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Producción de cuyes (Cavia porcellus) en los países andinos


Sistemas de cría
Tipos de cuyes
Nutrición y alimentación
Reproducción y manejo
Parto, lactación y destete
Cría y recría
Papel socioeconomico de la cría de cuyes
Bibliografía

L. Chauca de Zaldívar

La autora es Líder del proyecto «Sistemas de producción familiar», Instituto Nacional de Investigación Agraria y Agroindustrial-Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (INIAA-CIID), La Molina, Perú.

El cuy es un mamífero roedor originario de la zona andina del Perú, Ecuador, Colombia y Bolivia. Constituye un producto alimenticio nativo, de alto valor nutritivo y bajo costo de producción, que contribuye a la seguridad alimentaria de la población rural de escasos recursos. En los países andinos la población de cuyes se estima en 36 millones de animales. En Ecuador y Perú la cría está difundida en la mayor parte del país; en Bolivia y Colombia está circunscrita a determinados departamentos, lo cual explica la menor población animal en estos países. En el Perú se encuentra la mayor población de cuyes. El consumo anual es de 116 500 toneladas de carne, proveniente del beneficio de más de 65 millones de cuyes producidos por una población más o menos estable de 22 millones.

El cuy reviste, en los hogares rurales, un significado simbólico asociado a la familia y a la condición femenina. Es signo de comida, y es el reforzador de las relaciones sociales, del prestigio y de las virtudes medicinales. Con la conquista del imperio incaico, se introdujeron especies animales que desplazaron a las nativas, como la llama y la alpaca; sin embargo, la producción de cuyes se mantuvo. Si bien no se desarrolló la cría en gran escala, la población andina conservó pequeños núcleos de animales para el autoconsumo, debido a su gran potencial como productor de carne.

A pesar de que en la actualidad el consumo de esta especie está circunscrito a las zonas del área andina, su aceptación se ha extendido hacia la costa y la selva, por efecto de la migración de la población andina que ha llevado consigo sus costumbres y tradiciones.

Sistemas de cría

La cría de cuyes se conduce según tres sistemas diferentes, caracterizados por su función en el contexto de la unidad productiva, y no por la población animal. Dichos sistemas son el familiar, el familiar-comercial y el comercial. El desarrollo de la cría ha implicado que un mismo productor haya podido practicar los tres sistemas.

Cría familiar

La cría de cuyes a nivel familiar da seguridad alimentaria y sostenibilidad a las actividades de los pequeños productores. Es el sistema más difundido, y se distingue por desarrollarse en el seno de la familia, fundamentalmente en base a insumos y mano de obra excedentes. El cuidado de los animales corre a cargo de los hijos en edad escolar y del ama de casa (en el 73 por ciento de los casos), o en menor medida del esposo (en el 9 por ciento de los casos). Eventualmente otros miembros de la familia contribuyen a esta labor cuando comparten la vivienda. El 44,6 por ciento de los productores crían cuyes exclusivamente para el autoconsumo, disponiendo así de una fuente de proteínas de origen animal de bajo costo; otros (el 49,6 por ciento) comercializan los excedentes cuando disponen de ellos- para generar ingresos. En este sistema son pocos quienes mantienen los cuyes sólo para la venta.

La cría familiar se caracteriza por el escaso manejo de que son objeto los animales, que se reúnen en un solo grupo sin diferenciación de clase, sexo o edad, razón por la cual se generan poblaciones con un alto grado de consanguinidad y una elevada mortalidad de lactantes debido principalmente al aplastamiento por animales adultos. Los recién nacidos son atropellados cuando los machos pelean por cubrir a la hembra, que presenta celo poco después del parto. Otra característica de este sistema es la selección negativa que se efectúa con las reproductoras, puesto que es común sacrificar o vender los cuyes más grandes. En el sistema de cría familiar se mantiene un alto porcentaje de reproductoras (60 por ciento); el promedio de crías por hembra al año es de 5,5, en comparación con el promedio de 10,8 crías por hembra que se obtienen con un manejo eficiente.

Los insumos alimenticios empleados son por lo general forrajes, residuos de cosechas y de cocina. El lugar destinado a la cría es normalmente la cocina, donde el calor del fogón protege a los animales de los fuertes cambios de temperatura que caracterizan a la región andina. En otras zonas se construyen pequeñas instalaciones colindantes con las viviendas, y se aprovechan los recursos disponibles en la finca.

Es común encontrar núcleos de producción de 10 a 50 animales. El promedio de cuyes por familia en los países de mayor producción (Perú, Ecuador y Bolivia) es de 20 (Beck, 1987; Chauca, 1991). El número de animales está determinado fundamentalmente por la disponibilidad de alimentos. La carne de cuy suele comercializarse en los mercados locales a altos precios.

La población predominante es criolla, y como consecuencia del mal manejo sólo se logran índices productivos inferiores a 0,2. La separación por clases mediante el sistema de pozas de cría permite triplicar la producción (Higaonna, Zaldívar y Chauca, 1989). En los sistemas de cría familiar mejorados se aprecia un crecimiento de la población, una mayor capitalización pecuaria, y sobre todo un incremento del 30 por ciento del consumo de carne de cuy, y un mayor ingreso para la familia por venta de los animales excedentes.

Cría familiar-comercial

El sistema de cría familiar-comercial genera empleo y permite disminuir la migración de los pobladores del área rural. En este sistema se mantiene una población no mayor de 500 cuyes. Se ponen en práctica mejores técnicas de cría, lo cual se traduce en la composición del lote. La alimentación es normalmente a base de subproductos agrícolas y pastos cultivados; en algunos casos se suplementa con alimentos equilibrados. El control sanitario es más estricto.

La cría se realiza en instalaciones adecuadas - las pozas de cría - que se construyen con materiales de proveniencia local. Les cuyes se agrupan en lotes por edad, sexo y clase, razón por la cual este sistema exige mayor mano de obra para el manejo y el mantenimiento de las pasturas.

Se han introducido reproductoras de líneas precoces (Perú e Inti) que se cruzan con los animales criollos. Se generan así animales que pueden ser enviados al mercado a las nueve semanas de edad, mientras que los criollos alcanzan su peso de comercialización a las veinte. La mayor eficiencia de la cría familiar-comercial se refleja en el índice productivo, que puede llegar a 0,8.

Cría comercial

Poco desarrollada, más circunscrita a valles cercanos a áreas urbanas donde existe demanda de carne de cuyes, la cría comercial es la actividad principal de una empresa agropecuaria que emplea una tecnología apropiada. Se utilizan animales de líneas selectas, precoces, prolíficas y eficientes convertidores de alimento.

El mejor manejo de la población permite lograr un índice productivo de 1, pesos de comercialización a las nueve semanas y una conversión alimentaria con alimentación mixta de 4,8:1. De la población total de cuyes, el 32 por ciento representa el plantel de reproductoras, proporción que refleja la eficiencia del manejo reproductivo y la mayor sobrevivencia de las crías. El desarrollo de la cría comercial contribuirá a suministrar carne de cuy a las zonas urbanas, donde por el momento es escasa. En el Ecuador y el Perú, se viene desarrollando con éxito este sistema de producción.

Tipos de cuyes

Los cuyes se han clasificado por tipos, basándose en su forma, conformación y pelaje. En el presente estudio se ha adoptado la clasificación según el pelaje:

· Tipo 1. Denominado Inglés, es de pelo corto y pegado al cuerpo; es el más difundido y es el característico cuy peruano productor de carne. Puede o no tener remolino en la cabeza. Es de colores simples claros, oscuros o combinados.

· Tipo 2. Llamado también Abisinio, es de pelo corto que forma rosetas a lo largo del cuerpo; es menos precoz. Está presente en las poblaciones criollas; existen de diversos colores. No es una población dominante; por lo general está cruzada con otros tipos, y se pierde fácilmente.

· Tipo 3. Conocido como Landoso, su pelo es largo y lacio, no es buen productor de carne y está poco difundido. La demanda de este tipo se debe a su hermoso aspecto.

· Tipo 4. Denominado Merino, su pelo es corto y erizado, pero al nacimiento presenta pelo ensortijado. La forma de la cabeza y del cuerpo es redondeada. Es de tamaño medio y de carne muy sabrosa. Tiene abundante infiltración de grasa muscular. Es apreciado por el sabor de su carne. La variabilidad de sus parámetros productivos y reproductivos le da un potencial como productor de carne.

Cría familiar tradicional en Cajamarca, sierra norte del Perú - Traditional family breeding in Cajamarca, Sierra Norte, Peru - Elevage familial traditionnel dans la région de Cajamarca, Sierra Norte, Pérou

Cría familiar-comercial - Family-commercial breeding - Elevage familial- commercial

Cría comercial en un galpón con capacidad pare 3 000 cuyes - Commercial breeding shed with capacity for 3 000 guinea pigs - Elevage commercial, batterie d'une capacité de 3 000 cobayes

En los países andinos se encuentran dos genotipos dé cuyes: el criollo y el mejorado.

El criollo, denominado también nativo, es un animal pequeño muy rústico debido a su aclimatación al medio, poco exigente en cuanto a la calidad de su alimento, que se desarrolla bien en condiciones adversas de clima y alimentación. Criado técnicamente mejora su productividad; tiene un buen comportamiento productivo al ser cruzado con cuyes mejorados de líneas precoces. Es criado principalmente en el sistema familiar; su rendimiento productivo es bajo y es poco precoz.

El mejorado es el cuy criollo sometido a un proceso de mejoramiento genético. Es precoz por efecto de la selección. En los países andinos es conocido como Peruano.

En el Perú, los trabajos sobre el cuy se iniciaron en 1966, con la evaluación de germoplasma de diferentes ecotipos muestreados a nivel nacional. En 1970, en la estación experimental agropecuaria La Molina del INIAA, se inició un programa de selección con miras a mejorar el cuy criollo en todo el país. Los animales se seleccionaron: por su precocidad y prolificidad, y se crearon las líneas Perú, Andina e Inti de cuyes mejorados.

· Línea Perú. Seleccionada por su precocidad; a las nueve semanas alcanza su peso de comercialización; puede presentar un índice de conversión alimentaria de 3,81 si los animales son alimentados en condiciones óptimas; su prolificidad promedio es de 2,8 crías por parto. Son de pelaje de tipo 1, de color alazán (rojo) puro o combinado con blanco.

· Línea Andina. Seleccionada por su prolificidad (3,9 crías por parto); obtiene un mayor número de crías por unidad de tiempo, como consecuencia del aprovechamiento de su mayor frecuencia de presentación de celo post partum (84 por ciento) en comparación con otras líneas. Los individuos son de color blanco.

· Línea Inti. Seleccionada por su precocidad corregida por el número de crías nacidas, es la que mejor se adapta a nivel de productores logrando los más altos índices de sobrevivencia. Alcanza en promedio un peso de 800 g a las diez semanas de edad, con una prolificidad de 3,2 crías por parto. Predomina en el pelaje el color bayo (amarillo) entero o combinado con blanco.

Las líneas Perú e Inti evaluadas en diversos ecosistemas del Perú, Ecuador, Colombia y Bolivia han registrado adaptabilidad y capacidad mejoradora de la progenie al cruzarse con hembras nativas. En el Cuadro 1 pueden observarse los rendimientos productivos de cuyes criollos, mejorados y mestizos, según diversos autores, en Ecuador, Bolivia y Colombia, considerando al cuy peruano como mejorador.

La evaluación complementaria de los cuyes mejorados relizada en las estaciones experimentales agropecuarias del INIAA en La Molina tuvo por objeto la conversión alimentaria: el cuy peruano se destacó por su eficiencia, con una tasa de 8,6 en comparación con la tasa de 14,0 del cuy boliviano. Estos valores fueron obtenidos con un sistema mixto de alimentación (Suhrer, 1988).

En los sistemas de cría familiar, las líneas Perú e Inti han dado buenas respuestas al cruzamiento con cuyes criollos. A medida que se incrementa el grado de cruzamiento, los cuyes (criollos de 401 g, 1/2 sangre de 478 g, y 3/4 sangre de 532 g de 2 meses de edad) alcanzan su peso de comercialización a edad más temprana. El efecto del medio ambiente, el tipo y sobre todo la competencia por la ración diaria han determinado la no exteriorización de la totalidad del patrimonio genético de los animales de línea precoz. En todos los casos, el comportamiento de los cuyes cruzados ha sido superior al de los criollos. El rendimiento de animales de diferentes genotipos evaluados en cruzamiento con ejemplares de la línea Perú en distintos ecosistemas del país se muestra en el Cuadro 2.

Las evaluaciones realizadas a nivel de productores en sistemas familiar-comerciales, con mejor manejo de la alimentación, han permitido comprobar que se obtienen resultados superiores con animales cruzados 3/4 Perú (Cuadro 3).

La carne de cuy es de excelente sabor y calidad, y se caracteriza por tener un alto nivel de proteínas (20,3 por ciento), bajo nivel de grasa (7,8 por ciento) y minerales (0,8 por ciento). El rendimiento en canal varía entre el 54,4 por ciento (cuy criollo) y el 67,4 por ciento (cuy mejorado). El cruzamiento aumenta los rendimientos, y los cuyes mejorados superan en un 4 por ciento en rendimiento en canal a los cruzados, y en un 13 por ciento a los criollos.

Nutrición y alimentación

El cuy, especie herbívora monogástrica, tiene dos tipos de digestión: la enzimática, a nivel del estómago e intestino delgado, y la microbial, a nivel del ciego. Su mayor o menor actividad depende de la composición de la ración alimenticia. Este factor contribuye a dar versatilidad a los sistemas de alimentación.

Los sistemas de alimentación se adecuar a la disponibilidad de alimento. La combinación de alimentos, dada por la restricción del concentrado o del forraje, hace del cuy una especie de alimentación versátil. El animal puede, en efecto, ser exclusivamente herbívoro o aceptar una alimentación suplementada en la cual se hace un mayor uso de compuestos equilibrados.

Los sistemas de alimentación son de tres tipos: con forraje; con forraje más concentrados (alimentación mixta), y con concentrados (con vitamina C) más agua y vitamina C. Estos sistemas pueden aplicarse en forma individual o alternada, de acuerdo con la disponibilidad de alimento existente en el sistema de producción (familiar, familiar-comercial o comercial) y su costo a lo largo del año.

1. Pesos de cuyes criollos mejorados y mestizos evaluados en tres países andinos - Weights of indigenous, improved and cross-bred guinea pigs in three Andean countries - Poids des cobayes indigènes, améliorés et métis évalués dans trois pays andins

Origen

Tamaño de la camada

Pesos (g)

Nacimiento

Destete

Tres meses

Ecuador (1)





Criollo

1,44b

127,31 b

257,69b

637,69b

Peruano puro

2,22a

145,75a

298,88a

853,89a

Mestizo

1,90a

137,63a

288,42a

847,78a

Bolivia





Criollo

2,24 (2)

86,30 (3)

194,90 (3)


Mestizo

2,37




Criollo


83,45 (4)

215,23 (4)

544,72 (4)

Criollo x Peruano


114,86

304,38

807,53

Peruano x Criollo


127,55

358,80

803,86

Peruano puro


137,47

368,45

794,64

Colombia (5)





Criollo


80,0

200,0

330,0

Peruano puro


200,0

400,0

850,0

Mestizo


160,0

370,0

600,0

Fuentes: (1) Olivo, 1989; (2) Suhrer, 1988; (3) Beck, 1987; (4) Castellón, 1988; Atehortua y Caycedo, 1977.
Nota. Las letras se refieren a la prueba de significación de Duncan: 0,05.

2. Pesos al nacimiento, destete y a las 13 semanas de cuyes mejorados, cruzados y criollos evaluados en diferentes ecosistemas del Perú - Weights at birth, weaning and 13 weeks of improved, cross-bred and indigenous guinea pigs in different Peruvian ecosystems - Poids à la naissance, au sevrage et à 13 semaines de cobayes améliorés, croisés et indigènes, évalués dans différents écosystèmes du Pérou

Cruces

Ecosistema

Pesos (g)

Nacimiento

Destete1

8 semanas

13 semanas

Línea Perú x línea Perú (INIAA)

Costa

148,4

458,9

860,8

1 091,3

Sierra x criollo sierra

Sierra

87,4

263,6

356,7

458,9

Costa x criollo costa

Costa

117,6

268,4

383,3

483,7

Línea Perú x criollo sierra

Sierra

146,5

260,4

429,6

626,2

Línea Perú x criollo costa

Costa

123,6

393,4

582,6

795,4

1El destete se realizó a las 4 semanas de edad, en la estación experimental La Molina, y se emplearon cuyes selectos.

El cuy criollo, alimentado exclusivamente con forrajes y/o malezas, es poco eficiente en su conversión alimentaria (CA), que alcanza valores comprendidos entre 18 y 24. El cuy mejorado, explotado en sistemas de cría familiar comerciales en los que se administra una alimentación mixta (forraje más suplemento), logra una CA de 6,5 a 8,0. Es posible mejorar la CA si se proporciona una ración equilibrada con vitamina C más agua. Experimentalmente se han logrado valores de CA de 2,90 y 3,81 (Tamaki, 1972; Saravia, Muscari y Chauca, 1985).

Tradicionalmente se ha restringido el suministro de agua para beber. La alimentación con pastos suculentos de estos hebívoros satisface sus necesidades hídricas. Las condiciones ambientales y otros factores a los que se adapta el animal son los que determinan su consumo de agua para compensar las pérdidas que se producen a través de la piel, pulmones y excreciones.

3. Comportamiento de cuyes criollos y cruzados (3/4 Perú) en una granja familiar-comercial - Behaviour of indigenous and cross-bred (3/4 Peru) guinea pigs on a family-commercial farm - Comportement de cobayes indigènes et croisés (3/4 Pérou) dans une exploitation familiale-commerciale



Pesos promedios de las líneas (g)

3/4 Perú

Control

Nacimiento

151,25 ± 42,56

131,60 ± 32,56

Semana 1

257,77 ± 44,43

186,12 ± 42,18

Semana 4

412,66 ± 81,11

307,75 ± 45,58

Semana 8

689,42 ± 111,92

519,71 ± 106,08

Semana 12

835,47±147,98

665,00±117,18

Semana 13

896,31 ± 100,69

723,00 ± 108,70

El consumo de agua en la etapa reproductiva mejora la eficiencia reproductiva, incrementa el número de crías nacidas, disminuye la mortalidad de lactantes en 3,22 por ciento, mejora los pesos al nacimiento en 18 g y al destete en 34 g, incrementa el peso de las madres en la época del parto en 125,1 g, y limita las pérdidas de peso que éstas suelen sufrir por efecto de la lactación. Estas mejores respuestas las lograron las hembras mediante una mayor ingesta de alimento equilibrado, y por el consumo de agua ad libitum. En las zonas donde las temperaturas superan los 18 °C, la respuesta al suministro de agua es más evidente (Chauca et al., 1992a).

Una buena alimentación en la etapa reproductiva determina mejores índices productivos. El mayor número de crías destetadas por mes se debe a la mejora de la productividad de la granja; y este aumento responde no sólo a una mayor prolificidad lograda por efecto de la sobrealimentación (flushing), sino a la menor mortalidad registrada durante la lactación.

A nivel familiar-comercial, la productividad medida en función del índice productivo durante 19 meses fue en promedio de 0,35 (máximo, 0,65; mínimo, 0,07). Mejorando el sistema de alimentación pudo alcanzarse en promedio, por 15 meses, el valor de 0,72 (máximo, 1,12; mínimo, 0,46). Mejorando el manejo de los animales pueden incrementarse aún más estos valores (Zaldívar y Chauca, 1989).

Con un buen manejo de las reproductoras y lactantes y una buena alimentación, se llega a mejorar la producción de un plantel de cuyes. Los resultados obtenidos durante el seguimiento en las unidades de producción permitieron mantener una mejor relación entre las reproductoras y las crías. En un período de 22 meses, el porcentaje promedio de madres que contenía el plantel fue del 53,9 por ciento (máximo, 70,9 por ciento; mínimo, 42,6 por ciento) en relación con el total de la población. Mejorando la alimentación se pudo disminuir este porcentaje al 33,4 por ciento (máximo, 38,9 por ciento; mínimo, 29 por ciento), promedio logrado al mantenerse estable la población en 1 000 cuyes por 6 meses.

Reproducción y manejo

La precocidad es uno de los factores que permite disminuir los costos de producción. Al evaluar la producción de hembras apareadas a las 8, 10 y 12 semanas de edad no se encontraron diferencias estadísticas entre los índices de fertilidad y prolificidad de las madres (Chauca et al., 1984a).

Las hembras apareadas entre los 54 y 69 días de edad solían quedar preñadas en el primer celo, inmediatamente después desde el empadre. Las variaciones de peso desde el empadre al parto y del empadre al destete tienden a ser positivas en las hembras apareadas antes de los 75 días de edad (Zaldívar et al., 1986). El peso de la madre al iniciar el empadre es una variable más eficiente que la edad, e influye en los pesos al parto y al destete, en el tamaño de la camada y en el peso de las crías al nacimiento y al destete. Las hembras pueden iniciar su apareamiento cuando alcanzan un peso de 542 g (Zaldívar, 1986).

El primer empadre debe iniciarse cuando los machos tienen 4 meses, ya que a esta edad se han desarrollado no sólo en tamaño sino que han alcanzado la madurez sexual. Su peso supera 1,1 kg, y es mayor al de las hembras en un 34 por ciento, lo que les permite establecer en la poza de cría una relación de predominio sobre las hembras, que son mantenidas en una proporción de 1:7. Al mes del empadre éstas pesan más de 1,4 kg, y siguen desarrollándose hasta los 24 meses, edad en que su peso de adulto supera los 2,8 kg.

Sistemas de empadre

La cría de cuyes a nivel familiar y aun comercial se efectúa recurriendo al empadre continuo. Al evaluar los dos primeros partos de 300 cuyes procedentes de dos generaciones de tres líneas genéticas, se encontró que en el 68,3 por ciento habían sido cubiertos en celos post partum, y que en el 31,7 por ciento la gestación se iniciaba después del destete. La frecuencia de gestaciones de celos post partum variaba según la línea genética. Dicha frecuencia era menor en las líneas en las cuales la rapidez de crecimiento (Perú, 54,6 por ciento, e Inti 57,9 por ciento) era una de las características seleccionadas. La línea seleccionada exclusivamente por su prolificidad presentó una frecuencia de gestaciones de celo post partum del 74,7 por ciento (Andina). El intervalo entre partos en las hembras apareadas después del parto fue de 68 días, y el de las empedradas después del destete, de 112 días.

Cuatro tipos de cuyes clasificados según su pelaje: Inglés, Abisinio, Landoso y Merino - Four types of guinea pigs classified by pelt: English, Abyssinian, Landoso and Merino - Quatre types de cobayes classés en fonction de leur pelage: anglais, abyssinien, Landoso et mérinos (Inglés, English, anglais )

Cuatro tipos de cuyes clasificados según su pelaje: Inglés, Abisinio, Landoso y Merino - Four types of guinea pigs classified by pelt: English, Abyssinian, Landoso and Merino - Quatre types de cobayes classés en fonction de leur pelage: anglais, abyssinien, Landoso et mérinos (Abisinio, Abyssinian, abyssinien)

Cuatro tipos de cuyes clasificados según su pelaje: Inglés, Abisinio, Landoso y Merino - Four types of guinea pigs classified by pelt: English, Abyssinian, Landoso and Merino - Quatre types de cobayes classés en fonction de leur pelage: anglais, abyssinien, Landoso et mérinos (Landoso, Landoso, Landoso )

Cuatro tipos de cuyes clasificados según su pelaje: Inglés, Abisinio, Landoso y Merino - Four types of guinea pigs classified by pelt: English, Abyssinian, Landoso and Merino - Quatre types de cobayes classés en fonction de leur pelage: anglais, abyssinien, Landoso et mérinos (Merino, Merino, Merino)

No se encontraron diferencias en el tamaño de la camada por efecto de la cubrición post partum, evaluado al segundo parto. El peso individual al nacimiento en el empadre continuo fue de 121 g, valor inferior al que habían alcanzado las hembras apareadas después del destete (135 g). Los pesos al destete mantuvieron la misma tendencia. El tamaño de camada al nacimiento, en el caso de las hembras que gestaron inmediatamente después del parto, fue de 2,95 ± 0,08 individuos; dicho tamaño fue similar al que se registró con hembras que gestaron después del destete (2,92 ± 0,10 individuos) (Chauca y Muscari, 1993). El período entre partos de las hembras de las líneas Perú, Andina e Inti se muestra en el Cuadro 4.

Tres líneas de cuyes: Andina, Perú e Inti - Three lines of guinea pigs: Andina, Peru and Inti - Trois lignées de cobayes: Andina, Pérou et Inti (Andina-Andina-Andine)

Tres líneas de cuyes: Andina, Perú e Inti - Three lines of guinea pigs: Andina, Peru and Inti - Trois lignées de cobayes: Andina, Pérou et Inti (Perú-Peru-Pérou)

Tres líneas de cuyes: Andina, Perú e Inti - Three lines of guinea pigs: Andina, Peru and Inti - Trois lignées de cobayes: Andina, Pérou et Inti (Inti-Inti-Inti)

Carcasa de cuyes parrilleros: peso de comercialización, 1 200 g - Broiler guinea pig carcass, with commercial weight of 1 200 g - Carcasses de cobayes pour grillade, d'un poids à la commercialisation de 1 200 g

Parto, lactación y destete

Cada hembra puede tener 4 ó 5 partos por año; el número de crías por camada varía entre 1 y 6, y más frecuentemente entre 1 y 4. Al analizar la progenie de 207 hembras se registraron 439 crías nacidas provenientes de primeros partos. El 20 por ciento eran camadas de una cría; el 54 por ciento de dos, el 20 por ciento de tres, y el 6 por ciento de cuatro. Al medir el efecto genético de esta característica se pudo apreciar que la línea Andina, seleccionada por su prolificidad, tuvo un porcentaje de crías uníparas menor al promedio de la población (12,9 por ciento) (Chauca et al., 1984b). La prolificidad es una característica poco heredable, pero fuertemente influenciada por el efecto del medio ambiente, considerándose la alimentación como determinante de la mejora de este parámetro. Sometiendo a las reproductoras a flushing se aumenta el número de crías por camada en un 46,5 por ciento. Esta práctica mejora la fertilidad (Saravia, Muscari y Chauca, 1983). El número de crías de la camada depende de factores genéticos y del estado nutricional de la madre. Las variaciones climáticas durante el año afectan marcadamente la prolificidad (Cuadro 5).

El crecimiento del cuy es rápido durante las tres primeras semanas debido al valor nutricional de la leche materna y al consumo de alimento que inicia a las pocas horas del nacimiento. En virtud de estos factores es posible realizar destetes precoces.

El destete se puede efectuar a las dos semanas de edad, o incluso a la primera, sin detrimento del crecimiento de la cría (Cuadro 6), aunque se pueden presentar problemas de mastitis por la mayor producción láctea que se registra hasta los 11 días después del parto. El número de crías por camada influye en la sobrevivencia, y las camadas más numerosas alcanzan mayores porcentajes de mortalidad. En el sistema de cría familiar-comercial la mortalidad durante la lactación se he podido reducir al 14,7 por ciento suministrando alimento ad libitum. Los índices productivos mensuales mejoraron de 0,2 a 0,6. Estos valores pueden incrementarse si se introducen técnicas de manejo que permitan proteger a las crías del atropello y de la competencia con sus madres por el alimento y el espacio. La utilización de gazaperas permitió disminuir al 7,14 por ciento la mortalidad durante la lactación, y aumentar los pesos de la camada al destete (Cuadro 7). Ambas alternativas -mejorar la alimentación y utilizar gazaperas-, disminuyen los porcentajes de mortalidad que se registran en el sistema de cría familiar-comercial, la cual alcanza un valor del 22,94 por ciento (Chauca et al., 1992b).

Cuando la temperatura ambiente es inferior a 12 °C, es necesario disponer de una fuente de calor durante la lactación y aun una semana después del destete en la etapa de cría. Esta práctica de manejo contribuye a incrementar la tasa de sobrevivencia en la cría comercial (Chauca y Muscari, 1993).

4. Intervalos entre partos de cuyes de diferentes líneas genéticas empedradas post partum y postdestete - Interval between births in different genetic fines of guinea pigs, post-partum and post-weaning - Intervalle entre les naissances pour des cobayes de lignées génétiques différentes, recensé post partum et après sevrage

Sistema de empadre

Línea genética

Intervalo parto-parto (días)

Post partum

Perú

68,4 ± 0,43a

Andina

67,2 ± 0,29a

Inti

68,7 ± 0,26a

Control

67,6 ± 0,29a

Postdestete

Perú

119,8 ± 3,87c

Andina

112,4 ± 3,60b

Inti

106,8 ± 1,89b

Control

109,6 ± 4,08b

Nota: Las letras se refieren a la prueba de significación de Duncan: 0,05.

5. Tamaño promedio de la camada al nacimiento en las diferentes estaciones del año en la costa central del Perú - Average litter size at birth in different seasons of the year on the central coast of Peru - Taille moyenne d'une portée à la naissance aux différentes saisons de l'année sur la côte centrale du Pérou

Meses

Estación

Total de crías nacidas

Enero-marzo

Verano

2,90

Abril-junio

Otoño

2,44

Julio-septiembre

Invierno

2,83

Octubre-diciembre

Primavera

3,06

Nota: Valores obtenidos por el INIAA, en la estación experimental La Molina, sobre la base de 15 000 crías nacidas.

6. Pesos promedios de cuyes destetados a la primera, segunda, tercera y cuarta semana de edad - Average weights of guinea pigs weaned at one, two, three and four weeks - Poids moyens de cobayes sevrés à l'âge d'une, deux, trois et quatre semaines

Edad de destete

Peso al nacimiento

Pesos semanales (g)

Incremento total de peso a los 28 días (g)

1

2

3

4

Primera semana

120,5

158,5

213,1

258,0

335,1

214,6

Segunda semana

117,2

182,0

213,0

277,0

339,0

221,8

Tercera semana

122,5

152,2

212,7

268,5

329,2

206,7

Cuarta semana

111,5

165,0

214,5

248,0

309,5

198,0

Fuente: Chanca et al., 1984a.

Cría y recría

En la etapa de cría, los cuyes se consideran destetados a la primera, segunda o incluso cuarta semana de edad. Después del destete los animales se agrupan en lotes de 50 ó 60 que reciben una ración rica en proteínas (17-20 por ciento). Se logran incrementos de peso promedios de 15 g/animal/día.

La cría de cuyes con cerca gazapera permite disminuir la mortalidad evitando el atropello de los lactantes - Guinea pig breeding with fenced warren to lower mortality by averting losses of nursing mothers - Elevage de cobayes avec abris clôturés, ce qui permet de diminuer la mortalité en évitant que les nouveau-nés soient écrasés

La recría se inicia después de cumplida la cuarta semana de edad y prosigue hasta la edad de comercialización, que se sitúa entre la novena y décima semanas. Se deben formar lotes uniformes en edad, tamaño y sexo que respondan bien a las dietas con bajo contenido de proteínas (14 por ciento) y alto contenido de energía. Muchos productores utilizan como suplemento del forraje el afrecho de trigo. No debe prolongarse esta etapa para evitar las peleas entre los machos: las heridas que se hacen malogran la calidad de las carcasas y ocasionan un mayor engrosamiento.

Papel socioeconomico de la cría de cuyes

El cuy, en las zonas andinas, tiene ventajas comparativas frente a otras especies introducidas, puesto que es un bien que se puede consumir directamente, intercambiar por diversos productos (trueque) o vender para obtener ingresos que permiten la adquisición de otros bienes. Además de estos beneficios que pueden cuantificarse, los cuyes proporcionan a la familia campesina otros beneficios de tipo simbólico y medicinal. Desde un punto de vista social, la cría de estos animales representa una alternativa que contribuye a mejorar el nivel nutricional de la familia rural. Con técnicas de manejo apropiadas puede intensificarse su producción y adaptarse a aquellas familias que tienen poca disponibilidad de tierra para producir especies mayores.

La cría de cuyes en el Perú se ha desarrollado en la costa, zona donde anteriormente era inexistente y donde la carne de estos animales no se consumía. La adaptación del cuy a diferentes ecosistemas -por ejemplo, a la región tropical, rica en forrajes- ha hecho posible su exportación a países como Venezuela y Cuba, en los cuales ha sido introducido en zonas de pequeños productores. Fuera de América Latina, la producción de cuyes ha sido promovida en Africa.

7. Pesos al nacimiento y destete de cuyes manejados con y sin cerca gazapera - Birth and weaning weights of guinea pigs managed with and without fenced warrens - Poids à la naissance et au sevrage de cobayes élevés avec et sans abri clôturé

Tratamientos

Pesos (g)

Mortalidad (%)

Nacimiento

Destete

Alimentación ad libitum




Sin cerca

128,75±27,33

189,74±43,98

14,13

Con cerca

126,14 ± 29,27

202,61 ± 60,96

7,14

Alimentación restringida




Control, sin cerca

101,73 ± 23,48

169,54 ± 57,18

22,94

La mayor necesidad de alimentos de la población mundial coloca a las especies menores de ciclos reproductivos cortos como el cuy en una posición ventajosa. Por este motivo deben continuarse las investigaciones con el fin de mejorar sus parámetros productivos.

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