En el Apéndice 2 se presentan algunos tipos de formularios para la recogida de datos pesqueros, para diversos fines del sector pesquero. De cuando en cuando se requiere una gran diversidad de tipos de datos para diferentes análisis de dicho sector, y aunque esta publicación sólo puede tratar someramente cada uno de ellos, es útil tener una ámplia perspectiva previa de la información que probablemente se necesitará para la planificación de una base de datos estadísticos, y así evitar el tener un exceso de información sobre un aspecto a costa de la ausencia de datos de otros.
En la fase preparatoria de la planificación de un sistema estadístico, es necesario clasificar y codificar adecuadamente los principales tipos de desembarcos comerciales. Cada categoría exigirá un enfoque diferente del muestreo y algunas contendrán una variedad de especies o categorías comerciales que deberán ser registradas separadamente. Algunas de las categorías típicas recomendadas por la Commonwealth de las Bahamas (Caddy, 1981) fueron:
(i) peces vivos (mantenidos en viveros) y vendidos por piezas,
(ii) peces refrigerados con hielo y desembarcados en cajas,
(iii) peces congelados o colas de marisco en bolsas de “40 - 1b”,
(iv) filetes congelados de pescado en bolsas,
(v) moluscos (en concha, descascarados antes de la venta)
Se deben elegir categorías similares para cada isla (grupo de islas), que reflejen los diferentes tipos de recursos disponibles localmente, y sean importantes para la recolección de datos. De cada una de estas categorías hay que hacer un muestreo para determinar la composición por tamaño, edades y especies con el fin de extrapolarla a la captura total estimada de las principales especies de interés.
En Bazigos (1974) y FAO (1981) se presentan los diversos métodos para estimar la captura total de una pesquería y los consiguientes niveles de desembarcos. Generalmente se usan dos enfoques:
(a) calcular la captura total a partir de una fracción conocida de todas las operaciones pesqueras de las que se saben las cantidades capturadas. Como se señalará más adelante, esto sólo es posible si se ha definido toda la base de muestreo, y el muestreo se lleva a cabo aleatoriamente;
(b) intentar obtener toda las transacciones de ventas que se realizan a través de plantas de procesamiento y vendedores autorizados, por un esquema como el que se da en el Apéndice 3 (método de censo).
El ejemplo siguiente indica uno de los problemas especiales con que se tropieza en muchas pesquerías; la langosta de las pesquerías de arpón es probablemente troceada en el mar y sólo se desembarcan las colas. En cambio, en la pesquería de nasas puede que se utilicen animales enteros, con lo que se dispondría de datos sobre la longitud del caparazón para una pesquería y sólo sobre la longitud de la cola para la otra. Problemas similares se encontrarán al combinar los pesos del pescado eviscerado o seco con los pesos del pescado fresco para estimar de la captura total desembarcada. Para hacer esas conversiones se necesitará un factor de conversión, por cada tipo de procesamiento, con el fín de expresarlos en términos de la medida convencional adoptada: generalmente o longitud total o del caparazón, o peso de pescado fresco entero. Los factores de conversión se pueden establecer midiendo/pesando una muestra de unos 200 individuos etiquetados de toda la gama de tamaños, antes y después de su procesamiento de forma comercial. Después se pueden obtener los factores de conversión por análisis de regresión (para más detalles ver FAO (1980)). Esto requiere tiempo pero sólo se necesitará repetirlo cuando cambien los métodos comerciales de procesamiento.
Para el muestreo biológico es especialmente importante que se refleje en los formularios de muestreo la categoría del arte de pesca. Algunas categorías típicas para las Bahamas fueron:
(i) pesca de arpón (colas de langostas y similares, pescado entero o fileteado),
(ii) líneas de mano (pescado entero o fileteado),
(iii) artes de cerco (pescado entero o fileteado),
(iv) nasas (colas de langostas y similares, pescado entero o fileteado)
(v) salabardos con cierre (colas de langostas y similares)
Es obvio que estas categorías deberán ser ajustadas a las prácticas locales y codificadas apropiadamente.
Antes de establecer un esquema de muestreo o seguimiento con fines de evaluación de recursos, y decidir categorías de estos que sean significativas, es necesario determinar los grupos de especies que se capturan.
(1) Identificación de especies: la identificación apropiada de las especies es un requisito previo necesario para una detallada evaluación de la mayor parte de los recursos, y es un problema al que se enfrentan la mayoría de los países tropicales donde la diversidad de especies es elevada. La identificación de peces e invertebrados en el área del COPACO es posible mediante de las hojas de FAO de identificación de especies (ver por ejemplo, área de pesca 31: el Atlántico Centro Occidental: Fischer, 1978). Para identificar en la práctica el pescado en los desembarcos es por supuesto impracticable que el estadístico lleve consigo una colección de 7 volúmenes que incluyen del orden 1 000 especies potencial y actualmente comerciales. De hecho, lo que se suele hacer es extraer las hojas de las especies de importancia comercial en el país en cuestión. La cosa es más sencilla para varias de las especies más importantes (por ejemplo, langosta, conchas en el Caribe) en las que generalmente la identificación no es un problema. Para varias otras, especialmente la pesquería de nasas para peces de arrecife, estos se venden frecuentemente mezclados después de la extracción de las especies de alto precio; por ello, su clasificación individual puede no ser de máxima prioridad, pudiendo por ejemplo ser necesaria una categoría de “peces de arrecife mezclados”. Alternativamente, o además, se pueden seleccionar para el muestreo estadístico una o dos especies clave de arrecife, que sean fáciles de reconocer, como “indicadoras” del estado de los recursos de arrecifes. Será necesario que alguien familiarizado con los recursos del área, y su clasificación comercial, diseñe una simple “guia de las pesquerías comerciales” basada en las Hojas de Identificación de la FAO, y un formulario adecuado de muestreo (por ejemplo, formularios F y G en el apéndice 2) para cada subregión (coordinándolo cuando sea posible con estados insulares adyacentes).
(2) Datos sobre la composición de especies: las encuestas de mercado, realizadas a intervalos regulares anuales, son útiles para apreciar la proporción de especies clave que se ofrecen a la venta y sus precios relativos, y pueden proporcionar pruebas indirectas de los cambios en la abundancia relativa de las especies, desde el momento en que el precio de la especie “sustituta” o que antes era “de desecho”, tiende a subir cuando las especies preferidas se vuelven menos abundantes y demasiado caras para la mayoría de los consumidores. Para obtener una idea más exacta de la composición de especies, el método recomendado es el de muestrear en los puntos de desembarco, o si es el caso de descartes al mar (que generalmente lo és) se necesitará el muestreo en el mar sobre barcos comerciales.
(3) Identidad de la población: en la evaluación de los recursos es importante considerar primero cuales son los “recursos unitarios”, o poblaciones de una determinada especie que se están explotando, y diseñar un sistema estadístico que permita separar la información de los diferentes recursos unitarios. Por ejemplo, mientras que puede ser razonable y apropiado considerar la ordenación de todos los recursos de arrecifes de coral de una pequeña isla como una unidad, en el caso de dos sistemas de arrecife de coral, separados por una distancia considerable, puede ser más apropiado tratar las poblaciones de peces de estos dos arecifes como recursos individuales.
Por el contrario, para recursos migratorios, especialmente de pequeños pelágicos neríticos (por ejemplo, arenques y anchoas), la población de una serie de islas que compartan una plataforma común necesitará ser ordenada como una unidad. Para especies oceánicas (por ejemplo, atunes, peces voladores), es probable que las islas de un archipiélago esten compartiendo un recurso común, incluso si no hay una plataforma común, con las pesquerías de áreas continentales adyacentes. Algunos de los problemas que surjen al tratar de este tipo de recursos comunes han sido adelantados en Gulland (1981) y Caddy (1982), pero desde el punto de vista de la evaluación de estos dos últimos tipos de recursos, es importante que todos los datos de una unidad de población sean considerados conjuntamente y mantenidos separados de los de poblaciones contiguas.
El método directo para estimar la productividad potencial las plataformas insulares es construir un mapa de los habitats de la plataforma (arrecife, arena, manglar, hierba de tortuga, y fango, etc.), estratificados por profundidad, y utilizarlo como base para hacer un reconocimiento del recurso y determinar la biomasa total de las diferentes especies comerciales, o del recurso en su conjunto (una evaluación multiespecífica), usando o un buque de investigación o uno comercial alquilado.
Es posible que en algunos casos no se disponga de fondos y personal para llevar a cabo un reconocimiento adecuado de los recursos, y que el mapa de los principales habitats y fondos de pesca tenga que ser construido a partir de entrevistas con los pescadores o, con más detalle, a partir de imagenes del LANDSTAT y fotografía aérea (ver Caddy y Piaggesi (1982) para detalles sobre la metodología).
Como ya se ha indicado, a pesar de su simplicidad, los mapas temáticos permiten delimitar los caladeros y su superficie mediante un planímetro. La biomasa de la población de una especie es igual a (superficie de los fondos x biomasa media por unidad de superficie). Una primera estimación aproximada del rendimiento potencial de esta biomasa requiere un conocimiento, para cada especie, de la tasa de mortalidad por pesca F (dada por rendimiento de pesca/biomasa media) y de la tasa de mortalidad natural (M), que se obtiene de la investigación biológica, o utilizando el valor determinado para las mismas especies en áreas adyacentes. Las tablas de rendimiento de Beverton y Holt (1966) pueden entonces ser utilizadas para estimar cual será el nivel de pesca y la talla de primera captura que proporciona el máximo rendimiento por recluta.
El método indirecto para estimar la productividad potencial de un recurso consiste en la estimación indirecta del rendimiento potencial del recurso mediante el análisis de datos comerciales, completado, por supuesto con información sobre la biología y la distribución del recurso. Este enfoque debe ser el principal a adoptar cuando el recurso esté en, o cerca de, el máximo rendimiento, ya que permite elaborar un modelo de la relación entre el esfuerzo pesquero, el rendimiento y beneficios económicos de la pesca en una forma que es difícil, o imposible de hacer unicamente con los reconocimientos. En cualquier caso, es más barato y también proporciona información para el análisis del comportamiento económico de la pesquería. Esto no supone minimizar la importancia de los reconocimientos de recursos, pero en pequeños estados insulares, si se compilan y analizan estadísticas, sólo deberán hacerse reconocimientos a intervalos más largos (por ejemplo, tres a cinco años), salvo en circunstancias especiales.
Es importante y básico para casi todos los tipos de análisis el que los administradores tengan un conocimiento de la captura total de una determinada clase de especies, o al menos una indicación de las tendencias de los niveles de los desembarcos. Esta información puede ser obtenida de diversas formas (y estas categorías interesan generalmente para otros tipos de información de los que se tratará más adelante).
(1) Desembarcos totales: un sistema de cobertura total que puede ser un método barato de recogida de datos de desembarcos (como alternativa a un trabajo contínuo o a costosas encuestas por muestreo es el uso de hojas obligatorias de ventas para aquellos recursos que pasan a través de vendedores de pescado y comerciantes acreditados. Tal esquema aparece esbozado en el Apéndice 3 y deberá ser modificado con arreglo a las condiciones locales. Este esquema es obviamente atractivo en los casos en los que los recursos se venden a través de intermediarios. También es útil cuando un valioso recurso está exhausto y sobrepescado, y hay que someterlo a estrictas medidas de conservación para permitir la recuperación de la población (por ejemplo, langosta, concha). En estas circunstancias, y para asegurar la recuperación de la población, será necesario dar licencias a un número limitado de pescadores, o conceder derechos de uso territorial (CDUT) (Christy, 1982). El empleo de un sistema de cobertura total está contraindicado cuando son muchos, y dispersos, los lugares de desembarco, hay una alta proporción de trueques o ventas directas a consumidores, un bajo nivel de alfabetismo de los vendedores o poca vigilancia.
Estadísticamente, el principal problema que existe con los datos recogidos con este método es la significativa posibilidad de sesgos (por ejemplo, pocas declaraciones), y aquí el papel de los funcionarios pesqueros experimentados es estimar a partir de otras fuentes cuales son las magnitudes probables de los desembarcos que no han sido declarados de esta forma.
La otra alternativa principal para estimar los desembarcos totales y el esfuerzo (especialmente para barcos del día), es determinar la tasa media de captura para un recurso dado, y obtener una estimación de los desembarcos totales mediante la combinación de los resultados de las encuestas de pesca (estimación del tamaño efectivo de la flota usando un registro actualizado de barcos), más información especial sobre el número medio de días de pesca, por período de encuesta, por barco de un arte dado, sobre un tipo de recurso dado.
Para un determinado tipo uniforme de buque u método de pesca dado, los desembarcos en un més J de una especie A sobre un caladero dado pueden obtenerse como sigue:

Los tipos de información (a) y (c) provienen de encuestas con pescadores o registros de compañias, y (b) por combinación de los resultados deuna encuesta de pesca (estimación del coeficiente de actividad pesquera) con un registro actualizado de barcos. Los desembarcos mensuales por comunidad pueden ser acumulados por tipo de embarcación y mes para dar totales anuales, regionales o nacionales según se requiera. Hay que tener cuidado con que las embarcaciones elegidas como típicas de una determinada clase no sean las que probablemente tengan una tasa de captura más alta que el promedio. Al sustituir un barco de pesca por otro, es conveniente reemplazarlo con otro de rendimiento similar.
(2) Esfuerzo Pesquero: si hay uno o más tipos uniformes de embarcaciones que pescan con el mismo arte de pesca, puede elegirse una categoría como normal, y de una estimación de su captura por mes puede obtenerse el esfuerzo total ejercido dicho mes, para todas las categorías de barcos, de la siguiente forma:

Esta cifra se puede obtener tanto para un recurso dado A, o para el conjunto del recurso (multiespecífico), y por supuesto acumulativamente por comunidades y meses para obtener cantidades anuales.
El rango de tamaños de una especie que se desembarca en un área dada, es un indicador sensible de los acontecimientos que afectan al recurso. De este modo, una disminución en el tamaño medio en la captura, acompañada de una caída en la tasa de captura, es generalmente un indicador de sobrepesca, mientras que si está acompañada por un incremento en la tasa de captura de juveniles, será una buena indicación de que está sucediendo un reclutamiento mejor que el reclutamiento medio (comparado con años recientes). A la inversa, un incremento en el tamaño medio y la tasa de captura puede indicar que el esfuerzo efectivo ha declinado en años recientes; no obstante, si está acompañado por una disminución de la tasa de captura, puede indicar que los niveles de reclutamiento han disminuido a niveles inferiores a los promedios.
La distribución de tamaños en una población se halla en función de su composición de edades, su tasa de crecimiento y de las tasas de mortalidad provocadas en ella por causas naturales y por la pesca. Todas estas tasas pueden ser estimadas a partir de procedimientos de muestreo cuidadosamente planificados, y acompañados de información biológica. Aunque el método clásico ha sido combinar el muestreo para tamaños con una función de lectura de edades, para determinar el crecimiento y las tasas de mortalidad directamente (por ejemplo, Holden y Raitt, 1974), existen ahora varios métodos (ver Jones, 1985; Pauly, 1982) para estimar estos parámetros importantes, directamente a partir de las frecuencias de tamaños. Estos sistemas exigen un buen conocimiento de los métodos que se utilizan pero proporcionan la mayor parte de la información que hace falta para análizar las poblaciones de peces, además de la tasa de captura y los desembarcos.
El método de recogida de datos más apropiado para obtener estimaciones fiables de los parámetros poblacionales, a partir de los datos de frecuencia de tamaño, requiere tanto tiempo que sería aconsejable concentrarse al principio, durante unos pocos años, sobre un máximo de una media docena de especies de interés particular que necesitan conservación. Se debe resaltar la importancia de evitar en este tipo de trabajo la mezcla de especies similares. Unos buenos candidatos iniciales para muestrear frecuencias de tamaños en el Caribe son:
| Especies | Medida | Especiales características a anotar |
|---|---|---|
(1) Langosta | (longitud caparazón) | - registrar separadamente por sexos |
(2) Concha | (altura de la concha) | - registrar separadamente las de concha de labio delgado de las de grueso |
Más pesquerías que consisten predominantemente en una especie, por ejemplo:
| Longitud total | |
|---|---|
(3) pez volador | " |
(4) caballa reina o delfín | " |
y peces de arrecife, por ejemplo:
(5) ronco, pez cabra o especies conocidas de peces de arrecife (por ejemplo, viejas).
Otras especies, o grupos de especies tendrán prioridad para otras áreas.
El muestreo se hará para todos los principales tipos de artes que capturan las especies en cuestión, ponderado por su proporción de la captura total. Idealmente, es preferible medir pequeñas muestras de una gran variedad de fuentes que el mismo número de individuos de una gran captura. De este modo si la flota que captura langosta consiste en:
(a) 12 barcos que pescan con nasa, cada uno aproximadamente 100kg/día, y 10 días/mes (por ejemplo, 12 × 100 × 10 kg = 12 000 kg/mes);
(b) 8 barcos que pescan con arpón, cada uno aproximadamente 50 kg/día y 15 días/mes (por ejemplo, 8 × 50 × 15 kg = 6 000 kg/mes).
Así pues, antes de comenzar a combinar las frecuencias de tamaños para obtener totales mensuales o quincenales, habrá que medir por mes un total de 10 cajas, de 50 kg cada una, de langostas procedentes de 5 a 10 barcos que pescan con nasa y 1 caja de cada uno de los 5 barcos que pescan con arpón.
Aunque no es necesario para todos los análisis, las frecuencias de tamaño pueden ser “ponderadas” para dar la composición de tamaño estimada para la captura total comercial mensual de 18 000 kg. Esto se hace por categorías de tamaños de la forma siguiente (por ejemplo los grupos de talla de langosta son de 75–80 mm longitud del caparazón):

En la Figura 3 se muestra una ilustración de este procedimiento para una pesquería que tiene tres clases de artes. Sobre un período de un mínimo de un año, muestras regulares de una especie procedentes de cada tipo de arte, de la forma arriba indicada, deben permitir hacer estimaciones del crecimiento y las tasas de mortalidad.

Figura 3a Frecuencias mensuales de tallas obtenidas a partir del muestreo de 3 categorías comerciales de barcos/artes

Figura 3b Distribución general mensual de tamaños (todos los artes)
Donde:
Ai ℓ = Número por grupo de tamaño ℓ medido del arte i
Bi = Peso de la muestra en kg (arte i)
Ci = Peso capturado (kg) en el intervalo de tiempo por el arte i
En ciertas pesquerías que suministran a plantas de procesamiento de pescado, se pueden obtener datos sobre categorías de tamaños comerciales que, si están disponibles, pueden ser utilizados para ahorrar una gran cantidad de esfuerzo en la obtención de la frecuencia general de tamaños. De este modo si se procesan tres categorías comerciales de pesos conocidos, es posible obtener la distribución general de frecuencias de tamaños muestreando cada categoría de tamaño separadamente, combinandolas posteriormente como se describió más arriba para cada categoría comercial.