VIII. Resultados, seguimiento y aplicación de las recomendaciones de la DCI
A. Observaciones de carácter general
C. Análisis general de los resultados y el seguimiento de las recomendaciones de la DCI
72. El seguimiento ea un concepto activo y un proceso continuo que comienza inmediatamente después de que se envía un informe de la DCI para que se adopten las medidas correspondientes (el llamado "informe de pastas azules"). De hecho, eso constituye la fase mas importante y el punto de partida para comprobar la calidad y los posibles efectos de las recomendaciones de la DCI.
73. La Asamblea General ha tenido siempre conciencia de este hecho y se ha preocupado de destacar la necesidad de que las secretarías de las organizaciones participantes y la DCI elaboren procedimientos prácticos para comprobar la observancia de los procedimientos de presentación de informes y de seguimiento.
74. En su resolución 32/199, de 21 de diciembre de 1977, la Asamblea General decidió que en los informes del Secretario General en aplicación de lee recomendaciones de la DCI se suministrara información concisa solo respecto de los informes que la Dependencia hubiera indicado que eran de interés para la Asamblea, una de sus Comisiones Principales o sus demás órganos subsidiarios. A partir de entonces, la Dependencia ha proporcionado al Secretario General ese tipo de información.
75. En su decisión 46/446, de 20 de diciembre de 1991, la Asamblea General pidió a los jefes ejecutivos de las organizaciones participantes y al CAC que observaran estrictamente los plazos establecidos para formular comentarios sobre los informes de la DCI. En su resolución 44/184, de 19 de diciembre de 1989, la Asamblea invitó a la DCI a que siguiera haciendo todo lo posible por publicar sus informes con bastante antelación a las reuniones de los órganos rectores de las organizaciones participantes, a fin de lograr que las observaciones del Secretario General y del CAC, cuando procediera, se publicaran con arreglo a las normas destinadas a lograr que la documentación fuera recibida a tiempo.
76. En su resolución 48/221, la Asamblea General exhorto a la DCI a que siguiera de cerca la aplicación de sus recomendaciones e incluyera sistemáticamente la información pertinente en sus informes anuales.
77. Así, pues, se puede ver que la presentación a tiempo de los informes de la DCI y las prescritas observaciones del Secretario General y de los jefes ejecutivos de otras organizaciones participantes y del CAC, cuando sea del caso, es una tarea común a la DCI y a los otros órganos mencionados.
78. La DCI se ha comprometido a cumplir esos objetivos, pero en ocasiones es difícil para la Dependencia atenerse a los calendarios internos para la realización de sus informes. Una de las principales dificultades que se le plantean a la Dependencia para acelerar la preparación de sus informes es la de obtener de las diversas secretarias la información necesaria y en el momento oportuno.
79. En su 24° período de sesiones, el CPC pidió que se le autorizara a examinar los informes pertinentes de la DCI aunque no se contara con las observaciones del Secretario General por escrito; observaciones que podían presentarse al Comité verbalmente5. En su resolución 39/238, de 18 de diciembre de 1984, la Asamblea General aprobó las conclusiones y otras recomendaciones del CPC. Tal vez la Asamblea General y otros órganos legislativos de las organizaciones participantes quieran decidir que se proceda de la misma manera.
80. En un nuevo intento de responder positiva y eficazmente a la invitación de la Asamblea General, la Dependencia está adoptando medidas concretas para lograr un seguimiento puntual y sistemático de sus informes y recomendaciones desde un primer momento hasta la plena aplicación de sus recomendaciones tal como hayan sedo aprobadas por los órganos legislativos de las organizaciones participantes. Entre otras medidas, la Dependencia tiene intención de pedir a los jefes ejecutivos interesados que le proporcionen un calendario para la aplicación de las recomendaciones de la DCI, una vez que los órganos legislativos interesados les hayan dado su aprobación. Tal vez la Asamblea General y otros órganos legislativos de las organizaciones participantes quieran apoyar a la DCI a este respecto.
81. De conformidad con la practica actual, que se describe en el párrafo 94 infra, el Secretario General publicó un informe con fecha 4 de noviembre de 1994 (A/49/632) relativo a la aplicación de las recomendaciones contenidas en cuatro informes de la DCI: Instituto Africano de Desarrollo Económico y Planificación; Evaluación de la dimensión ambiental de 108 proyectos financiados por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y otros organismos de las Naciones Unidas Informe final sobre la aplicación de la resolución 32/197 relativa a la reestructuración de los sectores económico y social del sistema de las Naciones Unidas; y La superposición de categorías.
82. En su informe de 1994, la Dependencia manifestó que tenla intención de facilitar en una adición al documento sus observaciones sobre los informes del Secretario General, pero teniendo en cuenta que aquel informe se va a examinar junto con el presente, la Dependencia ha decidido incluir sus observaciones en éste.
83. Como los comentarios del Secretario General sobre los cuatro informes mencionados proporcionan una reseña detallada de lo que están haciendo las Naciones Unidas y otras organizaciones participantes interesadas, en especial el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, en lo que respecta a la aplicación de las recomendaciones de la DCI aprobadas por la Asamblea General, y como la Dependencia está satisfecha con la mencionada reseña, ha decidido que en esta ocasión no va a hacer un análisis detallado de cada comentario como ha sedo la práctica hasta ahora.
84. Durante los cuatro años últimos, la Dependencia ha participado de manera particular en un proceso y un dialogo encaminados a mejorar la sustancia y los resultados de su labor. Lo que se pretende es garantizar la utilización de sus limitados recursos para elaborar informes que hagan la máxima contribución posible al mejoramiento de los programas y el funcionamiento del sistema de las Naciones Unidas Ese proceso en marcha ha quedado reflejado en cada uno de los informes anuales más recientes de la DCI:
a) En el informe de 19911 se resumían las medidas adoptadas para mejorar la preparación del programa de trabajo de la DCI, en particular mediante una consulta mea activa con las organizaciones participantes y la elaboración de una estrategia de programación mas sistemática y a más largo plazo. También respondía a la petición de la Asamblea General de que la DCI proporcionara en sus informes anuales observaciones mea detalladas sobre la aplicación de sus recomendaciones por las Naciones Unidas y otras organizaciones participantes;
b) En el informe de 19926 se analizaban los tipos de efectos, considerablemente diferentes entre se, de los informes de la DCI:
i) el efecto de los informes de la DCI en el curso de un decenio, o más, en esferas como la planificación y presupuestación de programas, la cooperación para el desarrollo, los servicios de conferencias, la evaluación y cuestiones relativas al personal;
ii) la adopción de medidas importantes por las organizaciones como respuesta relativamente rápida a algunas recomendaciones de la DCI, en particular en las esferas de la evaluación, la gestión, la presupuestación y la administración, a las que la Asamblea General habla pedido que la Dependencia dedicara más atención;
iii) Los efectos diferidos, en casos en que las recomendaciones importantes de la DCI resultaron a la larga ser validas, pero sólo después de que las organizaciones, lentamente, adoptaran las medidas correctoras necesarias;
iv) la reducción de gastos resultante de las recomendaciones de la DCI, y un examen que la Dependencia habla iniciado para realizar un análisis cuantitativo de los resultados recientes;
c) En el informe de 19932 se examinaba la adopción a plazo más largo de una nueva estructura del programa de trabajo de la DCI, dividida en cuatro esferas prioritarias: administración y gestión; actividades operacionales para el desarrollo; operaciones de mantenimiento de la paz y cuestiones conexas, y asistencia humanitaria. También se trataba el análisis de las economías que entrañaban los informes de la DCI en el periodo 1985-1992, y, en cumplimiento de lo pedido por la Asamblea General, las opiniones y propuestas de la Dependencia para mejorar su productividad y resultados;
d) En el informe de 19944 se examinaban las actividades en curso de la DCI para afinar el enfoque de sus programas de trabado presente y futuros respecto de las cuestiones prioritarias señalada por los órganos legislativos y las secretarías, y el catado en que se encontraba la aplicación de las medidas adoptadas dentro de la DCI para mejorar sus procedimientos y métodos de trabajo y la calidad de sus informes.
85. Hace varios años, se adoptó la practica de que anualmente la DCI señalara al Secretario General cuatro de los informes que hubiera publicado en los tres o cuatro años anteriores para someterlos a seguimiento, obtener del Secretario General Comentarios sucintos sobre las medidas complementarias adoptadas a propósito de los informes y recomendaciones, e incluir en su informe anual breves observaciones al respecto.
86. Sin embargo, el seguimiento sigue siendo insatisfactorio hasta ahora. La falta de criterios objetivos para la selección ha hecho que la práctica no sea operacional y resulte restrictiva. Pasa por alto toda la gama de interacciones de a) las recomendaciones que aplican rápidamente, b) aquellas respecto de las cuales se toman decisiones importantes, pero sólo después de haber transcurrido un decenio, o más, y el los informes de la DCI que hacen un seguimiento progresivo de las medidas correctoras necesarias en una esfera importante de gestión o de programación mediante una serie de estudios sucesivos. Por todo ello, la Dependencia ha decidido renunciar a esa práctica, ya que ea necesario someter a seguimiento todas las recomendaciones de la DCI aprobadas por la Asamblea General.
87. La Dependencia tiene intención de aprovechar la experiencia obtenida del seguimiento de los informes En lo sucesivo, cada informe anual de la DCI proporcionará a la Asamblea General y a todas las organizaciones participantes un análisis complementario mea amplio, coherente y actualizado de los resultados que han logrado y están logrando los informes de la Dependencia. Ésta, además, establecerá una relación entre las medidas relativas a los informes recientes y en curso y las orientaciones y temas prioritarios que se estén configurando para futuros programas de trabado de la DCI. De esta forma, las organizaciones catarán en mejor actuación para comprender las actividades de la Dependencia y contribuir con ideas y orientaciones a fin de que la labor de la DCI se enfoque hacia las preocupaciones prioritarias de los Estados Miembros.
88. La Dependencia arbitrara otras medidas para mejorar el proceso de examen y aplicación de sus diferentes informes por las organizaciones participantes en todo el sistema de las Naciones Unidas. Una de esas medidas ea incluir en los informes anuales de la DCI información concreta sobre demoras en la presentación de comentarios sobre los diferentes informes de la Dependencia. El informe anual de 1991 fue el último que incluyó un cuadro de las demoras en la preparación de las observaciones de los organismos. En lo sucesivo, esos datos se actualizaran en cada informe anual hasta que la situación sea satisfactoria.
89. El nuevo capítulo sobre resultados y seguimiento, que por vez primera aparece en el presente informe, se incluirá anualmente con un desglose por categorías principales de la labor de la DCI. Actualmente, esas categorías son tres, como se expone seguidamente.
90. La labor de la DCI en esta esfera, en el curso de sus dos primeros decenios de existencia, se concentro principalmente en la programación, la presupuestación y, ulteriormente, en la evaluación. La Dependencia examino también esferas como las cuestiones de personal, los servicios de conferencias, el control de la documentación y otros sistemas y procesos administrativos que los Estados Miembros y las organizaciones designaron como temas prioritarios.
91. La concentración de la DCI en cuestiones de programación, presupuestación y evaluación tuvo su mayor intensidad en el decenio de 1970 y principios del de 1980. Posteriormente, a medida que esas cuestiones se estructuraban en todo el sistema de las Naciones Unidas fue disminuyendo la labor que la DCI las dedicaba. En la segunda parte de su informe anual de 19911, la Dependencia trato con alerto detalle la culminación y los resultados de su serie de mea de 20 informes sobre metodología de la evaluación, establecimiento de sistemas de evaluación interna y programas de evaluación específicos emprendidos durante el período 1976-1991. Los Inspectores manifestaron que, si bien proseguirían la labor de evaluación según se las solicitaba, en el futuro responderían más a las resoluciones de la Asamblea General que pedían exámenes mea profundos de problemas relativos al sistema de gestión. Como resultado de ello, la labor de la DCI se ha concentrado en las tres esferas que se indican seguidamente, aunque también ha proseguido la labor en otras esferas:
a) Rendición de cuentas, mejora de la gestión y supervisión;
b) Informática;
c) Gestión de los recursos humanos.
92. Durante el periodo 1985-1990, varios informes de la DCI iniciaron la transición hacia una mayor insistencia en la supervisión y la mejora de la qestión y la rendición de cuentas en el sistema de las Naciones Unidas. En un informe de 1985 sobre la situación de la evaluación interna en las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas. (véase A/41/201), la DCI recomendó sobre todo que las organizaciones elaboraran un sistema integrado y continuo de información sobre resultados y desarrollo de la qestión que proporcionara a los gestores y a los órganos legislativos información sucinta y actualizada sobre los resultados de los programas. Un informe de 1989 titulado "La presupuestación en las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas" (véase A/45/130) proporciono un análisis y cuadros exhaustivos de las prácticas en materia de presupuestación. En un informe de 1990 titulado "Recursos extrapresupuestarios de las Naciones Unidas: transparencia en la presentación, la gestión y la información proporcionada al respecto" (véase A/45/797) se examinó la necesidad de transparencia en la gestión y la presentación de informes en esa esfera. La Secretaria nunca llego a proporcionar a la Asamblea General sus comentarios sobre el informe, pero, no obstante, se han introducido importantes reformas, tal como habla recomendado la DCI en su informe, en la presentación de los recursos extrapresupuestarios en las consecuencias para el presupuesto por programas y la creación de funciones de auditoria independiente.
93. De forma mas directa, sin embargo, la Quinta Comisión de la Asamblea General expreso su profunda insatisfacción en 1985 ante la casi total falta de información sobre el funcionamiento de la Secretarla. Un informe de la DCI de 1988, titulado "Informes sobre la ejecución y los resultados de los programas de las Naciones Unidas: supervisión, evaluación e información sobre la gestión" (véase A/43/124) recomendaba la adopción de medidas decisivas para corregir las gravísimas fallas de los existentes informes de la Secretaria sobre supervisión y evaluación, y para iniciar la presentación de informes periódicos y analíticos de los resultados y calidad de los programas a los órganos rectores.
94. La Asamblea General se mostró de acuerdo con la DCI y subrayo la importancia de medir los resultados comparándolos con los objetivos fijados. Sin embargo, en 1989, el Secretario General señaló, en esencia, que los sistemas de supervisión y evaluación existentes eran demasiado débiles para proporcionar informes adecuados sobre los resultados de los programas. En 1991 la Asamblea General pidió a la CCAAP y al CPC que volvieran a examinar el informe de la DCI. Ambos se sumaron a la Dependencia en criticar la falta de mejoras en la presentación de informes analíticos e instaron a que se procediera a un "cambio de cultura" en el seno de la Secretaria. No obstante, el Secretario General en un informe de 1991 no propuso cambios importantes. De hecho, subrayó que la presentación de informes sobre la calidad de los programas seguiría catando fuera del ámbito de la supervisión de los resultados de los programas a cargo de la Secretaria.
95. En 1992, el Secretario General reconoció por fin que la evaluación tenla una naturaleza un tanto enfermiza. El CPC también pidió que se hicieran mea análisis de ejecución, en lugar de informes de supervisión que se limitaban a enumerar productos, y que se reforzase la rendición de cuentas individual en todos los programas de las Naciones Unidas. Todas esas cuestiones fueron seguidas por peticiones del CPC y de la Asamblea General en diciembre de 1993 de que se estableciera en la Secretaria un nuevo sistema de obligaciones y rendición de cuentas a más tardar el le de enero de 1995, aspecto que también abordó la DCI, según se expone más adelante.
96. Un informe de la DCI, en dos partes, sobre la cooperación entre el sistema de las Naciones Unidas y las instituciones financieras internacionales7 se concentró en los problemas de eficiencia e innovación que planteaba el estrechamiento de la cooperación operacional con esas instituciones. Los Inspectores llegaron a la conclusión de que esas organizaciones encontrarán sin duda interlocutores, incluso en la esfera altamente competitiva del desarrollo internacional, si proponen programas de alta calidad y pueden ejecutarlos con prontitud y eficiencia. La DCI identificó diez factores clave para el éxito, como son un enfoque estratégico, la identificación o creación de una esfera especializada propia y el control de la calidad. Los Inspectores exhortaron a las organizaciones a que elaboraran programas. mucho mea creativos, con mayor capacidad de respuesta y orientados a la acción, y a que informaran mucho mejor de los resultados a sus órganos legislativos. En su respuesta, las organizaciones reconocieron esos puntos, pero aseguraron que la DCI no había recogido cabalmente las medidas que hablan adoptado recientemente (omitiendo el hecho de que no formularon sus observaciones hasta transcurridos 16 meses desde la publicación del informe de la DCI). En mayo de 1993, el CPC elogio el informe de la DCI y su insistencia en señalar a las organizaciones del sistema la necesidad de obtener resultados de alta calidad.
97. También en 1993, para dar respuesta a todas las preocupaciones mencionadas, la DCI inició un amplio examen de la rendición de cuentas, la mejora de la gestión y el proceso de supervisión en todo el sistema de las Naciones Unidas. Como parte de ese proceso, los Inspectores publicaron un informe provisional sobre la rendición de cuentas y la supervisión en la Secretaria de las Naciones Unidas (véase A/48/420), en el que se señalaron graves defectos en las pequeñas dependencias de supervisión interna y también en otros sistemas de rendición de cuentas y supervisión de la Secretaria. Los Inspectores recomendaron la creación de una única oficina consolidada de rendición de cuentas, cosa que el Secretario General llevó a la practica en agosto de 1993 (en 1994, la Asamblea General decidió que aquella dependencia provisional se convirtiera en la Oficina de Servicios de Supervisión Interna, que adoptó la mayoría de las modalidades que habla propuesto la DCI para la nueva oficina). Por otra parte, la Asamblea General, en su resolución 48/218, de 23 de diciembre de 1993, relativa al mejoramiento de la gestión, lamentó que el informe del Secretario General sobre el sistema de obligaciones y rendición de cuentas no hubiera dado una respuesta adecuada, tomó nota con reconocimiento del informe de la DCI y pidió el establecimiento de "un sistema transparente y eficaz de obligaciones y rendición de cuentas" en las Naciones Unidas. a más tardar el 1° de enero de 1995, según habla recomendado el CPC.
98. En 1995, la DCI presentó su primer informe amplio al respecto, en dos partes, con el titulo de "Rendición de cuentas, mejora de la gestión y supervisión en el sistema de las Naciones Unidas. Parte I: Examen general y análisis; Parte II: Cuadros comparativos" (véase A/50/503 y Add.1). La Parte II del informe contiene cuadros pormenorizados en los que se resumen las medidas y reformas que adoptaron recientemente 39 organizaciones en 13 esferas importantes. En la Parte I se analizan las pautas, problemas y acontecimientos en las esferas de gestión importantes del sistema que se indican seguidamente:
- dependencias de supervisión interna;
- sistemas de gestión (controles internos e informática);
- gestión de los recursos humanos (perfeccionamiento y capacitación del personal directivo, programas de mejora de la gestión);
- planificación estratégica y gestión de la actuación profesional: la gestión integrada del cambio;
- actividades interinatitucionales;
- órganos de supervisión externa del sistema; y
- órganos rectores de supervisión: actividades de supervisión de los órganos rectores, presentación de informes y examen externo.
99. La Dependencia considera que el informe ea no sólo un amplio "estudio de referencia inicial. de las actividades presentes y los planes de las organizaciones en todo el sistema para su utilización por las secretarías y los órganos rectores, seno también una importante aportación a la labor futura de la DCI, como en las esferas fundamentales de la informática y la gestión de los recursos humanos que se examinan mea adelante.
100. Por ultimo, la DCI está poniendo a punto un informe para la Asamblea General en su quincuagésimo periodo de sesiones sobre los progresos realizados en la instalación de los nuevos sistemas de gestión en las Naciones Unidas. En el cuadragésimo noveno periodo de sesiones de la Asamblea General, la Secretaria aportó dos informes en los que se esbozaban los nuevos sistemas y las reformas proyectados: el informe de 1995 hará un seguimiento de los logros y defectos observados en la instalación de esos nuevos componentes del sistema así como de los problemas que plantea la exacta determinación de quiénes son los "gestores de las Naciones Unidas. al reducir el tamaño de las organizaciones del sistema y la permanente necesidad de establecer métodos mucho mejores de informar a la Asamblea General sobre la ejecución y los resultados de los programas, que la DCI ya habla planteado en su informe de 1988 y que todavía dieta mucho de haberse logrado.
101. También se podrían considerar instrumentos de gestión importantes para las secretarías interesadas otros recientes informes y notas conexos de la DCI, a saber, la nota sobre operaciones de transporte del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (cuestiones de programación y gestión)8; el informe sobre la gestión de edificios en el sistema de las Naciones Unidas (véase A/49/560); y el informe titulado "Análisis de los ahorros de gastos resultantes de informes y notas de la DCI, 1985-1992" (véase A/48/606), ya tratado mea arriba (párr. 40).
102. La DCI tiene en curso investigaciones sobre los servicios comunes de las Naciones Unidas. en Nueva York y sobre las relaciones entre la administración y el sindicato del personal en el sistema de las Naciones Unidas. y ha incluido en BU programa de trabajo para 1995-1996 la inspección de los servicios comunes en Ginebra y la investigación de las medidas para racionalizar las actividades de las Naciones Unidas y la subcontratación de servicios en el sistema de las Naciones Unidas. Todos esos estudios deben considerarse como un esfuerzo encaminado a proporcionar un seguimiento integrado y coordinado en la esfera de la administración y la gestión.
103. La DCI incluyó en su programa de trabajo para 1995 la inspección del sistema de control del acceso a las Naciones Unidas sistema de acceso por tarjeta). No obstante, al saber que la Oficina de Servicios de Supervisión Interna cataba realizando una investigación sobre el mismo tema, la Dependencia decidió esperar a disponer de la información pertinente. La Oficina prometió poner a disposición de la Dependencia el resultado de la investigación, pero no se ha recibido hasta ahora.
104. Un informe emitido por la DCI en 1985, titulado "Lea nuevas aplicaciones de las computadoras en las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas en Ginebra: cuestiones de gestión" (véase A/40/410), destacaba en especial la urgente necesidad de desarrollar y explotar las posibilidades que ofrecían los sistemas de computadoras. El informe de l995 de la DCI a nivel de todo el sistema señaló la informática como una novedad fundamental, junto con la gestión de los recursos humanos, de gran trascendencia para el sistema de las Naciones Unidas. En su programa de trabajo para 1995-1996 la DCI ha previsto una investigación sobre la aplicación de la informática en el sistema de las Naciones Unidas. Este nuevo estudio a gran escala no sólo examinara los elementos clave de la utilización de la informática en todo el sistema de las Naciones Unidas, seno que también determinara muchos aspectos importantes, sustantivos y de gestión, del empleo eficaz de esos nuevos y poderosos instrumentos y sistemas, analizará sus posibles ventajas e inconvenientes y propondrá otras posibilidades que cabria adoptar a nivel de todo el sistema para su utilización común.
105. Los informes de la DCI titulados "Problemas de almacenaje y sus costos en las organizaciones de las Naciones Unidas (véase A/41/806 y Corr.1 y A/42/724 y Corr.1) y, en especial, "Del proyecto de ensayo de discos ópticos en la Oficina de las Naciones Unidas. en Ginebra a un sistema de discos ópticos para las Naciones Unidas (véase A/44/684) abordaron la cuestión de las grandes aplicaciones y las economías que podrían desprenderse de ello y que ahora afloran en el sistema pese a la lentitud en la ejecución de los planea. La Dependencia estima que la Secretaria de las Naciones Unidas deberla acelerar la aplicación de ese nuevo sistema informático, y así sustituir sistemáticamente otros servicios mea costosos, como el facsímil.
106. En 1992 la DCI emitió un informe titulado "Hacia una red de bibliotecas integradas del sistema de las Naciones Unidas. (véase A/47/669).
107. Un informe de 1995, titulado "Examen de las telecomunicaciones y las tecnologías de información conexas en el sistema de las Naciones Unidas"9, que era continuación de los informes de 1972 y 1982, ha sido una contribución importante al actual debate sobre esa trascendental cuestión. Varios organismos usuarios han elogiado a la DCI por ese informe. Todavía no se han publicado los comentarios del CAC al respecto.
108. La labor de la DCI en esa esfera data de un informe de 1971 titulado "Informe sobre los problemas de personal en las Naciones Unidas (cuadro orgánico y funcionarios de categorías superiores)" (véase A/8454). El informe de 1995 a nivel de todo el sistema señala la esfera de la gestión de loe recursos humanos como el segundo elemento clave para mejorar la gestión en el sistema de las Naciones Unidas (véase A/50/503 y Add.1).
109. El informe de 1994 titulado "Mejoramiento de la condición de la mujer en la Secretaria de las Naciones Unidas. en una época de 'gestión de los recursos humanos' y 'responsabilidad': ¿un nuevo comienzo?" (véase A/49/176) puso de manifiesto la importancia fundamental de una buena gestión de los recursos humanos. La Asamblea General ya ha hecho suya la recomendación sobre la estrategia de los recursos humanos y una nueva dependencia de planificación, y su aplicación está en curso, así como una nueva estrategia para el adelanto de la mujer. Además, el informe de 1995 a nivel de todo el sistema titulado El adelanto de la mujer por medio de los programas de las Naciones Unidas y en los propios programas: tareas que habrá que abordar después de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer" (véase A/50/509) contiene un análisis de las nuevas e importantes cuestiones relativas a los recursos humanos que las organizaciones tienen que abordar, como son la movilidad, la disyuntiva trabajo/familia, el asesoramiento y la comunicación, el acoso sexual y los códigos de conducta.
110. El informe de la DCI de 1994 titulado "Hacia un nuevo sistema de evaluación del desempeño profesional en la Secretaría de las Naciones Unidas requisitos para una aplicación eficaz" (véase A/49/219) tomó nota de la existencia de sistemas de evaluación nuevos y más sólidos en otros ámbitos del sistema de las Naciones Unidas. investigó y confirmo el sistema gravemente defectuoso que todavía existe en las Naciones Unidas, e identificó los elementos indispensables para que se pueda instalar con éxito y esté formalmente en funciones para 1997 el nuevo sistema de evaluación de la actuación profesional. El informe también señaló las economías, por valor de millones de dólares, que podrían lograrse si no se aplicara automáticamente cada año el ascenso de un escalón a los funcionarios que, de acuerdo con el nuevo sistema de evaluación, obtuvieran resultados inferiores a la media.
111. Una inspección realizada por la DCI dio lugar a la publicación en enero de 1995 de la primera parte de un informe titulado "Examen de la aplicación de las políticas de las Naciones Unidas en materia de contratación, colocación y ascensos" (véase A/49/845). La Asamblea General, en su cuadragésimo noveno periodo de sesiones, hizo suyas todas las recomendaciones del informe, y aunque ea demasiado pronto para determinar resultados específicos, se espera que su aplicación en la Secretaria de las Naciones Unidas haga que mejore la situación en esa esfera tan importante. En su programa de trabado para 1995, la DCI ha incluido la segunda parte de su inspección (colocación y ascenso).
112. A petición de la secretaria de la UNESCO, la Dependencia está realizando una evaluación a nivel de todo el sistema, estrechamente relacionada con la anterior, de los métodos comparativos de distribución geográfica de los puestos en las diversas secretarias. La Dependencia espera que ese estudio constituya una contribución al actual debate sobre esa materia.
113. otros informes sobre rotación del personal dentro de las Naciones Unidas (véase A/46/326), sobre la superposición de categorías (véase A/47/140) y sobre ventajas y desventajas del sistema de clasificación de puestos (véase A/47/168) han resultado de gran utilidad para la administración y la gestión de personal.
114. Como las actividades operacionales para el desarrollo siguen absorbiendo una proporción considerable de los recursos financieros y humanos de las organizaciones participantes en la DCI, la Dependencia ha mantenido y recientemente ampliado sus actividades de inspección y evaluación de los sectores económico, social y sectores conexos del sistema de las Naciones Unidas para el desarrollo.
115. El objetivo central de la Dependencia en este importante ámbito de su labor ha sido el de prestar asistencia a las organizaciones en la elaboración de estrategias y disposiciones institucionales mas eficientes en materia de costos para crear capacidades de ayuda propia o de desarrollo sostenible en los países en desarrollo. Para ese fin, la DCI, desde que inició sus operaciones, ha emitido numerosos informes y ha formulado recomendaciones sobre temas concretos de la cooperación para el desarrollo, la armonización de los ciclos de programación y presupuestación y los procedimientos de apoyo a los programas. locales y servicios comunes sobre el terreno, descentralización a nivel operacional y ejecución gubernamental (nacional) de proyectos.
116. La creciente importancia que la Dependencia ha ido atribuyendo a esos temas a lo largo del tiempo ha servido para constituir el núcleo central de las directrices legislativas aplicables a las actividades operacionales para el desarrollo que realizan las organizaciones y que ha expuesto más ampliamente la Asamblea General en sus resoluciones 44/211, de 22 de diciembre de 1989, y 47/199, de 22 de diciembre de 1992.
117. En años recientes, la Dependencia ha intensificado su inspección y evaluación de las actividades de cooperación para el desarrollo de las organizaciones mediante la publicación, entre 1990 y 1994, de unos 20 informes que contienen mea de 100 recomendaciones. Doce de esos informes (un 60&) se referían a todo el sistema, o eran de interés directo para todas las organizaciones participantes en la Dependencia, y otros ocho eran de interés específico para determinadas organizaciones del sistema. Por falta de una presentación sistemática de informes sobre la adopción de medidas para el seguimiento de los informes y recomendaciones de la DCI, esta todavía no ha logrado componer un panorama completo de los resultados y los efectos totales de su labor mea reciente en materia de cooperación para el desarrollo.
118. No obstante, en su mayoría, los informes emitidos por la Dependencia desde 1990 han recibido por lo general una acogida favorable en los órganos legislativos del sistema. Varios de los informes o bien han contribuido directamente a mejorar la eficiencia operacional y a lograr ahorros en las operaciones de lo. programas. o han identificado áreas en las que un mejor diseño de políticas y sistemas podría afinar la eficacia de los programas de cooperación técnica.
119. Ejemplos de esos informes son la nota de 1991 de la DCI sobre operaciones de transporte del Fondo de las Naciones Unidas. para la Infancia8, que permitió al UNICEF lograr anualmente ahorros del orden de los 15 millones de dólares de los EE. UU.; un informe titulado "Evaluación orientada hacia el futuro del programa de cooperación técnica de la Organización de Aviación Civil Internacional"10, que hizo una importante contribución a la reorganización y fortalecimiento del programa de cooperación técnica de la OACI; o el informe en dos partes sobre descentralización de organizaciones dentro del sistema de las Naciones Unidas (véase A/48/78), que, entre otras cosas, ha contribuido a la adopción de medidas concretas en algunos organismos especializados, en particular, la FAO, la OMI, la ONUDI, la UIT, la UNESCO y la UPU; esos organismos han reorganizado o reforzado sus actividades cobre el terreno de conformidad con las recomendaciones principales del informe.
120. Otro tema importante de los informes de la Dependencia desde 1990 ha sedo el de intensificar la colaboración institucional entre los organismos que participan en la cooperación para el desarrollo7, por lo que se refiere a su apoyo a los países en desarrollo. A ese respecto cabe destacar el informe en dos partes sobre la cooperación entre el sistema de las Naciones Unidas. y las instituciones financiera multilaterales, en el que se instaba a las organizaciones del sistema a que fomentaran la creatividad, la competitividad, la respuesta a los programas. y el mejoramiento sostenido de los resultados para que pudieran colaborar más eficazmente con las instituciones financieras multilaterales. En el informe se cita a la OIT por su cooperación con las instituciones financieras multilaterales. Las tendencias recientes en el desarrollo de relaciones de cooperación entre los dos grupos de copartícipes para el desarrollo, especialmente sobre el terreno, se ajustan a las principales recomendaciones del informe.
121. De la misma manera, el informe titulado "Cooperación con las organizaciones no gubernamentales: actividades operacionales para el desarrollo del sistema de las Naciones Unidas con organizaciones no gubernamentales y gobiernos a nivel popular y a nivel nacional" (véase A/49/122-E/1994/44) ha contribuido a dar a conocer dentro del sistema de las Naciones Unidas los beneficios que puede entrañar para los países en desarrollo una mayor cooperación entre las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y las organizaciones no gubernamentales a nivel popular y a nivel nacional, a fin de que las organizaciones puedan llegar más directamente a los millones de personas del medio rural que han quedado en gran medida marginadas de los existentes programas de desarrollo que apoya el sistema.
122. En recientes informes, la DCI también ha destacado la eficiencia y las economías que pueden reportar unas disposiciones institucionales más racionales y cohesivas a nivel de país, especialmente mediante un enfoque más unitario de la representación de las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas sobre el terreno (véase A/49/133-E/1994/49), o mediante la aplicación de un programa a escalar mundial relativo a loe locales y servicios sobre el terreno comunes al sistema de las Naciones Unidas (véase A/49/629), que podría dar lugar a considerables ahorros.
123. La Dependencia decidió emprender un estudio en tres partes para evaluar la cooperación a nivel de todo el sistema de las Naciones Unidas en materia de ciencia y tecnología para el desarrollo en los países en desarrollo. La Dependencia ha completado su examen en lo relativo a Asia y Africa y tiene intención de iniciar la parte dedicada a la región de Latinoamérica y el Caribe. En su periodo de sesiones sustantivo de 1995, el Consejo Económico y Social elogió el informe sobre Africa (véase A/50/125-E/1995/19) y tomó nota del mismo.
124. El primer informe de la DCI en esta esfera ha sido el relativo a la coordinación de lee actividades relacionadas con la alerta temprana cobre posibles corrientes de refugiados (véase A/45/649 y Corr.1). Una de las conclusiones principales del informe era la necesidad de introducir la alerta temprana de manera coordinada, como un componente ordinario de la labor de las Naciones Unidas, utilizando para ello las estructuras existentes y designando un centro de coordinación dentro del sistema de las Naciones Unidas que se encargara de vigilar los factores relacionados con lee corrientes de refugiados, y mediante el establecimiento de un mecanismo consultivo interinstitucional. La Asamblea General, en su resolución 46/127, de 17 de diciembre de 1991, hizo suyas las recomendaciones pertinentes de la DCI. En el marco de su aplicación, se creó el puesto de coordinador del socorro de emergencia y se estableció un grupo de trabajo interinstitucional sobre la alerta temprana de refugiados y personas desplazadas.
125. En la nota titulada "Propuestas para mejorar lee operaciones de mantenimiento de la pez de las Naciones Unidas"11, la DCI, en un análisis selectivo, abordó ciertos problemas de gestión y financieros, ase como los relativos a la aportación de contingentes de tropas. Como resultado de ello, la Dependencia formuló una serie de propuestas al Secretario General para lograr mejoras en esas esferas. Las cuestiones financieras relativas a las operaciones de mantenimiento de la pez se volvieron a tratar en la "Nota sobre 'Un programa de pez': reflexiones sobre el capitulo XI - Financiación"12.
126. En el informe sobre la dotación de personal de las operaciones de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la pez y misiones conexas (componente civil) (véase A/48/421) se analizó el funcionamiento de los diferentes departamentos y dependencias de la Secretaría de las Naciones Unidas. en la gestión de las operaciones de mantenimiento de la pez y el grado de coordinación y cooperación interdepartamental y las estructuras y funciones organizacionales, tanto en la Sede como sobre el terreno, con miras a lograr una gestión más coherente y consolidada, evitar la duplicación de actividades, mejorar la coordinación y refinar el proceso de alerta temprana, planificación, despliegue y supervisión y evaluación. También se examinaron las medidas recomendadas y/o adoptadas por la Secretaría para mejorar su gestión. El informe recibió comentarios favorables del Secretario General (véase A/48/421/Add.1). Se han aplicado ya algunas de sus recomendaciones. El informe también fue examinado en la Quinta Comisión y en la Comisión Política Especial durante el cuadragésimo octavo periodo de sesiones de la Asamblea General, y fue mencionado en la resolución 48/42 que la Asamblea aprobó el 10 de diciembre de 1993. Tras un debate en profundidad sobre el informe, el CPC expresó su aprecio por la oportunidad de su aparición y se mostró de acuerdo con el diagnóstico sobre las imperfecciones del componente civil de la dotación de personal de las misiones de las Naciones Unidas. para el mantenimiento de la pez y misiones conexas. También expresó satisfacción por el hecho de que ya se hubieran aplicado algunas de las recomendaciones que los Inspectores formulaban en el informe.
127. Preocupada por la creciente carga que representan para las Naciones Unidas. las operaciones de mantenimiento de la pez, la DCI elaboró un informe sobre participación en el cumplimiento de las responsabilidades en la esfera del mantenimiento de la pez: las Naciones Unidas y las organizaciones regionales (véase A/50/571). En el informe se exponen conclusiones y recomendaciones sobre la cooperación entre las Naciones Unidas. y las organizaciones regionales en el mantenimiento de la pez y la seguridad. Su objetivo es contribuir a los esfuerzos que se realizan actualmente para incrementar la participación de las organizaciones regionales en la seguridad colectiva, con la esperanza de que de esa forma se aligere la carga que soportan las Naciones Unidas.
128. Un informe titulado "Investigación de las relaciones entre la asistencia humanitaria y las operaciones de mantenimiento de la pez" (véase A/50/572) se centra principalmente en cómo mejorar y hacer mas eficaces los mecanismos de cooperación y coordinación tanto en la Sede como sobre el terreno entre los diferentes participantes en situaciones complejas de emergencia. Explora la posibilidad y la viabilidad de examinar y formular normas de conducta (directrices) de los organismos que participen en situaciones complejas, teniendo presente su competencia, prioridades, las nuevas exigencias en materia de mantenimiento de la pez y asistencia humanitaria, con pleno respeto de los principios de independencia, neutralidad, humanidad e imparcialidad en los conflictos internacionales e internos. Se examinan algunos casos emblemáticos de operaciones complejas para extraer enseñanzas tanto de los éxitos como de las experiencias negativas. También ce abordan la protección y la seguridad del personal de las Naciones Unidas.
129. La DCI hace un seguimiento de las preocupaciones e intereses expresados por los Estados Miembros en los siguientes estudios en curso de realización:
a) Un informe sobre la participación del sistema de las Naciones Unidas. en el suministro y la coordinación de asistencia humanitaria tiene el propósito de i) examinar los progresos y los problemas de los mecanismos de las Naciones Unidas. para la coordinación de la asistencia humanitaria, su situación general en cuanto a capacidad y estructura operacional y organizativa, y sus técnicas de planificación y preparación para hacer frente a emergencias complejas, y ii) poner de manifiesto las esferas importantes en las que se pueden mejorar las operaciones humanitarias. Entre las recomendaciones se encuentran las relativas a medidas para pasar de un enfoque fragmentado de la respuesta ante casos de emergencia a estructuras amplias y consolidadas de las operaciones sobre el terreno, con cooperación lateral en la Sede, en el terreno y entre uno y otro ámbitos;
b) La Dependencia esta también examinando el fortalecimiento de la capacidad del sistema de las Naciones Unidas para la prevención de conflictos. El informe tiene por objeto i) examinar las actividades y capacidades pesadas y presentes del sistema de las Naciones Unidas para hacer frente a conflictos y ii) poner de relieve la importancia de la prevención de los conflictos sobre la base de un enfoque amplio de esa prevención que incluirla abordar las raíces de los conflictos y mejorar la capacidad de las Naciones Unidas en materia de diplomacia preventiva, así como la participación activa de todos los interesados. Las recomendaciones contienen propuestas concretas para la adopción de medidas por los Estados Miembros, el Secretario General y también en el plano interinstitucional, con miras a fortalecer la capacidad del sistema de las Naciones Unidas para la prevención de conflictos;
c) El informe sobre el componente militar de las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas complementa y amplia el informe anterior de la DCI sobre el componente civil. Mediante el examen de una serie de cuestiones, los Inspectores confían en contribuir a los esfuerzos que actualmente se hacen para mejorar la capacidad de las Naciones Unidas. en la planificación y gestión del componente militar de las operaciones de mantenimiento de la paz. Así, los Inspectores examinan y abordan tres amplias cuestiones. La primera de ellas es la relativa a los aspectos gerenciales de los mandatos para operaciones de mantenimiento de la paz, poniendo de relieve la importancia de celebrar consultas entre miembros del Consejo de Seguridad, los países que aportan contingentes y la Secretaria, así como la importancia de la unidad de mando y control. La segunda se refiere a la disponibilidad de tropas y equipo, a su preparación y a su despliegue oportuno. En este contexto se tratan algunos de los esfuerzos actuales encaminados a mejorar la eficacia de las operaciones de mantenimiento de la paz, a saber: la fuerza de reacción rápida, las disposiciones sobre la capacidad de reserva, la capacidad de reacción rápida y otras cuestiones conexas como son la rotación de contingente, la seguridad del personal, las indemnizaciones por muerte o invalidez y los reembolsos por gastos de equipo. La tercera cuestión se refiere a la capacidad de la Secretaria de las Naciones Unidas para administrar operaciones de mantenimiento de la pez. Trata del funcionamiento y reciente reestructuración de diferentes departamentos, especialmente el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz, con especial atención a elementos tales como la planificación, las disposiciones jurídicas, la capacitación, la información y los servicios de apoyo logístico. También se trata la importancia de la comunicación y la coordinación con la Sede y con el terreno y entre los dos planos. Las recomendaciones abordan pormenorizadamente esas cuestiones.
1 Documentos Oficiales de la Asamblea General. cuadragésimo sexto período de sesiones, Suplemento No. 34 (A/46/34).
2 Ibíd., cuadragésimo octavo periodo de sesiones, Suplemento No. 34 (A/48/34).
3 Ibíd., quincuagésimo periodo de sesiones. Suplemento No. 7 (A/50/7), parte- IX.B.
4 Ibíd., cuadragésimo noveno período de sesiones. Suplemento No. 34 (A/49/34).
5 Ibíd., trigésimo noveno período de sesiones. Suplemento No. 38 (A/39/38), párr. 381.
6 Ibíd., cuadragésimo séptimo período de sesiones. Suplemento No. 34 (A/47/34).
7 E/1993/18 y Add.1.
8 JIU/NOTE/9l/l
9 JIU/REP/95/3.
10 JIU/REP/92/3.
11 JIU/NOTE/92/1.
12 JIU/NOTE/93/1.