Las principales premisas utilizadas para la construcción del escenario del desarrollo forestal en Belice son:
• El apoyo que el gobierno ofrece al sector forestal se considera insuficiente y es producto de una falsa impresión de que este sector aporta poco al desarrollo del país.
• Las estructura de las Cuentas Nacionales, con las cuales se cuantifica el aporte del sector forestal al Producto Interno Bruto, reflejan principalmente el aporte que tiene el sector en el desarrollo industrial, mientras que otros aportes como los servicios ambientales (para turismo, agua y otros), no son contabilizados.
• El sector forestal puede y debe apoyar en forma significativa el combate a la pobreza, incrementando el rol de los bosques para la seguridad alimentaria y generando ingresos para los pobladores que viven dentro y cerca del bosque en las zonas rurales, en donde se concentra principalmente dicho flagelo.
• Para lograr lo anterior, se requiere de una decisión política para que el país cuente con un ordenamiento territorial que promueva un uso adecuado del potencial de la tierra.
• Se requiere también de una Política Forestal Moderna, acompañada de su respectiva Estrategia de Implementación.
Tomando como base el estado del sector forestal en el presente, se analizó en forma retrospectiva su tendencia de los últimos años y la situación actual, para así identificar los factores sectoriales y extra sectoriales que han influido en forma positiva o negativa en el desarrollo del sector.
Ello permitió visualizar y caracterizar al sector forestal al año 2020, bajo dos escenarios: el primero considerando que el sector Forestal continúa igual y el segundo (deseado y factible) estimando que se orientan positivamente las fuerzas impulsoras identificadas dentro del análisis.
La figura 5 presenta un croquis del proceso de análisis para llegar a los escenarios probables.
Figura 5 Escenarios del Sector Forestal en Belice al 2020
Este escenario se basa en la hipótesis de que el sector forestal del país no tendrá cambios de importancia y que su desarrollo se mantiene al igual que hoy.
Departamento Forestal. Su presupuesto y personal no será suficiente para cubrir las necesidades y demandas del sector, del país y de los compromisos contraídos a través de la Convenciones Internacionales. Lo anterior hace visualizar un Departamento Forestal facilitador de permisos forestales, pero sin la capacidad de dar seguimiento al cumplimiento de la normativa existente.
Cobertura Forestal. Si asumimos que la cobertura forestal actual es de 1,599,660 hectáreas (73.4% del territorio nacional), y que la tasa de deforestación es de alrededor de 36,000 hectáreas anuales en los últimos años (1990–2000), lo cual permite calcular una tasa de variación anual de 2.3%, podemos estimar que la cobertura al año 2020 será de 807,660 hectáreas; o sea, un 37.06% del territorio.
Bosque de Producción. Partiendo de una disponibilidad actual de 319,000 hectáreas de bosques aptos para el aprovechamiento sostenible y de que estas tierras también se verán afectadas por la deforestación a una tasa igual a la anterior (2.3% al año), el remanente de bosque de que se dispondrá será de 172,266 hectáreas.
Plantaciones. Hasta la fecha se cuenta con un total de 3,000 hectáreas plantadas y es de esperar que, al no crearse nuevas oportunidades de inversión en el sector, serán muy pocos los empresarios que estén dispuestos a invertir en la reforestación. Sin embargo, asumimos que el Gobierno continuará realizando esfuerzos para recuperar las tierras deforestadas, como consecuencia de desastres naturales y plagas, por lo que se asume una reforestación de 500 hectáreas anuales, alcanzando un total al final del período de 10,000 hectáreas adicionales.
Áreas Protegidas. Hoy el país cuenta con un 45.3% del territorio nacional protegido, incluyendo 158,652 hectáreas de Reservas Marinas. Si se excluyen estas Reservas Marinas, el área que queda como parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas es de 874,568 hectáreas; o sea, un 38.3% que se conservarían al final del período.
Aporte del Sector Forestal al PIB. Se asume que éste se mantendrá en 1.6%, manteniendo la imagen ante los decisores gubernamentales de que el sector forestal es un sector que aporta poco.
Bosque latifoliado degradado. El bosque latifoliado en Belice ha sido explotado desde la época de la colonia e incluso se cuestiona la existencia del bosque prístino en el país. Una hipótesis que maneja el actual Director del Departamento Forestal es que hasta hoy se ha disminuido considerablemente el volumen de madera por árbol de caoba y que, de continuarse explotando el recurso de la misma forma, el bosque latifoliado se vería sometido a una degradación genética de importancia.
Industria forestal. La industria forestal se encuentra sobredimensionada y son muy pocas las industrias que mantienen una verdadera integración con el bosque. De seguir esta situación, la industria se mantendrá mientras se recupera la inversión realizada, sin importar que pase con el bosque.
Servicios ambientales que ofrece el bosque. A pesar de que los servicios ambientales que presta el bosque son reconocidos por el sector turismo para la atracción de un mayor número de visitantes al país, que las dificultades del abastecimiento del agua se relacionan con la disminución del bosque, y que los mecanismos de mitigación de los gases de efecto de invernadero consideran a las plantaciones forestales y al bosque como sumideros naturales de los mismos, el sector forestal de Belice no se beneficia de dicho aporte.
El escenario positivo que coincide con el escenario más probable para el desarrollo del sector forestal al año 2020 se presenta a continuación. Parte del supuesto de que las fuerzas impulsoras identificadas en este mismo estudio impactarán positivamente en el desarrollo del sector.
Departamento Forestal. Basa su trabajo en función de un Ordenamiento de las Tierras Forestales y cuenta con una Política Forestal que responde a las condiciones existentes. A la vez, la Legislación Forestal se ha readecuado a esta nueva realidad nacional y se cuenta con una Estrategia Forestal de acción que responde a esta nueva visión. Lo anterior permitirá contar con un Departamento Forestal fortalecido que orienta su quehacer al desarrollo del Sector Forestal.
Cobertura Forestal. Se disminuirá a un 58.4% del territorio nacional (1,331,000 hectáreas), producto de haber designado 319,000 hectáreas al manejo sostenible para el abastecimiento de la industria forestal, de haber incorporado 100,000 nuevas hectáreas provenientes de plantaciones forestales y de haber consolidado el Sistema Nacional de Áreas Protegidas en 912,000 hectáreas (40.0% del territorio nacional).
Desarrollo Industrial. Se espera que el Departamento Forestal se mueva cada vez más hacia un esquema de aprovechamiento forestal basado en concesiones forestales certificadas que se ubiquen dentro de los terrenos de vocación forestal y que pueden abastecer las necesidades de la industria forestal existente, a través de una producción forestal sostenible y propiciando una verdadera integración bosque-industria.
En relación con la producción forestal, se espera que la industria procese alrededor de 200,000 de metros cúbicos rollo, los cuales deben provenir en un 75% de bosque de pino (825,000 m3r del aprovechamiento de 5,000 hectáreas plantadas por año, las cuales se suponen tendrán un rendimiento medio de 165 m3r/Ha, y de 700,000 m3r del aprovechamiento de 5,000 hectáreas de bosque natural de especies coníferas, con rendimiento promedios de 140 m3r/Ha.). El 25% restante (480,000 m3r) provendrá del aprovechamiento de 16,000 hectáreas anuales del bosque latifoliado, el cual se espera que tenga un rendimiento de 30 m3r/Ha producto de ampliar la canasta de especies aprovechables a utilizar en la industria y por ende en el mercado nacional e internacional y a un adecuado manejo forestal sostenible.
Se prevé que parte del financiamiento de las nuevas plantaciones provenga de la implementación de proyectos en tierras aptas para la mitigación de gases de efecto de invernadero, dentro del Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kyoto.
Considerando que en la actualidad la industria forestal existente se encuentra sub utilizada, la estrategia de elevar la producción forestal del país en un 100% aproximadamente, no requiere de ninguna inversión adicional. No obstante, se debe pensar en la necesidad de apoyar, con recursos adicionales, al desarrollo de la industria secundaria, principalmente con equipos que permitan mejorar el acabado de los nuevos productos (secadoras, Finger-join, equipo para muebles, etc.). Además, esta estrategia debe acompañarse de un adecuado plan de mercadeo y comercialización que permita ubicar en el mercado nacional e internacional los nuevos productos forestales provenientes de las especies no tradicionales.
Áreas Protegidas. Del total de tierras cubiertas de bosque actualmente (60%), y después de aplicar el Ordenamiento Territorial a nivel nacional, se espera que existan 37,500 hectáreas de bosque que pasarán a ampliar las 874,568 hectáreas ya existentes en Áreas Protegidas, para un total de 912,068 hectáreas (40.0%).
Por otro lado, así como la estrategia de turismo en el país espera incrementar el nivel de visitantes a 2 millones anuales, y conscientes de que la gran mayoría de esos visitantes estarán llegando para observar las bellezas escénicas y la alta biodiversidad que posee el país, es de esperar que el SINAP esté en condiciones de recibir gran parte de esos visitantes y que el sector del turismo aporte en forma significativa a la consolidación del SINAP.
Aporte a la Seguridad Alimentaria. Se espera que, producto de todo este desarrollo, el aporte del sector forestal al Producto Interno Bruto se vea favorecido, incrementándose significativamente como rubro en las Cuentas Nacionales, con una contabilidad adecuada que refleje en forma real el aporte del sector forestal al desarrollo del país. También debe reflejarse en las actividades de manejo, conservación y aprovechamiento sostenible del bosque, favoreciendo la derrama de recursos financieros a las áreas rurales, a través de nuevos trabajos y de la participación de utilidades en el aprovechamiento del recurso.
Sin lugar a dudas, este segundo escenario positivo, tendrá un efecto significativo en la calidad de vida de las nuevas generaciones de beliceños, los cuales podrán asegurar el abastecimiento del agua en calidad y cantidad adecuada y podrán gozar de las bondades del bosque en forma permanente.
