FAO/SMIAR - Perspectivas Alimentarias No. 3 , Junio 1999 p. 5

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COMERCIO 1/

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Las perspectivas iniciales para el comercio de cereales en 1998/99 indican una recuperación moderada

Situado en 212 millones de toneladas, el primer pronóstico del comercio mundial de cereales para 1999/2000 indica un crecimiento de alrededor de 5 millones de toneladas respecto al volumen reducido de las importaciones estimado para la presente campaña. La mayor parte de este crecimiento derivará del aumento de las importaciones de trigo, mientras que el comercio de cereales secundarios debería aumentar sólo un poco. Aunque es demasiado prematuro hacer un pronóstico para el año civil 2000, la FAO supone provisionalmente que el comercio del arroz disminuirá ulteriormente respecto al volumen de 1999 a causa de unas mejores perspectivas para la producción de 1999/2000, particularmente en aquellos países importadores que contribuyeron a llevar el volumen del comercio internacional del arroz a niveles superiores a la media en los dos últimos años.

 

En base a los informes actuales, el comercio internacional de trigo en 1999/2000 (julio/junio) podría aumentar a 99,5 millones de toneladas, 5 millones de toneladas más que las escasas importaciones de la presente campaña y un volumen cercano al importado en 1997/98. Algo de la recuperación del comercio de trigo prevista para la próxima campaña se deberá en parte a los retrasos producidos este año en los envíos de ayuda alimentaria que se supone se arrastrarán a la próxima campaña. Este será el factor principal en Europa, donde se prevé una duplicación de las importaciones de trigo de la Federación de Rusia, que pasarán de 1,5 millones de toneladas en 1998/99 a 3 millones de toneladas en 1999/2000. En otras zonas, se pronostica que las importaciones de trigo aumentarán a causa de la disminución prevista de la producción. Este es principalmente el caso en Asia, donde se verán afectados algunos países como China, la República Islámica del Irán y el Pakistán. En Africa, se prevé que las importaciones totales se mantendrán cercanas a las de la presente campaña, pero Marruecos debería aumentar sus importaciones de trigo a causa de la mala cosecha prevista para este año, mientras que una cosecha más favorable de trigo obtenida en Argelia se traducirá en una disminución de las importaciones de ese país. Se prevé una disminución de las importaciones de América del Sur, debido principalmente a un probable decrecimiento de las compras de Brasil, en previsión del aumento de su producción interna.

El aumento previsto en la demanda de importaciones de trigo en la próxima campaña redundará en un aumento de las oportunidades de exportación para los cinco principales exportadores de trigo pero, dado el pequeño volumen del aumento, las posibilidades de que cada exportador aumente su parte de mercado serán limitadas. Además, la gran cantidad de suministros exportables de otros países podría también intensificar la competencia. Los últimos informes ya señalan grandes cantidades de suministros en la India, de las cuales una parte podría exportarse, mientras es probable que Turquía, Kazajstán, Hungría y Ucrania sigan siendo grandes exportadores en la próxima campaña.

Los informes provisionales sugieren que el comercio mundial de cereales secundarios en 1999/2000 (julio/junio) se mantendrá en general estancado por cuarto año consecutivo en torno a los 92,5 millones de toneladas. En este nivel, las importaciones mundiales de cereales secundarios superarían sólo en alrededor de 1,7 millones de toneladas a las importaciones estimadas en 1998/99. Es probable que los factores que ya han contribuido a frenar la demanda en los últimos dos años impidan una recuperación significativa del comercio mundial en la próxima campaña. Aunque han mejorado en los últimos meses las perspectivas de una rápida recuperación económica en los países afectados por la crisis financiera, particularmente en Asia, puede resultar difícil, al menos por otro año, que se vuelva a un crecimiento continuo y rápido de la demanda de piensos, como ocurrió en los comienzos de los años noventa. Además la gran disponibilidad de trigo de baja calidad, que en muchos países podría reemplazar a los cereales secundarios en los forrajes, seguirá también limitando la demanda mundial de importaciones de los cereales secundarios principales, tales como el maíz y la cebada.

SITUACIÓN GENERAL DE LAS IMPORTACIONES MUNDIALES DE CEREALES - PRONÓSTICO PARA 1999/2000

 
Trigo
Cereales secundarios
Arroz (elaborado)
Total
 
1998/99
1999/00
1998/99
1999/00
1999
2000
1998/99
1999/00
 
( . . . . . . . . . . millones de toneladas . . . . . . . . . . )
 
Asia
45,2
49,0
53,2
54,4
12,5
 
110,9
 
Africa
22,6
22,4
11,1
11,6
4,1
 
37,8
 
América Central
5,5
5,7
10,5
10,6
1,4
 
17,4
 
América del Sur
11,2
10,4
6,9
6,4
1,5
 
19,6
 
América del Norte
2,7
2,7
3,2
3,0
0,6
 
6,4
 
Europa
7,0
8,9
5,9
6,5
1,4
 
14,3
 
Oceanía
0,4
0,4
0,1
0,1
0,3
 
0,8
 
TOTAL MUNDIAL
94,6
99,5
90,8
92,5
21,8
20,4 1/
207,2
212,4
Países en desarrollo
74,1
77,0
59,2
59,8
18,4
17,0
151,8
153,8
Países desarrollados
20,5
22,5
31,6
32,7
3,4
3,5
55,4
58,6

Las importaciones de Asia, la región importadora más grande, se cifran actualmente en 54 millones de toneladas, volumen ligeramente superior al de este año. Este pronóstico presupone un aumento de las importaciones de maíz de la República de Corea debido a una probable recuperación de la demanda interna de piensos, un aumento de las importaciones de cebada y maíz de la República Islámica del Irán a causa de la sequía, y un ligero aumento de las importaciones de maíz de Indonesia y Malasia, debido principalmente a una cierta recuperación registrada en sus sectores agrícolas. En cambio, las importaciones de casi todas las otras regiones se mantendrán cercanas a los niveles de la presente campaña, salvo solamente en Europa, donde las importaciones podrían aumentar algo debido principalmente a un posible incremento de las compras de centeno y cebada por parte de Polonia.

Como se prevé que el comercio mundial total aumentará sólo ligeramente, las perspectivas para un incremento significativo de las exportaciones de cereales secundarios por parte de los principales exportadores serán todavía más limitadas que en el caso del trigo. Además, es probable que China siga siendo en la próxima campaña un importante exportador de maíz, mientras que también se prevén ventas voluminosas, principalmente de maíz y cebada, de algunos otros países como la Federación de Rusia, Hungría, Rumania y Ucrania. Sin embargo, las exportaciones de cebada de Turquía podrían disminuir, a causa principalmente de la disminución de la producción interna, y las ventas de maíz de la República de Sudáfrica disminuirán también considerablemente tras dos años consecutivos de escasa producción.


Examen del comercio mundial de cereales en 1998/99

La última estimación de las importaciones mundiales de cereales en la actual campaña 1998/99 se sitúa en torno a los 207 millones de toneladas, 9 millones de toneladas, o sea el 4 por ciento, menos que el año anterior y el volumen más reducido desde 1994/95, y alrededor de 1 millón de toneladas menos de lo que se había previsto en abril. La disminución de las importaciones de trigo y arroz representa casi toda la contracción calculada en el comercio mundial de cereales en 1998/99, mientras que las importaciones de cereales secundarios, especialmente maíz, han cambiado poco respecto al año anterior. El aumento de los donativos de cereales como ayuda alimentaria ha impedido que el comercio mundial disminuyera todavía más drásticamente este año, aunque es probable que este incremento sea menor de lo previsto, a causa principalmente de los retrasos producidos en los envíos de los Estados Unidos y la CE a la Federación de Rusia.

A medida que la campaña comercial del trigo de 1998/99 (julio/junio) va llegando a su término, las estimaciones de las importaciones se hacen más firmes. Ahora se calcula que el comercio mundial de trigo y harina de trigo (en equivalente de trigo) alcanzará los 95 millones de toneladas aproximadamente, volumen inferior en más de 4 millones de toneladas a las importaciones ya escasas de 1997/98 e inferior en 1 millón de toneladas a lo que se había informado en abril. La característica principal de la presente campaña ha sido el aumento del componente de ayuda alimentaria en la cuantía total del comercio. Del volumen de importaciones estimado en 95 millones de toneladas en 1998/99, unos 6 millones de toneladas (o sea el 6 por ciento del total) será en la forma de ayuda alimentaria, frente a alrededor de 3,8 millones de toneladas (4 por ciento) de la campaña anterior, en la que las importaciones totales fueron de 99 millones de toneladas. Por consiguiente, la disminución del comercio de trigo en 1998/99 será de alrededor de 7 millones de toneladas, la mayor contracción, con mucho, desde 1992/93.

Los factores subyacentes que contribuyeron a la disminución del comercio en 1998/99 se encuentran principalmente en Asia, donde las importaciones totales se calculan en 45 millones de toneladas, 3,5 millones de toneladas menos que el año anterior. A causa principalmente del aumento de la producción interna, algunos países como China, la República Islámica del Irán, la India y el Pakistán han reducido sus importaciones de forma pronunciada en 1998/99. En Indonesia, una combinación de factores, tales como los problemas financieros, las cantidades grandes de existencias de harina de trigo, y el aumento de las importaciones de arroz, ha dado lugar a una disminución considerable de las importaciones de trigo durante la presente campaña. En cambio, la gradual recuperación económica registrada en la República de Corea y los bajos precios internacionales del trigo han determinado un pequeño incremento de las compras de trigo de ese país. Sin embargo, el aumento mayor de las importaciones, principalmente en la forma de ayuda alimentaria, se prevé en Bangladesh, debido a la escasez de alimentos causada por las inundaciones. Situadas en torno a los 23 millones de toneladas, las importaciones totales de Africa en 1998/99 serán ligeramente inferiores a las del año anterior, debido fundamentalmente a una disminución de las importaciones de Marruecos y Túnez donde el aumento de la producción de 1998 ha dado lugar a un crecimiento de las existencias internas. Se estima que las importaciones de la mayoría de los otros países se mantendrán sin modificaciones respecto al año anterior.

La disminución de las importaciones de trigo por parte de la Federación de Rusia, combinada con la de las compras de la CE tras una producción sin precedentes, ha reducido las importaciones totales de Europa a un volumen estimado en 7 millones de toneladas, frente a los 8,8 millones de toneladas de 1997/98. El cambio más significativo producido en Europa durante la presente campaña concierne a la Federación de Rusia donde, tras las revisiones a la baja de este mes, las importaciones podrían descender a 1,5 millones de toneladas, casi un 50 por ciento menos que el año anterior a pesar de la mala cosecha obtenida. Aunque la mayor parte de las importaciones de este año serán en forma de ayuda alimentaria, el ritmo lento registrado hasta ahora de las entregas de los principales donantes a la Federación de Rusia hará que una gran parte de los envíos se postergue hasta la próxima campaña. En otras partes, las importaciones de América Latina y el Caribe podrían alcanzar los 16,7 millones de toneladas, 1,5 millones de toneladas más que el año anterior, a causa sobre todo del aumento de las compras efectuadas por el Brasil, debido principalmente a una disminución de su producción interna.

El comercio mundial de cereales secundarios en 1998/99 (julio/junio) se calcula en torno a los 91 millones de toneladas, lo que representa un volumen ligeramente superior al del año anterior y sin modificaciones respecto al informe precedente. El mercado de cereales secundarios no ha registrado hechos importantes en 1998/99, siendo la característica principal el continuo efecto negativo del débil desarrollo económico en Asia que influyó en la utilización de piensos y, por consiguiente, limitó la demanda de importaciones en algunos países. De entre los principales cereales secundarios, sólo se prevén importaciones de cebada y centeno. Se calcula que el comercio mundial de cebada se acercará a los 16 millones de toneladas, 1,5 millones de toneladas más que el año anterior, a causa principalmente del aumento de las compras realizadas por algunos países de Asia y Africa del Norte. Las importaciones de centeno pueden alcanzar los 1,2 millones de toneladas, 300 000 toneladas más que el año pasado, pero un volumen inferior al previsto a causa de los retrasos producidos en los envíos de ayuda alimentaria de la CE a la Federación de Rusia. En cambio, las importaciones de sorgo disminuirán en alrededor de 300 000 toneladas a 7 millones de toneladas, a causa principalmente de la disminución de las compras por parte de México, que obtuvo una buena cosecha en 1998. Es probable que el comercio del maíz, con mucho el cereal secundario más comercializado, se mantenga sin modificaciones en torno a los 65 millones de toneladas.

Estas perspectivas, más bien de estancamiento del comercio, que enfrentan los mercados de cereales secundarios a nivel mundial reflejan también la situación de los niveles regionales. En Asia, las importaciones realizadas en 1998/99 se calculan actualmente en 53 millones de toneladas, 1 millón de toneladas menos que el escaso volumen del año pasado, a causa principalmente de la disminución de las compras de maíz por parte de la República de Corea e Indonesia, debida a una demanda más débil de piensos. En Africa, las importaciones se cifran en 11 millones de toneladas, lo que representa un incremento de 1 millón de toneladas respecto al año anterior, a causa principalmente del aumento de las importaciones de cebada de algunos países de Africa del Norte debido a una producción interna afectada por la sequía. En Europa, se prevé que las importaciones de la CE y la República Checa aumentarán marginalmente, debido sobre todo a una disminución de la producción. Las importaciones de América Latina y el Caribe se cifran en un volumen ligeramente superior a los 17 millones de toneladas, alrededor de 1,5 millones de toneladas más que el año anterior. La mayor parte del incremento respecto al año pasado se deberá al aumento de las compras de maíz por parte de Brasil y México, mientras que también han aumentado, como consecuencia del huracán Mitch, las importaciones de algunos de los países afectados de América Central.

El pronóstico actual relativo al comercio del arroz en 1999 sigue señalando un debilitamiento de la demanda de importaciones con respecto al año pasado, cuando el comercio internacional de ese producto alcanzó niveles sin precedentes. Aunque el pronóstico de la FAO relativo al comercio mundial de arroz en 1999 ha aumentado en 200 000 toneladas respecto al informe anterior, situándose ahora en 21,8 millones de toneladas, este nivel sería todavía inferior en alrededor de 5,7 millones de toneladas al nivel récord revisado de 1998. La contracción prevista se debe a una mejora de la producción en 1998 y/o a la previsión de un aumento de la producción en 1999 en muchos de los principales países importadores cuya producción en 1997 y/o 1998 se vio menguada por los problemas meteorológicos relacionados con El Niño.

La mayor parte de la revisión al alza, con respecto al último informe, del pronóstico relativo al comercio del arroz en 1999 se debe a un incremento de 400 000 toneladas en las importaciones previstas para Bangladesh, que se cifran en 1,7 millones de toneladas. Aunque la producción de la cosecha Boro podría ser muy superior a lo que se había pensado inicialmente, el país tendría que importar todavía un volumen considerable para satisfacer las necesidades internas e impedir un descenso drástico de las existencias. Además, las importaciones de Indonesia se ajustaron al alza en 200 000 toneladas a 2,7 millones de toneladas. El aumento previsto en la producción arrocera de 1999 deberá ser complementado con importaciones para satisfacer la demanda local y mantener un nivel razonable de existencias. Por otro lado, en base a las importaciones realizadas hasta ahora, las compras de China (Continental), principalmente de arroz de alta calidad, fueron rebajadas en 200 000 toneladas con respecto al último informe, para situarse ahora en 400 000 toneladas. Los volúmenes de importación previstos para Sri Lanka y Malasia se redujeron en un total de 200 000 toneladas debido a la mejora de las perspectivas de la producción. Los niveles de importación de 1999 previstos para Filipinas y Brasil, grandes importadores de arroz el año pasado, quedaron sin modificaciones respecto al informe anterior en 1,2 millones de toneladas y 1 millón de toneladas, respectivamente.

Con respecto a las exportaciones, la previsión de los envíos de la India aumentó en 200 000 toneladas respecto al informe anterior, a 2,5 millones de toneladas, teniendo en cuenta el ajuste al alza de su producción en 1998-99 y el aumento previsto de las entregas de arroz a Bangladesh. Las ventas previstas de China (Continental), que consisten principalmente en arroz de calidad inferior, también aumentaron en 300 000 toneladas a alrededor de 1,4 millones de toneladas, en base a las exportaciones realizadas hasta ahora. Durante los cuatro primeros meses del año, China exportó un total de alrededor de 660 000 toneladas, la mayor parte de las cuales a Indonesia y Filipinas. En cambio, el pronóstico relativo a las exportaciones de Viet Nam se ha revisado a la baja en 300 000 toneladas, en base a las exportaciones realizadas en lo que va del año, y teniendo en cuenta la debilidad de la demanda y el descenso de los precios internacionales. En los Estados Unidos, el mercado continúa en general calmo y la Asociación de Productores de Arroz de los Estados Unidos y la Federación Arrocera de los Estados Unidos están instando al Gobierno a que aumente su utilización de arroz como ayuda alimentaria. Asimismo, los productores de arroz de la Argentina están buscando otros mercados que absorban algo de sus suministros exportables, dado que el Brasil, su cliente tradicional y socio en el Mercosur, debería importar menos ya que las perspectivas indican un aumento de su producción interna. Las previsiones relativas a las exportaciones de los otros grandes exportadores se mantuvieron sin modificaciones respecto a los volúmenes indicados en el informe anterior. Tailandia exportó un total de 1,8 millones de toneladas de arroz durante el período de enero a abril de 1999, volumen inferior en alrededor del 25 por ciento respecto al mismo período de 1998. Durante los cuatro primeros meses, Nigeria fue el mayor destinatario del arroz tailandés.


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