SISTEMA DE INFORMACIÓN FORESTAL

62. En el curso de la ERF 2000, el Programa de Evaluación de los Recursos Forestales desarrolló un sistema de información colectivo a fin de archivar, analizar y divulgar la información a través del World Wide Web (Figura 4). Gracias a la utilización de la tecnología de Internet, se logró crear un foro de diálogo abierto con los países y alcanzar una mayor transparencia sobre las fuentes estadísticas, y métodos de la FAO. Debido a esta nueva forma de trabajo, la FAO estimuló la interacción y participación de los países en el proceso de evaluación, así como la conciencia pública. Al final de la evaluación, se incorporó el sistema de información al Programa Regular de la FAO.

Figura 4. El ingreso de datos, caracterizado por su forma dinámica, de perfiles forestales nacionales y de los bosques, constituye uno de los principales productos de la ERF 2000. Los perfiles se encuentran disponibles al público a través del sitio de la FAO en la siguiente dirección: www.fao.org/forestry/fo/country/nav_world.jsp.

CONCLUSIÓN

63. Desde 1951, la FAO ha informado sobre los recursos forestales mundiales, en cumplimiento de su mandato de recolectar, analizar y divulgar información sobre los bosques y sobre el sector forestal. La Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales 2000 es la evaluación más reciente de la FAO. Esta constituye un esfuerzo considerable, llevado a cabo en cooperación con los países miembros y socios de la organización. Los países tuvieron una participación activa en la evaluación y proporcionaron información fundamental para informar sobre los bosques a nivel nacional.

64. La evaluación 2000 concluyó que la cubierta forestal mundial hasta el año 2000 era de 3.9 mil millones de hectáreas. La deforestación neta a nivel mundial se estimó en una tasa anual de aproximadamente 9 millones de hectáreas, con una tasa de deforestación mundial bruta de 13.5 millones de hectáreas. Al mismo tiempo, la tasa anual de 4.5 millones de hectáreas de nuevas plantaciones sembradas, fue acentuadamente superior a las anteriores, y los rodales sembrados con éxito (estimados en 3 millones de ha/año para todo el decenio de 1990) compensó las pérdidas de los bosques naturales.

65. Los incendios forestales siguieron constituyendo un problema considerable durante el decenio de 1990. La evidencia existente indica que durante el decenio de 1980 también ocurrieron incendios ingentes y dañinos. Las condiciones climáticas relacionadas con el fenómeno de " El Niño", junto con las prácticas tradicionales de roza de bosques en el trópico produjeron efectos devastantes en los bosques de muchos países tropicales, así como en la sobrevivencia de sus ciudadanos. Otros países sufrieron vastos incendios durante el decenio de 1990 debido a una acumulación de materia combustible, a su vez producto de las políticas de eliminación de incendios.

66. Desde un punto de vista positivo, las iniciativas relacionadas con la ordenación sostenible de los bosques han estimulado a muchos países a desarrollar planes de manejo para sus bosques. Cerca del 6 por ciento de los bosques tropicales se encuentran sometidos actualmente a dichos planes, al igual que el 88 por ciento de los bosques en los países industrializados. Todavía sigue siendo necesario vigilar a fin de evaluar la ejecución de los planes. Además, el diez por ciento de los bosques del mundo se encuentran actualmente bajo alguna forma de protección formal o informal, tales como los parques nacionales o las reservas forestales.

67. La disponibilidad de información forestal confiable y de información sobre los recursos forestales actuales sigue siendo un tema importante para las evaluaciones nacionales y mundiales. A pesar de que los asuntos forestales han ocupado un puesto importante en los programas forestales de muchos foros internacionales durante los decenios pasados, y de que algunos países han mejorado sus propios inventarios forestales, hubo un escaso mejoramiento general respecto a la calidad de la información a nivel mundial durante el decenio de 1990. Mientras que la ERF 2000 recolectó y analizó más información técnica de base que cualquier otra evaluación previa, el análisis de la información básica muestra que no existe información fiable sobre la superficie de los bosques, el cambio forestal, el volumen y la biomasa en la mayoría de los bosques del mundo. Se necesita una inversión mayor a fin de desarrollar información más completa para apoyar las iniciativas forestales, tanto nacionales como internacionales.

68. Una de las consecuencias de la falta de información obedece a que es difícil establecer segmentos temporales válidos - a nivel nacional, así como a nivel mundial. Mientras que la evaluación mundial de 1990 utilizó un enfoque similar, los resultados no pueden compararse de manera directa con el estudio actual, debido a los cambios que sufrieron las definiciones y debido a la calidad de la información y a las metodologías utilizadas. En la evaluación actual, se adoptó un proceso transparente para garantizar que todos los pasos del procesamiento fueran de dominio público. Además de que los resultados actuales cobraron credibilidad, se espera que el diálogo sobre la información forestal y los bosques se enriquezca y que la evaluación de 2000 pueda compararse de forma más confiable con los resultados futuros.

69. La pérdida continua e ingente de la cubierta forestal tropical y la insurgencia de incendios incontrolados, contrastan con el aumento de la siembra de plantaciones registrado, y con los logros en la ordenación forestal y en las áreas protegidas, proporcionando así un panorama complejo del futuro de los bosques del mundo y de la interacción humana con ellos. Las futuras evaluaciones mundiales deberían esforzarse por mejorar tanto la precisión y profundidad de la información proporcionada, a través de una mayor capacidad por parte de los países, del desarrollo de parámetros mundiales y de la promoción del desarrollo de un sistema mundial de encuesta forestal. Asimismo, quienes toman las decisiones deben participar en la definición de las necesidades futuras en materia de información a fin de que ésta responda a sus preguntas e intereses sobre el estado y ritmo de cambio de los bosques del mundo.

BIBLIOGRAFÍA

CONTRIBUCIONES

La Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales 2000 fue el producto de un esfuerzo concertado y de un trabajo de equipo realizado por muchas personas dentro y fuera de la FAO. Los autores de las distintas secciones de este informe fueron Robert Davis (mapas mundiales); Joachim Lorbach (Extracciones); Peter Holmgren (Cubierta Forestal, Volumen y Biomasa, Áreas protegidas, y Sistemas de Información ); Jim Carle (Plantaciones); Mette Løyche Wilkie (Ordenación Forestal); Michelle Gauthier (Árboles Fuera del Bosque); Bob Mutch y Gillian Allard (Incendios); Laura Russo (Productos Forestales No Madereros); y Anne Branthomme e Ingemar Eriksson (Encuesta de Teledetección). Jim Ball y Jim Space editaron buena parte del texto del documento. Sören Holm proporcionó su valiosa asistencia en el análisis estadístico de los datos de la encuesta de teledetección. Toda la unidad de FRA contribuyó a desarrollar los distintos datos, junto con el personal de las Direcciones de recursos forestales y de productos forestales.

APÉNDICE 1

DEFINICIONES BÁSICAS DE ERF 2000

Las siguientes definiciones provienen de FAO (2000) en donde fueron elaboradas las formulaciones de las definiciones originales de FAO (1998).

Clasificación del uso de la tierra

Bosque

Los bosques son tierras de más de 0.5 ha, con una cubierta de copa de más del 10 por ciento, que no son utilizadas como tierra para fines agrícolas o urbanos.

Nota explicativa

Los bosques se determinan tanto por la presencia de árboles como por la ausencia de otras formas de utilización de la tierra. Los árboles deberían poder alcanzar una altura mínima de 5 metros a su madurez in situ. Se incluyen las áreas en vías de reforestación que aún deben alcanzar una densidad de copa del 10 por ciento o una altura de 5 m, al igual que las áreas que están temporalmente desarboladas, a consecuencia de la intervención humana, o por causas naturales, pero que volverán a convertirse en bosque. El término incluye específicamente: viveros forestales y huertos semilleros que forman parte integral del bosque; caminos forestales; senderos talados; cortafuegos; y otras pequeñas áreas abiertas que integran parques nacionales, reservas de la naturaleza y otras áreas protegidas que sean de interés científico, histórico, cultural o espiritual; cortavientos y cinturones de protección formados con árboles, con una superficie superior a 0,5 ha y un ancho mayor a 20 m; plantaciones utilizadas principalmente para fines forestales, incluidas las plantaciones de caucho y rodales de alcornoque. Este término excluye de manera específica los árboles sembrados principalmente para la producción agrícola, como la siembra de frutales y de sistemas agroforestales.

Otras tierras boscosas

Otras tierras boscosas corresponden a la tierra con una cubierta de copa que tienen entre 5 y 10 por ciento de árboles capaces de alcanzar una altura de 5 m a su madurez in situ; o una cubierta de copa superior al 10 por ciento cuando se incluyen los árboles pequeños y arbustos.

Otras tierras

Otras tierras es, para fines forestales, cualquier tierra que no fue clasificada como bosque u otras tierras boscosas, según se definió anteriormente. Estas incluyen las tierras agrícolas, praderas naturales y artificiales, terrenos con construcciones, tierras improductivas, etc.

Aguas interiores

Superficie ocupada por ríos, lagos y embalses importantes.

Árboles fuera del bosque

Los árboles fuera del bosque son árboles y ambientes arbolados en tierras que no han sido definidas como bosque u otras tierras boscosas.

Nota explicativa

Los árboles fuera del bosque (ToF = por sus siglas en inglés) incluyen: (a) grupos de árboles que cubren una superficie inferior a 0.5 ha, incluyendo hileras y cinturones de protección a lo largo de construcciones y campos agrícolas; (b) árboles dispersos en tierras agrícolas; (c) plantaciones de árboles para fines que no sean la producción de madera, tales como huertos frutales y plantaciones de coco; y (d) árboles en parques y jardines y alrededor de edificios. A los ToF no se les asigna una superficie en la clasificación general del uso de la tierra, pero crecen en otras tierras. Aunque la definición de ToF se basa en los árboles, el concepto también incluye el sitio y otra vegetación presente en el lugar.

Procesos de cambio forestales

Visión general

Los procesos de cambio forestal son fundamentales en numerosos programas y políticas forestales, tanto nacionales como internacionales. Estos también revisten de mucho interés para el público en general y a menudo son fuente de referencia para los medios de información. Muchas organizaciones trabajan en temas de cambio forestal, y las definiciones revisten por lo tanto importancia y son también temas delicados desde el punto de vista político. A continuación se resumen las definiciones, según el uso que les da el Departamento de Montes de la FAO. A continuación figuran las definiciones de cinco términos. La Figura 1 proporciona una visión de conjunto de cómo se relacionan entre sí.

Favor de notar que para determinar si la extracción de árboles de un área constituye deforestación o no, es necesario predecir el desarrollo futuro de esa área. Si se han sembrado nuevos árboles forestales que surgirán en un futuro relativamente inmediato, la tierra se clasifica como bosque durante todo el período de regeneración (y esta regeneración se denomina "reforestación"). Si, por otro lado, no se establece una densidad de árboles suficiente en un futuro relativamente próximo, o si la tierra es convertida a otra clase de uso, esa superficie debe considerarse como deforestada.

Notar también que el marco temporal es fundamental para las definiciones de cambio forestal y que la longitud del período umbral, que automáticamente comienza a los diez años, debería ser utilizado de manera consecuente cuando se aplican los términos, a fin de evitar traslapes o brechas en los informes. Entonces el "largo plazo" se refiere a diez años o más, y "temporal" se refiere a un período inferior a diez años. Notar que las condiciones de clima, contexto del uso de la tierra o el fin del análisis pueden justificar la necesidad de utilizar un período umbral más largo.

Figura 1. Relaciones entre términos relativos al cambio forestal. La degradación del bosque y la disminución de la degradación ocurre en los bosques que se mantienen constantemente por encima del umbral de 10 por ciento de cubierta de copa, pero que han sido considerados como bosques durante todo ese tiempo. La deforestación y la forestación representan la conversión y transferencia entre bosque y otras clases de uso de la tierra.

Deforestación

La deforestación es la conversión del bosque a otro uso de la tierra o la reducción a largo plazo de la cubierta de copa por debajo del umbral del 10 por ciento.

Nota explicativa

La deforestación implica la pérdida permanente o a largo plazo de la cubierta forestal. Tal pérdida sólo puede ser provocada y mantenida a través de una alteración producida por las actividades humanas o por un fenómeno natural. La deforestación incluye, por ej.: la superficie de bosque convertida a la agricultura (incluyendo la agroforestería), el pastoreo extensivo, la construcción de embalses o de áreas urbanas. El término excluye específicamente las áreas en donde los árboles fueron extraídos, debido por ej.: a la cosecha o explotación forestal, y cuando se espera que el bosque vuelva a regenerarse de forma natural o con el auxilio de prácticas silvícolas a largo plazo. A menos de que vaya seguido de la extracción del bosque talado para introducir usos de la tierra alternativos, o del desboscamiento continuo a través de la actividad permanente, los bosques suelen regenerarse, a menudo bajo forma de vegetación secundaria. En las áreas de agricultura migratoria, el bosque, el barbecho forestal y las tierras agrícolas conviven en un modelo dinámico en donde la deforestación y la regeneración del bosque crece en porciones pequeñas. Para simplificar el informe sobre estas áreas, se suele aplicar el cambio neto a una superficie más vasta. La deforestación también incluye las áreas en donde la sobre-explotación o el cambio de las condiciones ambientales influencian el bosque en la medida en que este no puede mantener una cubierta de copa superior al umbral del 10%, por ej.: las áreas quemadas en donde se verificaron severos daños al suelo o incendios recurrentes que a largo plazo impiden la regeneración del bosque o áreas que después de la tala no pueden regenerarse debido a la escarcha, vegetación u otras condiciones naturales. El concepto de "largo plazo es fundamental y dura diez años. Las condiciones climatológicas locales, usos de la tierra o el fin de estudio pueden justificar la aplicación de un margen temporal más largo.

Forestación

La forestación es la conversión de otros usos de la tierra a bosque, o el aumento de la cubierta de copa por encima del umbral del 10% .

Nota explicativa

La forestación es la condición inversa de la deforestación e incluye las áreas convertidas desde otros usos de la tierra a bosques, a través de prácticas silvícolas. La forestación también incluye las transiciones naturales a bosque, por ejemplo en tierras agrícolas abandonadas o superficies incendiadas que no fueron clasificadas como bosques durante el período de arrasamiento. En cuanto a la deforestación, la conversión debe ser a largo plazo, es decir en áreas en donde la transición a bosque se espera dure menos de diez años, por ej.: debido a incendios recurrentes, no debería ser clasificada como áreas de forestación. El concepto de "largo plazo" es fundamental en esta definición y dura diez años. Las condiciones de clima locales, los contextos de uso de la tierra, o el fin del análisis pueden justificar la aplicación de un período de tiempo más largo.

Reforestación

La reforestación es la regeneración de las formaciones forestales después de una condición temporal de una cubierta de copa inferior al 10% debido a la actividad humana o los fenómenos naturales.

Nota explicativa

La definición de bosque establece claramente que los bosques en regeneración se consideran bosques, aún cuando la cubierta de copa disminuya por debajo del umbral del 10 por ciento. Muchos planes de manejo forestales incluyen la tala seguida de regeneración, y varios procesos naturales, sobre todo los incendios forestales y ciclones que pueden llevar a una reducción de la cubierta de copa por debajo del 10 por ciento. En estos casos, la superficie es considerada como bosque, siempre y cuando la regeneración, (es decir la reforestación) a un nivel de cubierta de copa por encima del 10 por ciento se verifique en un futuro próximo. En cuanto a la deforestación, el lapso de tiempo es fundamental. El concepto "temporal" es central en esta definición y consiste en 10 años. Las condiciones del clima locales, los contextos de uso de la tierra, o el fin del análisis pueden justificar la aplicación de un período de tiempo más largo.

Degradación del bosque

Degradación del bosque significa una reducción de la cubierta de copa o de las existencias dentro del bosque.

Nota explicativa

A fin de disponer de un conjunto de definiciones del bosque y del cambio forestal armonizados, que puedan también ser medidos con las técnicas convencionales, se presume que la degradación del bosque se indica a partir de la reducción de la cubierta de copa y/o las existencias del bosque debido a la explotación forestal, incendios, ciclones u otros fenómenos, siempre y cuando la cubierta de copa se mantenga por encima del umbral del 10 % (definición de bosque). En sentido más general la degradación del bosque es la reducción, a largo plazo, del potencial total de suministro beneficios a partir del bosque, incluyendo madera, diversidad biológica y cualquier otro producto o servicio.

Mejoramiento del bosque

El mejoramiento del bosque es el aumento de la cubierta de copa o de las existencias dentro del bosque.

Nota explicativa

A fin de disponer de un conjunto de definiciones del bosque y del cambio forestal armonizados, que puedan también ser medidos con las técnicas convencionales, se presume que el mejoramiento del bosque es indicado por el aumento de la cubierta de copa y/o de las existencias del bosque mediante el crecimiento. En sentido más general (degradación del bosque) mejoramiento del bosque consiste en un aumento a largo plazo del potencial total de suministro de beneficios a partir del bosque, que incluye, madera, diversidad biológica y cualquier otro producto o servicio.

BIBLIOGRAFÍA