Exámenes regionales

África

África del Norte

La producción de cereales se recupera en Marruecos

En la mayoría de los países de la subregión la recolección de la cosecha de cereales de invierno de 2009 comenzará a partir de junio. Las perspectivas para la cosecha son generalmente favorables especialmente en Marruecos, donde se prevé una ulterior recuperación de la producción con respecto a la cosecha reducida a causa de la sequía de 2007, siempre y cuando predomine un tiempo normal en los meses venideros. La superficie total cultivada con trigo y cebada en Marruecos se estima en alrededor de 5,1 millones de hectáreas, semejante a la del año pasado, y los rendimientos deberían de aumentar considerablemente, apuntando a una cosecha excelente para este año. Las perspectivas son también favorables en Egipto, el mayor productor de la subregión, donde las condiciones atmosféricas han sido generalmente satisfactorias y se prevé una producción de cereales entre media y superior a la media. En cambio, en Túnez, a pesar de los incentivos dados por el gobierno para aumentar la producción interna con el fin de mitigar las repercusiones negativas de los altos precios internacionales sobre los consumidores, las perspectivas siguen siendo inciertas. Ello se debe principalmente a una insuficiente humedad del suelo durante el período de la siembra, lo que causó una disminución de la superficie plantada. Aunque las precipitaciones aumentaron considerablemente en enero y febrero, no se espera una recuperación agrícola sólida. En resumen, la FAO pronostica la producción total de trigo en la subregión para 2009 en aproximadamente 17,9 millones de toneladas, un 13 por ciento más que el nivel del año anterior, mientras que la de cebada se cifra en alrededor de 5 millones de toneladas, lo que representa un aumento del 50 por ciento.

En 2008 se obtuvo una cosecha media de cereales, lo cual, combinado con unas perspectivas favorables para las cosechas de 2009 y una importante disminución en los precios internacionales de los productos básicos, ha sido favorable para reducir la inflación y mejorar el acceso a los alimentos. En Egipto, el país más afectado, donde la tasa anual de inflación de las zonas urbanas alcanzó en agosto de 2008 el 23,6 por ciento (frente al 6,9 por ciento en diciembre de 2007), se observó un movimiento descendente a partir de septiembre que culminó abruptamente en una inflación del 14,3 por ciento en enero de 2009. La inflación se debe principalmente a las variaciones de los precios en el sector alimentario, en el que la tasa anual bajó de 30,9 por ciento en agosto de 2008 a 16,3 por ciento en enero de 2009.

 

África occidental

En África occidental, ha comenzado la preparación de la tierra en los países costeros para la plantación de los cultivos de cereales de la temporada principal de 2009, mientras que en el Sahel la plantación está prevista para junio.

Continúan siendo altos los precios de los alimentos en la subregión

Aunque en la mayoría de los países se ha obtenido una buena cosecha de cereales en 2008, las perspectivas para la seguridad alimentaria siguen siendo una preocupación debido a que los precios de los alimentos se mantienen siempre altos. Después de haber bajado durante los casi dos meses del período de recolección, los precios de los cereales secundarios, que dependen principalmente de los factores regionales de la oferta y la demanda, han ido aumentando desde noviembre-diciembre de 2008 en la mayoría de los países. Como consecuencia, en febrero de 2009 los precios de los cereales secundarios estaban muy por encima de los niveles de hace un año. Por ejemplo, a pesar de una disminución significativa con respecto al nivel máximo alcanzado en agosto-septiembre de 2008, en los mercados de Mali (Bamako), Níger (Niamev) y Burkina Faso (Ouagadougou) los precios mayoristas del mijo eran respectivamente un 16, 19 y 20 por ciento más altos en febrero de 2009 que en febrero de 2008. En Ghana (Accra), el precio minorista del maíz era un 54 por ciento más alto en marzo que un año antes. Sin embargo, en febrero de 2009 los precios minoristas del mijo en el Senegal (Dakar) eran semejantes a sus niveles de hace un año, lo que indica que el factor de la demanda regional, principalmente la demanda de las industrias de elaboración de alimentos y el sector avícola nigerianos pueden estar contribuyendo a una tensión del mercado en la parte oriental de la subregión.

La situación no es mejor para el arroz importado, cuyo precio, determinado por los precios mundiales, ha registrado una transferencia alta desde el mercado internacional. En Burkina Faso, el Senegal y el Níger, los precios del arroz siguen siendo muy altos: en febrero de 2009 eran, respectivamente, un 60 por ciento, 48 por ciento y 41 por ciento más altos que hace un año. En comparación, el precio de exportación del arroz Thai quebrado era un 22 por ciento más bajo en febrero de 2009 que hace un año. En los países francófonos del África occidental la inflación de los precios del arroz se ha debido en alguna medida a la devaluación, desde el comienzo del año, del CFA (que está vinculado al Euro) frente al dólar estadounidense. Análogamente, es probable que el precio del arroz continúe aumentando en otros países de la subregión debido a la constante devaluación de las monedas nacionales en respuesta a las repercusiones de la crisis económica mundial. En Nigeria, el Naira se ha devaluado mucho en las últimas semanas perdiendo más del 25 por ciento de su valor entre finales de noviembre y enero debido a los efectos del descenso de los precios del petróleo en la economía. Y el año pasado el Cedi ghanés ha perdido más del 30 por ciento de su valor frente al dólar. Es probable que estos hechos se traduzcan en un alza continua de los precios del arroz con efecto negativo en el acceso a los alimentos, principalmente en los países de la parte occidental de la subregión que dependen de las importaciones.

En algunos países los precios recientes de los alimentos son incluso más altos que en 2005, el año de la última grave crisis alimentaria en la subregión, lo cual suscita graves preocupaciones por las perspectivas para la seguridad alimentaria. Sin embargo, mientras la crisis de 2005 se vio activada por una combinación de factores tales como las infestaciones de langostas y las precipitaciones escasas que se tradujeron en graves pérdidas de cultivos y pastizales, la campaña agrícola de 2008 se caracterizó por un nivel bueno de precipitaciones, cosechas sin precedentes y pastizales abundantes en la mayoría de los países. De ahí la probabilidad de que el impacto de los precios altos de los alimentos sea muy fuerte para los hogares rurales con déficit de alimentos y para los consumidores de las zonas urbanas. Por lo tanto, durante el período de carestía se recomiendan intervenciones en materia de seguridad social, tales como la distribución selectiva de alimentos, las ventas a precios subvencionados, las actividades de alimentos por trabajo o de dinero por trabajo, según el alcance del suministro de alimentos en determinadas zonas.

África central

La plantación de los cultivos de cereales de 2009 ha apenas comenzado. En Camerún, aunque en 2008 se obtuvo una cosecha de cereales superior a la media, sus precios continúan aumentando debido a diversos factores tales como la fuerte recuperación de la industria avícola, muy afectada por la gripe aviar en 2006, así como la dependencia del país respecto del arroz importado. Con el afán de controlar la inflación alimentaria, en enero el gobierno firmó un acuerdo con los comerciantes para estabilizar el precio de los productos básicos importados, incluido el arroz. Para indemnizar a los importadores por los costos que pudiera causar dicha política, el gobierno ha prometido acelerar el pago de bonificaciones fiscales y reducir las comisiones. Está previsto que el acuerdo dure hasta junio de 2009. Además, en la República Centroafricana la recuperación agrícola continúa viéndose impedida por la persistencia de los disturbios civiles y la insuficiente disponibilidad de insumos agrícolas, principalmente en las partes septentrionales en las que, según los informes, cerca de 300 000 personas han tenido que abandonar sus hogares en los últimos dos años. La continua inseguridad, tanto en el Chad como en la región de Darfur del Sudán, amenaza con desestabilizar ulteriormente la situación en las partes septentrionales del país.

África oriental

Las últimas lluvias proporcionaron un anhelado respiro a los cultivos de cereales de 2009 después de un período de sequía

Los cultivos de cereales de la temporada principal de 2009 se están plantando o están madurando en Somalia, Kenya, Uganda y República Unida de Tanzanía, mientras que en Etiopía, Eritrea y el Sudan la siembra de los cultivos principales no comenzará hasta finales de mayo-junio.

Las precipitaciones tardías e inferiores a la media recibidas en toda la región desde principios del año retrasaron las actividades de siembra y perjudicaron a los cultivos tempranos, pero las lluvias abundantes caídas a final de marzo y principios de abril han mejorado las perspectivas para los cultivos de cereales de este año. En Kenya y Tanzanía, los resultados de las cosechas de la presente campaña deberían mejorar gracias a las iniciativas adoptadas por el gobierno para subvencionar los costos de los fertilizantes y las semillas.

En las zonas pastorales y agrícolas marginales afectadas por la sequía de Somalia meridional, Kenya septentrional y nordoriental y Etiopía oriental y sudoriental, el tiempo seco de los últimos meses ha suscitado una grave preocupación. Varias campañas consecutivas de precipitaciones inferiores a la media, combinadas con los altos costos de los insumos y los conflictos civiles, ya han afectado a la producción agropecuaria con consecuencias devastadoras sobre la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia.

Disminuyen las cosechas secundarias de cereales de 2008/09

La recolección de las cosechas de la temporada secundaria de 2008/09 ha terminado en la mayor parte de los países de la región, excepto en Etiopía, donde se prevé que las cosechas “belg” se recojan a partir de junio. En el Sudán, ha comenzado la recolección de la cosecha de trigo.

Debido a la insuficiencia de las lluvias, a la reducción de la superficie plantada y a los altos costos de los insumos, la cosecha de “lluvias cortas” terminada recientemente en Kenya apunta a una disminución de la producción. Las estimaciones indican que la producción del maíz de la temporada de las “lluvias cortas” alcanzó solamente las 130 000 toneladas, mientras que la producción total de maíz de 2008/09 totalizó 2,34 millones de toneladas, un 15 por ciento menos que la media a corto plazo. Las tierras bajas marginales del sudeste, que dependen mucho de la estación de las lluvias cortas, se han visto considerablemente afectadas por varios períodos consecutivos de lluvias deficientes. Análogamente, en Somalia las precipitaciones mal distribuidas y escasas, en combinación con la persistencia de la inseguridad civil y los altos costos de los insumos, redujeron la producción para la campaña “deyr” de 2008/09. La producción total deyr (sorgo y maíz) se estimó en 54 000 toneladas, un 54 por ciento menos que la media posterior a la guerra (1995-2007). En la República Unida de Tanzanía, los informes iniciales de la cosecha “vuli” de 2008/09 apenas terminada indican una cosecha de cereales menguada a causa de las escasas lluvias estacionales caídas en toda la región bimodal nordoriental. En cambio, las estimaciones provisionales indican para Uganda una mejorada cosecha de maíz de la temporada “segunda” de alrededor de 200 000 toneladas.

Las cosechas principales de cereales de 2008, recogidas al final del año pasado, fueron buenas en Etiopía y el Sudán, los mayores países productores. Sin embargo, en Eritrea, las precipitaciones insuficientes recibidas durante el período vegetativo principal “kremti” dieron lugar a una cosecha reducida. En el África oriental, la producción total de cereales de 2008 (temporadas principal y secundaria) se estima en 34,7 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento más que en 2007.

Los precios están por encima de los niveles del año pasado

A pesar de algunas bajas registradas en los últimos meses gracias a la producción de la temporada principal de cereales de 2008, los precios de los cereales continúan siendo altos en la región. Con el afán de bajarlos, algunos gobiernos han eliminado los impuestos internos y los derechos de importación a las ventas de cereales.

En Kenya, el precio del maíz, que en febrero de 2009 alcanzó niveles sin precedentes, disminuyó marginalmente en marzo a 381 USD por tonelada en Nairobi, lo cual es todavía un 43 por ciento más alto que el año anterior. En Somalia, los precios del sorgo y del arroz importado han descendido en los dos últimos meses, pero en marzo de 2009 eran un 72 y 32 por ciento más altos que hace un año. En Etiopía, en Addis Abeba, el precio del maíz, el cereal más consumido, y el del sorgo, el alimento básico principal en la mayoría de las zonas de tierras bajas del país, comenzaron una tendencia descendente a partir de septiembre de 2008, en coincidencia con el período de la recolección. En marzo de 2009, el precio del maíz era solamente un 4 por ciento más alto que hace un año, mientras que el del sorgo bajó alrededor de un 6 por ciento. Análogamente, el precio del trigo, que se consume principalmente en los centros urbanos, era un 18 por ciento más alto en febrero de 2009 que en el mismo período del año pasado. En Uganda, el precio del maíz aumentó un 11 por ciento en marzo, situándose por encima de los niveles de marzo de 2008. La gran demanda regional para la cosecha de maíz de Uganda podría sustentar la inflación de los precios internos. En cambio, en República Unida de Tanzanía, los precios del maíz descendieron en los últimos meses y en marzo de 2009 estaban en el mismo nivel de hace un año, aunque más del doble de sus niveles de marzo de 2007.

 

En el Sudán, los precios del sorgo, el principal alimento básico, eran un 68 por ciento más altos en febrero de 2009 que los precios registrados en el mismo período en 2008. En cambio, los precios del trigo en Jartum, la principal zona consumidora, han bajado un 35 por ciento desde febrero de 2008. Esta disminución indica una clara correlación con la evolución de los precios internacionales, debido a la gran dependencia del Sudán con respecto al trigo importado. En Djibouti, los precios de los cereales han comenzado a bajar desde principios de 2009: los del sorgo descendieron un 31 por ciento en enero de 2009 y los del arroz de calidad inferior (belem) comenzaron a bajar a partir de octubre de 2008.

 

 

En Eritrea, los precios de la harina de trigo y del sorgo aumentaron notablemente desde febrero de 2008 pero han dado señales de una cierta estabilidad durante enero y febrero de 2009, después de la cosecha principal de finales del año pasado. Entre septiembre de 2008 y febrero de 2009 el precio de la harina de trigo, en su mayor parte importada, aumentó un 6 por ciento en la principal ciudad portuaria de Massawa. Análogamente, durante el mismo período el precio del sorgo aumentó un 20 por ciento. Este aumento considerable de los precios afectará significativamente al poder adquisitivo de los hogares, repercutiendo negativamente en la seguridad alimentaria, particularmente en las zonas rurales en las que el sorgo es el alimento básico principal. Además, los precios locales convertidos en dólares estadounidenses al tipo de cambio oficial son considerablemente más altos en comparación con los vecinos regionales.

 

África austral

Las perspectivas para los cultivos de cereales de 2009 son generalmente favorables en el África austral, salvo en Zimbabwe

En el África austral, las cosechas de cereales de 2008/09 se están recogiendo o están a punto de recogerse. Aunque la llegada tardía de las lluvias estacionales de finales de 2008 causó algunos retrasos en la siembra y, posteriormente, una racha seca prolongada que afectó en febrero algunas partes de la subregión, las perspectivas para la próxima cosecha siguen siendo generalmente favorables para la subregión en su conjunto. El régimen de las precipitaciones estacionales se ilustra en la Figura 13, que muestra las lluvias estimadas en las principales zonas productoras de determinados países. En algunas partes, sin embargo, las irregularidades atmosféricas y el escaso acceso a los insumos principales a causa de los precios altos han determinado una disminución de la producción. Las indicaciones más recientes apuntan a una producción total de cereales secundarios en 2009 inferior en un 5 por ciento a la del año pasado pero todavía por encima de la media de los últimos cinco años.

La superficie plantada con maíz comercial durante la presente campaña en Sudáfrica se estima oficialmente en 2,42 millones de hectáreas, un 13,5 por ciento menos que el año pasado, debido principalmente a los precios bajos de SAFEX e internacionales para el maíz durante el período de siembra y a las precipitaciones retrasadas y mal distribuidas en las principales zonas productoras (el triángulo del maíz). La producción se pronostica provisionalmente en 11,2 millones de toneladas, un 12 por ciento menos que la cosecha sin precedentes del año pasado. Volvieron a aplicarse planes en gran escala para la subvención de los insumos en Zambia, Malawi, Angola y Madagascar, lo que permitió a los pequeños agricultores utilizar semillas de calidad y fertilizantes, con importantes efectos positivos en su producción total de cereales. En cambio, una racha seca de alrededor de 2 a 4 décadas en la mayoría de las zonas de Zimbabwe, unida a la escasez y los precios altos de insumos fundamentales, como fertilizantes, semillas, combustible y energía de tracción animal para la labranza, derivará en otra escasa cosecha de cereales para este año. La reforma de los precios y del mercadeo recientemente anunciada, la adopción del dólar estadounidense como moneda local y la liberalización del mercado de cereales (mediante la cual la Junta de Comercialización de Cereales queda como comprador de último recurso) llegaron demasiado tarde para tener un efecto significativo en la producción de este año. Unas lluvias irregulares, junto con un tiempo seco prolongado, afectaron también a los cultivos en las partes meridionales de Mozambique y Angola, donde se prevén rendimientos reducidos.

 

Las importaciones de cereales siguen siendo pocas

El ritmo de las importaciones de cereales de los países deficitarios de la subregión continúa siendo relativamente más lento en la presente campaña comercial (2008/09) que el año pasado (véase el Cuadro 9), debido posiblemente a los precios de las importaciones generalmente más altos durante 2008/09, particularmente para el trigo y el arroz. Las cifras disponibles a mediados de marzo de 2009, casi al final de la campaña comercial, indican que desde el comienzo de la campaña comercial en abril de 2008 se ha recibido o contratado/prometido solamente el 68 por ciento de las necesidades estimadas para las importaciones de todos los cereales (frente a aproximadamente el 82 por ciento del año anterior). En Zimbabwe, Mozambique, Angola y otros países las importaciones efectivas han descendido muy por debajo de la necesidad de importación estimada o los datos sobre las entregas todavía no están completos. Dado que el período de escasez ha comenzado en enero de 2009, se necesita con urgencia importaciones adicionales con objeto de evitar la escasez de alimentos y ulteriores alzas de los precios en los mercados locales.

Los precios actuales de los cereales siguen siendo altos en algunos países pese a la disminución de los precios regionales e internacionales

En marzo de 2009 los precios de los cereales principales eran considerablemente más altos que en el mismo período del año pasado en algunos países de la subregión debido al retraso de las importaciones durante la campaña comercial 2008/09 (abril/marzo en la mayoría de los casos). Los precios del maíz, el alimento básico más importante de la subregión, estaban por encima de sus niveles de hace un año (véase la Figura 14). En Sudáfrica, el principal país exportador de la región, el precio de marzo de 2009 (precio al contado en Randfontein) era un 4 por ciento más bajo que al principio de la campaña comercial en mayo de 2008, mientras que durante el mismo período de hace un año los precios habían aumentado en un 13 por ciento. En dólares estadounidenses los precios disminuyeron en un 30 por ciento de mayo de 2008 a marzo de 2009, debido a la devaluación del Rand. En Mozambique, en marzo de 2009 el precio de 12,95 MZN (Metical mozambiqueño) por kilogramo (precio al por mayor en Maputo) era un 41 por ciento más alto que en el mes correspondiente de 2008. Dado que la nueva cosecha ha comenzado en abril, es probable que en la mayoría de los países los precios bajen a sus niveles estacionales. El precio medio de abril de 2007 a marzo de 2008 para el arroz local, el principal alimento básico de Madagascar, era alrededor de un 12 por ciento más alto que la media correspondiente al mismo período de hace un año. Estos precios aumentaron ulteriormente en alrededor de un 4 por ciento durante 2008/09, pero deberían bajar con la llegada de la nueva cosecha que comenzará en abril-mayo.

 

Asia

Lejano Oriente

Condiciones de crecimiento mejoradas para la cosecha de trigo de invierno de 2009

En China (Continental), la cosecha de trigo de invierno, que representa alrededor del 95 por ciento de la producción anual de trigo de China, se recogerá en mayo-junio. Después de la grave sequía de invierno, que afectó seriamente al 50 por ciento de los cultivos, unas precipitaciones benéficas recibidas al final de febrero y en marzo, unidas a un aumento de los abastecimientos de riego gracias al apoyo del gobierno, contribuyeron a la recuperación de los cultivos. También fueron beneficiosas para los cultivos las temperaturas superiores a lo normal registradas durante el invierno. La producción de trigo de 2009 se pronostica provisionalmente en alrededor de 109 millones de toneladas, aproximadamente un 3 por ciento menos que en 2008 a pesar de un ligero incremento en la superficie plantada. En la India, se está recogiendo actualmente la cosecha de trigo de invierno y la producción de 2009 se pronostica oficialmente en 78 millones de toneladas, volumen cercano al récord del año pasado. Se prevén mayores producciones en Uttar Pradesh y Bengala occidental, mientras en Haryana, Uttaranchal y Uttarakhand es probable que las producciones sean iguales a las del año pasado. Se supone que el gobierno suprimirá la prohibición de las exportaciones de trigo después de las elecciones federales de abril-mayo, como resultado de una buena producción prevista y de unas compras de trigo sin precedentes debidas a los precios de compra más altos establecidos por el estado (a principios de este año el gobierno aumentó el precio estatal de 10 000 INR por tonelada a 10 800 INR por tonelada). En 2007 la India prohibió las exportaciones de trigo para aumentar los suministros locales e impedir que los precios internos se fueran a las nubes. La situación de la cosecha de trigo, que está a punto de recogerse en el Pakistán, sigue siendo buena debido a unas lluvias favorables recibidas durante el período vegetativo. La producción de trigo de 2009 debería alcanzar un nivel sin precedentes de 23,5 millones de toneladas. El gobierno se ha comprometido a mantener el precio mínimo garantizado al productor de 950 PKR por 40 kg (o sea 11,8 USD por 40 kg) y el objetivo de compra de trigo para 2009/2010 se ha establecido en 6,5 millones de toneladas. En la República Islámica del Irán, el tiempo seco, unido a unas temperaturas superiores a lo normal, ha acelerado con respecto a lo normal el desarrollo de los cereales de invierno. Se pronostica que la cosecha de trigo de invierno de 2009 se recuperará sólo parcialmente con respecto al nivel reducido por la sequía del año pasado. En 2007 el país había llegado a ser prácticamente autosuficiente en trigo, pero después de la sequía de 2008 la necesidad total de importaciones de trigo en 2008/09 (abril/marzo) se pronostica en 5,6 millones de toneladas.

Los precios de los alimentos a niveles históricamente altos en algunos países

Los precios de los alimentos básicos han bajado en el primer trimestre del año, pero se mantienen significativamente más altos en comparación con las medias a largo plazo registradas en algunos países. El impacto de los precios en la producción total de alimentos del grupo vulnerable de la población todavía es fuerte.

En Sri Lanka, el precio del arroz al por menor en Colombo bajó a 61 Rupias por kg en marzo de 2009, aproximadamente un 6 por ciento menos que el mes anterior y un 8 por ciento menos que los niveles máximos alcanzados en junio de 2008. Sin embargo, este precio sigue siendo superior en un 78 por ciento al del mismo mes de hace dos años. En el Pakistán, el precio de la harina de trigo al por menor en Karachi era de 26,3 rupias por kg en marzo de 2009, un 23 por ciento menos que el precio máximo registrado en agosto de 2008, pero todavía un 48 por ciento más alto comparado con el de marzo de 2007. En Tailandia, el precio mayorista del arroz (con un 5 por ciento de grano quebrado) en Bangkok bajó a 18,27 baht por kg en febrero de 2009, un 28 por ciento menos que el nivel máximo registrado en abril de 2008, pero todavía un 74 por ciento más que en febrero de 2007.

Producción récord de arroz en 2008 y perspectivas globales positivas para la de 2009

La campaña del arroz de 2008 ha terminado en la subregión con resultados mucho mejores de lo previsto. Las estimaciones más recientes indican una producción sin precedentes de 621,3 millones de toneladas de arroz en 2008, aproximadamente un 3,5 por ciento más que el año anterior.

En algunos países la campaña del arroz de 2009 está muy avanzada. Las perspectivas son favorables en Indonesia (temporada principal), China (arroz temprano), Sri Lanka (maha) y Bangladesh (boro). En cambio, en el Nepal, la sequía está perjudicando a la cosecha de trigo de 2009, que está a punto de recogerse, y las pérdidas se estiman en más del 30 por ciento de las plantaciones en algunas zonas. Las precipitaciones y nevadas caídas en los distritos del Lejano y Medio Oeste durante febrero y en el Nepal central y oriental durante marzo, fueron demasiado pocas y tardías para mejorar la situación de los cultivos. En muchas zonas agrícolas marginales de los distritos de colinas y montañas de las regiones del Lejano y Medio Oeste las pérdidas de cosechas se prevén en un nivel situado entre el 50 y el 70 por ciento de la superficie plantada.

Algunos países de la subregión han aplicado nuevas políticas para apoyar la producción arrocera de 2009. Para el arroz de la segunda cosecha, el gobierno de Tailandia ha fijado el precio garantizado de los agricultores en un nivel, superior al precio de mercado, de 11 800 THB (332 USD) por tonelada, en el marco de un nuevo plan de intervención que comenzó el 16 de marzo y durará hasta julio. El gobierno de Viet Nam ha pedido a las grandes industrias alimentarias estatales que compraran todo el arroz comercial a los agricultores y les aseguraran un beneficio de por lo menos el 30 por ciento. El país se propone exportar 3,4 - 3,5 millones de toneladas de arroz en los primeros seis meses de este año y aproximadamente 5 millones de toneladas en todo 2009, un volumen semejante al del año pasado. El 28 de enero de 2009 el gobierno de Bangladesh redujo considerablemente los precios de los fertilizantes para impulsar la producción agrícola y mantener estables los precios de los productos básicos. Los precios al por menor de tres fertilizantes distintos de la urea – el superfosfato triple, el cloruro de potasa y el fosfato diamónico – se redujeron a la mitad.

En algunos países persisten las dificultades del suministro de alimentos y del acceso a los mercados

A pesar de una situación en general satisfactoria en la subregión en materia de suministro de alimentos, las poblaciones vulnerables de algunos países siguen viéndose afectadas por graves dificultades al respecto. La República Democrática Popular de Corea continúa sufriendo inseguridad alimentaria crónica y dependiendo de la ayuda alimentaria exterior. Sin embargo, últimamente el país ha decidido interrumpir la asistencia alimentaria que recibía de los Estados Unidos. Desde mayo de 2008 los Estados Unidos han entregado alrededor de 170 000 toneladas de alimentos (principalmente cereales). Según los informes, las raciones de alimentos se han reducido a la mitad a partir de abril de este año. En el Nepal, el aumento de los precios de los alimentos y la mala cosecha de trigo de 2009 obtenida en zonas localizadas han determinado un aumento significativo en la inseguridad alimentaria de los hogares. La seguridad alimentaria se ve perjudicada también por la crisis financiera que ha reducido los ingresos de las remesas para muchos hogares vulnerables. En Myanmar, se sigue necesitando asistencia agrícola durante la temporada secundaria de 2009 y la próxima temporada monzónica principal para ayudar a los pequeños productores a recuperar su producción y medios de subsistencia en las zonas afectadas por el ciclón Nargis (mayo de 2008). Se ha señalado una situación de escasez de alimentos en el estado de Rakhine, atribuida a las malas campañas agrícolas de 2007 y 2008 y al aumento de los precios de los alimentos y de los insumos agrícolas, así como a las menores oportunidades de empleo para las poblaciones pobres sin tierra. En Sri Lanka, la situación de la seguridad alimentaria del país continúa viéndose afectada por el recrudecimiento del conflicto civil. Según los informes, desde enero de 2009 se cuentan más de 5 000 víctimas civiles y 220 000 personas afectadas por los enfrentamientos entre los Tigres Tamil y las fuerzas del gobierno.

Cercano Oriente

Las últimas lluvias mejoran las perspectivas para las cosechas de cereales de 2009; la producción debería mejorar con respecto a los niveles reducidos por la sequía del año pasado

Las perspectivas para las cosechas de trigo y cebada de invierno de 2009 que se recogerán a partir de mayo-junio han mejorado mucho en la mayor parte de la subregión en comparación con el año pasado, en el que una sequía extrema diezmó los cultivos. Después de unas rachas secas registradas a principios de la campaña se recibieron precipitaciones abundantes durante febrero y marzo que fueron beneficiosas para los cereales de invierno en muchas zonas productoras, particularmente Turquía, la República Árabe de Siria y el Líbano. Las imágenes de satélite también han indicado lluvias buenas en el norte del Iraq, que beneficiaron el despunte temprano del trigo de invierno. En Israel, el peligro que existía al principio de este año de una grave sequía se disipó después de las intensas precipitaciones recibidas al final de febrero y principios de marzo. Análogamente, en Jordania los chaparrones caídos en febrero, particularmente intensos hacia el final del mes, han sido muy favorables tanto para los cultivos como para el ganado.

La mala campaña agrícola del año pasado redujo la producción del trigo de invierno de 2008 en la mayoría de los países de la subregión (véase la Figura 19). La cosecha de trigo en Iraq, estimada en 1,5 millones de toneladas, fue aproximadamente un 36 por ciento menor que en 2007 y la cosecha menor que se haya registrado últimamente. En la República Árabe Siria, la producción total de trigo en 2008 se estima en 2 millones de toneladas, la mitad de la mala cosecha obtenida el año anterior y un volumen situado muy por debajo de los niveles medios.

 

América Latina y el Caribe

 

América Central y el Caribe

En México, la recolección de las cosechas de trigo de invierno de 2009, en su mayor parte de regadío, está por comenzar en los estados nordoccidentales de Sonora y Baja California y en el estado central de Guanajuato. La superficie plantada se estima oficialmente en 700 000 hectáreas y la producción de la temporada invernal, que representa alrededor del 95 por ciento de la producción nacional anual, se prevé en alrededor de 3,4 millones de toneladas. La recolección de las cosechas de cereales secundarios de invierno de 2009 acaba de comenzar en los estados de Sinaloa, Veracruz, Tamaulipas y Chiapas y, pese a algunas pérdidas localizadas debidas a la disminución de la humedad del suelo, se informa que la producción es ligeramente superior a los buenos niveles de 2008 y 2007, debido a algún aumento de la superficie plantada. En Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, la recolección de las cosechas de maíz y fríjol de las temporadas segunda y tercera de 2008 ha terminado a fines de marzo. Pese a diversos programas gubernamentales destinados a apoyar la producción local frente al aumento de los precios internacionales de los alimentos, la producción total de maíz de 2008 de la subregión (excluido México) se estima ahora en alrededor de 3,7 millones de toneladas, aproximadamente 135 000 toneladas menos que la buena cosecha de 2007. El pronóstico actual es inferior al anterior en aproximadamente 200 000 toneladas debido a las pérdidas causadas por las intensas precipitaciones de fin del año pasado que afectaron especialmente a los cultivos de la segunda temporada en el norte de Guatemala, en los departamentos de Cortés, Olancho y Choluteca de Honduras, y en algunas zonas de tierras bajas sobre la costa pacífica de Nicaragua. Por el contrario, se ha registrado una producción récord de las cosechas de maíz, sorgo y arroz de 2008 para El Salvador, donde las precipitaciones han sido abundantes, oportunas y bien distribuidas a lo largo de la temporada, con efectos generales positivos en los rendimientos.

En Haití, la recolección de las cosechas de maíz, frijoles y tubérculos de la campaña secundaria (de invierno) de 2008 ha terminado a fines de marzo en las tierras bajas de regadío y en las montañas húmedas, y la producción se estima en un nivel medio. En total, se señala que la producción de los alimentos básicos principales de 2008 se sitúa en aproximadamente un 10-15 por ciento por debajo del nivel de 2007 como consecuencia de las pérdidas de cosecha causadas por las intensas precipitaciones recibidas durante las campañas de primavera y otoño (que representan conjuntamente entre el 65 y el 75 por ciento de la producción anual). Las pérdidas principales se han registrado en la península meridional y en el valle de Artibonite donde alrededor de 800 000 personas todavía están recibiendo asistencia alimentaria de la comunidad internacional. Los buenos resultados de las cosechas de la campaña de invierno, la disminución de los precios locales e internacionales de los alimentos, unidos con la ejecución, en algunos departamentos, de programas de inversiones intensivas en empleo han determinado una cierta disminución en el número de las personas afectadas de inseguridad alimentaria, desde 3,3 millones al final de la temporada de los huracanes a los actuales 2,8 millones.

En los principales estados productores de Jalisco, Chiapas y Michoacán, en México, y en otros países centroamericanos y caribeños se está preparando la tierra para la siembra de las cosechas de maíz y arroz de la temporada principal de verano/primavera, principalmente de secano de 2009 que se realizará a comienzos de mayo con la llegada de las primeras precipitaciones.

 

Precios

En Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, los precios nominales al por menor del arroz registraron un nivel máximo histórico en septiembre-octubre de 2008, con un retraso de algunos meses en comparación con los niveles máximos alcanzados en el mercado internacional. Desde el comienzo de 2009, los precios nacionales del arroz están dando las primeras señales de disminución, pero todavía siguen siendo alrededor de un 25-30 por ciento más altos que hace un año. Los precios al por mayor del maíz blanco tienen una tendencia estacional más típica, con máximas en julio/agosto durante el período de hambruna antes de la llegada a los mercados de la producción de la temporada principal y niveles mínimos a comienzos del año. Ello se debe fundamentalmente al hecho de que el maíz blanco, que se usa para preparar las tortillas, importante alimento básico, se produce casi totalmente en el lugar y los mercados internacionales influyen marginalmente sobre sus precios. En todos los países, los precios nominales del maíz blanco estuvieron en febrero de 2009 entre un 20 y un 25 por ciento por encima del mismo mes en 2008. Una excepción es El Salvador, donde los precios actuales del maíz han bajado alrededor de un 7 por ciento en un año como consecuencia de la excelente cosecha obtenida últimamente. En Haití, los precios minoristas de los principales alimentos básicos van disminuyendo constantemente con efectos positivos en el acceso de los hogares a los alimentos; el arroz importado pasó del precio máximo de 72 gourdes por kg en agosto de 2008 a 46 gourdes por kg en marzo de 2009, casi el mismo nivel de 16 meses antes.

 

 

América del Sur

La recolección de las cosechas de cereales secundarios de la temporada principal de 2009 ha comenzado a finales de febrero y las estimaciones provisionales indican una producción total de 84,8 millones de toneladas. Este resultado es inferior en alrededor de un 16 por ciento al nivel sin precedentes de 2008, como consecuencia de la reducción de la superficie sembrada (un 6 por ciento menos) y de la sequía prolongada que afectó a los rendimientos en las principales zonas productoras (un 11 por ciento menos).

En la Argentina, la producción de maíz se estima en 13,5 millones de toneladas, un 40 por ciento menos que la excelente producción obtenida en 2008 y 2007, y un 28 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Las precipitaciones escasas e irregulares y las altas temperaturas registradas hasta finales de enero, unidas a los precios relativamente altos de los insumos, han retrasado las operaciones de siembra y en muchos casos han desalentado a los agricultores sobre la posibilidad de realizar sus intenciones de siembra. En lo que respecta a las variedades tempranas, las lluvias registradas durante febrero y marzo fueron algo tardías para determinar un efecto benéfico en los rendimientos, puesto que la mayor parte del daño causado por la falta de humedad del suelo durante las fases cruciales de floración y polinización ya era irreversible. En muchos casos, los agricultores han decidido utilizar sus cultivos para pastoreo. Se prevé que esta situación difícil reduzca los excedentes exportables de la Argentina en la campaña comercial 2009/2010 (marzo/febrero) a sólo 7,5 millones de toneladas, alrededor de un 60 por ciento del volumen medio comercializado en los últimos cinco años.

También se prevé un considerable descenso en la producción de maíz en el Brasil, donde la producción de la primera temporada se estima en 33,7 millones de toneladas, un 15,7 por ciento menos que el nivel sin precedentes de 40 millones de toneladas obtenido en 2008. Las pérdidas mayores en los rendimientos se señalan en los principales estados meridionales de Paraná, Río Grande do Sul, y las zonas centrales y occidentales de Santa Catarina, en los que las precipitaciones mensuales durante noviembre y diciembre han estado un 50 por ciento por debajo de lo normal. Por ejemplo, en el estado de Paraná, que representa casi un cuarto de la producción nacional de maíz, la sequía duró cerca de 40 días y actualmente se prevén rendimientos de sólo 4,7 toneladas por hectárea, muy por debajo del nivel sin precedentes de 2008 de 7,1 toneladas por hectárea. A pesar de los efectos positivos que tuvieron en los rendimientos las condiciones atmosféricas favorables desde enero, con precipitaciones abundantes y temperaturas superiores a la media desde Paraná septentrional hasta Mato Grosso, el pronóstico oficial para la cosecha de maíz de la segunda temporada (zafrinha) plantada recientemente indica una producción de 17,6 millones de toneladas, casi 1,2 millones de toneladas menos que la producción sin precedentes de 2008.

Por el contrario, en el Uruguay, a pesar de los efectos negativos de la sequía en los rendimientos, todavía se prevé una producción sin precedentes de los cereales secundarios de 2009. Este resultado se debe principalmente al notable incremento de la superficie sembrada para los cultivos de maíz y sorgo que, en total, pasó de 120 000 hectáreas en 2008 a 200 000 hectáreas en 2009.

En Chile, la recolección de la cosecha de maíz de 2009 está muy avanzada y se pronostican rendimientos de un nivel inferior a la media debido a una humedad del suelo limitada y a las temperaturas altas que en muchas zonas han dañado al proceso de llenado de los granos. Se prevé provisionalmente una producción de maíz de 1,25 millones de toneladas, un 10 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Las condiciones atmosféricas secas también están disminuyendo la disponibilidad de pastizales en las regiones meridionales con los consiguientes efectos negativos en la producción de carne y leche.

En el Perú, la siembra del trigo amarillo de 2009 está casi completada en el departamento andino de San Martín y en los departamentos costeros septentrionales de La Libertad, Lambayeque, Lima y Piura, mientras que la recolección de la cosecha de maíz blanco de 2009 para el consumo humano ha comenzado recientemente. Se prevé provisionalmente que la superficie total plantada con maíz para 2009 alcanzará las 500 000 hectáreas, muy semejante al nivel satisfactorio de la superficie cultivada en 2007 y 2008.

En Bolivia, la recolección de los cereales de verano de 2009, principalmente de secano, ha comenzado en las principales zonas productoras de los departamentos de Santa Cruz, Cochabamba, Chuquisaca y Tarija. A pesar de un buen desarrollo de la vegetación, observado mediante imágenes satelitales, como consecuencia de las precipitaciones abundantes y bien distribuidas a través de la temporada, la producción de los cultivos alimentarios y comerciales se ha visto afectada por la imposibilidad de los agricultores de realizar sus intenciones de siembra debido a un acceso limitado al diésel durante el período de siembra. Para facilitar las inminentes operaciones de recolección, el Gobierno ha emanado últimamente un decreto que permite a los pequeños agricultores obtener licencias gratuitas para comprar directamente diésel para su propio consumo, con un máximo de 400 litros por persona, hasta finales de agosto.

En Venezuela, la siembra de la importante cosecha de maíz de invierno de 2009 comenzará en mayo con la llegada de las primeras precipitaciones estacionales, y las intenciones de siembra apuntan a un nivel sin precedentes de 880 000 hectáreas (con las variedades tanto blanca como amarilla) que, en condiciones atmosféricas favorables, podrían llevar a una producción sin precedentes de 3 millones de toneladas.

En todos los países australes de América del Sur ha dado comienzo la recolección de la cosecha de arroz de 2009, mientras que en los países andinos se prevé que comenzará entre finales de abril y comienzos de mayo. Se pronostica que la producción total alcanzará un nivel sin precedentes de 24,4 millones de toneladas, un 2 por ciento más que el nivel récord anterior alcanzado en 2008.

 

 

 

América del Norte, Europa y Oceanía

América del Norte

La producción de trigo sufrirá un descenso en los Estados Unidos, pero la producción de maíz podría mantenerse cercana al buen nivel del año anterior

En los Estados Unidos, el Prospective Plantings Report, informe oficial publicado a finales de marzo, estima las plantaciones de trigo de invierno en 17,4 millones de hectáreas, un 7 por ciento menos que el nivel del año anterior, pero un poco más que las estimaciones anteriores. Sin embargo, las perspectivas de los rendimientos son desfavorables en algunas de las principales zonas productoras. En las praderas meridionales la situación de la cosecha empeoró de forma pronunciada durante la primera parte del año, y a principios de marzo se clasificó como mala o muy mala en el 64 por ciento de los cultivos en Texas, y en el 46 y 15 por ciento en Oklahoma y Kansas, respectivamente. En lo que respecta al trigo de primavera (duro y otros), cuya siembra apenas ha comenzado, se prevé que la superficie disminuirá a cerca de 6,4 millones de hectáreas, casi un 7 por ciento menos que el nivel del año anterior. En base a las indicaciones oficiales acerca de la siembra, y suponiendo condiciones atmosféricas normales durante el resto de la campaña, la FAO pronostica actualmente la producción total de trigo de los Estados Unidos en 2009 en 57 millones de toneladas, un 16 por ciento menos que la cosecha del año pasado.

La mayor parte de la siembra del maíz en los Estados Unidos comenzará en abril. De acuerdo al Prospective Plantings Report, se prevé que los agricultores reducirán ulteriormente la superficie de maíz en 2009, aunque sólo un poco, a 34,4 millones de hectáreas, después de los 34,8 millones de hectáreas plantados en 2008. Se trata, con todo, de un nivel que sigue siendo relativamente alto. Además, tal como ocurrió el año pasado, la superficie no sembrada con maíz debería ser la de las tierras más marginales, en las que se prevé que una cosecha de soja, de producción más barata, daría ingresos mejores y sería una opción más segura para los agricultores. En los 10 principales estados productores, donde se logran los rendimientos mayores, se pronostica que la superficie total del maíz aumentará ligeramente en comparación con el año anterior. En base a las indicaciones iniciales sobre la siembra, y suponiendo condiciones atmosféricas normales durante el resto de la campaña, la FAO pronostica la producción total de maíz de los Estados Unidos en 2009 en alrededor de 305 millones de toneladas, prácticamente sin cambios respecto de la cosecha del año anterior, la segunda más alta registrada.

En el Canadá, la siembra de los cultivos de cereales de primavera comenzará en abril. Tras la cosecha especialmente abundante del año anterior, se prevé que este año las siembras disminuyan. Provisionalmente se pronostica que la superficie sembrada con trigo disminuirá de los 10 millones en 2008 a 9,2 millones de hectáreas, ya que los agricultores volverán a cultivar semillas oleaginosas. Suponiendo condiciones atmosféricas normales y rendimientos medios, la producción de trigo se pronostica en 24 millones de toneladas, menos que el volumen excelente de 28,6 millones de toneladas obtenido en 2008 y por debajo de la media de los últimos cinco años.

 

Europa

Se pronostica una disminución de la producción de cereales en 2009, especialmente en el este de la región

Se pronostica que la producción de cereales descenderá en la región con respecto a la buena cosecha del año pasado si bien la producción podría ser superior a la media de los últimos cinco años. Aunque se supone un retorno a los rendimientos normales tras los niveles excelentes del año pasado, la disminución prevista en la producción se debe también a una reducción de la superficie plantada, ante las perspectivas de precios considerablemente más bajos para las cosechas de este año. En esta fase inicial, la producción total de cereales de la región en 2009 se pronostica provisionalmente en 462 millones de toneladas, un 8 por ciento menos que el año anterior.

En la UE, la superficie total de cereales para la cosecha de 2009 debería descender, debido a la siembra de semillas oleaginosas y al aumento de las tierras puestas nuevamente en régimen de detracción voluntaria. Según las estimaciones, la superficie total de trigo disminuirá alrededor de un 3 por ciento con respecto al nivel elevado del año anterior, y dando por supuesto que los rendimientos no alcanzarán los niveles sin precedentes del año pasado, se prevé que la producción de trigo descienda a 140 millones de toneladas aproximadamente, alrededor de un 7 por ciento menos que el nivel excelente del año pasado.

En los países de la CEI europea, en la Federación de Rusia, aunque la superficie cultivada con trigo de invierno se estima ligeramente mayor que la del año pasado, se pronostica que las plantaciones de trigo de primavera disminuirán significativamente, en alrededor de un 3 por ciento, ya que en las decisiones de siembra de los agricultores probablemente influyan los precios más bajos de los cereales y las incertidumbres financieras. En Ucrania, se estima que la superficie cultivada con trigo ha disminuido en alrededor de 500 000 hectáreas con respecto al nivel alto del año pasado y, suponiendo un retorno a niveles medios de productividad, se prevé una fuerte reducción de la producción con respecto a la cosecha abundante del año pasado.

Oceanía

Los primeros indicios apuntan a un aumento de las plantaciones de los principales cultivos de cereales

En Australia, la recolección de la cosecha menor de cereales secundarios de verano (principalmente sorgo) comenzó en marzo, y se prevé una producción satisfactoria. Las precipitaciones superiores a la media del verano beneficiaron el desarrollo de los cultivos, dando lugar a unas buenas perspectivas para los rendimientos. La producción de sorgo se pronostica en aproximadamente 2 millones de toneladas, muy por debajo de la excelente producción del año pasado pero en torno a la media de los últimos cinco años.

Los primeros indicios sobre los cultivos de cereales de invierno de 2009, que se sembrarán a partir de abril, apuntan a un posible incremento de las siembras. Aunque los precios internacionales de los cereales han descendido de forma pronunciada en comparación con un año atrás, para los productores australianos los precios en su moneda local son relativamente atractivos debido al debilitamiento del dólar australiano en comparación con el dólar estadounidense. Sin embargo, aunque las intenciones de los productores puedan apuntar a plantaciones extensas, el resultado final depende de las precipitaciones que se reciban entre abril y julio en las principales zonas productoras. Las lluvias buenas recibidas en el verano en zonas agrícolas clave como el norte de Nueva Gales del Sur y Queensland constituyen un buen presagio para las siembras de cereales, pero el sudeste sigue estando muy seco y necesitando absolutamente lluvias buenas para poder empezar a sembrar. A esta altura, en base a las indicaciones actuales sobre las intenciones de siembra de los productores y suponiendo un tiempo normal durante la campaña, se pronostica que en 2009 la producción de trigo del país aumentará en un 3 por ciento con respecto al año pasado, a alrededor de 22 millones de toneladas, volumen cercano al de la cosecha sin precedentes de 2003. También se pronostica una cosecha mayor de cebada.