72. El debate sobre este punto tuvo lugar en presencia del Dr. Roy I. Jackson, Director adjunto de la FAO, y del Sr. E. M. Ojala, Subdirector General, Departamento Económico y Social, FAO. La Comisión tomó nota de la sección del documento ALINORM 76/8 relativa a los ingresos y gastos en 1974/75, que había sido examinada por el Comité Ejecutivo en su 22o período de sesiones (ALINORM 76/4, párrafos 3 y 4).
73. En lo que se refiere al proyecto de programa de labores y presupuesto para 1976/77, la Comisión tuvo a la vista el documento ALINORM 76/8 y los informes del 21o y 22o períodos de sesiones del Comité Ejecutivo, que había examinado este asunto.
74. Antes de que la Comisión procediera al examen del proyecto de presupuesto para el programa del bienio en curso y de las consecuencias para las actividades del Programa, el Director General Adjunto expuso los antecedentes de la cuestión en lo que respecta a la FAO. Señaló que el Director General había recibido de la Conferencia de la FAO, celebrada en noviembre de 1975, el encargo de revisar los programas, las actividades, la plantilla de personal y la organización general de la FAO, y de presentar sus recomendaciones sobre estos asuntos al Consejo de la FAO, que se reuniría del 12 al 21 de julio de 1976. Después de formular sus recomendaciones, el Director General tendría que exponerlas al Comité del Programa y al Comité de Finanzas de la FAO, que comunicarían sus puntos de vista al Consejo de la FAO. Las propuestas del Director General no estaban todavía ultimadas. Las propuestas que han sido objeto de estudio se encuentran actualmente en forma de borrador. La Decisión final en este asunto incumbe al Consejo de la FAO.
75. El Director General Adjunto aludió a las orientaciones que la Conferencia de la FAO había dado al Director General. Estas orientaciones insistían en la necesidad de que los programas y actividades de la FAO respondan de manera más positiva a las necesidades de los países en desarrollo. La Conferencia de la FAO había pedido también al Director General que revisara y evaluara las reuniones, las publicaciones, los viajes, los puestos de nueva creación y las reclasificaciones y que, en la medida de lo posible, los redujera.
76. La Conferencia de la FAO había aprobado sin oposición un presupuesto de 167 millones de dólares para la Organización para 1976/77, pero en la inteligencia de que el Director General se obligaría a efectuar la revisión. Cada parte del Programa del Labores y Presupuestos de la FAO para 1976/77 está sujeta a revisión.
77. El Director General Adjunto indicó a la Comisión que se había preparado en dicho contexto el presupuesto y programa de labores sometido a su consideración en el documento ALINORM 76/8. De todos modos, los Gobiernos Miembros de la Comisión del Codex Alimentarius tenían la posibilidad de dar a conocer sus puntos de vista sobre el asunto a través de sus representantes en el Consejo de la FAO en julio de 1976.
78. El Presidente comunicó que el proyecto de presupuesto para el Programa de 1976/77, que contenía las dos listas de reuniones del Codex, había sido examinado por el Comité Ejecutivo en su 22o período de sesiones, que formuló varias observaciones al respecto. La Comisión tomó nota de que se le pedía que examinara muy atentamente sus propias prioridades, en vista de la difícil situación financiera y dadas las prioridades globales y la orientación general señalada por los órganos rectores de las dos Organizaciones. Se le pedía también que ajustara su programa de trabajo para 1976/77 a un presupuesto que se había establecido sobre la base de 1974/75 más los aúmentos de gastos obligatorios para 1976/77. El jefe del Programa Conjunto FAO/OMS sobre Normas Alimentarias comunicó que, al igual que la FAO, la OMS se había enfrentado también con una difícil situación financiera en relación con sus prioridades globales y que el Director General de la OMS no había podido presupuestar un aumento de las actividades para el Programa de Normas Alimentarias. De todos modos, la OMS, como en el pasado, contribuiría con el 25 por ciento del presupuesto común del Programa y atendería también los aumentos obligatorios de gastos. Sobre la base de las actuales propuestas presupeustarias para 1976/77, se mantendría el acuerdo de distribución de los gastos para el presupuesto común del Programa (el 75 por ciento la FAO y el 25 por ciento la OMS).
79. En cuanto a la reducción de 41 a 27 en el número de reuniones del Codex durante el bienio, la Comisión tomó nota de que el Comité Ejecutivo, habida cuenta de las explicaciones dadas por la Secretaría, estaba en general convencido de que, salvo el caso de una reunión completa del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos que no había sido incluida en las propuestas del Director General para el bienio, la elección de reuniones representaba, en conjunto y dadas las circunstancias, la solución probablemente más satisfactoria, desde el punto de vista de la necesidad de garantizar el desarrollo general de las actividades del Programa.
80. Dadas las importantes cuestiones que este Comité debe tratar y considerando sus funciones de apoyo, que interesan a todos los proyectos de normas el Comité Ejecutivo consideró importante que se celebrase una reunión completa de este Comité en el bienio actual. En consecuencia, el Comité Ejecutivo hizo las gestiones oportunas para que se añadiera una reunión del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos a la lista de las 27 reuniones del Codex previstas para el bienio. Como alternativa, en caso de que hubiese dificultades al respecto, el Comité Ejecutivo había propuesto la supresión de una reunión del Comité del Codex sobre Pescados y Productos Pesqueros de la lista de reuniones previstas para 1976/77 y su sustitución por una reunión del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos.
81. En el curso del debate, varias delegaciones subrayaron el carácter singular del Programa Mixto FAO/OMS sobre Normas Alimentarias. El Programa era único en su género, pues una parte importante de la carga financiera de administrar el Programa estaba costeada por los gobiernos hospedantes. La gran mayoría de las reuniones del Codex eran reuniones patrocinadas por los Gobiernos Miembros, que habían asumido la responsabilidad de costear los servicios de organización, de interpretación y traducción - las más de las veces en los tres idiomas de la Comisión (inglés, francés y español) - además de una considerable cantidad de documentación. La delegación de los Estados Unidos, que hospeda dos Comités del Codex, indicó que el costo correspondiente a los Estados Unidos por la participación en los trabajos de la Comisión del Codex Alimentarius era del orden de 1 millón y medio de dólares por año.
82. Todas las delegaciones que intervinieron en este asunto, tanto de países industrializados como de otras regiones en desarrollo del mundo, insistieron en la importancia de las actividades de la Comisión. Su labor era importante porque se destinaba principalmente a proteger al consumidor contra los riesgos de la salud debidos a los alimentos y contra el fraude, y a conseguir la mayor uniformidad posible en las leyes y normas alimentarias, con objeto de facilitar la libre circulación de los alimentos en el comercio mundial. Se dedica una atención cada día mayor a los trabajos de la Comisión en favor de los países en desarrollo, principalmente a través de los Comités Coordinadores Regionales del Codex que se ocupan, en primer lugar, de la elaboración de modernas leyes alimentarias de carácter regional y de otras cuestiones referentes a la infraestructura de la inspección alimentaria.
83. Se manifestó la preocupación general de que la FAO y la OMS asignasen una prioridad inferior a la labor del Programa Mixto FAO/OMS sobre Normas Alimentarias, lo que sería muy de lamentar en unos momentos en que la Comisión se estaba apuntando unos resultados muy positivos en sus trabajos.
84. Algunas delegaciones pertenecientes a regiones en desarrollo destacaron la importancia de que se creara una infraestructura de inspección alimentaria y una delegación expresó el parecer de que era éste el punto al que había que atribuir mayor importancia, aun cuándo ello significara una reducción del número de las reuniones del Codex. Otras delegaciones, también de países en desarrollo, estimaban que sería posible intensificar los trabajos sobre la infraestructura de la inspección alimentaria sin reducir el número de las reuniones del Codex.
85. Se trataron también los puntos siguientes:
Las economías conseguidas mediante la reducción de la cuantía del presupuesto del Codex para 1976/77 eran muy reducidas en relación con los presupuestos globales de la FAO y la OMS;
los gobiernos mismos deben elaborar sus presupuestos para las actividades de la Comisión y sus órganos auxiliares y es necesario que exista cierta continuidad en el programa de trabajo de la Comisión, de manera que los gobiernos puedan elaborar sus presupuestos ordenadamente;
la amplicación del período intermedio entre las reuniones de la Comisión y los Comités del Codex tenía un efecto negativo en cuanto a la continuidad; la continuidad del personal era importante para la labor de la Comisión, dada la naturaleza de esta labor y de las ramificaciones de las actividades de la Comisión. Algunas delegaciones manifestaron su inquietud por el hecho de que entre el 11o y 12o Períodos de la Comisión mediaría ahora un período de dos años; en virtud de los Artículos del Procedimiento, la Comisión debería, en principio, reunirse cada año.
86. Un número considerable de delegaciones subrayó, también, la necesidad de no reducir la frecuencia de las reuniones de los Comités sobre Cuestiones Generales, incluidos, sobre todo, el Comité del Codex sobre Residuos de Plaguicidas y los Comités del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos, Aditivos Alimentarios e Higiene de los Alimentos. A propósito del trabajo del Comité del Codex sobre Residuos de Plaguicidas, se observó con preocupación que se proyectaba para este bienio un solo período de sesiones de la Reunión Conjunta FAO/OMS sobre Residuos de Plaguicidas, reunión constituída por un grupo de expertos cuya tarea altamente especializada se considera fundamental para la marcha del trabajo de la Comisión del Codex sobre Residuos de Plaguicidas. Una delegación en la región de Africa señaló que los Comités del Codex sobre Residuos de Plaguicidas y sobre Aditivos Aliemntarios representaban fuentes muy importantes de información sobre estas cuestiones.
87. Una delegación de un país en desarrollo preguntó si era tan económico y tan eficaz emplear los servicios de consultores, según se preveía en el presupuesto reestructurado para el Programa de Normas Alimentarias en 1976/77 como encomendar ese trabajo a los Comités del Codex. La Secretaría explicó que los servicios de consultores eran necesarios para examinar y analizar la situación en los países en desarrollo respecto al estado actual de la legislación alimentaria y de otras cuestiones de los servicios de inspección de los alimentos. La tarea de los consultores completaba el trabajo de los Comités del Codex, que eran fundamentalmente órganos intergubernamentales de negociación; esta tarea proporcionaría una aportación muy importante a los Comités intergubernamentales y regionales del Codex que actúan en las regiones en desarrollo; en cambio, la cuestión de llegar a un acuerdo sobre textos que podrían tener consecuencia para el comercio y la protección del consumidor es un asunto que ha de debatirse y negociarse en los Comités del Codex, tanto a nivel mundial como regional. Varias delegaciones señalaron la utilidad de los documentos especializados que podrían ser preparados por los consultores para su examen en los Comités del Codex. Una delegación de la región de América Latina recalcó la necesidad de asegurar que el presupuesto del Programa prevea la publicación de todos los documentos del Codex en español, señalando que en algunos comités del Codex sólo se disponía de las versiones inglesa y francesa de los documentos.
88. Una delegación de la región de Asia expresó su desilusión por el hecho de que sólo se hubiera previsto una reunión del Comité Coordinador para Asia en el bienio.
89. El Director General Adjunto, que solamente había podido asistir a una parte de las deliberaciones, indicó a la Comisión que comunicaría al Director General los puntos de vista expresados por la Comisión, sobre todo en lo que se refiere a la solicitud de que se celebre un período de sesiones completo del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos en el presente bienio.
90. El Subdirector General, Departamento de Política Económica y Social de la FAO, que había asistido a la totalidad del debate sobre esta cuestión, manifestó su agrado de poder escuchar los puntos de vista de las delegaciones sobre el problema. Refiriéndose a la pregunta de la delegación de un país en desarrollo de si no se podría prestar la máxima atención al fortalecimiento de los servicios de inspección de los alimentos sin reducir el trabajo de elaboración de Normas del Codex, indicó que ello podría lograrse en gran parte si, dentro de la reducción global del número de reuniones del Codex, se mantuviese el número de reuniones regionales. Este, en efecto, era el enfoque que el Director General daba a la cuestión. El Subdirector General entendió que el debate de la Comisión concedía prioridad a las reuniones de los Comités del Codex sobre Cuestiones Generales y también a los Comités Coordinadores Regionales del Codex.
91. Resumiendo el dabate, el Presidente dió las gracias en nombre de la Comisión al Director General Adjunto y al Subdirector por haber asistido a las deliberaciones de la Comisión sobre este asunto esencial. El Presidente indicó que las observaciones del Director General Adjunto, del Subdirector General y del Jefe del Programa Conjunto FAO/OMS sobre Normas Alimentarias debían recogerse en el Informe, conjuntamente con los puntos de vista expuestos por las distintas delegaciones. El Presidente señaló las siguientes conclusiones fundamentales de las deliberaciones:
Se atribuyó gran importancia a los trabajos de la Comisión del Codex Alimentarius tanto en los países en desarrollo como en los países industralizados.
La incidencia en los presupuestos de la FAO y la OMS de los gastos motivados por el trabajo de la Comisión del Codex Alimentarius era pequeña en relación con los gastos sufragados por los Gobiernos hospedantes que presidían los Comités del Codex y por los Gobiernos Miembros en general para proseguir las actividades de la Comisión y aplicar sus recomendaciones.
La Comisión, en general, había expresado su preocupación por el hecho de que se hubiera reducido el presupuesto para el Programa de Normas Alimentarias para el presente bienio y de que se hubiera prolongado el período que media entre una y otra reunión del Codex.
Los Miembros de la Comisión habían atribuido especial importancia a los trabajos de los Comités del Codex sobre Cuestiones Generales, es decir, los Comités sobre Residuos de Plaguicidas, Etiquetado de los Alimentos, Aditivos Alimentarios e Higiene de los Alimentos.
La Comisión expresó su preocupación de que la reducción del presupuesto y del número de reuniones del Codex disminuido podría retrasar la marcha del programa global de labores de la Comisión.
La Comisión recomendó que se tomaran disposiciones para celebrar la reunión completa del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos en el presente bienio. La reunión se celebraría en Canadá, y el Gobierno del Canadá sufragaría los gastos. Los únicos gastos que incidirán sobre la FAO serán los gastos de viajes de la Secretaría para prestar servicios a la reunión y la preparación de una cantidad modesta de documentos relativos al informe final de la reunión. La Comisión estimó que la reunión del Comité del Codex sobre Etiquetado de Alimentos no debería celebrarse a expensas de la reunión del Comité del Codex sobre Pescado y Productos Pesqueros.
La Comisión estimó que era necesario que los miembros de la Comisión se aseguren de que los delegados que asistan a las próximas reuniones del Consejo de la FAO y de la Asamblea Mundial de la Salud sean informados detalladamente acerca de los puntos de vista de la Comisión, con objeto de que estos puntos de vista puedan estudiarse en las reuniones de esos dos órganos.
92. La Comisión, con posterioridad, tomó nota con agrado de que el Director General había convenido en añadir una reunión completa del Comité del Codex sobre Etiquetado de los Alimentos a sus propuestas relativas a las reuniones del Codex para el presente bienio, además de las 27 reuniones ya previstas.