El pronóstico relativo a las existencias mundiales de cereales al cierre de las campañas agrícolas que terminan en 1996 se ha vuelto a rebajar en 2 millones de toneladas respecto al informe anterior. Actualmente se prevé que los remanentes mundiales de cereales alcanzarán los 265 millones de toneladas, el volumen más bajo desde 1981 e inferior en 47 millones de toneladas, o sea un 15 por ciento, a su nivel revisado de apertura. La mayor parte de la disminución corresponderá a los cereales secundarios, pero también se prevé que descenderán los remanentes de trigo y arroz respecto a sus ya bajos niveles de apertura. Según el volumen pronosticado, las existencias mundiales de cereales al cierre de las campañas de 1995/96 representarían un 14 a 15 por ciento de la utilización tendencial en 1996/97, margen muy inferior al 17-18 por ciento que la Secretaría de la FAO considera el mínimo para la seguridad alimentaria mundial.
EXISTENCIAS REMANENTES MUNDIALES DE CEREALES
| Años agrícolas que finalizan en: | |||
| 1994 | 1995 estim. | 1996 pronóst. | |
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Trigo Cereales secundarios Arroz (elabor.) |
136,3 138,8 62,9 |
111,9 146,7 55,2 |
104,6 105,8 54,7 |
| TOTAL | 338,0 | 313,7 | 265,2 |
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del cual: Principales exportadores Otros países |
118,2 219,9 |
110,0 203,7 |
78,8 186,3 |
Este mes el pronóstico relativo a las existencias de trigo ha vuelto a rebajarse, debido principalmente a los ajustes de los remanentes de los Estados Unidos y la CE. Actualmente se pronostica que las existencias mundiales de trigo al cierre de las campañas que terminan en 1996 alcanzarán los 105 millones de toneladas, 2 millones de toneladas menos que el informe anterior, y 6 millones de toneladas, o sea un 5 por ciento, menos que su nivel de apertura, y el volumen más bajo en 15 años. Los remanentes totales de trigo de los principales exportadores se cifran actualmente en 27 millones de toneladas, más de 2 millones de toneladas menos que el informe anterior. Este nivel de las existencias totales de trigo sería tan bajo como en 1974 y representaría menos del 26 por ciento de las existencias mundiales de trigo, frente a alrededor de un 40 por ciento alcanzado al comienzo de los años noventa. El pronóstico oficial relativo a los remanentes totales de trigo de los Estados Unidos se rebajó en febrero en otro millón de toneladas a 9,4 millones de toneladas, lo que se considera cercano a los niveles mínimos operativos. Esta difícil situación de los suministros ya ha inducido a los Estados Unidos a autorizar a utilizar hasta 1,5 millones de toneladas de su reserva de seguridad alimentaria de 4 millones de toneladas con objeto de atender a los compromisos de ayuda alimentaria.
Tras la cesión de los saldos de cereales de la CE por parte de la Comisión en febrero, el pronóstico relativo a las existencias finales de trigo se ha rebajado a 9,5 millones de toneladas, 1,7 millones de toneladas menos que sus niveles de apertura y más de 1 millón de toneladas menos de lo que había previsto la FAO en febrero. Casi toda la disminución afectaría a las existencias de trigo blando. Según los informes oficiales, al final de febrero las existencias de intervención de trigo blando de la CE descendieron a poco más de 500 000 toneladas, frente a más de 2,5 millones de toneladas en el mismo período del año pasado.
Aumentado en unos 2 millones de toneladas respecto al informe anterior, el pronóstico relativo a las existencias mundiales finales de cereales secundarios en 1996 se cifra ahora en 106 millones de toneladas, 41 millones de toneladas, o sea un 28 por ciento, menos que sus niveles de apertura. Pese al aumento de los precios de cereales secundarios desde septiembre de 1995, lo que determinó un menor empleo de piensos en algunos países, la utilización prevista para este año sólo puede cubrirse recurriendo a las existencias de cereales secundarios. La mayor parte de la disminución prevista de los remanentes mundiales de cereales secundarios afectaría a los inventarios de los principales exportadores, especialmente de los Estados Unidos, pero también se prevé que descenderán de forma pronunciada las existencias de otros países.
La revisión al alza de las existencias mundiales de cereales secundarios desde el último informe se debe totalmente al aumento de las cifras correspondientes a la CE. El último pronóstico de la Comisión relativo a las existencias totales de cereales secundarios de los 15 estados miembros se ha cifrado en 18 millones de toneladas, frente a más de 11 millones de toneladas previstos anteriormente, y cerca del nivel revisado al final de la campaña pasada. La revisión de los remanentes de la actual campaña se debe principalmente a un pronóstico considerable-mente mayor para las existencias de cebada. Las que al final de la campaña en junio representarían más de la mitad de las existencias totales de cereales secun-darios de la Comunidad, nivel ligeramente mayor que el del comienzo de la campaña. También se han revisado considerablemente al alza los remanentes de maíz y ahora se prevé que alcanzarán los 6 millones de toneladas, frente a 4,4 millones de toneladas en junio de 1995.
Esta marcada revisión al alza en la CE se ha visto, sin embargo, contrarrestada con creces por una disminución en otras partes. En los Estados Unidos, según el último pronóstico oficial, las existencias fina-les de este año podrían descender hasta 14 millones de toneladas, unos 3 millones de toneladas menos de lo previsto y hasta un 70 por ciento menos que su ni-vel de apertura. Dada la abrupta reducción de la pro-ducción de maíz debida a la sequía, ya se había pre-visto una importante merma de las existencias. Sin embargo, la última revisión se debe principalmente a la constante y firme demanda interna principalmente para piensos así como a la fuerte demanda de expor-taciones, pese al aumento pronunciado de los precios. Este mes también se ha rebajado el pronóstico relativo a las existencias de cereales secundarios en China, en casi 2 millones de toneladas, debido a la reciente revisión a la baja de las cosechas de maíz y sorgo de 1995.
El pronóstico de la FAO relativo a las existen-cias mundiales de arroz al final de las campañas co-merciales de 1996 es de 54,7 millones de toneladas, volumen marginalmente inferior al de 1995. Aunque la producción mundial de arroz aumentó en alrededor de un 3 por ciento, la mayor parte del aumento se produjo en China, donde la producción alcanzó un nivel sin precedentes. En muchos otros importantes países pro-ductores y consumidores la producción descendió. Por lo tanto, las existencias de China deberían recuperarse del volumen bajo del año anterior, mientras que en la India es probable que la gran cantidad de exporta-ciones efectuadas en 1995 y la producción ligeramen-te reducida determinen una disminución de sus exis-tencias finales en 1996. Asimismo, se pronostica que en 1996 disminuirán las existencias arroceras de cierre de campaña en Viet Nam. Entre los países desarrolla-dos, se pronostica que las existencias que más des-cenderán en 1996 serán las de los Estados Unidos, a causa principalmente de la menguada producción de 1995 y la gran cantidad de exportaciones efectuadas el año anterior. En cambio, en el Japón, las existencias arroceras deberían alcanzar los 2,3 millones de toneladas, volumen muy superior al nivel del año anterior y superior al objetivo oficial de 1,5 millones de toneladas.