AFRICA ORIENTAL
BURUNDI* (8 de noviembre)
Después de cinco meses en los que prácticamente no había llovido en la mayoría de las regiones productoras, unas lluvias buenas caídas a partir de la segunda quincena de octubre mejoraron las condiciones del suelo para la siembra de la campaña agrícola de 2001 y aportaron alivio a los cultivos tempranos y perennes. Sin embargo, puede que las lluvias hayan llegado demasiado tarde para evitar la reducción de las plantaciones que normalmente suelen terminar a fines de octubre. La escasez de semillas, después de varias cosechas reducidas consecutivas, también está perjudicando las operaciones de campo.
La situación alimentaria es difícil, debido a una cosecha muy reducida de cereales y legumbres de la temporada B de 2000. Se está distribuyendo asistencia alimentaria a una población objetivo de 700 000 personas, con inclusión de aquéllas que se han visto afectadas por una mala cosecha, las personas desplazadas y la población más vulnerable. El rendimiento de la presente campaña será decisivo para el suministro de alimentos en el país en el primer semestre de 2001.
ERITREA* (6 de noviembre)
Pese a unas lluvias favorables recibidas en septiembre y octubre en algunas regiones del país, principalmente Debub y Gash Barka, las perspectivas para las cosechas de cereales y legumbres de la temporada principal de 2000 que se recogerán a partir de noviembre se pre-sentan sombrías, debido principalmente al desplazamiento de cientos de miles de agricul-tores a causa de la guerra con el vecino país de Etiopía. Además, las fuentes meteorológi-cas oficiales indicaron que durante la estación de las lluvias había disminuido la distribu-ción espacial de las precipitaciones en todo el país. Lo cual se vio agravado por unas preci-pitaciones no estacionales caídas a principios de noviembre, que han tenido un efecto po-tencialmente negativo en la cosecha actual. Las zonas administrativas (Zobas) de Gash y Debub, principales zonas productoras de cereales del país que normalmente aportan más del 75 por ciento de la producción de cereales de Eritrea, han sido teatro de los conflictos desencadenados últimamente y podrían por ello obtener en el mejor de los casos una cose-cha reducida en 2000. Como la próxima cosecha se prevé recién para noviembre/diciembre de 2001, estas regiones conocidas como "la panera de Eritrea", junto con otras regiones más, dependerán de los alimentos de socorro de urgencia en los próximos 18 meses.
La situación alimentaria de más de 1,5 millones de personas desplazadas o afectadas por la guerra es motivo de grave preocupación. El fracaso de la estación de las lluvias en las zonas administrativas de Anseba, Mar Rojo septentrional y Mar Rojo meridional también ha afectado gravemente a cerca de 340 000 personas.
En octubre, el PMA distribuyó un total de 15 871 toneladas de alimentos a 808 822 personas afectadas por la guerra y la sequía. En junio de 2000, la FAO y el PMA aprobaron conjuntamente una operación de urgencia, OU6044.01 "Asistencia alimentaria a las poblaciones afectadas por la guerra en Eritrea" por un total de 151 080 toneladas de alimentos para el período comprendido entre el 1 de mayo de 2000 al 30 de abril de 2001. Con ella se complementaba la operación de urgencia OU 6227.00 "Asistencia a las víctimas de las pérdidas de cosecha y de la sequía en Eritrea", por un total de 19 390 toneladas de alimentos para el período comprendido entre el 1 de abril y el 31 de diciembre de 2000, aprobada conjuntamente por la FAO y el PMA el 10 de abril de 2000.
ETIOPIA* (6 de noviembre)
Unas buenas lluvias recibidas en septiembre y octubre en varias partes del país han contribuido a la maduración de los cultivos en las importantes zonas productoras de cereales del centro, norte y oeste del país. En las partes orientales y meridionales, sin embargo, la producción de cereales ha sufrido las consecuencias de una sequía continuada. También se ha perdido a causa de la sequía la cosecha secundaria "Belg" de 2000, que normalmente se recoge a partir de junio. Aunque la producción Belg representa sólo el 8-10 por ciento de la producción total de cereales, es importante en algunas zonas en las que aporta la mayor parte de los suministros anuales de alimentos. Según se prevé, una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA visitará el país a partir de mediados de noviembre para evaluar la producción "Meher" y hacer una estimación de las necesidades de asistencia alimentaria en 2001.
Al fracasar la campaña Belg, el número de personas que necesitan asistencia ha aumentado a más de 10 millones de personas, incluidas 400 000 personas desplazadas a causa de la guerra fronteriza con Eritrea. Por consiguiente, la necesidad de ayuda alimentaria en 2000, estimada anteriormente en 836 000 toneladas, se ha revisado al alza a 1,2 millones de toneladas. A mediados de noviembre, las promesas totales ascendían a 1 320 000 toneladas, de las cuales se han entregado 794 000 toneladas.
KENYA (3 de noviembre)
En las principales zonas productoras del valle del Rift se han terminado de recolectar las cosechas de cereales de las "lluvias largas". La cosecha principal de la estación de las lluvias (marzo-mayo), que normalmente representa el 80 por ciento de la producción total anual de alimentos, se ha perdido en gran parte debido a una grave sequía. En consecuencia, el país necesitará importar aproximadamente 1,4 millones de toneladas de cereales en la campaña comercial 2000/01 (octubre-septiembre) para satisfacer las necesidades de consumo normales. Cerca de 3,3 millones de personas, en su mayor parte pastores de las partes septentrionales y orientales del país, necesitan asistencia alimentaria de urgencia. Una grave escasez de agua ha provocado la pérdida de un gran número de cabezas de ganado. Dado lo limitado de sus recursos de divisas, el país necesita una asistencia internacional considerable importante para capear la emergencia.
Las perspectivas para la cosecha de cereales de las "lluvias cortas" de 2000/01 en las zonas bimodales de las provincias occidentales, centrales y orientales, que se recogerán en febrero y marzo, son inciertas a pesar de algunas lluvias buenas que se han recibido.
En junio de 2000 los organismos de las Naciones Unidas formularon un llamamiento por 146 millones de dólares EE.UU. para ayudar a Kenya. La respuesta ha sido favorable, pero se necesita más.
RWANDA* (8 de noviembre)
La siembra de la temporada A de 2001, que normalmente se realiza de septiembre a octubre, se ha retrasado debido a las precipitaciones inferiores a la media recibidas en septiembre y la primera quincena de octubre. Unas lluvias copiosas y generalizadas caídas en la segunda quincena de octubre mejoraron las condiciones del suelo para la siembra y aportaron alivio a los cultivos tempranos, particularmente en las partes orientales y meridionales afectadas por una sequía prolongada. Es probable, sin embargo, que se reduzca la superficie plantada debido a la falta de semillas causada por la pérdida de las cosechas tempranas sembradas en septiembre, así como a la reducción de la producción de yuca a causa del fracaso de la tercera campaña C de 2000. Las lluvias recibidas a partir de mediados de octubre beneficiaron también a los cultivos perennes, como el banano y el café, que habían quedado gravemente afectados por la falta de precipitaciones después que cesaron las lluvias de la temporada B de 2000 en el mes de mayo, ya que las lluvias cortas y ligeras de la temporada C de este año (mediados de julio a mediados de agosto) han fracasado.
En las zonas más afectadas por un tiempo seco prolongado, entre ellas los distritos de las prefecturas de Butare Gitarama, Kaibungo y Umatara, así como la región Bugesera de la prefectura rural de Kigali, las últimas lluvias llegaron demasiado tarde para evitar graves reducciones de los rendimientos del banano, el café y la yuca, así como la pérdida de un gran número de cabezas de ganado. En algunas zonas de la prefectura de Umutara, las pérdidas de bovinos se estiman en un 25 por ciento del total de cabezas. Los precios del ganado han disminuido de forma pronunciada debido a las ventas de urgencia. La situación alimentaria en estas zonas es motivo de preocupación. Al final de octubre, una misión de evaluación formada por el Ministerio de Agricultura local/FAO/PMA/ FEWS/UE estimó en 267 000 el número de personas más afectadas por la sequía y necesitadas de asistencia alimentaria durante los próximos tres meses. Este número representa un 22 por ciento de la población de los distritos afectados. La misión también recomendó la distribución de insumos agrícolas para ayudar a los agricultores a recuperar su capacidad de producción y reponer los animales perdidos. En total, el Gobierno ha pedido asistencia internacional de urgencia por un valor de 7 215 dólares EE.UU..
SOMALIA* (6 de noviembre)
La recolección de las cosechas de la temporada principal ("Gu"), recientemente terminada, es satisfactoria. La producción de cereales de la campaña, estimada en 212 000 toneladas, es superior en alrededor del 22 por ciento a la media posterior a la guerra (1993-1999). Unas lluvias generalizadas caídas en abril y mayo y unas lluvias "Hagay" buenas recibidas a principios de julio contribuyeron al desarrollo de los cultivos en Lower Shabelle, Middle Shabelle, Hiran, Bay, Bakool y en algunas partes de Lower Juba. Las condiciones de seguridad mejoradas también han alentado a algunas familias a regresar a sus fincas y han facilitado las actividades agrícolas. Sin embargo, se prevén malas cosechas en algunos focos de las regiones de Gedo, Lower Juba y Middle Juba debido a la irregularidad e insuficiencia de las lluvias.
A pesar de alguna mejora de la situación del suministro de alimentos en algunas partes del sur de Somalia, se señalan tasas cada vez mayores de malnutrición grave, debido a una dis-minución de los medios de vida como consecuencia de varias sequías consecutivas y los efectos a plazo más largo de años de inseguridad y de la falta de inversiones en la economía.
En otras partes, en el noroeste de Somalia (Somaliland) la situación alimentaria es inestable en algunas zonas agropastorales de Togdheer, Awdal y Sanag donde varias lluvias inferiores a lo normal consecutivas han afectado gravemente la producción agropecuaria. Ante la disminución del apoyo comunitario, se señalan migraciones de personas y animales, principalmente camellos, a Etiopía y otras regiones.
En julio de 2000 se lanzó un llamamiento interinstitucional de las Naciones Unidas por alrededor de 15,6 millones de dólares EE.UU. para ayudar a 750 000 personas vulnerables de Somalia. Las promesas totales para la campaña comercial de 2000/01 ascendieron a 24 000 toneladas, de las cuales hasta ahora se han entregado 19 000 toneladas.
SUDAN* (6 de noviembre)
Una reciente misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA enviada al sur del Sudán estimó deficitaria la producción de cereales, particularmente en North Bahr el Ghazal, Bahr el Jebel, East Equatoria, Jonglei y Juba. Sin embargo, se ha señalado alguna producción de excedentes en West Equatoria, Lakes y West Bahr el Ghazal.
En el Sudán central y septentrional está a punto de comenzar la recolección de las cosechas de cereales de la temporada principal de 2000. Pese al retraso de las precipitaciones, en ge-neral las perspectivas para la cosecha han mejorado gracias a unas lluvias prolongadas. Se-gún se prevé, una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA visitará las partes septentrionales del país a partir de mediados de noviembre para evaluar la producción de cereales de la temporada principal de 2000 y hacer una estimación general de las necesidades de importaciones/exportaciones comerciales y ayuda alimentaria en 2001.
TANZANIA (6 de noviembre)
Ha comenzado la plantación de la cosecha de cereales de la temporada principal de 2001 en las zonas centrales y meridionales unimodales, así como la de las cosechas de la temporada corta de 2000/01 en las zonas septentrionales bimodales. En general, las lluvias inferiores a lo normal caídas en octubre han causado estrés por falta de humedad, particularmente a los cultivos tempranos.
La cosecha de cereales de 2000, principalmente maíz, se estima en alrededor de 3,5 millones de toneladas, cerca de un 20 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. La disminución se atribuye a la sequía que ha asolado varias partes del país. Como consecuencia, la necesidad de importación de cereales se pronostica actualmente en 690 000 toneladas. Sin embargo, la situación del suministro de alimentos ha mejorado debido a la gran cantidad de importaciones de maíz que han provocado un marcado descenso de los precios de los alimentos. Pese a la reducción de los pastizales, se señala que la situación del ganado es buena.
Se necesita asistencia alimentaria para alrededor de 800 000 personas aquejadas de inseguridad alimentaria, principalmente en las regiones de Dodoma, Mara, Shinyanga, Singida, Tabora, Tanga y el sur de Mwanza, que sufren las consecuencias de una tercera mala cosecha consecutiva.
UGANDA (6 de noviembre)
Ha terminado la recolección de la cosecha de cereales de la temporada principal de 2000. En algunos distritos, como Kumi, Lira y Soroti, unas lluvias tardías e irregulares han afectado a los rendimientos. La situación de los pastizales y del ganado en las zonas pastorales del nordeste es adecuada debido a unas lluvias benéficas recibidas últimamente.
Gracias a unas lluvias buenas recibidas últimamente, han mejorado las perspectivas para los cultivos alimentarios de la segunda temporada de 2000, que se recogerán a partir de enero.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, la situación sigue siendo inestable en el nordeste, debido a la mala cosecha obtenida en la última campaña y a la pérdida de ganado debida a saqueos. Se sigue necesitando también asistencia alimentaria para cerca de 112 000 personas del distrito de Bundibugyo, en el oeste, desplazadas a causa de los disturbios civiles.