Página precedente Indice Página siguiente


ESTUDIO DE CASO 4: La protección de los recursos frágiles a través del manejo tradicional en Naw, República Islámica de Irán


Introducción

La aldea de Naw está situada en el Valle de Houraman en Kurdistán, que forma parte de una región montañosa aislada a unos 1 100 metros sobre el nivel del mar. La principal vía de acceso a Naw es de tierra y grava y la ciudad más próxima queda a 35 km de distancia. La aldea cuenta con 160 familias y un poco más de 800 habitantes.

La región occidental de Irán, incluyendo Kurdistán, es especialmente apta para los cultivos de secano ya que las precipitaciones son adecuadas para este propósito. El valle de Houraman tiene un sistema agrícola complejo e integral, consiste en cultivos de secano, huertos de árboles frutales, pastoralismo transhumante, agroforestería y recolección de productos forestales. Recibe relativamente pocas precipitaciones. Las tierras de pastoreo son importantes en la economía hogareña porque brindan alimentos para los animales y acceso a los productos de los bosques. Hay unas 900 ha de tierra agrícola, de las cuales aproximadamente unas 700 ha son granjas, mientras que las restantes son tierras de pastoreo. El sistema tradicional de explotación de los recursos naturales es razonablemente sostenible.

Además de la agricultura y la cría de animales, el sistema productivo de Naw incluye las artesanías. Se puede observar que las mujeres participan en la mayoría de las actividades económicas, y los frutos de su trabajo se usan equitativamente. Las instituciones gubernamentales casi no influyen en las actividades sociales y económicas de la región.

Características de la región

Clima

Por estar en un valle de montañas, Naw tiene su propio microclima. En las zonas más altas, las precipitaciones pueden ascender a 700 mm con una regularidad razonable, y se distribuyen mayormente en el otoño, invierno y primavera. En la región más baja, llueve bastante menos. Esta distribución permitió la expansión de los cultivos de secano y de árboles. Las temperaturas máximas promedio son de unos 20,5°C y las mínimas descienden a los 7°C. La temperatura media es de alrededor 13,8°C.

Recursos del suelo

Las laderas en pendiente de la región, el terreno montañoso y las ocasionales lluvias intensas han causado erosión en los suelos, especialmente en las zonas más altas. Esto resultó en una capa arable delgada con un predominio de grava y roca e hizo que quedaran expuestas muchas áreas rocosas con escasa nutrición. En general, los suelos originales son arcillosos y arenosos con bajo contenido de materia orgánica, pero están bien drenados sin problemas de salinidad.

Los campesinos de Naw clasifican sus suelos en tres categorías: arcilla, blanco (arcilla de origen de Marne) y negro (volcánico), y consideran que la mayoría de los suelos usados para huertos o cultivos de secano necesitan fertilizante animal. No se conoce el uso de fertilizantes químicos o compost en la región.

Los campesinos del lugar crean huertos formando terrazas con paredes de piedra según un sistema que se conoce como «Talan». Generalmente la capa arable para cubrir estas terrazas se transporta con mulas. Luego se plantan árboles y el agua se absorbe y conserva en las terrazas.

En las zonas de pastoreo se utiliza un sistema de microcuencas con forma de contenedores semicirculares de piedra que rodean los robles. Esto permite recoger y almacenar agua y humedad alrededor de los árboles.

Pueblo Naw

Recursos hídricos

Los recursos hídricos incluyen el agua subterránea y el agua de superficie. Los agricultores construyen terraplenes de piedra y tierra o acequias y canales de piedra que recogen las lluvias estacionales y la nieve derretida y luego llevan el agua a los viñedos, granados e higueras. Estos canales de piedra miden a veces más de dos metros de altura. Generalmente, los viñedos de secano se arman a lo largo de estos canales o en las tierras altas recolectoras de nieve. Las aguas subterráneas aparecen como manantiales en las aldeas, con un rendimiento de 5 a 40 litros por segundo. El agua necesaria para los huertos proviene de dos grupos de manantiales. Unos seis manantiales ubicados en los terrenos altos proveen el agua para los animales. Estas aguas subterráneas y estacionales proporcionan agua de calidad que se recoge en odres desde los arroyos ubicados en las zonas altas de la aldea. Algunos embalses pequeños localizados cerca de los manantiales aportan el agua para los animales. En esta región el rendimiento total de agua subterránea de los manantiales es de aproximadamente 2,6 millones de metros cúbicos por año.

En la región se encuentra una variedad de agentes naturales de control biológico, por ejemplo, la mariquita de siete puntos, el león de los pulgones, arañas y otras especies, razón por la cual no se usan insecticidas.

La biodiversidad y el manejo de los recursos naturales

La cadena montañosa de Zagros tiene su propio sistema climático con muchos hábitats diferentes que han dado origen a una considerable diversidad biológica en los recursos genéticos, en las especies y en el ecosistema. En esta región, hay pendientes empinadas, montes y bosques que forman parte del bioma natural. Las comunidades vegetales de robles, pistacho silvestre y almendros forman hábitats apropiados para la fauna salvaje incluyendo muchas especies de mamíferos, reptiles, aves e insectos. La fauna predominante incluye ardillas, serpientes, lagartos, ovejas y cabras de montaña, zorros, lobos, chacales, conejos, jabalíes, leopardos y aves, por ejemplo, codornices, aves acuáticas y de rapiña incluyendo águilas e insectos tales como saltamontes, lepidópteros, escarabajos, insectos de Sunn, mariquitas y otros. Hay algo de agroforestación dispersa en estos bosques.

En la región se encuentra una variedad de agentes naturales de control biológico, por ejemplo, la mariquita de siete puntos, el león de los pulgones (Chrysopa spp.), arañas y otras especies, razón por la cual no se usan insecticidas. También hay aves, como las codornices y las especies locales del gorrión, que controlan las plagas de ciertos cultivos. Generalmente, las comunidades de la zona protegen a estas especies.

Entre la biodiversidad vegetal de la región se encuentran las especies de árboles y arbustos Quercus persica (roble persa), Pistacia mutica (pistacho silvestre), Acer persicum (arce persa), Crataegus sp. (espino), Amygdalus orientatus (almendro silvestre), Amygdalus scoparia (almendro montañés), Rhus sp. (zumaque), Pyrus glabra (peral silvestre) y una planta con el nombre Kurdo «homr». También hay plantas silvestres anuales con cualidades medicinales, como por ejemplo Glycyrrhiza glabra (regaliz), Fumaria parviflora (fumaria) y Althaea officinais (anís), entre otras.

Las hojas y bellotas del roble se usan como alimento para los animales, mientras que la madera y el tanino que se extrae de las bellotas tienen uso industrial y medicinal. Las bellotas se muelen, después de que se extrae el tanino por un proceso de ósmosis en agua, y con esa harina se hace un tipo de pan que se consume especialmente en épocas de escasez de alimentos. El pistacho silvestre produce una resina que se usa localmente, aunque también se la procesa y exporta. La extracción de la resina proporciona otra fuente de ingresos para los habitantes de la región. Los montes, árboles y arbustos son propiedad de clanes y a veces de familias, cuyos derechos se heredan. Algunas veces, hasta diez familias pueden tener derechos sobre sólo uno o dos árboles.

Las especies en las tierras de pastoreo incluyen muchas plantas anuales y perennes de la familia graminidae, leguminosae y otras más. Astralagus spp. (incluyendo A. acutus y A. dolius) son comunes. Esta última sirve para alimento animal y como fuente de una resina con usos farmacéuticos e industriales. En las zonas con cultivos de secano también se encuentran algunas especies anuales que sirven de alimento.

A diferencia de muchas partes del cordón montañoso de Zagros, el Valle de Houraman en general, y el área de Naw en particular, se encuentra en condiciones ecológicas razonablemente buenas. La variabilidad en la humedad, estructura y capacidad de retención de agua de los suelos, como también la distribución de las lluvias, la altitud y las laderas son algunos de los múltiples factores que han hecho posible la gran diversidad de los recursos genéticos. Entre las prácticas que contribuyen a esta biodiversidad, se pueden mencionar los siguientes factores.

La agrobiodiversidad en los recursos de semillas

La agrobiodiversidad de Naw ha demostrado ser muy fuerte. Hasta ahora, ha habido poca presión externa para reemplazar las variedades locales. Estas incluyen ocho variedades de trigo, cinco variedades de cebada y ocho de maíz; nueve de moras, cinco variedades de granadas, cuatro variedades de higos y nueve de peras y uvas respectivamente[318].

La gestión ambiental

La gestión ambiental de esta región depende del estilo de vida de las comunidades rurales. La mayoría de las aldeas del valle de Houraman tienen un esquema migratorio vertical, donde pasan un tercio del año en las tierras altas llamadas «hawar». Cada hawar tiene su propio nombre y actúa como una segunda aldea con producción, hábitat y sistema agrícola propios.

El agua necesaria para la población, la agricultura y los animales proviene de los manantiales. Las aguas residuales se almacenan en tanques de 6x4x1 metros aproximadamente y se usan para el riego de los huertos de nogales y hortalizas.

En el hawar, cada familia tiene un terreno y las tierras de pastoreo se cuidan como propiedad común. Parte de las tierras de pastoreo se protege y no se puede utilizar hasta el mes de mayo. En los meses restantes de primavera y verano, además del pastoreo extensivo, el pasto de las praderas gia-jar se cosecha tres veces. El pasto cosechado se deja secar y si es necesario se pisotea con bueyes o mulas y luego se lo almacena para alimentar a los animales de la aldea en el invierno.

En el hawar, los pobladores tienen sus modos tradicionales de proteger y mejorar las especies más apreciadas. Se recogen las semillas mientras los animales pastorean en su constante subida (similar al alpage en Europa). En la época de regreso a la aldea base, al final del verano, las semillas recogidas se dispersan en las praderas. Los animales se dejan en estas tierras, las fertilizan y su movimiento trabaja el suelo, enterrando las semillas. Cuando llega la próxima temporada de lluvias, las praderas se han renovado con esta vegetación.

La energía para cocinar y para procesar los productos lácteos se obtiene en el hawar podando las ramas principales de los robles. Hasta épocas recientes, los aldeanos a veces tenían que cortar árboles enteros para juntar leña para el invierno. Este fue uno de los factores que contribuyó a que se perdiera la capa vegetal y aumentaran las inundaciones de los campos. Últimamente, las agencias gubernamentales lograron suministrar combustible fósil, parafina (kerosene) por ejemplo. Esto redujo la tala de árboles y aumentó el interés de la población local para proteger las praderas y bosques. Como consecuencia, los habitantes de la región observan una mejora definitiva en la vegetación y una mayor abundancia de fauna salvaje. Las frecuentes inundaciones del pasado no han sido un problema en la última década. Esto se puede notar especialmente en los canales y barrancos, ricos en arbustos y árboles, lo que permite detener las aguas descendentes y evitar inundaciones.

En las tierras de cultivo, una vez que se cosecha el trigo y la cebada, la paja restante provee el alimento para los animales, mientras que en las praderas más altas, las pasturas se cosechan y se guardan como alimento para el invierno. Las hojas de los robles también se usan en pequeñas cantidades como alimento de los animales, el corte parcial tiene un efecto de poda en los árboles. El tiempo que los animales pasan en el hawar no es tanto como para dañar los árboles o las praderas, ya que como se los lleva a pastar más arriba, las laderas empinadas no se usan para pastoreo.

En el hawar, los pobladores tienen sus modos tradicionales de proteger y mejorar las especies más apreciadas. Se recogen las semillas mientras los animales pastorean en su constante subida.

Los sistemas agrícolas de Naw

El sistema agrícola de Naw es un conjunto interactivo de actividades agrícolas, hortícolas, de pastoreo y forestales (en general de cosecha). La agricultura cubre unas 700 ha de las cuales 40 son huertos parcialmente irrigados. Los cultivos de secano incluyen viñedos, granos y legumbres. Los higos y las granadas constituyen la mayor parte de la horticultura de huertos y los granos se siembran en otoño y se cosechan alrededor de junio.

El sistema de rotación agrícola depende de la calidad del suelo, los pronósticos de lluvias, la percepción de la situación en el mercado y la disponibilidad de mano de obra y herramientas agrícolas.

Las rotaciones más corrientes son:

trigo-garbanzo-trigo;
trigo-cebada-trigo;
trigo-garbanzo-cebada-trigo.

El sistema de rotación está impulsado parcialmente por la demanda del mercado, pero también por las necesidades de la economía de subsistencia. Un factor importante que determina el papel dominante del trigo y la cebada en el sistema de rotación es la necesidad de alimentar a los animales. En el verano, se alimentan de los rastrojos de los granos y de las pasturas, mientras que en invierno comen paja, heno y cebada, además de los cortes de los árboles almacenados.

Los cultivos hortícolas de verano se plantan en una escala limitada, principalmente para satisfacer las necesidades familiares, aproximadamente 0,4 ha por hawar.

La mayor parte del estiércol animal se usa en los huertos, alrededor de 6-7 kg por árbol, y se coloca en septiembre. Las semillas que se usan para la agricultura son variedades autóctonas locales y los árboles que se plantan en los huertos también son recursos genéticos de la zona. En la región no se percibe que haya necesidad de insumos tales como semillas y plantines, fertilizantes y plaguicidas químicos o maquinarias agrícolas.

La principal plaga de los granos es la de langostas de Sunn, aunque no ha habido en esta área ningún brote importante. La manera que tienen los agricultores de manejarla es por medio del humo. Los agricultores también dicen que los pájaros cazan las langostas y de este modo no causan grandes daños.

Los factores naturales y culturales, como la topografía, las precipitaciones, la tenencia de la tierra y la autosuficiencia, juegan un papel importante en la producción de los cultivos de secano, por ejemplo, los granos y las legumbres. Después de la nacionalización de las praderas por parte del Shah, las comunidades comenzaron a alejarse de ellas. Sólo algunos agricultores trataron en las últimas dos décadas de practicar el cultivo de secano en esas tierras con la idea de recuperarlas. Sin embargo, al darse cuenta de que este enfoque estaba causando la erosión del suelo y las inundaciones, comenzaron nuevamente a cuidar mejor las praderas.

Un factor importante que determina el papel dominante del trigo y la cebada en el sistema de rotación es la necesidad de alimentar a los animales.

La estructura económica

El ingreso anual promedio de cada hogar proveniente de los cultivos de secano y de los huertos es de 824 000 riales (470 $EE.UU.) y 830 000 riales (475 $EE.UU.), respectivamente. No se conocen datos sobre la cría de animales.

El ingreso que aporta la agricultura no es muy considerable, dado el nivel general del costo de vida. El ingreso más alto entre los cultivos de secano proviene del trigo y, entre los productos de huerto, del granado. El principal mercado de productos de la granada, especialmente su salsa y semillas, es en las aldeas vecinas. Se estima que un 80 por ciento de los productos agrícolas se usan para cubrir las necesidades de subsistencia y el resto se vende a los intermediarios en los mercados locales. En la actualidad no hay inversiones de los departamentos gubernamentales para mejorar la agricultura. El bajo nivel de producción comercial y los caminos de acceso deficientes desalientan el transporte en la región. La alta calidad de la granada que se produce en Naw, el uso de los métodos orgánicos naturales y el alto nivel de los conocimientos técnicos de los campesinos dan fundamentos para creer que si se recibiera ayuda habría un mercado potencial muy bueno para este producto fuera de la región.

La mano de obra para las tareas agrícolas y la cría de animales proviene del núcleo familiar, y en épocas de cosecha y demás actividades las distintas familias se ayudan entre sí. Las decisiones en cuanto a las obras públicas, como por ejemplo la apertura y cierre de las acequias de riego, la limpieza de los canales y la regulación del uso del agua en los huertos se toman en la comunidad después de realizarse consultas entre los distintos miembros. Los usuarios realizan colectivamente estas obras bajo la supervisión de los ancianos de la comunidad. Las mujeres participan principalmente en la cosecha y en las actividades de procesamiento, por ejemplo la recolección de lentejas y garbanzos, la preparación de la salsa de granada, la recolección de uvas, pepinos y tomates. También tienen otras responsabilidades, como por ejemplo el traslado de piedras para la construcción, el pastoreo y ordeñe de los animales, el procesamiento de los lácteos, la recolección y transporte de la leña y abono para combustible, la recolección de plantas silvestres, el procesamiento de las pasas de uva y jarabe, el secado de los higos y las semillas de granada.

El comercio, cuando se realiza, es principalmente para cubrir las necesidades de las familias y no tiene fines de lucro. Aunque se utiliza el dinero, el trueque todavía caracteriza a las sociedades tribales de la región.

La alta calidad de la granada que se produce en Naw, el uso de los métodos orgánicos naturales y el alto nivel de los conocimientos técnicos de los campesinos dan fundamentos para creer que, si se recibiera ayuda, habría un mercado potencial muy bueno para este producto fuera de la región.

El tiempo promedio en personas-días (p-d) de trabajo manual utilizado por hectárea para los diferentes cultivos es 60 p-d, y puede ascender hasta 72 p-d en las tierras irrigadas pero sólo 20 p-d para los productos de secano. Dada la pirámide de edad de la aldea y las oportunidades limitadas de la agricultura del área, el tiempo sobrante de hombres y mujeres se dedica a la principal actividad no agrícola de Naw, la fabricación de giwah (giveh en persa), una especie de calzado tramado, hecho de algodón tejido en la parte superior y de algodón prensado en la suela. Esta actividad artesanal es típica de la región kurda y tiene un buen mercado local y nacional. En realidad, esta actividad aporta casi el 70 por ciento de los ingresos de la población. La segunda actividad de importancia económica es el trabajo estacional migratorio en las ciudades vecinas y distantes del país.

La actividad artesanal aporta casi el 70 por ciento de los ingresos de la población.

Algunas características sociales

En períodos de necesidad, las personas de diferentes familias colaboran entre sí con mano de obra o con productos agropastoriles, sin esperar una retribución inmediata. Las relaciones de parentesco y de clan son importantes en la región y la cooperación tanto a nivel individual como grupal es una fuerte tradición que tiene un alto valor social. Un ejemplo de esta cooperación es lo que se denomina «gol kardan» que incluye la siembra, el desmalezado y la cosecha. Los hombres de la aldea se dividen en diferentes equipos, cada uno bajo la dirección de un «berawan.» Cada equipo se hace cargo de un campo por vez hasta que el trabajo de todos está terminado. La recolección de la resina de los árboles de pistacho silvestre es otra de las actividades que se realizan colectivamente.

No existen las cooperativas formales en esta región. Los campesinos de la comunidad no tienen prácticamente ninguna relación con las instituciones gubernamentales, salvo un par de maestros de la escuela local. Si bien el Gobierno cuenta en la provincia con muchos organismos de investigación y desarrollo para temas como el cultivo de secano, la conservación del suelo y el agua, la mejora de las semillas y plántulas y las plagas y enfermedades de la flora, en realidad, los agricultores de la zona no tienen ninguna relación con ellos y no reciben ningún beneficio de su trabajo. La principal fuente de conocimiento técnico es el conocimiento tradicional e indígena adquirido a lo largo de siglos y transmitido de generación en generación.

Sistemas agrícolas, ecológicos y económicos

A pesar de la falta de acceso al asesoramiento «técnico» moderno y a los insumos agrícolas y el medio ambiente relativamente adverso dado lo empinado del terreno, la escasez de agua para una agricultura de riego extendida y la pobreza de los suelos, la comunidad ha logrado mantener un sistema razonablemente productivo, especialmente para cubrir sus necesidades de subsistencia. Esto se hizo a través de la aplicación del conocimiento y saber tradicional, los cultivos de secano extensivos y la integración de varios tipos de agricultura con la forestación, la recolección de productos forestales no madereros y el manejo de las praderas para la cría de animales. Los beneficios mutuos de la agricultura y la cría de animales permiten mantener una alta productividad en ambas actividades y resguardar las condiciones de los suelos y las pasturas.

La superficie promedio de tierra con cultivos de secano para cada familia es de 6 ha aproximadamente, unas diez veces más que las tierras con cultivos de riego anuales. La baja productividad total de los agroecosistemas y el carácter de subsistencia de la agricultura no permiten ahorrar. Por lo tanto, muchas de las familias viven en un estado de relativa pobreza. La subdivisión de los derechos de la tierra por razones de herencia puede convertirse en un problema futuro.

La sociedad de Naw desarrolló su sistema agrícola particular basado en sus condiciones climáticas, topográficas y de agrobiodiversidad, la predominancia de las tradiciones tribales y la dependencia de la agricultura y la cría de animales transhumante y estacional. Con estos elementos utilizó de manera sustentable su medio ambiente y sus recursos naturales.

Lecciones aprendidas

Las claves del éxito de los sistemas de sustento de la región de Naw son:

la protección de los agroecosistemas sin insumos artificiales externos;

la confianza de satisfacer las necesidades a través de una subsistencia basada en el agroecosistema;

el uso de sistemas tradicionales de cooperación comunitaria y de manejo de los recursos;

la falta de dependencia de actores externos o de organismos gubernamentales;

la preservación de la biodiversidad biológica, silvestre y agrícola, a través de una variedad de enfoques de manejo agrícola y ambiental interdependientes y del uso óptimo de la migración estacional vertical para evitar el estrés excesivo de las praderas y los bosques.


[318] La información sobre las variedades vegetales fue sumistrada por los ancianos de la comunidad de Naw y de otras comunidades del Valle.

Página precedente Inicìo de página Página siguiente