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2 Reseña del entorno mundial y de América Latina

PANORAMA MUNDIAL

La economía mundial ha mostrado un crecimiento progresivo en las últimas décadas, sin embargo, este crecimiento no se dió de manera homogénea en las diferentes regiones del mundo. Para África, Asia, América Latina y el Caribe el PIB creció en una baja proporción con relación al resto del mundo. En contraste con esto, desde 1972 hasta 1999 el PIB per cápita de Europa creció un 35% y el de América de Norte más del 75% (véase figura 1).

Estos períodos de crecimiento se alternaron con períodos de crisis que generaron alteraciones de las tasas de incremento. Para los países del G7, el período de 1993-1998 fue de recesión. En este período, todos los países han presentado crecimientos inferiores a los que tuvieron entre 1964 y 1993, a excepción de los Estados Unidos y el Reino Unido (véase cuadro 1).

FIGURA 1 Evolución del PIB per cápita en el mundo (1972–1999).

Fuente: GEO, 2002.

Actualmente el mundo se encuentra en un período de recuperación, que se vincula a las bajas tasas de interés y a las medidas fiscales expansionistas. Una previsión de la ONU para 2004 era que la economía mundial creciera alrededor de 3,5% ese año, también los Estados Unidos debían crecer un 4%, el Japón 2,5% y la Unión Europea un 2%.

Por su parte, los países en desarrollo debían crecer un 3,5%. Tal incremento sería mediado por la recuperación de la Argentina, el Brasil, Chile, México y Venezuela. En el caso de África, el crecimiento era de más del 4%, mientras el sudeste asiático debía alcanzar tasas del 6%, basado principalmente en el crecimiento de la India y China (8,5%), considerada la fuerza motriz del crecimiento mundial. Sobre el Oriente Medio persisten muchas dudas debido a la no resuelta situación del Iraq.

Sin embargo, tales perspectivas para 2004 pueden cambiar debido al déficit externo de los Estados Unidos, que ha crecido bastante en los últimos tiempos, y puede desequilibrar la economía mundial.

CUADRO 1. Tasas de crecimiento anual de los países del G7 (1964-1998)

Crecimiento anual de los G7

1964-73

1983-93

1993-98

Canadá

5,6

2,8

2,5

Francia

5,3

2,3

1,7

Alemania

4,5

2,9

1,5

Italia

5,0

2,4

1,3

Japón

9,6

4,0

0,8

Reino Unido

3,3

2,3

2,7

EE.UU.

4,0

2,9

3,0

Fuente: Beams, 2002.

Según datos del Banco Mundial (Banco Mundial, 2003), en el 2001 alrededor de 1 100 millones de personas en el mundo (21,3% de la población mundial) vivían en condiciones de «extrema pobreza», considerando que el indicador de la línea de pobreza es de 1 dólar EE.UU. por día en los países de bajos ingresos. Sin embargo, los valores son muy diferentes según las regiones del mundo: África subsahariana el 46,5%, el Sudeste asiático 31,1%, Asia oriental y el Pacífico 15,6%, América Latina y el Caribe 9,5%, Europa y Asia central 3,7%. África del Norte Oriente Medio el 2,4%.

Considerando el indicador de menos de 2 dólares por día por persona, se tiene que alrededor de 2 733 millones de personas están en condiciones de pobreza (el 52,8% de la población mundial). En América Latina el 24,5% de la población se ubica en esta categoría.

En los países en desarrollo, el consumo medio per cápita ha aumentado en 70% en términos reales, la esperanza media de vida se ha elevado de 51 a 63 años y las tasas de matrícula en la enseñanza primaria han alcanzado un 89%. Sin embargo, aunque el mundo produce suficiente alimento, el hambre continúa siendo uno de los principales problemas. Se estima que en el mundo existen más de 840 millones de personas desnutridas y, aunque un alto porcentaje vive en países de bajos ingresos, las personas con hambre están ubicadas en todo el mundo. En los países industrializados viven alrededor de 10 millones de personas que no consumen la cantidad de alimento necesaria para mantener los niveles normales de actividad.

ALGUNAS CIFRAS PARA AMERICA LATINA

En el 2000, los países latinoamericanos con mayor población fueron el Brasil (169 millones) y México (98 millones). Sin embargo, el Brasil presenta una densidad de población muy inferior al promedio mundial que es del 45,8% (FAO, 2002). En el cuadro 2 se puede apreciar que todos los países sudamericanos están por debajo de dicho promedio, mientras que en Centroamérica sólo Belice, Nicaragua y Panamá están por debajo del promedio. Este es un indicador de la presión que ejerce la población por los recursos: suelo, agua, bosques, fauna y flora silvestre entre otros. Según la proyección de FAO para el 2020, la densidad poblacional en la región se incrementará, se destaca el caso de El Salvador (380), la República Dominicana (217), Guatemala (164) y Costa Rica (104).

El índice de desarrollo humano (IDH) en el 2001 clasificó 57 países en la categoría de desarrollo humano alto, 69 en la categoría mediana y 48 en la categoría baja (PNUD, 2001). En el cuadro 2 se presenta el IDH para países latinoamericanos y se puede observar como la Argentina, Costa Rica y el Uruguay, son algunos de los países que se ubican dentro de la categoría de desarrollo humano alto. En contraposición, Nicaragua, Honduras, Guatemala y Bolivia superaron en la evaluación del 2001 la posición 100.

En América Latina, el promedio de la tasa de fertilidad ha disminuido en las últimas décadas gracias al aporte de la educación. Sin embargo, en algunos países las mujeres aún tienen un promedio de casi seis hijos en hogares predominantemente pobres. En otros, el número de hijos es menos de dos. Asimismo, en el primer caso la esperanza de vida aún no llega a los 60 años, frente al otro extremo que se acerca a los 75 años.

Se estima que América Latina cuenta con un 23% de la tierra arable del mundo; un 46% de los bosques tropicales, un 31% del agua fresca y una proporción substantiva de la biodiversidad mundial. A pesar de la riqueza natural con la que cuenta la región, una cantidad creciente de países no producen suficiente comida para alimentar a su población, que corresponde al 8% de la población mundial. Aproximadamente un 45% de la población es pobre y casi 60 millones de personas no reciben suficientes ingresos como para asegurarse su comida.

Los países que tienen las más altas tasas de crecimiento de la población, son los que han experimentado una conversión más rápida de terrenos a usos agrícolas, ejerciendo con ello presiones adicionales sobre la tierra y los hábitats naturales. La distribución de las personas entre el campo y la ciudad ha tenido consecuencias importantes en cuanto a los tipos de tensión a que se somete al medio ambiente.

Estas diferencias tan marcadas no le permiten a la región avanzar en su conjunto y son el reflejo de la falta de equidad social que discrimina algunos sectores o géneros del acceso a los servicios esenciales de educación, salud, capacitación, empleo y seguridad social, transmitiéndose así la pobreza de una generación a otra.

CUADRO 2. Estadísticas de población, ingreso per cápita e índice de desarrollo humano
para 22 países de América Latina y el Caribe.

País

Población
2 000
(millones)

Densidad de población (hab./km²)
2000

Densidad de población (hab./km²)
2020 (1)

PIB 1997
(millones dólares EE.UU.

IDH (2001)

Belice

0,24

10

15

750

54

El Salvador

6,31

295

380

13,203

95

Guatemala

12,12

105

164

19,079

108

Honduras

6,49

58

84

5,924

107

Costa Rica

3,82

77

104

15,948

41

Nicaragua

4,78

39

59

2,067

106

Panamá

2,85

39

54

10,019

52

México

98,26

51

64

580,121

51

Argentina

37,03

13

16

284,345

34

Bolivia

8,33

8

11

8,289

104

Brasil

169,28

20

25

593,799

69

Chile

15,21

20

25

70,545

39

Colombia

39,57

37

49

83,207

62

Ecuador

12,65

44

56

13,607

84

Paraguay

5,50

13

21

7,521

80

Perú

25,66

20

26

53,511

73

Uruguay

3,30

19

21

20,053

37

Venezuela

24,17

27

37

121,258

61

Surinam

0,44

3

3

846

64

Guyana

0,87

4

3

712

93

República Dominicana

8,42

171

217

nd

86

Cuba

11,07

101

104

nd

nd

Proyección elaborada por FAO considerando un escenario promedio.
nd: no disponible.
Fuentes: PNUD. Informe sobre el desarrollo humano 2001; Informe Organización de Naciones Unidas, 2002.

PANORAMA SUBREGIONAL

Centroamérica y México cubren una superficie de 241,9 millones de hectáreas, siendo el país con mayor extensión territorial México (79% de la superficie total) (Véase cuadro 3). Los países que integran Centroamérica son Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá y cubren el 21% restante del área (51,0 millones de hectáreas).

CUADRO 3. Superficie de la subregión Centroamérica y México

País

Superficie total (miles hectáreas)

Belice

2 296

Guatemala

10 843

El Salvador

2 072

Honduras

11 189

Nicaragua

12 140

Costa Rica

5 106

Panamá

7 443

México

190 869

Total

241 942

Fuente: Consejo Monetario Centroamericano, 2002.

Población total en la región

Para el año 2000 la población de la subregión fue de 139,3 millones de habitantes, de los cuales el 74% corresponde a México (103 millones) y el 26% a Centroamérica (36,3 millones). La población indígena alcanza los 18 millones de personas, de las cuales el 67% son mexicanos y se caracterizan por hablar más de 60 lenguas diferentes al español y el 33% son centroamericanos. En Guatemala el 43% de sus habitantes son indígenas, en Belice el 19%, Honduras, Nicaragua y Panamá se ubican entre un 7 y un 10%, mientras que en Costa Rica solamente el 2% de la población total es indígena. El Salvador no ha informado sobre su población indígena en el año 2000 (véase figura 2).

FIGURA 2. Población total y población indígena en Centroamérica (2000) (miles de personas)

Fuente: FLACSO, 2004.

La tasa de crecimiento de la población total de la subregión se redujo desde 1995 al 2000 en la mayoría de los países, excepto Belice que experimentó un leve incremento pasando de una tasa del 2,4% al 2,5%. Guatemala mantuvo la misma tasa de crecimiento del 2,6% (véase figura 3).

FIGURA 3. Crecimiento de la población total en Centroamérica y México
(tasas
anuales medias por 100 habitantes)

Fuentes: FLACSO, 2004, México; Consejo Nacional de Población.

En las últimas dos décadas, en Centroamérica y México ha aumentado la esperanza de vida al nacer (véase cuadro 4). En 5 de los 8 países la esperanza de vida superó en el año 2000 los 70 años, mientras que en Nicaragua y El Salvador la cifra es de 68 y 69 años respectivamente. Guatemala tiene el valor más bajo, o sea 64 años y Costa Rica el valor más alto, 77 años.

CUADRO 4. Esperanza de vida al nacer en los países de Centroamérica y México (1980-2000)

País

Esperanza de vida período 1980-2000

1980

1985

1990

1995

2000

México

67,1

69,5

71,2

72,7

74

Belice

-

-

-

-

74

Costa Rica

71

74

75

76

77

El Salvador

57

57

63

67

69

Guatemala

56

58

60

63

64

Honduras

58

62

65

68

70

Nicaragua

58

59

62

66

68

Panamá

69

71

72

73

74

Fuentes: FLACSO, 2004; México; Datos para el año 2001.

Población económicamente activa (PEA)

En Centroamérica, existen aproximadamente 13 millones de personas empleadas, las cuales representan un 37% de la población total (tasa bruta de ocupación). Un 36% del total de ocupados en la región son mujeres, lo que equivale a 5 millones. Costa Rica y Panamá presentan cerca de un 40% de los habitantes ocupados, mientras que en Guatemala la población económicamente activa es solamente el 30%. En Nicaragua, El Salvador y Honduras la PEA oscila entre el 37% y el 38% de la población total (véase figura 4). En el caso de Belice, la PEA es de cerca 78 mil personas en el año 2000. De éstas el 70% de los puestos de trabajo son ocupados por hombres y el 30% por mujeres.

FIGURA 4. Población económicamente activa (PEA) para los países de Centroamérica en el año 2000
(miles de personas)

Fuente: FLACSO, 2004.

En el cuadro 5 se observa que el 30% de la población centroamericana trabaja en el sector formal, el 39% en actividades informales y el 31% restante en actividades agropecuarias.

El sector formal es importante para países como Costa Rica y Panamá, ya que el 50% de su población se ubica en este sector, seguidos por El Salvador que cuenta con el 35,7%. Para Honduras y Nicaragua el sector formal tiene menos población en términos relativos (27% y 25,5% de los ocupados respectivamente). En el caso de Guatemala, solamente el 19,9% de su población económicamente activa se ubica dentro de este sector.

En el sector informal se desempeña el 39,3% de los ocupados centroamericanos, en este porcentaje se tiene en cuenta el servicio doméstico (3,7%), a los trabajadores familiares no remunerados (4,4%), a los trabajadores y patrones en establecimientos de 5 empleados o menos del sector privado, excluyendo a aquellos con estudios universitarios, (12,2%), y además se considera a los que trabajan por cuenta propia (18,9% del total de ocupados). Estos resultados muestran la importancia que tiene el sector informal en las economías centroamericanas.

Dentro del sector agropecuario se ubica el 30,6% de los ocupados. Este es un sector importante principalmente para los hombres puesto que el 42,4% de ellos se desempeña en esta actividad. La importancia del sector agrícola es mayor en este caso para Guatemala, pues absorbe cerca del 40% de los ocupados. Para Honduras y Nicaragua representa el 34%, seguido por El Salvador con un 30% y en menor porcentaje Panamá y Costa Rica.

CUADRO 5. Población ocupada según sector de ocupación (2000)

Sector

Centroamérica

Países

Costa Rica

El Salvador

Guatemala

Honduras

Nicaragua

Panamá

Formal

30,1

50,0

35,7

19,9

27,0

25,5

45,9

Informal

39,3

32,8

42,8

41,0

38,8

40,4

33,3

Agropecuario

30,6

17,2

21,4

39,1

34,3

34,1

20,8

Fuente: Segundo informe sobre desarrollo humano en Centroamérica y Panamá, 2004.

Distribución de la población por edad

La distribución de la población en los diferentes grupos de edades en 1990 y 2000 presenta un comportamiento similar en los países de Centroamérica (véase cuadro 6). Sin embargo, Guatemala presenta la mayor tasa de mortalidad general (7,4%) con respecto al resto de los países de la subregión, seguido por El Salvador con 6,0%. Costa Rica tiene una tasa de mortalidad general de 3,8, siendo la menor tasa reportada para los países de Centroamérica desde 1980.

Los grupos de edades entre 5 y 24 años son bastante significativos para todos los países, en el caso de Belice, es el 35% de su población total, la franja de 25 a 34 años es de aproximadamente el 15% y el restante grupo de edades oscila entre un 4 y un 10%.

CUADRO 6. Distribución de la población Centroamericana por grupo de edades (1990-2000)

Población por país (miles de personas)

Grupos
de edad

Costa Rica

El Salvador

Guatemala

Honduras

Nicaragua

Panamá

México*

1990

2000

1990

2000

1990

2000

1990

2000

1990

2000

1990

2000

1990

2000

    0 a 4

407

441

703

797

1520

1845

836

973

646

813

301

301

33448

33558

    5 a 14

705

861

1381

1437

2500

3120

1370

1728

1126

1356

545

592

    15 a 24

582

771

1064

1334

1717

2369

987

1338

770

1078

496

526

48545

62326

    25 a 34

528

628

666

1008

1105

1542

671

950

516

720

379

481

    35 a 44

342

550

487

628

744

999

416

637

328

476

262

374

    45 a 54

209

354

339

455

509

671

273

389

200

299

178

256

    55 a 64

146

212

254

304

377

435

181

246

135

174

118

167

    65 y más

128

205

215

312

277

404

145

223

106

158

119

158

3383

4685

    Total

3048

4023

5110

6276

8749

11385

4879

6485

3827

5074

2398

2856

85376

100569

Fuente: FLACSO, 2004.

La figura 5 muestra la distribución de la población total por sexo. Nicaragua y El Salvador son los países que informan mayor población femenina. En el caso de México, la población femenina es de 52 368 900, en 2003, un 1% más con respecto a la población masculina.

FIGURA 5. Distribución de la población total por sexo (miles de personas)

Población urbana y población rural

En 1990 el 45,6% de la población total de centroamericanos residía en áreas urbanas, aumentando en el 2000 a 49,8%. En los últimos treinta años el número de habitantes urbanos pasó de 6,5 a 17,5 millones (PNUD, 2003). De mantenerse este ritmo, la población urbana se duplicaría cada treinta años. En una década la población urbana aumentó notablemente, siendo en este caso Honduras y El Salvador los países que muestran un mayor incremento de la población urbana, de 7,4% y 5,4% respectivamente. Guatemala informó un incremento del 1,4% de 1990 al año 2000 (véase cuadro 7). Casi tres cuartas partes de los 100 millones de habitantes mexicanos viven en la zona urbana, así como poco más de la mitad de la población en Belice.

CUADRO 7. Población urbana para los países de Centroamérica

País

Años %

1990

2000

    México*

71,5

74,8

    Costa Rica

46,7

50,4

    El Salvador

49,8

55,2

    Guatemala

38,0

39,4

    Honduras

40,8

48,2

    Nicaragua

52,5

55,3

    Panamá

53,8

57,6

    Belice**

52,0

52,0

Fuente: FLACSO, 2004.

Producto interno bruto (PIB)

El PIB para Centroamérica y México alcanza los 663,5 mil millones de dólares EE.UU., de los cuales el 90% (597 mil millones) corresponde al PIB mexicano y el 10% (66,5 mil millones) al PIB centroamericano. El PIB per cápita para México es de 5 920 y el de Centroamérica es de aproximadamente 1 800. En términos comparativos, el PIB per cápita mexicano es superior al PIB per cápita de cualquiera de los países de la región centroamericana. Es evidente la diferencia de México, no sólo en superficie y población, sino en ingresos con respecto a los países centroamericanos.

FIGURA 6. Producto interno Bruto real total y por habitante, para los países de Centroamérica (2000)

La figura 6 muestra estas diferencias tanto en el PIB total como en el PIB per cápita. Costa Rica, Panamá y Belice presentan el mayor PIB per cápita, mientras que Nicaragua y Honduras presentan los menores. En los últimos 40 años, el PIB per cápita a nivel de Centroamérica se ha mantenido más o menos constante, excepto Costa Rica y Panamá, que superaron los 3 000 EE.UU dólares. Honduras no llegó a los 1 000 EE.UU. dólares al igual que Nicaragua. Esto evidencia la necesidad que tienen los países de la región en lograr tasas de crecimiento económico más altas.

Según se observa en la figura 7, las economías de los países centroamericanos no tienden a converger en términos del PIB por habitante, lo cual tampoco sucede con otros indicadores sociales. Se forman tres grupos de países: Costa Rica, Panamá y Belice con el PIB per cápita más alto de la región, un segundo grupo formado por Guatemala y El Salvador y un tercero formado por Nicaragua y Honduras con el menor PIB per cápita de la región. Se requiere desarrollar condiciones regionales e internacionales apropiadas para la convergencia como elemento importante para el logro de un desarrollo dinámico y equilibrado (Gryspan, R. 2004).

FIGURA 7. Producto interno bruto real para los países de Centroamérica (1960-2000)

La evolución del PIB total de los países de Centroamérica muestra cómo aquellos países que no se han visto afectados por conflictos sociales agudos y prolongados (guerra) y que han realizado una inversión social, muestran diferencias en cuanto a crecimiento y también en cuanto a desarrollo humano en relación a los que han mantenido largos períodos de guerras internas (Gutiérrez, 2004).

Inflación

El cuadro 8 muestra que Costa Rica es el país con la mayor tasa de inflación (11%) seguido por Guatemala y Honduras. El resto de los países de la subregión mantienen tasas inferiores al 5 por ciento.

CUADRO 8. Tasa anual de inflación para los países de la subregión Centroamérica y México (1995-2001)

País

Tasa de inflación por año (%)

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

Costa Rica

22,6

13,8

11,2

12,3

10,1

10,2

11,0

El Salvador

11,3

7,4

1,9

4,2

-1,0

4,3

3,0

Guatemala

8,6

10,9

7,1

7,5

4,9

5,1

8,9

Honduras

26,8

25,3

12,8

15,7

10,9

10,1

8,8

Nicaragua

11,1

12,1

7,2

18,5

7,2

9,9

4,6

Belice

-

-

-

-

-

-

2,6

Panamá

-

-

-

-

-

-

1,6

México

-

-

-

-

-

-

4,5

Fuente: PNUD, 2003.

Distribución de la renta

El cuadro 9 presenta los índices de pobreza en la subregión, mostrando grandes diferencias entre países. Honduras registra la mayor incidencia de pobreza total con un 71,3%, seguido por Guatemala con un 56,2%. Belice y Costa Rica, tienen la menor incidencia de la población en esas condiciones.

El valor de pobreza extrema en Honduras (53%) y Panamá (26,5%) es relevante. En toda la subregión, los grupos indígenas son, en la mayoría de los casos, los que integran este grupo, como por ejemplo México, donde el 93% de los 12 millones de indígenas, se encuentra en extrema pobreza, además el 60% presentan problemas de desnutrición, el 84% de los niños indígenas muere por dolencias intestinales, el 88% de las viviendas no tiene drenaje y el 75% no acabó la escuela primaria, (Banco mundial).

CUADRO 9. Pobreza total y extrema en Centroamérica
(en porcentaje de población bajo las líneas de pobreza respectivas)

Tipo

 

México*

Belice

Costa Rica

El Salvador

Guatemala

Honduras

Nicaragua

Panamá

2000

2000

2001

2000

2000

2002

2001

2000

Pobreza total

Total

43

33

22,9

45,5

56,2

71,3

45,8

40,5

Área urbana

   

18,6

35,3

27,1

63,4

30,1

23,4

Área rural

   

28,5

59,9

74,5

78,5

67,8

68,9

Pobreza extrema

Total

nd

nd

6,8

19,8

15,7

53,0

15,1

26,5

Área urbana

   

3,9

11,1

2,8

32,5

6,2

11,1

Área rural

   

10,5

31,9

23,8

70,4

27,4

52,2

nd: no disponible.
Fuente: Segundo informe sobre desarrollo humano en Centroamérica y Panamá.

El cuadro 10 presenta el IDH para los países de la subregión en 1975, 1990 y 2002. Se observa que todos los países, excepto Belice, presentan valores superiores del IDH para el año 2002. Analizando la posición de los países para el año 2002, se observa que cuatro de los ocho países se encuentran por encima del puesto 100, alcanzando Guatemala el puesto 121 de 177 naciones.

De los países de la subregión, Costa Rica y México se ubican según el IDH en la clasificación de países con desarrollo humano alto (valores ≥ 0,800). El resto de los países se clasifican en la categoría de desarrollo humano medio (valores ≥ 0,5000 y < 0,800).

CUADRO 10. Índice de desarrollo humano para los países de la subregión (1975-1990-2002)
(valor y posición para el año 2002 entre 177 naciones)

País

Valor del IDH/año

1975

1990

2002

Belice

0,747

      0,737 (99)

Costa Rica

0,745

0,791

      0,834 (45)

El Salvador

0,590

0,648

      0,720 (103)

Guatemala

0,510

0,583

      0,649 (121)

Honduras

0,571

0,624

      0,672 (115)

Nicaragua

0,565

0,589

      0,667 (118)

Panamá

0,708

0,748

      0,791 (61)

México

0,688

0,761

      0,802 (53)

Fuente: PNUD, 2004. Informe sobre desarrollo humano 2004.

Balanza comercial

Para los países de la subregión, la balanza comercial total es negativa (véase figura 8). Excepto en Costa Rica y Belice, en los demás países el déficit supera el monto de las exportaciones totales. Por su parte México presenta una balanza comercial negativa, sin embargo esta cifra solamente representa el 2,5% de las importaciones con respecto a las exportaciones.

FIGURA 8. Exportaciones, importaciones y balanza comercial del año 2002 para los países de la subregión
Millones de dólares EE.UU.

Fuente: FLACSO, 2004.

La figura 9 muestra el comportamiento de las exportaciones e importaciones totales para los países de Centroamérica, excluyendo a México para visualizar mejor la información. En las dos últimas décadas las exportaciones de Costa Rica y Guatemala, aumentaron considerablemente y en la década de los noventa Honduras, Nicaragua y El Salvador presentaron un aumento significativo de sus exportaciones, siendo este último país el que tuvo las mayores tasas. Panamá, por su parte, tiene un esquema económico basado en la oferta de servicios, por lo que el dinamismo en cuanto a exportaciones de bienes es relativamente bajo.

FIGURA 9. Exportaciones, importaciones y balanza comercial del año 2002 para los países de Centroamérica
Millones de dólares EE.UU.

Fuente: FLACSO, 2004.

Tasas de interés

Las tasas de interés activas son altas para toda Centroamérica excepto para El Salvador. Esto difiere sensiblemente de la coyuntura financiera de los países desarrollados, en la que esta tasa de interés no sobrepasa los cuatro puntos. Con respecto a la tasa pasiva real, se muestran datos negativos, lo cual no incentiva el ahorro (véase cuadro 11). Las brechas entre tasas activas y pasivas son un indicador de las ineficiencias de la intermediación financiera en la región.

CUADRO 11. Tasas de interés activas y pasivas para Centroamérica
(con base en la moneda de cada país) (1995-2001)

País

Año

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001*

Tasa activa real

Costa Rica

13,9

14,8

13,9

12,5

15,7

14,4

12,2

El Salvador

7,8

8,6

13,5

10,5

16,3

7,6

4,7

Guatemala

12,5

10,4

8,7

9,9

15,1

15

9

Honduras

1,3

3,4

17,1

12,9

16,7

13,1

13,1

Nicaragua

21,4

21,1

26,9

15,4

24,9

24,9

24,9

Panamá

             

Belice

             

México

             

Tasa pasiva real

Costa Rica

7,1

8,9

8,5

10,8

7,4

4,8

4,5

El Salvador

4,2

4,2

10,6

6,3

11,8

2,7

0,9

Guatemala

-0,4

-2,8

-1,8

-1,2

5,2

5,9

-0,4

Honduras

-7,6

-4,3

7,9

5,2

6,9

3,6

3,6

Nicaragua

15

15,2

17,9

6,4

14,7

3,6

3,6

Panamá

             

Belice

             

México

             

* Proyección.
Fuente: Consejo Monetario Centroamericano, 2002.

Gasto público social e inversión

En el cuadro 12 se presenta el gasto público social en 17 países de América Latina. Si consideramos el promedio de gasto per cápita equivalente a 540 dólares EE.UU., se observa que sólo Panamá y Costa Rica presentan valores sobre el promedio. México ocupa una posición intermedia. Sin embargo, Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua presentan los valores más bajos de inversión en relación a los 17 países, siendo los dos últimos la inversión pública social del 10% del promedio de los 17 países.

Al comparar el gasto público social como porcentaje del PIB se observa que son Panamá y Costa Rica los que están por encima del promedio. Pero al compararlo con el gasto público total, estos dos países no alcanzan el promedio de los 17 países. Por el contrario, en México el gasto público social es del 58,5% del gasto público total. En el resto de los países de la subregión es evidente la baja inversión en gasto público social.

El estancamiento de la inversión pública, ligado a la pobreza y a la pobreza extrema, así como el bajo PIB en algunos de los países centroamericanos, permite suponer que las dos próximas décadas serán de retos para el desarrollo socioeconómico de los países y que, en ese contexto, las áreas boscosas de la región continuarán disminuyendo por la demanda de tierras para agricultura y ganadería y por la altísima extracción de leña en algunos de los países.

La evolución económica de los últimos 15 años en Centroamérica fue más rápida al inicio de los noventa, como producto de la paz y el restablecimiento del comercio intrarregional. En la segunda mitad de los noventas e inicios de siglo XXI ha tenido un menor vigor económico. Sin embargo, aunque la región ha hecho esfuerzos de desarrollo durante ese período, aún persisten importantes rezagos en materia de pobreza, educación e inversión social.

CUADRO 12. Gasto público social per cápita como porcentaje del PIB y del gasto público para 17 países de América Latina y el Caribe (1998-1999)

País

Gasto per cápita
(cotización $EE.UU. de 1997)

Gasto público social como porcentaje del:

PIB

Gasto público

Argentina

1687

20,5

63,6

Uruguay

1539

22,8

72,5

Brasil (1)

1011

21,0

60,4

Chile

827

16,0

66,8

Panamá

642

19,4

38,6

Costa Rica

622

16,8

43,1

México

402

9,1

58,5

Colombia

381

15,0

35,5

Venezuela

313

8,6

37,3

Perú

192

6,8

38,3

Bolivia

168

16,1

56,5

República Dominicana

135

6,6

39,7

Paraguay

132

7,4

46,2

Guatemala

107

6,2

46,2

El Salvador

82

4,3

27,0

Honduras

57

7,4

34,3

Nicaragua

57

12,7

37,0

Promedio regional (2)

540

13,1

47,8

Fuente: CEPAL, 2001.
Estimación del gasto social consolidado (todas las esferas del gobierno)
Promedio simple de los países, excluidos Bolivia y El Salvador.

En la figura 10 se nota la evolución de la inversión en Centroamérica. Es evidente que la inversión pública se ha quedado estancada, mientras que la inversión privada ha crecido.

FIGURA 10. Inversión bruta fija realizada en Centroamérica (1980-2003)

Fuente: Gryspan, 2004.

CONCLUSIONES RELATIVAS AL ENTORNO MUNDIAL Y DE AMÉRICA LATINA

Es evidente que la subregión es económicamente, pobre, y relativamente rezagada como lo demuestran los siguientes indicadores:

• El PIB de los países centroamericanos para el 2003 fue de 89 mil millones de dólares EE.UU. mientras que el PIB de México fue de 642 mil millones de dólares. Comparando con otros países de América Latina, el PIB de Colombia para el mismo año fue de 72 mil millones de dólares EE.UU. y el de Chile de 64 mil millones de dólares EE.UU.

• El ingreso anual por habitante (PIB per cápita como promedio regional) supera apenas los 2 mil dólares EE.UU.

• Persisten condiciones de desigualdad. Por ejemplo, en Costa Rica el 10% más pobre recibe el 15,3% del ingreso, mientras que en Nicaragua el 10,4%. En Costa Rica, el 10% más rico recibe el 29,4% del ingreso mientras que en Nicaragua es el 40,5%.

• La pobreza afecta al 51% de la población. Sin embargo, existen grandes diferencias entre países, desde el 23% en Costa Rica hasta el 71% en Honduras.

• Según los informes anuales del IDH del PNUD, cuatro de los ocho países se encuentran por debajo del puesto 105, lo cual es una posición bastante insatisfactoria.

• El analfabetismo es del 22%, la mortalidad general del 6,2 por cada 100 mil habitantes y la mortalidad infantil de 38,2 por cada 1 000 nacidos vivos.

• Las bajas tasas de crecimiento de las economías de la región no favorecen una mayor inversión en salud y educación, lo cual mantiene a la región en un círculo vicioso donde dos elementos claves son la baja inversión social y el bajo crecimiento económico.

Además, existen otros problemas significativos como los demográficos (Ej.: El Salvador), de integración cultural (Ej.: Guatemala) y de exposición a fenómenos naturales (huracanes y sismos). Por otro lado, la condición de México, país ubicado políticamente en América del Norte, socio comercial de los Estados Unidos y del Canadá a través del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), que presenta un PIB más de 7 veces mayor que el de toda Centroamérica, sin embargo, en algunas regiones de este país las condiciones de pobreza y rezago son similares a las de la región.

La tasa de pobreza ha bajado en Centroamérica pero no obstante persisten niveles altos de pobreza y pobreza extrema (Gryspan, 2004). Si combinamos la pobreza medida por la línea de pobreza y por las necesidades básicas insatisfechas, se puede concluir que cerca del 65% de los hogares centroamericanos son pobres. La incidencia de la pobreza en el campo es del 66%, mientras que en las ciudades es del 47%. De los casi 20 millones de pobres, 12 millones viven en áreas rurales, esto corresponde al 60% del total. El problema sigue siendo el subempleo y la alta informalidad prevaleciente en el mercado de trabajo y aunque se ha aumentado la inversión social, ésta sigue estando por debajo del promedio de América Latina.

Gutiérrez,y Gryspan,concluyen que aunque por más de una década Centroamérica ha realizado reformas estructurales, las mismas han sido orientadas principalmente para lograr el crecimiento económico (Gutiérrez, Gryspan 2004). Estas reformas son necesarias pero no son suficientes para reducir la pobreza y superar los rezagos de la región. Por otro lado, las reformas no son suficientes para elevar los niveles de crecimiento. Además, en Centroamérica la ausencia de políticas macroeconómicas sostenibles y de un marco regulatorio inadecuado, no han permitido obtener los resultados deseados. En el futuro son necesarias nuevas condiciones de inserción internacional para lograr superar esos rezagos, así como también nuevas o renovadas capacidades institucionales debidamente financiadas.

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