. Los cultivos y los animales domésticos, las especies forestales y acuáticas naturales y cosechadas, y la biodiversidad asociada que se encuentra dentro y alrededor de la producción, es indispensable para la seguridad alimentaria, el desarrollo sostenible y el suministro de muchos servicios ecosistémicos vitales.

América Latina y el Caribe se ubica como una de las regiones con mayor diversidad de ecosistemas en el mundo. Solo América del Sur abarca el 21% de la superficie forestal total del mundo, y de ese total 27% es de bosque primario, albergando reservas únicas de biodiversidad.

“La biodiversidad es clave para la producción de alimentos, garantiza suelo, servicios ecosistémicos, y resilencia al cambio climático. Debemos avanzar en incorporar acciones de mantenimiento, mejora y conservación en todos los sistemas productivos”, sostuvo Hivy Ortiz, Coordinadora de la Iniciativa Regional de Agricultura Sostenible y Resiliente de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), para América Latina y el Caribe.

Iniciativas de en la región

En la Reserva Forestal Imataca en Venezuela, bosque húmedo tropical ubicado en el sur del país, que comprende un área protegida que cuenta con más de 3 millones 700 mil hectáreas, se encuentra una región megadiversa en la que habitan 168 especies de mamíferos, 597 de aves, 358 de peces, 119 de reptiles y 76 de anfibios; es, además, territorio ancestral de los indígenas Kariña. En la localidad se implementa desde el año 2016, un proyecto con enfoque de género junto a la comunidad, para la preservación y aprovechamiento sustentable de los recursos del bosque.

En el sector Caribe de Colombia se desarrolló el proyecto Conexión Biocaribe, en el cual los gobiernos locales, pueblos indígenas y jóvenes, trabajaron con asistencia de la FAO para identificar y desarrollar diferentes estrategias de integración productiva y ambiental en cinco corredores de conectividad y 11 mosaicos de conservación y uso sostenible, con las que se construyó una propuesta de valoración en función de la conectividad de áreas protegidas. A la fecha, cerca de dos millones de hectáreas de ecosistemas terrestres y marinos contribuyeron a la conectividad, y 21 mil hectáreas de nuevas áreas protegidas fueron declaradas en el marco de la contrapartida de socios del proyecto. En total, 1800 familias fueron involucradas en la implementación de sistemas productivos y de conservación.

En Chile, la FAO, junto a la Red de Sistemas Importantes de Patrimonio Agrícola Nacional (Red SIPAM, una iniciativa de rescate patrimonial que se ha convertido en política pública en distintos países), el Ministerio de Agricultura de Chile y con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), ha dado apoyo a 1.162 familias en materias de prácticas agrícolas sostenibles (56% son mujeres), como rescate de semillas e identificación de prácticas ancestrales.

Además, en este país se está desarrollando un proyecto marino costero con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial, y la ejecución del Ministerio del Medio Ambiente, en conjunto con la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (SUBPESCA) y el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (SERNAPESCA), e implementado por la FAO. Su objetivo central es desarrollar e implementar un sistema de gobernanza que integre, coordine y articule las instituciones públicas, privadas y de la sociedad civil para la conservación de los ecosistemas marinos costeros en la zona Norte en las regiones Coquimbo y Atacama; y en la Zona Sur en la región Aysén.

En Perú, en las regiones de Cusco, Puno, Apurímac, Huancavelica y Arequipa, el proyecto SIPAM, a través de la implementación del mecanismo de retribuciones por servicios de conservación de la agrobiodiversidad (mecanismo ReSCA) y de la mano con las comunidades, viene conservando 226 cultivares (variedades nativas) de 10 cultivos en riesgo. Este trabajo reúne más de 1.700 familias de 72 Comunidades campesinas, comprometidas en la recuperación y conservación de cultivos nativos.

En Ecuador, el proyecto Paisajes Andinos, ejecutado por la FAO con el apoyo financiero de la Unión Europea, ya ha beneficiado a 1.541 familias en las provincias de Pichincha, Bolívar, Cotopaxi e Imbabura, con acciones enfocadas en el manejo integrado del paisaje, la conservación y restauración ambiental y buenas prácticas de producción, como una manera de garantizar la sostenibilidad de los medios de vida de las comunidades en las áreas de incidencia.

Además, junto a Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela, la FAO dio apoyo a la integración, gestión efectiva, buena gobernanza y participación local en las áreas protegidas de países amazónicos de la RedParques en el proyecto IAPA Visión Amazónica.