Las últimas informaciones indican un ligero empeoramiento de las perspectivas
de la oferta de cereales para 1998/99 debido a una nueva revisión a la
baja de la producción estimada para este año. Desde el último
informe, hay indicios de que la producción de cereales ha disminuido
más de lo previsto en la CEI, y de que también han empeorado las
perspectivas para las cosechas de arroz en algunos de los principales productores
de Asia. Según las previsiones actuales, la producción mundial
de cereales disminuirá en 1998 en alrededor del 2 por ciento con respecto
al nivel récord del año pasado, situándose en 1 872 millones
de toneladas (incluido el arroz elaborado). Según los pronósticos,
la producción de cereales será un poco inferior a las necesidades
de consumo previstas para 1998/99, lo que obligará a recurrir a las reservas.
Ello no obstante, la relación mundial entre las existencias y la utilización
en 1998/99, prevista en un 17 por ciento, se mantendrá dentro del margen
del 17-18 por ciento que la Secretaría de la FAO considera el mínimo
necesario para salvaguardar la seguridad alimentaria mundial. Mientras se prevé
una disminución marginal de las existencias de cereales a nivel mundial,
se pronostica que las de los grandes exportadores, que suelen ser el principal
amortiguador de las variaciones de la producción mundial, aumentarán
considerablemente en 1998/99 como consecuencia de un aumento de su producción
y de la lentitud de la demanda mundial de importaciones. Los precios internacionales
del trigo y los cereales secundarios están en general más débiles
que hace un año, y se pronostica que las disponibilidades de ayuda alimen-taria
de los principales donantes aumentarán de for-ma pronunciada para 1998/99.
1996/97 | 1997/98 estim. |
1998/99 pronóst. |
|
(. . millones de toneladas . .) | |||
Producción 1/ | 1 895 | 1 912 | 1 872 |
Trigo | 590 | 615 | 594 |
Cereales secundarios | 923 | 909 | 903 |
Arroz (elabor.) | 383 | 388 | 375 |
Suministros 2/ | 2 156 | 2 211 | 2 203 |
Utilización | 1 853 | 1 874 | 1 878 |
Comercio 3/ | 204 | 208 | 201 |
Existencias finales 4/ | 299 | 331 | 323 |
FUENTE: FAO
1/ Los datos corresponden al año civil indicado en primer lugar. Incluye el arroz elaborado
2/ Producción y existencias iniciales.
3/ Base julio/junio para el trigo y cereales secundarios y año civil para el arroz.
4/ No indican la diferencia entre los suministros y la utilización de- bido a los distintos años comerciales de cada país.
A medida que avanza el año, va disminuyendo la probabilidad de que las
perspectivas para la oferta de 1998/99 sigan empeo-rando. Sin embargo, el resultado
final sigue depen-diendo de las noticias sobre la verdadera magnitud de la producción
de cereales en la CEI y de arroz en algunos de los grandes países productores
de Asia, que siguen bajo la influencia del mal tiempo. Ya ha comenzado en condiciones
en general favorables la favorables la plantación de los cultivos de
trigo de invierno de 1999 en los principales países producto-res del
hemisferio norte. La superficie que se sem-brará para la cosecha del
año próximo es una incógnita, pero los informes iniciales
indican que posiblemente disminuirá debido a que las pers-pectivas de
los precios son poco interesantes, que es al parecer la razón de mayor
peso en los Estados Unidos, pero debido también a los cambios de política,
como es el caso de la CE donde el requisito de detracción de tierras
para 1999 se ha duplicado al 10 por ciento.
Como ya se indicó, el último pronóstico de la FAO relativo
a la producción mundial de cereales en 1998 se ha revisado a la baja
desde el último informe de septiembre, en 20 millones de toneladas, a
1 872 millones de toneladas (incluido el arroz elaborado). La última
revisión se debe principalmente a una disminu-ción de las estimaciones
de la producción de trigo y cereales secundarios de la CEI, en la que
los rendi-mientos han sido muy inferiores a lo normal en algu-nas de las principales
zonas productoras a causa de la sequía registrada durante el verano.
También se ha revisado a la baja desde el último informe el pronós-tico
de la producción arrocera en Asia, lo que contri-buyó a la disminución
general. Según los pronósticos, la producción mundial de
cereales en 1998 será infe-rior en un 2 por ciento a la producción
sin prece-dentes de 1997, pero aun así superior a la media de los últimos
cinco años y cercana a la tendencia.
El pronóstico relativo a la producción mundial de trigo se ha
rebajado a 594 millones de toneladas, un 3,5 por ciento menos que la de 1997
y un poco inferior a la tendencia. Las revisiones a la baja, muy especialmente
en la CEI, pero también en Asia y América del Sur, compensan con
creces los aumentos marginales indicados para América del Norte, Europa
y Australia. El pronóstico de la FAO relativo a la producción
mundial de cereales secundarios en 1998 se ha rebajado a 903 millones de toneladas,
lo que representa un volumen marginalmente inferior al nivel estimado en 1997.
Según las estimaciones, la producción de cereales secundarios
aumentará sensiblemente en Asia, mientras que también se prevén
aumentos, aunque menores, en Africa, América del Norte y América
Central. Ahora bien, estos aumentos se ven compensados con creces por las disminuciones
registradas en América del Sur, Europa, la CEI y Oceanía. Según
los pronósticos actuales, la producción mundial de arroz en 1998
descenderá a 561 millones de toneladas, un 3 por ciento menos que la
producción récord del año pasado. Estos pronósticos
son provisionales, ya que todavía se están evaluando las repercusiones
de las grandes inundaciones registradas en algunos países asiáticos
del hemisferio norte. En el hemisferio sur y en la zona ecuatorial, donde ya
se han terminado de levantar las cosechas de arroz de la temporada principal,
la producción ha descendido a causa del mal tiempo.
El pronóstico de la FAO relativo al comercio mundial de cereales en
1998/99 (julio/junio) se ha revisado al alza en 2 millones de toneladas desde
el último informe a 201 millones de toneladas, pero aun así es
inferior en un 3 por ciento al volumen del año anterior, debido en su
mayor parte a una disminución de las importaciones de trigo y arroz.
Las importa-ciones mundiales de trigo en 1998/99 se pronostican ahora en 91,5
millones de toneladas, 1 millón de toneladas más que el pronóstico
anterior, debido principalmente a la probabilidad de que aumenten las de la
CEI. Se prevé que la disminución respecto al año anterior
se producirá sobre todo en Asia debido al efecto combinado del aumento
de la producción interna en algunos países y a la disminución
del poder adquisitivo a causa de las dificultades econó-micas. También
se ha elevado algo respecto al infor-me anterior el pronóstico del comercio
mundial de ce-reales secundarios, situándose ahora en torno a los 89
millones de toneladas, 1,5 millones de toneladas más que el año
pasado. Según los pronósticos, la mayor parte del incremento respecto
al año anterior se producirá en la cebada, y en el centeno, que
es un cereal secundario de comercialización relativamente baja. El volumen
del comercio mundial de maíz aumentará sólo marginalmente,
aunque a nivel regio-nal se prevé un aumento significativo de las importa-ciones
de algunos países latinoamericanos que se verá compensado en gran
parte por las disminu-ciones en otras partes. Se pronostica provisional-mente
que el comercio mundial de arroz disminuirá en el año civil 1999
de forma pronunciada respecto al volumen sin precedentes de 1998, debido a que
la producción de muchos de los principales países importadores
se ha recuperado respecto a los niveles bajos de 1997 y principios de 1998.
Se pronostica que la utilización mundial de cereales en 1998/99 aumentará
ligeramente respecto del año anterior a 1 878 millones de toneladas,
aun-que descenderá marginalmente respecto de la ten-dencia a largo plazo
por primera vez desde 1995/96. La contracción del crecimiento de la utilización
se deberá principalmente al receso económico registrado en Asia,
que disminuyó la demanda de piensos y, más recientemente, a las
dificultades eco-nómicas y a las cosechas muy reducidas obtenidas en
algunos países de la CEI, que podrían afectar también al
uso de cereales forrajeros en esa región. Por consiguiente, pese a que
los precios de los cereales siguen estando débiles, se pronostica ahora
que la utilización mundial de piensos descenderá en 1998/99 en
un 0,3 por ciento. En 1998/99l, el consu-mo humano mundial de cereales debería
seguir au-mentando al ritmo del crecimiento demográfico, mien-tras que
otros usos, incluidas las pérdidas posco-secha, las semillas y los usos
industriales, deberían volver a niveles más normales después
de los niveles máximos alcanzados en 1997/98.
En base a los primeros indicios, se pronos-tica que en 1998/99 (julio/junio)
los envíos de ayuda alimentaria en cereales aumentarán a alrededor
de 9 millones de toneladas, en comparación con el nivel bajo de 1997/98,
estimado ahora en 5,3 millones de toneladas. Este cambio brusco después
de cuatro años de constante disminución se debe en gran parte
a que aumentaron las disponibilidades de los principales donantes y también
las necesidades de ayuda alimentaria. Según los pronósticos, los
envíos de ayuda alimentaria en 1998/99 cubrirán el 12 por ciento
de las importaciones totales de los PBIDA, comparado con sólo el 6,5
por ciento del año anterior.
Los precios internacionales del trigo y los cereales secundarios han repuntado
algo desde finales de agosto debido al aumento de la actividad comercial, aunque
están muy por debajo de los del período correspondiente del año
pasado. Los precios internacionales del trigo son los que más subieron:
a finales de octubre, el precio del trigo No.2 (trigo rojo duro, fob) se cotizó
a 133 dólares EE.UU. por tonela-da, 23 dólares EE.UU. más
por tonelada que en agosto, pero todavía 20 dólares EE.UU. menos
por tonelada que hace un año. Los precios de la mayor parte de los cereales
secundarios también han au-mentado desde agosto, si bien el incremento
se vio li-mitado por las perspectivas favorables de la cosecha de los Estados
Unidos, unidas al alto nivel de los in-ventarios y a una disminución
de la demanda de im-portaciones de piensos. Al final de octubre, el precio del
maíz de los Estados Unidos había subido a 98 dó-lares EE.UU.
por tonelada, 14 dólares EE.UU. más por tonelada que en agosto,
pero todavía 25 dólares EE.UU. menos por tonelada que el nivel
del año pa-sado. Los precios internacionales de exportación del
arroz han estado bajo presión en los últimos meses debido a la
escasa demanda de importación de las calidades superiores y a la llegada
al mercado de la nueva cosecha. En consecuencia, en octubre el índice
de la FAO para los precios de exportación del arroz (1982-84=100) descendió
a 131 puntos, frente a los 132 puntos de septiembre, pero aun así fue
muy superior al del mismo período del año pasado.
Tras dos años consecutivos de expansión, el último pronóstico
de la FAO indica una disminución de las existencias mundiales de cereales
para las campañas agrícolas que terminarán en 1999. A diferencia
de las informaciones anteriores, ahora se prevé que los remanentes de
cereales descenderán a 323 millones de toneladas, 7 millones de toneladas
menos que su nivel inicial revisado. La última revisión se debe
principalmente a la gran reducción prevista en los inventarios de algunos
países de la CEI, debida a la necesidad de compensar la gran escasez
de las cosechas. Si se realizan los pronósticos actuales relativos a
la producción y el consumo, la relación mundial entre las existencias
y la utilización en 1998/99 se pronostica ahora en un 17 por ciento,
es decir dentro del margen del 17-18 por ciento que la Secretaría de
la FAO considera el mínimo necesario para salvaguardar la seguridad alimentaria
mundial.