Balaena mysticetus Ballena de cabeza arqueada
Braham (1982) estima que las poblaciones de los mares de Beaufort, Chukotka y Bering
cuentan unos 4 000 animales, frente a una población inicial estimada en 18 000. Braham
et al. (1979) han estimado que la parte de esta población que vive en el mar de Beaufort
totaliza unos 2 200 animales. En 1981, balleneros inauit de los Estados Unidos dispararon
a 28 ballenas de cabeza arqueada y 17 de ellas fueron llevadas a tierra. Probablemente
varios de los animales heridos no capturados habrán muerto (IWC, 1983, p. 142).
Eschrichtius robustus Ballena gris
Hershkovitz (1966) sostiene que esta especie llega por el norte hasta los 72°N. Se cree
que su alimentación incluye invertebrados bentónicos, pero no peces.
Balaenoptera physalus Rorcual de aleta
Tomilin (1967) sugiere que en las partes más septentrionales de su zona de distribución
esta especie se alimenta sobre todo de crustáceos.
Balaenoptera musculus Ballena azul
Su dieta consiste en crustáceos grandes (Tomilin, 1967)
Balaenoptera acutorostrata Ballena enana
Esta especie penetra en los bancos de hielo, y su dieta, en las altas altitudes, en aún
poco clara, pero probablemente incluye bacalao del Artico.
Megaptera novaeangliae Ballena jorobada
Physeter macrocephalus Cachalote
Monodon monoceros Narval
Delphinapterus leucas Ballena blanca
Fraker (1980) ha estimado la población de Mackenzie, en el mar de Beaufort, en 4 000 ó 7 000 individuos. Cazadores Inuit e Inupiat capturan en esa zona anualmente unos 300 animales (Fraker, 1980). En la relación por especies pueden verse otros datos.
Orcinus orca Orca
Phocoena phocoena Marsopa común
Odobenus rosmarus Morsa
Harwood (1981), citando a Fay et al., ha indicado que si la población de morsa se halla al
límite de su capacidad y se ve limitada por los suministros de alimentos, el desarrollo de
una pesquería de almejas en aguas boreales podría influir en la dinámica de la población.
Anualmente se capturan unos 6 000 animales para consumo humano y para la preparación de
alimentos para perros.
Phoca vitulina Foca común
Phoca largha Foca largha
Phoca hispida Foca marbreada
Phoca groenlandica Foca de Groenlandia
Phoca fasciata Foca fajada
Erignathus barbatus Foca barbuda
Cystophora cristata Foca capuchina
Se sabe muy poco sobre los hábitos alimentarios o el volumen de las poblaciones de mamíferos marinos en las regiones árticas del área 18. Probablemente los crustáceos pelágicos constituyen un elemento importante de la dieta de la mayoría de las especies.
En este área no parecen realizarse operaciones comerciales de pesca. El Anuario Estadístico de Pesca de la FAO (1983) da como cero las capturas totales en 1981 de tres grupos de peces: platijas, halibut, lenguados, etc.; bacalaos, merluzas, eglefinos, etc., y “peces diversos”.
En este área se cazan varias especies de mamíferos marinos con fines de subsistencia. Hay pocos datos sobre el volumen de estas capturas, excepto en el caso de la ballena de cabeza arqueada y la ballena blanca, que se han mencionado más arriba.
No hay noticias de interacciones entre pesquerías locales o artesanales y mamíferos marinos.
Según Marquette et al. (1982), el bacalao del Artico (Eglefinus navaga) consume el 95, 8 por ciento del zooplancton y necton presentes en el mar de Beaufort. Es de suponer, pues, que esta especie constituya una parte considerable de la biomasa depredadora de las regiones árticas. Hasta la fecha sólo la URSS explota esta especie en las áreas 27 y 61.
Eubalaena glacialis Ballena franca
Reeves y Mead (1978) informan de varios animales de esta especie enredados en artes de
pesca. Un animal quedó apresado en las líneas de una nasa langostera frente a New Jersey
en 1976, y más tarde fue liberado. Otro quedó enredado en Cabo Cod en 1976 y se mencionan
otros dos casos de ballenas enredadas. Concluyen que “aunque no hay indicios de que
eso suceda a menudo, o que se traduzca invariablemente en la muerte o el debilitamiento
de los animales … no ha de pasarse por alto como amenaza potencial a ballenas individuales,
y por tanto, como un obstáculo para la recuperación de esta pequeña población”.
No se conoce el volumen de la población, pero el informe del Subcomité sobre especies
protegidas y cacerías aborígenes de ballenas (IWC, 1983) indica que se han identificado
59 individuos mediante fotografías. La población podría ser del orden de algunos centenares.
En el mismo informe se señala que el análisis de las heces ha mostrado que se
alimentan de copépodos.
Balaena mysticetus Ballena de cabeza arqueada
Mitchell y Reeves (1981) sugieren la presencia de dos poblaciones de estas ballenas, con
unos 700 animales en el área de la bahía de Hudson y 700 en estrecho de Davis/bahía de
Baffin. Esas cifras representan el 15 por ciento y el 5 por ciento, respectivamente, del
volumen inicial estimado de estas dos poblaciones, antes de su explotación. En la actualidad
las pesquerías en esa área son pocas también, por tanto, las posibilidades
de interacción. La dieta de estos animales no incluye ninguna especie de peces (Tomilin,
1967).
Balaenoptera physalus Rorcual de aleta
Perkins y Beamish (1979) mencionan un individuo de esta especie atrapado en una red salmonera
frente a Labrador. En los informes del Canadá a la IWC se mencionan otros siete
casos de ballenas atrapadas en redes de enmalle frente a Terranova en 1979, tres en 1980,
una en una red para arenques y dos en redes de enmalle, y otra en 1981 en una red para
arenques. La mitad de esos animales, aproximadamente se hallaron muertos. Como ya se
ha indicado, los rorcuales de aleta comen algunos peces de importancia comercial, como
arenque, capelán y bacalao del Artico (Jonsgaard, 1966; Tomilin, 1967), aunque en el área
21 ello no parece representar un problema hasta la fecha. El volumen de la población en
esteárea podría ser del orden de algunos millares.
Balaenoptera musculus (Ballena azul)
No se conoce el número de ballenas azules que aún quedan en el nororeste del Atlántico,
pero se considera muy pequeño y quizás no exceda de algunos centenares. Esta especie no
consume pez alguno.
Balaenoptera acutorostrata Ballena enana
Parece que esta especie queda enredada con cierta frecuencia en artes de pesca; noticias
de casos de ese tipo pueden hallarse en los informes del Canadá incluidos en el informe
anual de la Comisión Ballenera Internacional. En 1981 se comunicó sólo la muerte de un
animal en una “red comercial”. En 1980 los casos registrados fueron doce, con 10 de los
animales muertos. Los artes en que habían quedado atrapados eran redes salmoneras, redes
de enmalle y trampas, incluidas trampas para salmones. En 1979 los animales atrapados de
que hay noticias fueron nueve. Perkins y Beamish (1979) estiman que anualmente tres ballenas
enanas, por término medio, quedan apresadas en artes de pesca, con un índice mínimo
de mortalidad de 0,77. La mayor parte de los casos, según ellos, correspondenden a trampas
para bacalao, y algunos a redes de enmalle. Ya se ha mencionado que la ballena enana consume
algunas especies comerciales de peces, aunque ello, como en el caso de la ballena dealeta, no parece presentar un problema por el momento. No se conoce el volumen de la población
en este área, pero quizás no sea irrazonable suponer una cifra de pocas decenas de
millares.
Balaenoptera borealis Rorcual negro
Las poblaciones de rorcual negro de este área están protegidas por las reglamentaciones
de la IWC. Gambell (1977) estima la población del noroeste del Atlántico en 2 078 animales,
cifra calculada sobre la base de los avistamientos. Mitchell y Chapman (1977) han identificado
dos poblaciones separadas, concentradas respectivamente en el Mar del Labrador y en
la plataforma de Nova Scotia. Mediante experimentos de marcado y recaptura el volumen de
esta última población se ha estimado entre 1 393 y 2 248 animales. Por lo que se refiere
a la población del Labrador, los datos censales dan un mínimo de 965 animales. No hay
noticias de interacciones.
Balaenoptera edeni Ballena de Bryde
Según Mead (1977), el avistamiento más septentrional de un animal de esta especie se ha
hecho en la costa atlántica de los Estados Unidos a 37°59°N, es decir, apenas dentro del
área 21. Es probable que el número de ballenas presentes en este área sea muy reducido
y no hay noticias de conflictos con las pesquerías en el área 21.
Megaptera novaeangliae Ballena jorobada
Esta especie es quizás, de todas las ballenas mysticetas, la que más frecuentemente queda
enredada en artes de pesca en este área, y en los informes presentados por el Canadáa la
IWC pueden verse numerosos casos, con 33 registrados en 1981. Según el informe correspondiente
a 1982, las ballenas que resultaron muertas en redes entre 1969 y 1980 fueron 43
y otras 88 fueron liberadas aun vivas. Estas ballenas son particularmente propensas a este
tipo de interacciones, ya que se alimentan de las poblaciones de capelán en aguas de
Terranova (Perkins y Beamish, 1979), y los efectos de tales cifras de mortalidad en la
recuperación de las poblaciones de ballenas jorobadas no pueden ser insignificantes.
Whitehead (1982) ha expresado además el parecer de que la grave sobrepesca de las pobla
ciones de capelán de esta región puedan representar un obstáculo para la recuperación
deesta población de ballenas jorobadas. Perkins y Beamish observaron también que la mayoría
de los apresamientos se producen en trampas bacaladeras y en redes salmoneras, y resultan
extremamente costosos para los pescadores propietarios de las redes en cuestión, dado que
el costo de una trampa bacaladera en 1978 era de 7 000 a 8 000 dólares EE.UU. Sobre la
base de avistamientos y observaciones acústicas, el volumen de la población de esta especie
en el noroeste del Atlántico ha sido estimado entre 1 000 y 1 500 animales por Balcomb y
Nicholls (1978), entre 2 300 y 4 100 por Whitehead (1982).
Mesoplodon
No hay noticias de interacciones con la pesca y se desconoce el volumen de la población de
todos los miembros de este género. Los individuous registrados de cada una de las especies
son poquísimos.
Mesoplodon bidens Mesoplodón de Sowerby
Mesoplodon densirostris Mesoplodón de Blainville
Mesoplodon europaeus Mesoplodón de Gervais
Mesoplodon mirus Mesoplodón de True
Ziphius cavirostris Ballena picuda de Cuvier
Hershkovitz (1966) señala que esta especie se encuentra por el norte hasta Rhode Island,
en la costa americana del Atlántico. No hay estimaciones de la población ni se conocen
interacciones con las pesquerías. Esta especie se alimenta de calamares.
Hyperoodon ampullatus Ballena de hocico de botella del norte
Benjaminsen (1972) informa sobre su alimentación y distribución. Hasta hace poco esta
especie era cazada por los noruegos y Mitchell (1977) ha sugerido que actualmente la población
está agotada. Este cetáceo, que prefiere aguas profundas, transcurre el verano en
latitudes altas y se alimenta de calamares. No parecen probables interacciones con las
pesquerías por el momento.
Physeter macrocephalus Cachalote
Los mapas de Townsend (1935) muestran algunas de las regiones del Atlántico centro-occidental
al sur de los 40°S donde más intensa es la explotación de cachalotes; los caladeros (occidental
y “meridional”) se hallan a caballo de la línea que divide el área 31 de la 21. No
se conoce el volumen de la población en el área 21, pero es posible que sea del orden de
pocas decenas de millares, al menos en el verano. En el informe del Subcomité sobre el
cachalote (IWC, 1982) se da una estimación de 58 000 animales para la población explotada
por los balleneros de Islandia. El desarrollo de las pesquerías de calamares en el área
21 podría causar algunas interacciones operacionales o biológicas con esta especie, pero
no se conoce ninguna por el momento.
Kogia breviceps
Sergeant y Fisher (1957) señalan la presencia de un individuo de esta especie en aguas
del Canadá. Aunque no son raros los encallamientos en la costa oriental de los Estados
Unidos, aparentemente esta especie no es común a escala mundial. No se dispone de estimaciones
de la población ni hay noticias de interacciones con las pesquerías.
Monodon monoceros Narval
Esta especie se caza aún en el norte del Canadá, especialmente alrededor de la isla de
Baffin; en 1981 se capturaron 406 animales (IWC, 1983, p. 160). En el informe del Subcomité
sobre los cetáceos menores (IWC, 1981) se menciona una estimación de la población
de narval de Lancaster Sound, cifrándola en unos 20 000 animales. El narval come también
varias especies de importancia comercial, incluido halibut negro, y algunos crustáceos
(Finley y Gibb, 1982), aunque hasta la fecha ello no ha sido causa, aparentemente, de
ningún conflicto.
Delphinapterus leucas Ballena blanca
En 1981 se capturaron en el Canadá entre 616 y 703 ballenas blancas(IWC, 1983, p. 160).
En el informe del Subcomité sobre los cetáceos menores (IWC, 1982) las poblaciones de ballena
blanca del Artico canadiense oriental se estiman en unos 9 000 animales. Esta especie
come también algunas especies de importancia comercial (véase Gurevich, 1980), pero tampoco
en este caso parece haber conflictos con los intereses pesqueros.
Pseudorca crassidens (Falsa orca)
Aunque no hay noticias de conflictos entre esta especie y los pescadores en el área 21, si
se han producido en otras partes del mundo, en particular en el Japón (véase área 61), donde
esta especie come peces de importancia comercial y calamares y daña a los peces ya apresados
en palangres. Por tanto, no se puede excluir que se produzcan conflictos en el
futuro en otras partes del mundo.
Orcinus orca orca
También en el caso de esta especie se producen conflictos en otras partes del mundo, debido
en parte a su consumo de peces (véase IWC, 1980, pp. 628–9), pero no hay aún noticias de
conflicto alguno en el área 21. Es posible que su dieta en esta zona incluya focas de
Groenlandia y ballenas enanas (Sergeant y Fisher, 1957). No se dispone de estimaciones de
la población de esta especie en el área 21.
Globicephala melaena Calderón
Esta especie, que ya no es objeto de explotación comercial en el área 21, se halla especialmente
en torno a Terranova, donde se alimenta de calamares de importancia comercial y, en
cierta medida, de peces (Sergeant, 1962). En raras ocasiones se ha comunicado la presencia
de animales enredados en artes de pesca, como trampas y redes de enmalle, en Terranova
(véanse los informes del Canadá, IWC, 1982). Las interacciones, por tanto, parecen ser
mínimas por el momento, pero la presencia de pesquerías de calamares en este área podría
representar una interacción potential, como indica el análisis de Mercer (1975), que pone
en relación la disminución de las capturas de calderón con el aumento de las de calamares.
Lagenorhynchus albirostris Delfín cariblanco
Se sabe que esta especie se alimenta de arenque, bacalao y otras especies comerciales
(Tomilin, 1957; Sergeant y Fisher, 1957). No hay estimaciones del volumen de la población,
pero se cree que está concentrada sobre todo en el área 27. La importancia que tienen en
su dieta algunas especies de peces comerciales sugiere la probabilidad de ciertas interacciones.
Leatherwood y Reeves (1983) señalan que estos animales son frecuentes en primavera
frente a cabo Cod y abundan también, al menos estacionalmente, en aguas más septentrionales.
Lagenorhynchus albirostris Delfín cariblanco
Katona et al. (1978) hallaron un individuo de esta especie que se suponía había muerto en
una red de enmalle en el golfo de Maine y en cuyo estómago se encontraron restos de arenque,
calamar y merluza. Gaskin (1983) señala que esta especie se captura accidentalmente en
redes fijas para caballa en la bahía de cabo Cod. Leatherwood y Reeves (1983) sugieren que
se trata de una especie relativamente común, y añaden que se solían capturar accidentalmente
animales de esta especie en la pesquería de acoso de calderones en Terranova. Cabe
la posibilidad de que esta especie compita para alimentarse con las pesquerías comerciales
de arenque y otros peces, pero no ha habido confirmación de ello hasta la fecha.
Tursiops truncatus Tursón
Aunque son frecuentes los casos comunicados de animales de esta especie apresados en redes
de pesca en todo el mundo, no parece haberse registrado ningún caso de ese tipo en el área
21; Sergeant y Fisher (1957) dicen que es raro en aguas del Canadá y más común en aguas
más meridionales del área 21, donde ha sido objeto de explotación comercial (Mitchell,
1975). Su dieta es muy variada (Tomilin, 1967) y probablemente incluye algunas especies
comerciales.
Grampus griseus Delfín de Risso
No se dispone de estimaciones de la población de esta especie ni se sabe de interacciones
por el momento. Se cree que se alimenta exclusivamente de calamares.
Stenella coeruleoalba Delfín rayado
Hershkovitz (1966) señala que se halla desde el sur de Groenlandia hasta la Argentina. No
se dispone de estimaciones de la población ni hay noticias de interacciones con las actividades
pesqueras en este área.
Delphinus delphis Delfín común
Se sabe que come peces pequeños, incluidas algunas especies comerciales, pero no parece
que haya capturas accidentales de esta especie en esta zona ni hay noticias de otras
interacciones con la pesca. Es de suponer, sin embargo, que haya cierto grado de interacción
“biológica”, poco clara por el momento.
Phocoena phocoena Marsopa común
En el oeste de Groenlandia se explota directamente esta especie, capturándose algunos
centenares de animales al año. Según parece son frecuentes también las capturas accidentales
en buena parte de las costas canadienses y estadounidenses del área 21. Gaskin
(1983) presenta un resumen de la información disponible sobre las capturas de esta especie
y sostiene que sus hábitos alimentarios y su hábitat nerítico la hacen vulnerable a diversos
tipos de redes. La mayor parte de las muertes, que quizás asciendan a algunos millares
al año, se producen en redes de enmalle, aunque también otros tipos de artes, como trampas
bacaladeras, redes fijas y corrales, causan algunas muertes. Entre los peces de que se
alimenta figuran varias especies comerciales, en particular arenque, caballa y gádidos
pequeños (Gaskin, 1983).
Odobenus rosmarus Morsa
La población del Atlántico se está recuperando de un grave depauperamiento y por el momento
no parece haber interacción alguna con la pesca, aunque, como Harwood (1981) ha señalado
a propósito de la población del Pacífico, un eventual desarrollo de la pesquería de señ
táceos y moluscos en aguas más septentrionales podría modificar la situación actual.
Brenton (1979) estima que la población del área 21 es del orden de 10 000 animales.
Phoca vitulina Foca común
La variedad de su dieta, que incluye algunas especies comerciales, sugiere que no puede por
menos de haber alguna interacción entre esta especie y los pescadores locales. Bonner
(1979c) indica que en las regiones septentrionales se cazan algunos animales para obtener
pieles, pero según parece no existe dato alguno sobre capturas accidentales. La población
podría ser del orden de 20 000 a 30 000 animales (Bonner, 1979c).
Phoca hispida Foca marbreada
El hecho de que esta especie se halle en aguas muy septentrionales puede impedir conflictos
con las pesquerías, pero se sabe que come platija, bacalao del Artico y crustáceos
(Popov, 1982). No se conoce el volumen de la población en el área 21, pero es posible que
se trate de la foca más numerosa en las regiones árticas, con una población total de
6–7 milliones (Stirling y Calvert, 1979).
Phoca groenlandica Foca de Groenlandia
Esta especie se ha explotado extensamente durante un largo período de tiempo y aún se
matan anualmente millares de cachorros y adultos. Las interacciones con las pesquerías
se han limitado al capelán: la depauperación de las poblaciones de capelán en el área
de Terranova ha movido a sugerir que quizás ello afecte a la dinámica de las poblaciones
de estas focas, que se alimentan de capelán (UICN, 1981), pero esos efectos no son, por
el momento, claros. El NCC (1982) indica que, “a juzgar por los datos hoy disponibles,
no es claro si esta población - cuyo volumen se estima actualmente entre 1 y 2 milliones
de animales - está en aumento o va en disminución”. Añade, además, que las variaciones
en los suministros de alimentos podrían influir en las posibilidades de recuperación de
esta población.
Erignathus barbatus Foca barbuda
No parece haber ningún conflicto entre esta especie, que vive en aguas muy septentrionales,
y las actividades pesqueras, aunque se sabe que come algunas especies comerciales, en particular
arenque y platija (Popov, 1982). No se dispone de estimaciones de la población en
este área (Stirling y Archibald, 1979).
Cystophora cristata (Foca capuchina)
Sergeant (1976) señala que hay algunos casos de muertes debidos a fragmentos descartados
de redes, y Sergeant (1979) observa que algunos animales mueren también en las redes salmoneras
de deriva de la pesquería del oeste de Groenlandia, aunque sostiene que no es
probable que ello tenga efectos significativos en la población. Su dieta incluye varias
especies comerciales, pero es muy variada, por lo que quizás las probabilidades de conflicto
sean limitadas. No se conoce el volumen de la población, pero podría ser del orden
de algunos centenares de millares (Reeves y Ling, 1981). El NCC (1982) añade que, aunque
no se dispone de un método fidedigno para estimar el volumen de la población, los datos
disponibles sugieren que está aún en disminución, a pesar de haberse reducido la explotación
comercial.
Halichoerus grypus Foca gris
Esta foca consume algunas especies comerciales, en particular bacalao, merluza, arenque y,
en ocasiones, salmón (Mansfield, 1963). Aunque no se dispone de datos sobre capturas
accidentales en el área 21, Bonner (1981a) habla de daños considerables a las pesquerías
canadienses que se atribuyen a focas grises. Es posible que sustraigan caballas de las
redes fijas, bacalaos de los palangres y cebo de las nasas langosteras. En Canadá se ha
procedido a una matanza selectiva de focas grises porque hospedan el nematodo Porrocaecum
decipiens, que infesta a los peces y reduce considerablemente su valor. La población del
área 21 podría ser del orden de 22 000 animales (Bonner, 1979d).
De las 33 especies enumeradas, al menos 12 comen con seguridad especies de peces de importancia comercial y probablemente otras cuatro o cinco se alimentan también de esas especies. De las demás, cuatro ballenas mysticetas se alimentan sólo o sobre todo de crustáceos gregarios y se cree que 10 especies se alimentan principalmente de calamares. La morsa y el delfín rayado parecen alimentarse, respectivamente, de organismos bentónicos y organismos mesopelágicos pequeños, por lo que en la actualidad probablemente hay pocas interacciones con las activiades de pesca.
Al menos 7 especies han sido señaladas en interacciones con artes de pesca sobre todo en redes fijas y de enmalle en torno a Terranova. Aunque las interacciones con los artes son relativamente pocas, parece probable, dado el número de mamíferos marinos que se alimentan de poblaciones comerciales de peces en este área, que haya otros muchos casos no comunicados. Vale la pena observar también que, aunque la explotación pesquera en este área es una de las mejor documentadas, hay poquísima información sobre conflictos “biológicos” presuntos o reales entre los mamíferos marinos y las actividades de pesca. Probablemente esos conflictos constituyen ya, o pueden llegar a ser un factor importante para la dinámica de la población de varias especies y para el futuro de la actividad pesquera, aunque están aún mal documentados. Quizás ello revista particular importancia en el caso de la población de foca de Groenlandia, que probablemente es, después del hombre, el principal mamífero depredador de peces en este área.
RECURSOS ICTICOS DEMERSALES
Los recursos ícticos demersales de esta región han sido explotados desde hace siglos por embarcaciones europeas y de América del Norte; la pesca de bacalao, en particular, ha sido muy importante en la historia de la explotación pesquera de esta región (Innis, 1954). Al igual que en otras áreas de aguas templadas, las capturas están constituidas en gran parte por un número relativamente pequeño de especies, las más importantes de las cuales, con gran diferencia, pertenecen a la familia Gadidae. Se calcula que sólo el bacalao ofrece un potencial del orden de 1,5 millones de toneladas. El Anuario Estadístico de Pesca de la FAO cifra la captura anual de todas las especies demersales en 1981 en 1 225 998 toneladas. Casi todas las poblaciones se explotan intensamente y algunas se han depauperado a causa de la explotación excesiva (véanse los informes de la Organización de Pesquerías del Atlántico Noroeste, NAFO, y de su predecesora, la Comisión Internacional de Pesquerías del Atlántico Noroeste, CIPAN).
GADIDAE
Gadus morhua Bacalao del Atlántico
La captura total registrada de esta especie en 1981 ascendió a 588 318 toneladas. Garrod
(1977) enumera 10 poblaciones importantes separadas de bacalao en la región del Atlántico
noroeste. Aunque el bacalao llega por el norte hasta los 70°N en la costa de Groenlandia,
la zona principal de explotación del bacalao y en la que más abunda se halla más al sur,
frente al Labrador y Terranova, e incluso hasta Nova Scotia, y en esas áreas constituye
la especie comercial más abundante.
Se sabe que el bacalao realiza movimientos migratorios anuales en estas regiones, siguiendo las migraciones de desove de las poblaciones de capelán, y puede hallarse, cerca del fondo, desde la zona de rompientes costeros hasta profundidades superiores a 200 m (NOAA, 1983). El bacalao se mueve mar adentro en primavera hacia las zonas de desove y durante el verano vuelve a aguas menos profundas. A la pesca del bacalao se dedican arrastreros modernos, hoy día principalmente del Canadaá y de los Estados Unidos, tras la partida de la mayoría de las flotas europeas de gran radio de acción, pero existen también pesquerías artesanales con trampas y otros tipos de artes, particularmente en las zonas costeras de Terranova. De las capturas estadounidenses de 1981, entre el 11 y el 33 por ciento se hicieron con redes de enmalle (NOAA, 1983).
Melanogrammus aeglefinus Eglefino
Es una de las varias especies de gran importancia comercial en el área de Nova Scotia y
Nueva Inglaterra y sustituye al bacalao como especie predominante en esas regiones más
meridionales. Algunos individuos de esta especie pueden llegar a pesar hasta 5 kg y se
hallan sobre todo a profundidades de 43–135 m, desde el oeste de Groenlandia hasta el
cabo Hatteras (NOAA, 1983). Las capturas en este área fueron superiores a 80 000 toneladas
en 1981, lo que representa una recuperación respecto de las capturas anuales de
principios de los años setenta, que eran inferiores a 30 000 toneladas, tras las cifras
sin precedentes de más de 200 000 toneladas conseguidas a finales de los años sesenta
(FAO, 1981; Gulland, 1983). Una de las poblaciones más importantes se explota en el Banco
Georges, frente a Nueva Inglaterra, con capturas que en 1981 ascendieron a 25 000 toneladas
(NOAA, 1983). Casi todas las capturas corresponden a Canadá y Estados Unidos y se hacen
con redes de enmalle y artes de arrastre de puertas (FAO, 1983; NOAA, 1983).
Merluccius bilinearis Merluza norteamericana
Esta especie se halla desde los bancos de Terranova hasta Carolina del Sur, con concentraciones
mayores, también en este caso, frente a la costa de Nueva Inglaterra. El desove
tiene lugar en aguas poco profundas entre marzo y noviembre y los adultos realizan luego
amplias migraciones para transcurrir el invierno en las aguas más profundas del golfo de
Maine y en el talud exterior de la plataforma continental. Los adultos pueden alcanzar
una talla de 65 cm (NOAA, 1983). Las capturas de esta especie han disminuido de más de
170 000 toneladas en 1976 a 61 000 en 1981 (FAO, 1983), debido, según se cree, a una grave
reducción de la biomasa de la población, que comenzó en los años sesenta. A partir de
principios de los años setenta se ha ido recuperando sólo lentamente y en algunos lugares (NOAA,
1983). De las 61 000 toneladas capturadas en 1981, 40 000 lo fueron en la URSS y la mayor
parte del resto por los Estados Unidos (17 000 toneladas). La pesca se hace sobre todo al
arrastre (Gulland, 1971). La FAO (1981) estima el potencial total de esta especie en unas
250 000–500 000 toneladas.
Urophycis tenuis Locha blanca
En 1981 se descargaron 26 000 toneladas, de las cuales 19 500 capturadas por Canadá. Las
capturas se han mantenido estables al menos desde 1977 (FAO, 1983).
Pollachius virens Carbonero
En 1981 se capturaron 58 000 toneladas, lo que representa un aumento respecto al quinquenio
anterior. Dos tercios de ese total fueron capturados por Canadá y un tercio por los
Estados Unidos (FAO, 1983). El aumento de las capturas se debe a un aumento del esfuerzo
directo de pesca durante los últimos cinco años, mientras anteriormente el carbonero se
capturaba sobre todo accidentalmente junto con otras especies de peces de fondo. El carbonero
es abundante sobre todo en el sudoeste de la plataforma de Nova Scotia y en el
golfo de Maine. Durante el período juvenil vive en aguas costeras y poco profundas, desplazándose
mar adentro a medida que va creciendo. El carbonero puede alcanzar unos 16 kg
de peso (NOAA, 1983).
SCORPAENIDAE
Sebastes spp. Gallinetas
En cada uno de los últimos seis años se han capturado entre 100 000 y 200 000 toneladas
de dos a tres especies de gallineta del Atlántico (FAO, 1983). Al menos la pesquería de
los Estados Unidos ha experimentado una disminución de la captura por unidad de esfuerzo
de Sebastes fasciatus y en los últimos tres o cuatro años se ha registrado una reducción
del índice de abundancia (captura media estratificada por lance) (NOAA, 1983). Gulland
(1983) da también datos (cuadros 5–9) que indican una disminución de las capturas de
gallineta en el área 3 de la CIPAN. Las gallinetas viven en aguas relativamente profundas
y son de crecimiento lento, con longitudes máximas de unos 50 cm. Se pescan en toda la
región, desde el oeste y el sur de Groenlandia (especialemnte S. marinus) hasta Terranova
(S. mentella) y el golfo de Maine (especialmente S. fasciatus) (FAO, 1981; NOAA, 1983).
La pesca se hace casi exclusivamente al arrastre (Gulland, 1971).
PLEURONECTIFORMES
Hippoglossoides platessoides Platija canadiense
En términos de peso de la captura, es la especie de peces planos más importante de la
región. En 1981 se capturaron 90 000 toneladas (FAO, 1983). Las principales zonas donde
se encuentran concentraciones comerciales de esta especie se hallan en la parte meridional
del golfo de San Lorenzo y en la plataforma frente a Nova Scotia (FAO, 1981). La mayoría
de las capturas las hacen embarcaciones canadienses, pero los Estados Unidos extraen unas
10 000 toneladas en el golfo de Maine (FAO, 1983; NOAA, 1983). Esta especie se halla a lo
largo de la plataforma continental, desde el Labrador hasta Rhode Island, sobre todo en
aguas comprendidas entre 50 y 100 brazas de profundidad (90–182 m) (NOAA, 1983). Los adultos
pueden alcanzar una longitud de hasta 80 cm (Pauly, 1978).
Reinhardtius hippoglossoides Halibut negro
En 1981 se capturaron 42 000 toneladas de esta especie, la mayor parte de ellas por embarcaciones
canadienses (29 000 toneladas). También Groenlandia capturó pequeñas cantidades
(5 800 toneladas) y el resto correspondió a barcos extranjeros (FAO, 1983). Estos peces
pueden alcanzar longitudes de más de un metro y pesos de más de 10 kg (Bowering y Brodie,
1981). Es especie de crecimiento lento, que se halla sólo en las aguas más frías del
norte del Pacífico y del Atlántico. En el área 21 su explotación tiene lugar en el estrecho
de Davis y ha aumentado rápidamente desde 1973, en que se pescaron sólo 9 000
toneladas (Atkinson et al., 1981).
Limanda ferruginea Limanda nórdia
Esta especie se encuentra desde el Labrador hasta la bahía de Chesapeake, y se halla en
cantidades comerciales en varias áreas: Banco Georges, al, sur de Nueva Inglaterra y cabo
Cod, y División 3NLO, al este de Terranova. Los adultos pueden alcanzar pesos de hasta
1 kg, aunque buena parte de las capturas consiste en ejemplares más pequeños, y se hallan
en aguas de 20 a 30 brazas (37–73 m) de profundidad (NOAA, 1983). Las capturas totales
fueron en 1981 de 33 000 toneladas, de las cuales 15 000 correspondieron a la URSS y
17 000 al Canadá (FAO, 1983), con una mortalidad por pesca en la pesquería de los Estados
Unidos superior a 1,0, frente a una Fmax estimada en 0,5 (NOAA, 1983). La pesca se hace
con redes de arrastre y de cerco de jareta.
Pseudopleuronectes americanus Solla roja
Se halla desde el Labrador hasta Georgia, a lo largo de la costa de América del Norte, pero
sobre todo en la zona comprendida entre la bahía de Chesapeake y el golfo de San Lorenzo
(NOAA, 1983). En 1981 las capturas ascendieron a 23 000 toneladas, que correspondieron en su
mayoría (19 000 toneladas) a los Estados Unidos (FAO, 1983). No se conoce el estado de las
poblaciones (NOAA, 1983).
Glyptocephalus cynoglossus Mendo
En 1981 se capturaron 13 000 toneladas y las capturas habían ido disminuyendo continuamente
durante los seis años anteriores (FAO, 1983). Esta especie parece preferir aguas de
más de 100 m de profundidad y abunda sobre todo alrededor de golfo de Maine. Los adultos
pueden alcanzar un peso de hasta 2 kg (NOAA, 1983).
Otras especies demersales, en particular brosmio (Brosme brosme), corvinata (Cynoscios spp.) y granadero (Coryphaenoides rupestris) se capturan en cantidades menores (menos de 10 000 toneladas al año), y otras varias especies en cantidades menores aún.
RECURSOS ICTICOS PELAGICOS
En 1981 se descargaron en este área poco más de 0,5 millones de toneladas de peces pelágicos. Casi todas las principales poblaciones pelágicas de esta zona han sido ya intensamente explotadas. El grueso de las capturas pelágicas corresponde a sólo cuatro especies, pero también algunas otras son importantes económicamente, sobre todo el salmón del Atlántico.
CLUPEIDAE
Brevoortia tyrannus Lacha tirana
La lacha tirana ha sido explotada desde mediados del siglo XIX; las capturas alcanzaron
un punto máximo a mediados de los años cincuenta, con unas 700 000 toneladas, y posteriormente
disminuyeron a menos de 200 000 toneladas a finales de los años sesenta. Desde
entonces han aumentado de nuevo (Schaaf, 1979). Las capturas registradas en 1981 en el
área 21 ascienden a 260 000 toneladas, aunque las capturas totales de los Estados Unidos,
incluidas las del área 31, fueron superiores a 400 000 toneladas (FAO, 1983). A esta
pesquería se dedican casi exclusivamente cerqueros y las capturas se utilizan para la
fabricación de harina de pescado (Reintjes et al., 1978).
Clupea harengus Arenque del Atlántico
En 1981 las capturas totales ascendieron a 224 000 toneladas, con una considerable disminución
respecto del total de más de un millón de toneladas que se conseguía a finales de
los años sesenta, debido a la explotación excesiva. El arenque se encuentra a lo largo
de la plataforma continental, desde Labrador hasta cabo Hatteras, y se pescan al menos
cinco poblaciones separadas desde Terranova hasta el golfo de Maine, que es la zona donde
más abunda (NOAA, 1983) (Sissenwine y Waring, 1979). La capturas corresponden casi exclusivamente
a Canadá y los Estados Unidos y se hacen con artes fijos y móviles (NOAA, 1983).
Mallotus villosus Capelán
La pesquería de capelán de media altura comenzó a principios de los años setenta como
pesquería industrial con pocos millares de toneladas y aumentó rápidamente durante los
años siguientes. En 1976 se capturaron más de 360 000 toneladas y las poblaciones de
media altura se depauperaron rápidamente, hasta el punto de que en 1979 y 1980 no se permitió
la pesca en esas aguas (FAO, 1983; Carscadden et al., 1981). Entre tanto la pesquería
de bajura ha ido en auemento y las capturas totales registradas en 1981 ascendieron
a 39 000 toneladas (FAO, 1983). Se ha manifestado cierta preocupación por el estado de
las poblaciones de capelán, debido a los hábitos alimentarios de la foca de Groenlandia,
que se sabe come gran número de peces de esta especie, y hay algunos indicios de que el
agotamiento de las poblaciones de capelán puede haber afectado las focas de Groenlandia
desde el punto de vista energético (UICN, 1981).
SCOMBRIDAE
Scomber scombrus Caballa del Atlántico
Las capturas de esta especie en el área 21 fueron en 1976 de 240 000 toneladas, pero al año
siguiente disminuyeron a 75 000 y en la actualidad (1981) las estadísticas muestran capturas
de 28 000 toneladas (FAO, 1983). A principios de los años setenta las capturas eran
aún mayores, con 420 000 toneladas en 1973, debido a la intensiva pesquería internacional
que tenía lugar en aquel entonces y a un reclutamiento excepcional a finales de los años
sesenta. En aquellas fechas, la mayoría de las capturas procedían de la subárea 5 de la
CIPAN (frente a cabo Cod). Para 1977 el número de países que participaban en la pesquería
se había reducido notablemente. En la pesquería de media altura se emplean redes de cerco
de jareta y redes de enmalle, mientras las pequeñas embarcaciones de pesca que faenan cerca
de la costa emplean artes muy diversos, tanto fijos como móviles (Anderson y Paciokowski,
1980), en algunos de los cuales (redes fijas) se capturan accidentalmente mamíferos marinos
(Gaskin, 1983). Las capturas de caballa corresponden sobre todo a embarcaciones canadienses,
estadounidenses y polacas. Las capturas de los Estados Unidos son inferiores a
5 000 toneladas (NOAA, 1983).
SALMONIDAE
Salmo salar Salmón del Atlántico
El salmón del Atlántico se pesca en los ríos y estuarios de varios países a ambos lados
del Atlántico. Hay también pesquerías pelágicas importantes en las zonas marítimas donde
estos peces se alimentan, sobre todo en el oeste de Groenlandia. Aunque las capturas en
esta región no superan de ordinario las 1 000 toneladas y la producción total de esta
especie en el Atlántico noroeste es de unas 3 000 toneladas al año, esta pesquería tiene
gran importancia económica. En alta mar, los salmones se capturan sobre todo con redes
de deriva, mientras a lo largo de la costa, cuando regresan a los ríos de origen para
reproducirse, se pescan con diversos tipos de artes, en especial redes fijas. Se sabe
que las redes de deriva causan la muerte de algunos cetáceos menores y los pescadores
de salmón ven también con malos ojos a los pinnípedos, por considerarlos vectores de
parásitos o depredadores del salmón (Christensen y Lear, 1974; UICN, 1981).
RECURSOS INVERTEBRADOS
Varias especies ocupan un lugar destacado en las estadísticas de captura de esta región. Gulland (1983) señala que las cifras correspondientes a vieiras y almejas están sobrestimadas, porque en el peso se incluye la concha, y que la especie más valiosa en aguas más septentrionales es sin duda alguna el camarón norteño Pandalus borealis, que se pesca al arrastre en el estrecho de Davis y del que se extrajeron en 1981 45 000 toneladas. La jaiba azul (Callinectes sapidus) es también una especie comercial importante en la zona de la bahía de Chesapeake, donde en 1981 se capturaron más de 50 000 toneladas, principalmente en trampas colgadas de palangres.
CALAMARES
En 1981 se capturaron en el área 21 cerca de 50 000 toneladas de calamares (FAO, 1983). Las dos principales especies comerciales son Loligo pealei e Illex illecebrosus, a cuya pesca se dedican flotas extranjeras de gran altura en el borde de la plataforma continental y embarcaciones locales en aguas costeras (NOAA, 1983). Localmente, las poteras parecen ser el arte más utilizado para la pesca de calamares (Voss, 1973). Voss (1973) ha observado en esta región gran número de mamíferos marinos que comen calamares y está de acuerdo con Gulland (1971) en que los recursos podrían ser muy abundantes.
El canadá y los Estados Unidos dominan las pesquerías de este área, con capturas de 1,16 y 1,24 millones de toneladas, respectivamente, en 1981. Groenlandia extrae unas 100 000 toneladas al año y también varios países europeos capturan en esta zona algunos peces y calamares. Gulland (1983) ha señalado la importancia del bacalao en las pesquerías de este área tanto históricamente como en la actualidad y, de hecho, a la familia de los gádidos correspondieron unas 800 000 toneladas de los 2 800 000 toneladas de todas las especies que se descargaron en 1981. Los peces demersales representaron 1 225 000 toneladas y los pelágicos unas 500 000, mientras el resto de las capturas fueron invertebrados.
Buena parte de las capturas totales se obtienen con redes de arrastre, cuya evolución ha sido resumida por Gulland (1983). También las redes de cerco de jareto son importantes en las capturas de peces pelágicos (véase recursos pelágicos). No parece que estos dos métodos de pesca determinen interacciones con los mamíferos marinos en este área.
Algunos artes tradicionales de pesca, como redes fijas, trampas, corrales y líneas de mano son aun importantes en muchas de las regiones costeras (Gulland, 1983) y la mayor parte de las especies de peces mencionados más arriba se capturan también en aguas de bajura con artes de estos tipos. Estos artes son causa de interacciones importantes con los mamíferos marinos, en especial las ballenas, que a menudo quedan apresados accidentalmente y causan graves daños al equipo de pesca. Lien (1981) señala que las colisiones de ballenas con artes de pesca han aumentado durante los últimos 10 años por varias razones, de orden biológico y económico, y que los daños a los artes y las capturas perdidas en 1979 y 1980 equivalen al 2–3 por ciento del valor anual total de las capturas de bajura en Terranova.
Gaskin (1983), entre otros, ha subrayado la importancia que la introducción de redes de enmalle de monofilamento ha tenido para la captura accidental de mamíferos marinos. Algunos reconocimientos realizados sugieren que el número de pescadores que utilizan esos artes en Canadá es muy superior al número de licencias concedidas. En opinión de Gaskin, estos artes son responsables de muchas muertes de cetáceos que otros tipos de equipo de pesca.
En resumen, parece que mientras los artes comerciales de arrastre y de cerco apenas crean problemas de interacción operacional con los mamíferos, o viceversa, es más fácil que surjan conflictos con los artes costeros, como las redes fijas tradicionales. También las redes de enmalle de monofilamento ocupan un lugar destacado en los conflictos entre artes y mamíferos marinos. Algunos mamíferos grandes, como las ballenas mysticetas y, entre todo, la ballena jorobada (Megaptera novaeangliae) se enredan a menudo en artes costeros. Lien (1981) ha estimado que esas ballenas son responsables del 70–90 por ciento de los daños sufridos por esos artes. Otras especies causantes son Balaenoptera acutorostrata, Balaenoptera physalus, Eubalaena glacialis, Delphinapterus leucas y Globicephala melaena. No todos los conflictos se producen con redes, pues se sabe de ballenas enredadas en líneas de nasas y otros tipos de líneas fijas.
Se cree que la causa principal de mortalidad entre los mamíferos marinos menores son las redes de enmalle: las especies afectadas son sobre todo Phocaena phocaena, Lagenorhynchus acutus y Cystophora cristata, aunque también la ballena jorobada y otros cetáceos mayores resultan a menudo capturados en artes de este tipo.
Hasta hace muy poco no había evidencia de interacciones biológicas entre los mamíferos marinos y las actividades pesqueras en este área. La reciente expansión de muchas pesquerías tradicionales y el inicio de la explotación de especies relativamente nuevas, como el capelán, ha hecho que estas interacciones resultaran más visibles. Al mismo tiempo, muchas especies de mamíferos marinos que hasta hace muy poco eran escasos han empezado de nuevo a aumentar en número. La reducción de las poblaciones de capelán, unida a la recuperación de la población de ballena jorobada en el área 21, ha movido a sugerir que quizás la escasez de capelán impida ahora la ulterior recuperación de la población de ballena jorobada (Whitehead, 1982). Al mismo tiempo, los cambios relativos de ambas poblaciones podrían contribuir al aumento de los daños sufridos por los artes en Terranova. La escasez de capelán podría afectar también a la población de foca de Groenlandia (UICN, 1981).
La expansión de la pesca en aguas más septentrionales, como el reciente aumento de las capturas de halibut negro y de camarón (Pandalus borealis), podría determinar también un nuevo nivel de interacción con varias especies de mamíferos marinos que viven en esas aguas y se alimentan de esas especies, como son, por ejemplo, los fócidos, el narval y la ballena blanca.
No hay que olvidar tampoco la rápida expansión de la pesquería de calamar. Se ha señalado que la abundancia en este área de mamíferos marinos consumidores de calamares es un indicador de la abundancia de estos últimos. Es posible que el volumen de la población de varios de esos mamíferos, como el calderón y el cachalote, vaya en aumento, por lo que no puede excluirse la posibilidad de conflictos si la pesquería de camarón prosigue su expansión. Mercer (1975) ha señalado ya que cuando las capturas de calderón empezaron a disminuir respecto de su nivel máximo aumentaron las capturas de calamares y muy bien podría suceder lo contrario si aumentara la abundancia de calderones.
Las interacciones más evidentes en este área son principalmente de carácter operacional, a pesar de que se trata de una de las zonas donde la explotación pesquera es más intensa. Ello se debe en parte al hecho de que las especies capturadas no coinciden en forma importante con los principales alimentos de los mamíferos marinos en este área.
Interacciones operacionales
Las interacciones con los artes se producen sobre todo en la costa, en pesquerías en pequeña escala. Las especies que resultan apresadas en diversos tipos de artes, sobre todo redes costeras fijas y trampas, son ballena franca, rorcual de aleta, ballena enana, ballena jorobada, delfín blanco, marsopa común y foca capuchina.
Interacciones biológicas
La foca gris es vectora de algunos parásitos de los peces que pueden causar considerables pérdidas a algunas pesquerías, en particular la de bacalao. Recientemente se ha sugerido que quizás las interacciones biológicas entre los mamíferos marinos y las pesquerías vayan adquiriendo mayor importancia. La expansión de algunas pesquerías podría impedir la recuperaciónde algunas poblaciones de mamíferos marinos. En particular, es posible que la foca de Groenlandia y el calderón pueden convertirse en competidores importantes de la explotación pesquera.
Eubalaena glacialis Ballena franca
El número de animales de esta especie que aún quedan en el norte del Atlántico es muy pequeño,quizás de sólo algunos centenares. No se sabe de ninguna interacción con las pesquerías
en la actualidad, ni es probable que las haya. Estos cetáceos no comen ninguna
especie de peces de importancia comercial.
Balaena mysticetus Ballena de cabeza arqueada
Jonsgaard (1981) indica que en los últimos 23 años se han avistado en este área al máximo
nueve animales; la posibilidad de que haya una población de reproductores es, pues, escasa,
y no es probable, por tanto, que haya interacciones con las actividades pesqueras.
Balaenoptera physalus Rorcual de aleta
No se conoce el volumen de la población del nordeste del Atlántico, pero podría ser de
algunos millares. Esta especie, al igual que otras ballenas mysticetas, ha sufrido una
gravísima reducción, pero, a diferencia de algunas de ellas, se alimenta de especies de
peces de importancia comercial (Tomilin, 1967), como arenque y capelán, que en la actualidadse explotan intensamente en este área. No se puede excluir, por tanto, la posibilidad
de que la pesquería afecte a la recuperación de las poblaciones de rorcual de aleta.
Balaenoptera musculus Ballena azul
También el nivel de abundancia de esta población es actualmente muy bajo; durante la campaña
ballenera de 1982 los balleneros islandeses comunicaron 245 avistamientos, con un total de
462 ballenas azules (IWC SC/35 Informes de Islandia, 1983). Esta especie no se alimenta de
peces y no es probable que resulte afectada por las pesquerías comerciales.
Balaenoptera acutorostrata ballena enana
La ballena enana ha sido conocido, durante varios siglos al menos, como consumidora de
peces, en especial arenque (Von Brandt, 1972). Jonsgaard (1982), entre otros, ha señalado
otras varias especies comerciales consumidas por la ballena enana, incluido el bacalao.
Es posible que esta especie sea hoy día menos abundante en el área 27 que en años anteriores,al igual que varias de las especies de que se alimenta, y ello podría hacer que surgieran
mayores conflictos con varias pesquerías, en particular las de capelán, arenque y
bacalao. Hasta la fecha, sin embargo, los casos comunicados son pocos.
Balaenoptera borealis Rorcual negro
No se conoce el volumen de la población de rorcual negro en el área 27, pero está gravementereducida y probablemente no excede de algunos millares de animales. Los peces no
constituyen parte importante de su dieta, por lo que es posible que no haya interacciones
con ninguna pesquería.
Megaptera novaeangliae Ballena jorobada
El informe del Subcomité sobre especies protegidas y cacerías aborígenes de ballenas
(IWC, 1982) señala que esta especie transcurre el invierno en la región del Caribe e indicaque en el pasado se han avistado algunos animales en las Azores. No se dispone de
estimaciones de la población, pero es poco probable que sea superior a algunos millares.
Se sabe que la dieta de esta ballena incluye algunas especies de peces, como el capelán
(Tomilin, 1967), que se explota intensamente en la parte nordoriental del área 27. No se
puede excluir por tanto, la posibilidad de que esta pesquería afecte al ritmo de recuperaciónde la población de ballena jorobada en el área 27.
Mesoplodon bidens Mesoplodón de Sowerby
Esta especie se ha avistado en raras ocasiones y se alimenta de calamares en aguas profundas.Es poco probable, pues, que se produzcan interacciones con alguna pesquería
comercial.
Mesoplodon europaeus Mesoplodón de Gervais
Vive también en aguas profundas y algunos individuos llegan ocasionalmente a las costas
europeas siguiendo la corriente del Golfo. No es probable que entre en contacto con
ninguna pesquería.
Mesoplodon grayi Mesoplodón de Gray
Al igual que los demás mesoplodones se avista raras veces y vive en aguas profundas.
Mesoplodon mirus Mesoplodón de True
Esta especie, como las demás, es rara y no es probable que entre en conflicto con las
actividades pesqueras.
Ziphius cavirostris Ballena picuda de Cuvier
Es rara y se alimenta de calamares, por lo que no es probable que haya interacciones con
las pesquerías en la actualidad.
Hyperoodon ampullatus Ballena de hocico de botella del norte
Mitchell (1977) ha demostrado que la población está actualmente depauperada como consecuenciade decenios de explotación en el norte del Atlántico. Prefiere aguas profundas y
se alimenta de calamares, por lo que no es probable que se produzcan interacciones con las
actividades de pesca, a menos que se exploten intensamente las poblaciones de calamares.
Physeter macrocephalus Cachalote
Los mapas de Townsend muestran las zonas principales de distribución del cachalote en
torno a las Azores, donde existía y existe aún una industria ballenera centrada en esta
especie (véase, por ejemplo, Clarke, 1981). No se conoce el volumen de la población del
nordeste, pero se puede suponer que es del orden de algunos millares. El informe del
Subcomitè sobre el cachalote (IWC, 1982) estima las poblaciones explotadas por los ballenerosislandeses en 58 000 animales. Igual que en el caso de otras especies que se alimentan
sobre todo de calamares, no es probable que haya interacciones con la actividad
pesquera a menos que se intensifique la explotación del calamar.
Kogia breviceps Cachalote pigmeo
Duguy (1977) dice que esta especie es rara en aguas francesas y, aunque Clarke (1981) señalasu presencia en las Azores, tampoco es común en esas islas. No se sabe nada sobre el
volumen de la población, y como tampoco hay datos claros `sobre su alimentación no es posible
hacer ninguna suposición sobre eventuales interacciones con la pesca.
Monodon monoceros Narval
Se sabe que se alimenta de peces comerciales (Tomilin, 1967). No se conoce el volumen de
la población en el área 27, pero quizás se halle aún gravemente reducida (Tomilin, 1967).
Ello hace posible alguna interacción con las pesquerías comerciales de las especies de que
se alimentan los narvales, aunque Tomilin sugiere que su alimento principal en estas zonas
son los calamares pelágicos.
Delphinapterus leucas Ballena blanca
Bjorge et al. (1981) han observado los hábitos alimentarios de esta especie, que según
parece, al menos en una ocasión, ha creado problemas a los pescadores locales de Finnmark
(Noruega) como consecuencia de una “migración desusual” a esa zona. Tomilin (1967) dice
que se halla en aguas costeras frías y en el informe del Subcomité sobre los cetáceos
menores (IWC, 1982) se cifra en 232 y 1 570 el número mínimo y máximo de ballenas blancas
en los mares de Barents, Kara y Blanco. Tomilin menciona también varias especies comercialesde peces de que se alimentan estas ballenas, entre las que figura el salmón, por lo
que existe al menos la posibilidad de conflictos.
Steno bredanensis
Duguy (1977) no registra su presencia en aguas francesas y Clarke (1981) no lo menciona
tampoco en las Azores. Hershkovitz (1966), sin embargo, dice que esta especie se halla
desde los Países Bajos hasta Portugal. Probablemente es rara en este área y, como no se
conoce su alimentación, no es posible evaluar la probabilidad de interacciones con las
pesquerías.
Pseudorca crassidens Falsa orca
Según parece no es especie común en este área y no se ha registrado ninguna interacción
con las pesquerías. Dados sus hábitos pelágicos y oceánicos, las posibilidades de interacciónparecen pequeñas, aunque en otras áreas come peces de importancia comercial.
Orcinus orca Orca
Se ha sugerido varias veces que la orca puede ser perjudicial para las poblaciones de peces,sbre todo para las poblaciones de arenque que se hallan alrededor de Noruega (véase
Hiby y Harwood, 1981), pero el análisis teórico hecho por Hiby y Harwood ha mostrado que
la orca no afecta necesariamente la dinámica de las poblaciones de arenque. Es indudable,
por otro lado, que al menos algunos pescadores consideran que esta especie es dañina.
Christensen (1982) señala además que frente a Islandia la orca crea a veces tales problemas
a los pescadores de halibut que en ocasiones han tenido que interrumpir las faenas.
Mitchell (1975a) dice que la presencia de orcas en las aguas costeras de Islandia se con
sideraba tan perjudicial que se pidió a la Marina de los Estados Unidos que acabara conellas.Centenares de animales perecieron de esa manera en los años cincuenta. No se dispone
de estimaciones de la población en el área 27, pero se puede asegurar con certeza que
esta especie no es rara, al menos en las aguas costeras más frías.
Globicephala melaena Calderón
En ocasiones se capturan accidentalmente animales de esta especie en redes de pesca en el
área 27. Duguy y Hussenot (1982) dan detalles de cinco capturas de ese tipo en la costa
francesa del Atlántico entre 1971 y 1981: tres de ellas en redes de arrastre de fondo o
pelágicas y dos en redes de enmalle. Esta especie es también objeto de explotación, sobre
todo en las islas Faeroes, donde anualmente se capturan más de 1 000 animales. No se conoceel volumen de la población, pero se supone que es estable y quizás ascienda a algunos
centenares de millares. Se alimenta principalmente de calamares (Sergeant, 1962), aunque
es posible que coma también peces.
Globicephala macrorhynchus Globicéfalo
Clarke (1981) registra la presencia de esta especie en las Azores, aunque según parece no
es común y no se halla más al norte. No es probable, pues, que haya interacciones con las
actividades de pesca.
Lagenorhychus albirostris Delfín cariblanco
Se sabe que esta especie se alimenta de peces de importancia comercial, en particular
bacalao, merlán y arenque (Tomilin, 1967). Según Tomilin es más frecuente en el mar del
Norte, especialmente hasta Noruega, y en la costa oriental de Gran Bretaña. Aguayo (1978)
considera que es una de las especies que “viven normalmente” en el Báltico. Leatherwood
y Reeves (1983) indican que todos los años se capturan accidentalmente algunos ejemplares
en redes de arrastre en el mar del norte. La presencia de varias especies de peces comercialesen su dieta puede hacer pensar en cierta competencia con la explotación pesquera.
Lagenorhynchus acutus Delfín blanco del Atlántico
El volumen de la población de esta especie, que se sabe come peces de importancia comercial,
es desconocido, pero Tomilin (1967) señala que entra en los fiordos noruegos en gran número
persiguiendo a los arenques. Se ha registrado también su presencia en el Bático, pero
Aguayo (1978) sugiere que quizás sea rara en esas aguas.
Tursiops truncatus Tursón
Duguy (1977) y Duguy y Hussenot (1982) informan de capturas accidentales de esta especie,
señalando que en los 10 años comprendidos entre 1971 y 1981 se capturaron tres ejemplares
en redes de arrastre pelágicas o de fondo en la costa francesa del Atlántico. Duguy (1977)
dice que esta especie está muy extendida pero no es común y Aguayo (1978) sugiere que
quizás visite regularmente el mar Báltico. No se conoce el volumen de la población y
se ha prestado poca atención a su dieta en este área, pero probablemente incluye algunas
especies comerciales. Es probable que las interacciones con las actividades pesqueras
sean más importantes de lo que se sabe.
Grampus griseus Delfín de Risso
Esta especie se captura también a veces accidentalmente en diversos tipos de redes. Duguy
y Hussenot (1982) informan de la captura de dos animales en redes de enmalle a lo largo de
la costa atlántica francesa entre 1971 y 1981. Clarke (1981) sugiere que esta especie es
común en las Azores, mientras Aguayo (1978) señala que sólo visita el Báltico en raras ocasiones.Su dieta consiste sobre todo en calamares, por lo que no parece haber muchas probabilidades
de interacciones con las pesquerías por el momento, aparte de algunos apresamientos ocasionales en las redes.
Stenella coeruleolaba Delfín rayado
Tampoco esta especie se halla frecuentemente en las redes como captura accidental. Duguy
y Hussenot (1982) informan de dos animales capturados en redes de enmalle en la costa francesa
del Atlántico, pero indican además que es posible que en los 10 años comprendidos entre
1971 y 1981 los pescadores franceses hayan matado en alta mar, para procurarse alimentos,
varios millares de animales de esta especie y de delfín común. No se conocen los efectos
que ello puede haber tenido en la población. La dieta de estos animales en este área es
poco conocida, y lo mismo puede decirse de otras interacciones potenciales con la pesca.
Delphinus delphis Delfín común
Duguy y Hussenot (1982) informan de la captura de 25 individuos de esta especie entre 1971
y 1981: dos en palangres para tiburones, ocho en redes de enmalle y 15 en artes de arrastre.
Collet (1983) comunica también 16 capturas accidentales confirmadas en las pesquerías costeras
francesas del Atlántico en 1981. Se sabe que frente a las costas de Francia esta
especie come espadín, sardina y anchoa (Tomilin, 1967). Probablemente se capturan también
regularmente en otras zonas animales de esta especie, pero sin hacer comunicación alguna.
Duguy (1967) sostiene que es el más común de los cetáceos menores en la costa francesa del
Atlántico y añade que los pescadores franceses capturan muchos animales de esta especie
mientras se hallan en el mar, para disponer de carne fresca a bordo. No se conocen los
efectos que ello tiene en la población ni la importancia de las interacciones entre esta
especie y las pesquerías que explotan especies de que se alimenta.
Phocoena phocoena Marsopa común
Andersen y Clausen (1983) han sugerido que un número considerable de animales de esta especie,
quizás varios centenares al año, quedan apresados en redes de arrastre danesas.
Gaskin (1983) da cifras del número de animales de esta especie apresados en redes escocesas.
En un año han llegado a capturarse así hasta 24 animales, sobre todo en redes
bacaladeras fijas. Gaskin cita también opiniones de otros muchos autores, según las cuales
esta especie se está haciendo más rara en el área 27, aunque Easton et al. (1982) indican
lo contrario, sobre la base del número de animales encallados en Gran Bretaña. Aguayo
(1978) sugiere que esta especie es una de las que “viven normalmente” en el Báltico, pero
indica que quizás, sea ahora mucho más rara que en años anteriores. No se conoce el volumen
de la población y tampoco es claro hasta qué punto se producen interacciones con las pesquerías,
pero es evidente que se hacen algunas capturas accidentales y probablemente hay
también cierta competencia por algunas capturas especies de peces. Tomilin (1967) incluye en la
dieta de esta especie en el Atlántico arenque, capelán, caballa, sardina, bacalao, bacalao
del Báltico, merlán, anguila, salmónidos pequeños y lenguado.
Odobenus rosmarus Morsa
La población del área 27 se halla sólo en dos regiones: en torno a Spitzbergen y en Novaia
Zembla, y probablemente no excede de pocos centenares de animales (Fay, 1981). No parece
haber ningún conflicto con la pesca por el momento, ni es probable que lo haya en el fututro,
a menos que se desarrolle una pesquería de moluscos en esas aguas.
Phoca vitulina Foca común
Se sabe que estos fócidos consumen algunas especies comerciales de peces especialmente en
aguas poco profundas o costeras. La población del nordeste del Atlántico podría ser del
orden de unos 50 000 animales. Según parece, todos los años se matan en el área 27, en
operaciones de caza, entre 6 000 y 8 000 individuos (Bonner, 1979c), sobre todo en Islandia.
La población del Báltico es en la actualidad críticamente baja, del orden quizás de sólo
150 animales (Almkvist, 1977). Se dice que también los pescadores del Báltico se quejan
de estos fócidos (Almkvist, 1977). No hay datos de capturas accidentales, pero es evidente
que, dada la dieta de esta especie, tiene que haber competencia con las pesquerías
en varios lugares (Bigg, 1981).
Phoca hispida Foca marbreada
Esta especie, que es uno de los dos pinnípedos principales del Báltico, se halla solamente
en las regiones más septentrionales del área 27, en el mar de Barents (Frost y Lowry, 1981).
Se dice que es la foca más abundante del Artico, con una población total de 6–7 millones;
en el mar Blanco se capturan anualmente unos 3 500 animales (Stirling y Calvert, 1979).
Stenman (1978) sugiere que la foca marbreada causa daños a las pesquerías de salmón del
Báltico, pero esa es la única zona en la que se sabe de interacciones, aunque es posible
que su dieta incluya algunas especies comerciales (Frost y Lowry, 1981).
Phoca groenlandica Foca de Groenlandia
Aunque esta especie es más numerosa en el área 21, se encuentran también poblaciones importantes
en el área 27. La población del mar de Barents ha causado recientemente graves
conflictos con los pescadores en el norte de Noruega. Entre 1978 y 1981 muchos de estos
fócidos se desplazaron hacia el sur para alimentarse del capelán que emigra hacia las
costas de Noruega. Bjorge et al. 1981) indican que en cada uno de esos años quizás hasta
10 000 focas de Groenlandia hayan perecido ahogadas en redes bacaladeras fijas, causando
daños a las redes y a las capturas por valor de varios millones de coronas. Oritsland
(com. pers.) señala que la invasión de las costas de Finnmark por gran número de focas de
Groenlandia ha proseguido en 1982, 1983 y 1984.
Erignathus barbatus Foca barbuda
Burns (1981) cita a Chapskii (1966) que estima en 300 000 animales la población de esta
especie en todo el norte del Atlántico. Estas focas se hallan sólo en las regiones más
septentrionales y se alimentan de organismos bentónicos. No se sabe de interacciones con
las pesquerías ni parece que sean probables.
Cystophora cristata Foca capuchina
Se halla alrededor de la isla de Jan Meyen y llega por el este hasta la isla de los Osos.
No se conoce el volumen de la población, pero quizás sea de algunos centenares de millares
(Reeves y Ling, 1981). Sergeant (1976, citado en Reeves y Ling) ha sugerido que la gallineta
puede constitutir parte importante de su dieta, en cuyo caso podría haber cierta
competencia con las pesquerías. Oristland (com. pers.) señala que frente a las costas septentrionales
de Noruega se capturan algunas focas de esta especie en palangres y redes
salmoneras de deriva, aunque según parece los daños a los peces y a los artes tienen poca
importancia.
Halichoerus grypus Foca gris
La población de esta especie en el área 27 se estima en unos 100 000 individuos, muy pocos
de los cuales se hallan en el Báltico. Esta especie se alimenta de ordinario cerca de la
costa y entra continuamente en conflicto con los pescadores debido a los daños que causa
a las redes, especialmente a las redes fijas, y a las capturas, sobre todo a las de salmón.
Stenman (1978), refiriéndose al Báltico, dice que un dos por ciento, aproximadamente, de
las capturas de salmón resultan dañadas por focas grises. Esas focas crean también problemas
en Escocia y Noruega (CIEM, 1981) y se ha sugerido que quizás causen graves pérdidas
a las industrias pesqueras de esos países, ya que se sabe que su dieta incluye
muchas especies de importancia comercial (Parrish y Shearer, 1978; CIEM, 1981). Algunos
trabajos hechos recientemente por la Unidad de Investigación sobre los Mamíferos Marinos
del Reino Unido sugieren que quizás se hayan sobreestimado esos efectos, ya que la dieta
de la foca gris consiste en buena parte en peces pequeños y poco valiosos, como el lanzón
(NCC, 1984). La Unidad de Investigación sobre los Mamíferos Marinos ha examinado heces de
focas tomadas de nueve lugares en torno a las Islas Británicas. Los resultados indican
que la dieta de las focas grises británicas está compuesta como sigue: 60 por ciento
lanzones (Ammodytes), 12,4 por ciento brosmio y maruca (Brosme brosme y Molva molva),
6,7 por ciento Trisopterus, 6,3 por ciento merlán (Merlangius merlangius), 5,8 por ciento
peces planos, 5,1 por ciento eglefino, carbonero y abadejo, 3 por ciento bacalao y menos
del uno por ciento bacaladilla, borrachos, gobio, arenque, espadín y jurel.
Las focas grises, además, hospedan el parásito de los peces Phoconoema decipiens (UICN, 1981), que causa también pérdidas a la industria pesquera. Ello puede constituir un problema particular en algunas zonas y ha sido la razón de lagunas matanzas selectivas de focas grises (Bonner, 1981a).
Monachus monachus Foca monje del Mediterráneo
Sergeant et al. (1978) señalan algunos avistamientos aislados de esta especie en las Azores,
pero probablemente no existe una población reproductora en esa zona y el escaso
número de animales excluye toda interacción apreciable con las pesquerías en este área.
Las interacciones entre los mamíferos marinos y las actividades pesqueras en el área 27 están relativamente bien documentadas, pero en el caso de varias especies, como marsopa común, delfín común y foca común, no se conoce bien su importancia. De las 36 especies descritas, al menos 17 comen peces de importancia comercial y otras ocho o nueve parecen alimentarse sobre todo de calamares. La intensidad de las operaciones de pesca en el área 27 es tal que prácticamente todo mamífero marino que consuma peces de valor comercial competirá en alguna forma con una pesquería. De igual modo, probablemente son pocas las especies (quizás sólo las más raras) que no se capturan accidentalmente durante las faenas de pesca en alguna parte de este área.
Por fortuna, las capturas accidentales en esta región no parecen ser muy numerosas, salvo quizás las de marsopa común en redes de arrastre danesas reseñadas por Andersen y Clausen (1983) y las capturas extraordinarias de focas de Groenlandia en el norte de Noruega en los últimos años.
Como era de suponer en un área intensamente explotada y con gran número de especies de mamíferos marinos, los casos registrados de conflictos “de competencia” entre mamíferos marinos y pesquerías son relativamente numerosos.
RECURSOS ICTICOS DEMERSALES
Las capturas de especies demersales en 1981 alcanzaron un total de 5 469 846 toneladas (FAO, 1983). Igual que en el Atlántico noroeste, las principales especies comerciales son peces planos, sobre todo platija, y gádidos, en particular bacalao. Las pesquerías comerciales de esta región son de las más antiguas del mundo y muchos de los métodos modernos de pesca se aplicaron por primera vez en esa región; quizás debido a ello muchas poblaciones de esta región están hoy plenamente explotadas o sobreexplotadas. De todas maneras, esta región sigue siendo la segunda más productiva del mundo, después del área 61.
GADIDAE
Gadus morhua Bacalao del Atlántico
Esta especie es quizás la más importante de la región y se ha pescado, partiendo de las
costas europeas desde hace muchos siglos. Existen numerosas poblaciones, cuya distribución
va desde el Canal de la Mancha y el mar del Norte hasta el Báltico por el este,
Islandia por el oeste y el mar de Barents por el norte. Muchas de ellas están probablemente
excesivamente explotadas, como demuestran los informes correspondientes de los
grupos de trabajo del CIEM. En el mar del Norte, por ejemplo, la población ha ido en
disminución, mientras las capturas se han mantenido estables; la mortalidad por pesca ha
aumentado alrededor de 1,0, mientras la Fmax es quizás de 0,25. También en la división 6a,
al oeste de Escocia, la mortalidad actual por pesca es muy superior al valor de la Fmax.
En la mayor parte de las áreas el bacalao se pesca al arrastre, aunque en el mar del Norte se utilizan también con buenos resultados redes de cerco danesas para capturar esta y otras especies de peces demersales (Gulland, 1983). En varias áreas se utilizan métodos más tradicionales, como redes fijas montadas sobre estacas, líneas, redes de enmalle, etc. Bjorge et al. (1981) mencionan el uso de redes caladas en el norte de Noruega para la capbacalao en Escocia, indicando que en ellas han quedado atrapadas marsopas comunes. La captura total de bacalao en el área 27 fue en 1981 superior a 1,7 millones de toneladas.
Micromesistius poutassou Bacaladilla
Esta especie es, entre las demersales del área 27, la que mayores capturas produce después
del bacalao. En 1981 se pescaron 870 000 toneladas, mientras en los dos años precedentes
la cifra fue superior a un millón. La principal zona de desove se halla al oeste y norte
de Escocia y se extiende desde las costas del suroeste de Irlanda hasta el área comprendida
entre las islas Faroes y las Orcadas. Los peces adultos se encuentran desde el Mediterráneo
hasta Spitzbergen, y hasta hace muy poco esta especie se explotaba sólo muy ligeramente.
Durante la temporada de desove se hallan a varios metros de profundidad sobre el borde de
la plataforma continental y, como durante el resto del año los peces viven muy dispersos,
es en esas áreas donde se concentra la mayor parte del esfuerzo de pesca. A la captura
de esta especie se dedican sobre todo grandes arrastreros (más de 40 m de eslora) que
utilizan redes de arrastre pelágica y en ocasiones, cuando los peces se hallan cerca del
borde de la plataforma, redes de arrastre de fondo con relinga de corchos alta (Pawson,
1979).
Pollachius virens Carbonero
Se encuentra sobre todo al oeste de las Islas Británicas, en la parte septentrional del
mar del Norte y alrededor de las Faeroes, Islandia y Noruega. En 1981 las capturas de
esta especie fueron superiores a 420 000 toneladas, procedentes de al menos cinco poblaciones
identificadas por el grupo de Trabajo del CIEM sobre el carbonero. A su explotación
se dedican sobre todo arrastreros, aunque existe también una pesquería importante de
cerco, con barcos principalmente noruegos, que se dedica a la captura de formas juveniles
en el mar del Norte y frente a las costas de Noruega.
Trisopterus esmarkii Faneca noruega
Es uno de los llamados peces industriales, utilizados exclusivamente para la fabricación de
harina y de aceite y cuya explotación ha empezado sólo hace poco. Es un pez pequeño, que
vive de ordinario a pocos metros del fondo del mar, en aguas de 100 a 250 metros de profundidad.
Se encuentra sólo en la parte septentrional del mar del Norte y áreas adyacentes,
y a su captura se dedican sobre todo arrastreros daneses. Las capturas han disminuido
respecto del máximo de 300 000 toneladas alcanzado en 1974, pero el estado de la población
no es claro y el reclutamiento parace ser muy variable.
Melanogrammus aeglefinus Eglefino
La distribución de esta especie es similar a la del bacalao, aunque su zona de distribución
es menos amplia. Según parece está ya sobreexplotada en el mar del Norte y al oeste de
Escocia, pero las capturas en torno a las Faeroes han permanecido más estables. Las capturas
totales de esta especie ascendieron en 1981 a 333 000 toneladas, lo que representa
un aumento respecto de 1980 pero es menos de lo que se pescaba a principios de los años
setenta, cuando anualmente se capturaban más de 500 000 toneladas. La pesca se hace sobre
todo al arrastre, aunque Gulland (1983) menciona una pesquería de ésta y otras especies
con redes de cerco danesas en el mar del Norte.
Merlangius merlangius Merlán
Las capturas totales de esta especie fueron en 1981 de 189 000 toneladas y se han mantenido
relativamente estables durante los últimos cinco años, pero son de todas maneras
inferiores a las de mediados de los años setenta, que superaban las 250 000 toneladas
(FAO, 1983; 1977). Su zona de distribución se limita sobre todo a las aguas en torno
a las Islas Británicas, con pequeñas zonas de desove y algunas poblaciones alrededor de
las islas Faeroes y el sudoeste de Islandia. Parece que en la actualidad la población
está plenamente explotada.
SCORPAENIDAE
Sebastes spp. Gallineta
Esta especie, que es de crecimiento lento y vive en aguas profundas, se halla sobre todo
en aguas septentrionales, desde el sur de Groenlandia hasta el mar de Barents. Las capturas
anuales en 1981 fueron de 250 000 toneladas.
AMMODYTIDAE
Ammodytes spp. Lanzones
La principal especie en esta pesquería es A. marinus, que se halla en cantidades comerciales
alrededor de las Islas Británicas, en el mar del Norte y a lo largo de la costa
de Noruega. Los adultos son abundantes sobre todo a profundidades de 20 a 40 metros en
la parte septentrional del mar del Norte, aunque en los últimos años se han explotado
también con éxito aguas más profundas. Las capturas aumentaron a un máximo de 800 000
toneladas en 1978, disminuyendo luego a 630 000 toneladas en 1981. El 66 por ciento de
los desembarques de 1978 procedían del Banco de Dogger, en la parte septentrional del mar
del Norte. Hay gran incertidumbre sobre el estado de esta población. La mayoría de las
capturas corresponden a arrastreros daneses.
PLEURONECTIDAE
Pleuronectes platessa Solla
Esta especie se ha explotado desde hace mucho tiempo y fue una de las primeras pescadas
con redes de arrastre en el mar del Norte. Las capturas se han mantenido relativamente
estables durante varios años, en torno a unas 150 000 toneladas, pero la mayoría de las
poblaciones se han explotado intensamente. Se cree que la mortalidad por pesca de la
población del mar del Norte es muy superior a la Fmax. La pesca se hace sobre todo con
redes de arrastre y con redes de cerco danesas.
OTRAS ESPECIES
Todas las especies mencionadas más arriba produjeron en 1981 más de 100 000 toneladas, pero hay otras varias poblaciones que dieron capturas superiores a 10 000 toneladas, cifra que en una zona menos productiva representa una producción comercial importante. Entre los gádidos, la merluza y la maruca (Merluccius merluccius y Molva molva) produjeron en 1981 77 000 y 58 000 toneladas, respectivamente. El lenguado Solea solea produjo 25 000 toneladas, lo que representa una captura económicamente valiosa, y también las capturas de rape (Lophius piscatorius) son importantes, con 49 000 toneladas en 1981.
RECURSOS ICTICOS PELAGICOS
En 1981 se capturaron cerca de 5 millones de toneladas de peces pelágicos. De ese total, más de la mitad correspondió a capelán (utilizado sobre todo para la fabricación de harina y aceite), que ha sustituido al arenque como especie más importante en peso. Muchas poblaciones de arenque han llegado al colapso debido a una explotación excesiva y actualmente se hallan en un nivel muy bajo. La mayoría de las demás especies pelágicas están ya, con toda probabilidad, plenamente explotadas.
OSMERIDAE
Mallotus villosus Capelán
Las poblaciones de capelán de Islandia, norte de Noruega y mar de Barents sólo se han explotado
desde los años sesenta, y las capturas han alcanzado la cifra máxima de 3,7 millones
de toneladas en 1977, disminuyendo desde entonces ligeramente. A la explotación de
esta especie se dedican sobre todo embarcaciones de Islandia, la Unión Soviética y Noruega,
utilizando redes de cerco de jareta. Gulland (1983) señala que las poblaciones se hallan
en estado razonablemente bueno.
CLUPEIDAE
Clupea harengus Arenque del Atlántico
El arenque, que era antes una de las dos especies más importantes del nordeste del
Atlántico, se ha sobreexplotado hasta tal punto que en algunos lugares el reclutamiento
es hoy prácticamente inexistence. El arenque se ha pescado y se pesca aún hoy en diversas
formas, aunque quizás los artes más eficientes sean los de cerco de jareta. Los cupos
de captura de la mayoría de las especies se han reducido notablemente, en ciertos casos a
cero, y en algunas áreas hay señales de recuperación.
Sprattus sprattus Espadín
Es uno de los varios peces “industriales” que se capturan en grandes cantidades (238 000)
toneladas en 1981) en aguas costeras del mar de Norte y en el Báltico. A su pesca se
dedican sobre todo arrastreros daneses. Los efectos que esta pesquería puede tener en la
recuperación de las poblaciones de arenque del mar del Norte han dado lugar a algunos
debates, ya que en esta pesquería se capturan accidentalmente cantidades considerables
de arenque.
Sardina pilchardus Sardina
Se trata de una especie más meridional, que se captura en aguas costeras de Francia, España
y Portugal, con un total de más de 500 000 toneladas en 1981. La mayoría de las capturas
corresponden a embarcaciones portuguesas y españolas, sobre todo barcos pequeños de bajura
de menos de 50 TRB (Agra Europe, 1981).
CARANGIDAE
Trachurus trachurus Jurel
En 1981 se capturaron 156 000 toneladas en la parte meridional del área 21, lo que representa
una disminución respecto de principios de los años setenta, cuando las capturas eran
superiores a 300 000 toneladas.
SCOMBRIDAE
Scomber scombrus Caballa
En 1981 se capturaron unas 575 000 toneladas, precedentes de dos poblaciones: una en el
mar del Norte y otra al oeste de Gran Bretaña. Los informes del Grupo de Trabajo del CIEM
revelan que ambas poblaciones están sobreexplotadas y parece dudoso que la del mar del
Norte pueda seguir sosteniendo una pesquería tan importante como la actual. La caballa se
captura con diversos artes, el más eficaz de los cuales es quizás la red de cerco de jareta,
pero en algunas zonas, como en el sudoeste de Inglaterra, se utilizan también líneas de
mano.
Otras poblaciones pelágicas importantes son la anchoa (29 000 toneladas), en la parte meridional, y varias especies de túnidos que, aunque no dan capturas voluminosas en peso, tienen de todas formas importancia comercial. La especie de atún más productiva es el atún blanco Thunnus alalunga, con 28 000 toneladas en 1981. Hay que mencionar también el salmón, sobre todo porque se captura aún con redes fijas tradicionales a lo largo de las costas de Escocia y Escandinavia, donde a veces existe considerable antagonismo entre los pescadores de salmón y las focas grises, que visitan frecuentemente las redes salmoneras y causan daños a los artes y a las capturas.
RECURSOS INVERTEBRADOS
CRUSTACEA
Varias especies son comercialmente importantes, sobre todo buey (Cancer pagurus), camarón norteño (Pandalus borealis), cigala (Nephrops norvegicus) y quisquilla (Crangon crangon). Estas especies se capturan de diversas formas. A la pesca de camarón norteño se dedican arrastreros daneses en el Kattegat y el Skagerak, y otros arrastreros más al norte (54 000 toneladas en 1981). La quisquilla (40 000 toneladas) se pesca sobre todo en los estuarios arenosos de la costa del mar del norte, a menudo con redes especiales (Holthuis, 1980).
MOLLUSCA
El berberecho (Cardium edule), el mejillón (Mytilus edulis), la vieira (Pecten maximus) y la ostra (Crassostrea spp.) son todas especies de importancia local, que se explotan sobre todo en pequeña escala, a menudo a mano.
CEPHALOPODA
Los calamares constituyen una parte sorprendentemente pequeña de las capturas totales en este área, con unas 35 000 toneladas en 1981, es decir el 0,2 por ciento de la captura total de todas las especies. Se extrajeron además 15 000 toneladas de pulpo. Voss (1973) sostiene que la mayoría de las capturas de calamares se obtienen accidentalmente durante la pesca al arrastre de peces y que el potencial total del Atlántico nordeste es muy superior a las capturas actuales.
Este área es una de las más productivas del mundo y con una producción total de más de 11,6 millones de toneladas en 1981 ocupa el segundo lugar después del Pacífico noroeste. Gulland (1983) divide el área en cuatro subregiones principales, que son: la región septentrional, desde Groenlandia hasta Islandia, el norte de Noruega y Rusia; el mar del Báltico; el área situada alrededor de las Islas Británicas, incluido el mar del norte; y la región meridional, que va desde Ushant hasta Gibraltar.
Gulland sugiere que la proximidad de mercados, unida a la elevada productividad de las aguas, ha sido la causa de que las pesquerías se hayan desarrollado pronto y en forma sostenida. Cada una de las subregiones indicadas por Gulland dispone de un grupo de peces localmente importantes. En el norte, por ejemplo, el bacalao y, hasta hace poco, el arenque eran las especies más importantes; hoy día han adquirido también importancia la gallineta, el eglefino y, sobre todo, el capelán. Descendiendo hacia el sur son más las especies que han sido y siguen siendo importantes. Entre ellas cabe citar bacalao, arenque, caballa, lenguado, platija, merlán y eglefino, y recientemente la faneca noruega, el lanzón, el espadín y la bacaladilla han venido a añadirse a la lista. En el Báltico las especies importantes son también el bacalao y el arenque, el último de los cuales ha desempeñado tradicionalmente una función importante en la economía de ese mar (Cushing, 1982). Otra especie importante del Báltico es el espadín, aunque en los últimos años las capturas han disminuido debido a la reducción radical de la población. En la región meridional, la sardina, la merluza y el besugo sustituyen en importancia a las especies mencionadas en aguas más septentrionales.
La productividad de la región, unida a su compleja estructura política y geográfica, hace muy difícil una exposición simplificada de las pesquerías. Noruega es el principal productor de pescado de este área, con más de 2,5 millones de toneladas en 1981, sobre todo de capelán (1,3 millones de toneladas). También la Unión Soviética, Islandia y Dinamrca capturaron en 1981 más de un millón de toneladas. Siguen luego el Reino Unido, Francia, la Rep. Federal de Alemania, los Países Bajos y España, cuyas capturas totales son también importantes.
Por lo que se refiere a los métodos de pesca, en el área 27 predomina la pesca al arrastre y con redes de cerco de jareta, artes ambos que se desarrollaron en estes área, pero Gulland (1983) señala que esos métodos no han eclipsado totalmente las técnicas más antiguas de pesca. En el mar del Norte se utilizan aún redes de cerco danesas y también en varios lugares se calan redes fijas. En Noruega e Islandia se utilizan todavía redes de enmalle para capturar al bacalao durante el período de desove. También se utilizan trampas y redes camaroneras para la pesca de crustáceos. En esta región, pues, se utiliza una rica mezla de métodos de pesca antiguos y modernos, a cuyo uso contribuyen varios factores de orden económico, social y geográfico.
Las comunicaciones de capturas accidentales en este área, en particular de cetáceos menores, son numerosas. Muchas de ellas se ponen en conocimiento del Subcomité del IWC sobre los cetáceos menores.
Interacciones operacionales
Delfines y marsopas comunes quedan apresados frecuentemente en aguas europeas en diversos tipos de artes, incluidas redes de arrastre.
En el norte de Noruega se han capturado accidentalmente en redes bacaladeras focas de Groenlandia en gran número.
En redes de arrastre y enmalle se capturan ocasionalmente delfines rayados, delfines de Risso, tursones, calderones y algunas especies de fócidos.
Vale la pena observar que, a diferencia de lo que sucede en área 21, las noticias de cetáceos mayores capturados accidentalmente son pocas o ninguna. Ello puede deberse a la diferencia de los métodos de pesca o a que las ballenas mysticetas de este área se alimentan en zonas en que no se utilizan redes fijas y otras formas de artes en que pueden quedar atrapadas fácilmente.
Interacciones biológicas
En este área, como en otras, es difícil verificar la existencia de interacciones de competencia. Parece, de todas maneras, que varias especies de mamíferos marinos pudieran estar actualmente en competencia directa con las pesquerías comerciales. Entre ellos pueden citarse el rorcual de aleta y la ballena jorobada, que actualmente se están recuperando de una explotación excesiva y se alimentan de poblaciones de peces intensamente explotadas. Otras especies, aunque no depauperadas en la misma medida, pueden resultar también afectadas por las pesquerías comerciales. Por otro lado, en dos casos en que se pensaba que las pesquerías estaban afectadas por la competencia de mamíferos marinos se ha sugerido que quizás los efectos no sean tran graves como se pretendía. Se aducía que la orca dificultaba la recuperación de la población de arenque en Noruega, pero Hiby y Harwood (1981) han mostrado en un análisis teórico que no tiene por qué ser así. De igual modo, se ha demonstrado que los efectos de la foca gris en las pesquerías de salmón no son tan espectaculares como se había pretendido (Stenman, 1978; NERC, 1984), aunque en algunas zonas se considere aún a esa foca como una plaga grave.