En el Africa septentrional, las perspectivas para el trigo y la cebada de 1999 son inciertas en Argelia y Marruecos, debido a un retraso de las lluvias que afectó a la siembra. Unas lluvias caídas últimamente mejoraron las condiciones, pero los niveles de humedad del suelo siguen siendo bajos y hacen faltan todavía más lluvias. En Túnez, las perspectivas para los cereales de invierno son favorables gracias a las lluvias superiores a lo normal recibidas desde el comienzo de la temporada. En Egipto, se prevé que la producción de trigo, en su mayor parte de regadío, será satisfactoria.
En el Africa occidental, unas condiciones en general favorables imperantes en 1998 en el Senegal, Mauritania, Malí, el Níger y el Chad dieron lugar a una cosecha sin precedentes, estimada en 10,6 millones de toneladas, alrededor de un 17 por ciento más que la media. Según las estimaciones, el Chad, Malí y el Níger obtendrán cosechas muy buenas. En otras partes del Sahel, la producción fue superior a la media en Gambia, cercana a la media en Burkina Faso y el Senegal, pero inferior a lo normal en Cabo Verde y Mauritania. En cambio, se estima que la producción de cereales será muy inferior a la media en Guinea-Bissau, donde los conflictos civiles han impedido las actividades agrícolas. En los países del litoral, la producción total de cereales de 1998 se calcula en un volumen superior a la media de 29,7 millones de toneladas. Gracias a una situación de seguridad mejorada y a un tiempo favorable, la cosecha de cereales fue buena en Liberia, pero en Sierra Leona, el país vecino, la producción agrícola de 1998 fue muy inferior a la media y la situación alimentaria es crítica en muchas zonas.
En el Africa central, las perspectivas de las cosechas son en general favorables en la República Centroafricana y el Camerún. En cambio, ha habido un empeoramiento significativo de la situación del suministro de alimentos en la República del Congo, debido a un brote reciente de disturbios civiles. La situación alimentaria sigue siendo también inestable en muchas partes de la República Democrática del Congo.
En el Africa oriental, la recolección de las cosechas de la segunda temporada de 1998/99 ha terminado en la mayoría de los países, salvo en Etiopía, donde está por comenzar la siembra. Unas lluvias tardías e irregulares redujeron la superficie plantada, los rendimientos y la producción en algunos países, particularmente en Kenya, Tanzanía y Somalia. Según las proyecciones, la producción total de cereales de 1998/99 para la subregión en conjunto será superior a la media, debido a una buena temporada principal.
En el Africa austral, las precipitaciones han sido en general favorables para las cosechas de 1998/99 en la mayoría de los países. Las lluvias siguieron siendo abundantes durante el mes de enero en muchas zonas, suscitando la preocupación de una posible reducción de los rendimientos debido a anegamientos en algunas partes de Malawi, Mozambique, Sudáfrica, Zambia y Zimbabwe. Las informaciones iniciales apuntan a un aumento general de la superficie sembrada con maíz y otros cultivos con respecto al año pasado. Las perspectivas son también en general buenas para el arroz en Madagascar. En Angola, sin embargo, las perspectivas son desfavorables como consecuencia de las continuas hostilidades registradas en las principales provincias productoras de cereales.
En Asia, las perspectivas para los cereales de invierno son variadas. En China, se estima que en las principales zonas productoras la sequía ha causado daños a los cultivos en varios millones de hectáreas. En cambio, en la India la cosecha de trigo debería ser buena gracias a un tiempo favorable y a un aumento de la superficie cultivada. En el Pakistán, las condiciones registradas en enero, tras la sequía anterior, favorecieron el trigo de invierno. Asimismo, unas lluvias imprevistas caídas en Tailandia mejoraron las perspectivas para la segunda cosecha de arroz. En Bangladesh, se ha lanzado una campaña para impulsar el arroz Boro, y las perspectivas para el trigo de invierno siguen siendo favorables. En Indonesia, se espera una recuperación de la producción arrocera de la temporada principal de este año, gracias a unas condiciones en general favorables. En la RPD de Corea, es probable que persistan las dificultades alimentarias pese a una cierta recuperación de la producción interna en 1998. En el Afganistán, las perspectivas para la cosecha de 1999 que se recogerán en mayo y junio siguen siendo inciertas, debido principalmente a las hostilidades actualmente en curso en las provincias septentrionales y a la continua escasez de insumos fundamentales. Las perspectivas de las cosechas siguen siendo malas en el Iraq y Jordania, debido a un tiempo desfavorable. En Siria y Turquía las condiciones han sido satisfactorias para la producción de cereales.
En América Central y el Caribe, la producción de cereales de 1998/99 debería ser incluso inferior a la del año pasado, gravemente afectada por los disturbios meteorológicos relacionados con El Niño. En Honduras, El Salvador, Nicaragua, Guatemala y México se registraron pérdidas generalizadas en la producción de maíz y frijoles, a raíz de la devastación causada por el huracán "Mitch". En Cuba, Haití y la República Dominicana, las intensas lluvias e inundaciones provocadas por el huracán "Georges" causaron daños graves a la cosecha principal de arroz.
En América del Sur, ha terminado la recolección de la cosecha de trigo de 1998/99 en la Argentina, el Brasil, el Paraguay, el Uruguay y Chile. La producción fue inferior a la media e inferior en casi 5 millones de toneladas a la de 1997/98, debido a una disminución de la superficie plantada y a las malas condiciones del tiempo. En Bolivia, y el Ecuador, la recolección de la cosecha de trigo de la primera temporada de 1999 comenzará en marzo, mientras que en el Perú empezará en abril. En el Brasil, se está recogiendo el maíz en algunas zonas y la producción debería recuperarse respecto a la campaña afectada por El Niño del año pasado. En los países andinos, está a punto de comenzar la recogida de las cosechas de cereales secundarios de la primera temporada, mientras que en Colombia y Venezuela la siembra de la cosecha de la primera temporada de 1999/2000 comenzará en abril.
En Europa, las condiciones atmosféricas para las cosechas de cereales de invierno han sido hasta ahora en general satisfactorias. La producción del trigo de invierno debería descender en 1999, debido a una combinación de factores, tales como la disminución de la superficie plantada y el tiempo malo registrado en varios países durante el otoño. Aunque según las estimaciones, también ha descendido la superficie sembrada con cereales secundarios de invierno, la producción total dependerá principalmente del nivel de la siembra de primavera. En los países bálticos, las condiciones invernales para los cereales han sido en general favorables hasta ahora, aunque es probable que en Letonia los cultivos hayan sufrido algunos daños. La producción de cereales y legumbres en 1998 se vio menguada por la persistencia de las lluvias caídas en el verano, que mermó las cosechas en los tres países. En Lituania, la producción descendió en un 8 por ciento a 2,8 millones de toneladas.
En la Comunidad de Estados Independientes (CEI), las perspectivas iniciales para el trigo y el arroz de 1999 son variadas. En Ucrania y la Federación de Rusia, la superficie total ha disminuido marginalmente y la mayor parte de los cultivos se plantó tarde o en condiciones secas. Según los informes, la situación de los cultivos es satisfactoria en el 85 por ciento de la superficie plantada en Ucrania, pero mala en más de 2 de los 13 millones de hectáreas plantados en la Federación de Rusia. La FAO calcula la producción total de cereales y legumbres de 1998 en 111 millones de toneladas, casi un 30 por ciento menos que la del año anterior (157 millones de toneladas). Las estimaciones de la FAO correspondientes a los estados principales superan en un 15 por ciento a las oficiales.
En América del Norte, las perspectivas para la cosecha de trigo de 1999 en los Estados Unidos son satisfactorias. Aunque según las estimaciones, la superficie plantada con trigo de invierno ha descendido en un 7 por ciento respecto a 1998, las condiciones atmosféricas han sido en general favorables hasta ahora. En el Canadá, la mayor parte de la cosecha de trigo de 1999 se sembrará en mayo y junio. Según las primeras informaciones, la superficie sembrada con trigo ha vuelto a disminuir debido a las malas perspectivas de los precios.
En Oceanía, la producción de trigo de invierno de 1998 en Australia se calcula en 21,2 millones de toneladas, alrededor de un 9 por ciento más que el año anterior. En cambio, la de cereales secundarios ha descendido en alrededor del 16 por ciento a 8,4 millones de toneladas. Las perspectivas para la pequeña cosecha de cereales secundarios de verano que se recogerá en 1999 son buenas debido a unas condiciones favorables para la siembra registradas al final de 1998.