Resultados de un taller sobre recursos forestales fuera del bosque
El taller sobre recursos forestales fuera del bosque -la primera reunión internacional que se celebra sobre este tema, que hasta la fecha ha sido muy descuidado en la política y planificación nacionales- tuvo lugar en Arusha (República Unida de Tanzanía) del 12 al 16 de julio de 1999.
FAO/17693/A.CONTI |
En la República Unida de Tanzanía, que como otros países del África oriental tiene cuantiosos recursos arbóreos fuera del bosque, se ha realizado una parte de la labor más importante sobre agrosilvicultura y sobre la dinámica de la relación entre la población y los recursos arbóreos.
En el taller de Arusha participaron 62 científicos y personas interesadas de 25 países de todo el mundo. Se organizó con el patrocinio de la Universidad de Agricultura Sokoine, de la República Unida de Tanzanía, el Centro Internacional de Investigación en Agroforestería (ICRAF), la Academia Africana de Ciencias, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO) y la Fundación Científica Internacional (FCI). También estuvieron representados la FAO y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM).
Los participantes en el taller organizaron las deliberaciones en torno a cuatro temas principales:
- inventario y vigilancia de los recursos;
- biodiversidad y ecología;
- manejo de los recursos, productos y servicios;
- aspectos socioeconómicos y arreglos institucionales.
Para enriquecer las deliberaciones, los participantes estudiaron el sistema de huertos con plantación de árboles de las laderas del monte Kilimanjaro. Este sistema agroforestal de varios niveles, muy complejo y maduro, es un ejemplo de un sistema de utilización de la tierra sostenible desde el punto de vista económico y ecológico. Los participantes en el taller formularon observaciones y recomendaciones sobre cada uno de los temas mencionados anteriormente. De las exposiciones temáticas se sintetizaron las siguientes observaciones y recomendaciones principales:
Observaciones
- No se está haciendo acopio y no se incluye en los inventarios nacionales de recursos forestales información sobre los recursos arbóreos fuera del bosque a pesar de que este recurso contribuye de forma importante al bienestar de las comunidades.
- Los mencionados recursos aparecen en varios sistemas de utilización de la tierra, como la agricultura, los pastizales y las reservas de vida silvestre, en los que con frecuencia se ha subestimado su importancia. Debido a ello, no existe en casi ningún país una política sobre su manejo y/o inclusión en la economía nacional.
- No se han documentado de forma sistemática las funciones y servicios de los recursos arbóreos fuera del bosque.
- No se han analizado ni documentado suficientemente (salvo en las publicaciones en materia de agrosilvicultura y actividad forestal comunitaria) los problemas que comportan su desarrollo y manejo. Es necesario conocer mejor los objetivos del establecimiento y/o mantenimiento de estos recursos, así como el tipo de bienes y servicios que ofrecen.
- Existe un potencial ingente para aumentar el bienestar de las comunidades pobres mediante el desarrollo y el manejo mejorados de los recursos arbóreos fuera del bosque.
- Los proyectos sobre estos recursos tienen un carácter aislado, y en ellos la cooperación y el intercambio de información son muy limitados.
- Los recursos arbóreos fuera del bosque son complementarios de los recursos forestales, tanto por lo que respecta a sus productos como a sus funciones.
Recomendaciones
- Se debería establecer un foro para el intercambio de información sobre los recursos arbóreos fuera del bosque. Se pidió al ICRAF, la FAO y la IUFRO que tomaran medidas a este respecto y crearan una base de datos sobre organizaciones y proyectos centrados en estos recursos. También se debería establecer un sitio Web.
- Se debería sintetizar y difundir ampliamente la información disponible. Se instó a la Universidad de Agricultura Sokoine y a otras universidades a que llevaran a cabo esta tarea mediante la labor de investigación realizada en tesis doctorales.
- Es necesario establecer definiciones precisas de los recursos arbóreos fuera del bosque, así como métodos para medir y controlar los recursos. Se exhortó a la FAO y a la IUFRO a que llevaran adelante esta iniciativa.
- Las instituciones de investigación deben estudiar arreglos normativos e institucionales para salvaguardar los beneficios derivados de los recursos arbóreos fuera del bosque, y hacer las recomendaciones apropiadas a los gobiernos interesados. Es necesario establecer en los ministerios relacionados con el uso de la tierra centros de coordinación del manejo de dichos recursos.
- Se debería establecer un mecanismo para fomentar la toma de conciencia sobre la importancia y el valor de los recursos arbóreos fuera del bosque para todas las partes interesadas. Se podrían adoptar estrategias como la creación de grupos de debate en Internet, la formación de una red de interesados y la producción de un boletín y de otras publicaciones.
- Debería promoverse un entorno que permitiera que el régimen de tenencia y las prácticas de manejo tradicionales dejaran paso a una explotación científica de los mencionados recursos.
- Se necesita disponer de manuales sobre el inventario, vigilancia y manejo de los recursos arbóreos fuera del bosque. La FAO y otras instituciones pueden desarrollar una labor importante en esta esfera.
Seguimiento
Se publicarán las actas editadas del taller. Se creó un grupo de trabajo provisional de 21 científicos para profundizar los trabajos. Este equipo constituirá el primer grupo de trabajo de la IUFRO sobre los recursos arbóreos fuera del bosque y estará representado en el Congreso Mundial de la IUFRO que tendrá lugar en Malasia en el año 2000.
A.B. Temu
Jefe de fortalecimiento institucional y de creación de capacidad
Centro Internacional de Investigación en Agroforestería
Nairobi, Kenya
fao/18835/I.BALDERI |
La reunión de Teherán se centra en las necesidades de los países en desarrollo con una cubierta forestal exigua
El creciente interés internacional sobre la situación de los bosques del mundo se ha centrado principalmente en los países que tienen una importante cubierta forestal, y se ha concedido poca atención a los intereses de los países con una cubierta forestal exigua, la mayor parte de los cuales son países en desarrollo. Como un primer paso para remediar esta omisión se celebró en Teherán (República Islámica del Irán) la reunión de expertos sobre necesidades y requisitos especiales de los países en desarrollo con una cubierta forestal exigua y tipos singulares de bosques, del 4 al 8 de octubre de 1999. Esta reunión fue la primera en su género en países en desarrollo.
La reunión fue patrocinada por el Gobierno de la República Islámica del Irán, con el apoyo de otros gobiernos y el respaldo técnico y financiero de organizaciones internacionales como la FAO y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). La reunión, que fue incluida en la iniciativa del Irán en apoyo de la labor del Foro intergubernamental especial y de composición abierta sobre los bosques (FIB), contó con la asistencia de 77 participantes en representación de 40 países y seis organizaciones internacionales. Su objetivo era señalar a la atención los problemas relacionados con la existencia de una cubierta forestal exigua y tipos singulares de bosques, así como las necesidades de los países en los que se dan esas condiciones. Los objetivos a largo plazo eran los siguientes:
- promover programas forestales nacionales en todos los países con este tipo de cubierta forestal y promover acuerdos regionales y subregionales para el intercambio de experiencias y el apoyo a los procesos nacionales, en colaboración con la comunidad internacional de donantes;
- establecer vinculaciones entre las actuaciones de esos países y los objetivos de los tres convenios ambientales de la CNUMAD de alcance mundial (la Convención de Lucha contra la Desertificación, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y la Convención Marco sobre el Cambio Climático) con el fin de llamar la atención de la comunidad internacional sobre las necesidades de los países interesados;
- identificar esferas comunes de actuación conjunta a través de redes, proyectos regionales y otras iniciativas en cooperación, y promover asociaciones entre países y con organizaciones internacionales y donantes.
El resultado principal de la reunión fue la Declaración de Teherán, que propuso a los países con una cubierta forestal exigua el establecimiento del Proceso de Teherán, sobre la base de las recomendaciones de la reunión. Este proceso ofrecerá un foro para abordar las necesidades específicas de esos países y un lugar en el que puedan plantear sus preocupaciones. Deberá orientarse a la acción y ofrecer apoyo y orientación normativos. Deberá servir también para el acopio, análisis y difusión de datos; el intercambio de información y experiencias; la creación de capacidad; la elaboración de criterios e indicadores de la ordenación forestal sostenible; la definición del concepto de cubierta forestal exigua para determinar con mayor precisión cuáles son los países que han de ser incluidos en esa categoría; y otros aspectos de interés mutuo. La reunión también formuló recomendaciones sobre las siguientes cuestiones:
-Política, planificación e instituciones. Es necesario elaborar nuevas políticas en relación con los productos forestales no madereros (PFNM); la mayor orientación hacia el mercado de los productos forestales obtenidos localmente; los servicios, incluso el suministro de agua salubre, la conservación del suelo y el agua (especialmente en los ecosistemas frágiles) y la lucha contra la erosión y la desertificación; la seguridad alimentaria, incluido el suministro de leña y forraje; la retención del carbono; y la conservación de la diversidad biológica.
- Procesos participativos. La adopción de métodos participativos debe generar ingresos y empleo, debe basarse en las culturas existentes e incluir a las comunidades locales e indígenas, con especial consideración a los pueblos nómadas y trashumantes, los habitantes de los bosques y la función de la mujer y de los jóvenes. Es preciso utilizar plenamente los conocimientos tradicionales sobre los bosques. Los países con una cubierta forestal exigua deben apoyar y facilitar una intervención más activa de las organizaciones no gubernamentales.
- Financiación e inversión. Los gobiernos deben crear un entorno favorable para la inversión por parte de individuos, comunidades y el sector privado, con medidas tales como un régimen de tenencia segura de la tierra, la descentralización del poder de decisión, el ofrecimiento de incentivos y la supresión de los desincentivos, y disposiciones para el reparto de los costos y los beneficios. Con la ayuda de asociados interesados, los países con una cubierta forestal exigua deben analizar las oportunidades existentes para aumentar la inversión en el sector forestal, incluso las oportunidades derivadas de acuerdos y convenios internacionales multilaterales sobre el medio ambiente.
- Cuestiones técnicas. Los gobiernos de los países con una cubierta forestal exigua deben apoyar el desarrollo y transferencia de tecnologías sostenibles para la ordenación y rehabilitación de bosques naturales, espacios arbóreos y pastizales; el fomento de la importancia de los PFNM en la economía rural; el apoyo a las pequeñas industrias basadas en productos madereros y no madereros; la conservación de ecosistemas naturales y tipos singulares de bosques; el establecimiento de plantaciones y la plantación de árboles; y los programas de energías renovables basadas en la madera.
- Acuerdos y mecanismos internacionales futuros. Las necesidades y requisitos especiales de los países con una cubierta forestal exigua deberán recibir la atención necesaria en todos los acuerdos y mecanismos sobre los bosques, incluida la asistencia técnica y financiera necesaria para formular y aplicar programas forestales nacionales.
El informe de la reunión y sus recomendaciones se presentarán en una sesión complementaria de la reunión final del FIB (FIB4) que tendrá lugar en febrero del 2000. La finalidad es que sean objeto de atención por el Foro, cuyo mandato global comprende el estudio de las necesidades de los países en desarrollo con una cubierta forestal exigua. En efecto, la atención del FIB a los "acuerdos y mecanismos internacionales para fomentar la ordenación, conservación y desarrollo sostenible de los bosques de todo tipo" no será completa si no se concede la consideración debida a las necesidades y requisitos especiales de los países en cuestión.