FAO en Ecuador

El encanto del chocolate de origen ecuatoriano

24/06/2020

Las tendencias del mercado internacional han evidenciado que los consumidores prefieren productos que están vinculados a modelos de desarrollo sostenible y responsables socialmente. Uno de estos productos es el chocolate de origen ecuatoriano, proveniente de un sistema agroforestal, que trae consigo beneficios ambientales, sociales y económicos.

Este tipo de producción es una de las fortalezas de la agroindustria en Ecuador que tiene la capacidad de producir barras con cacao 100% fino de aroma, bajo un enfoque que difícilmente pueda replicarse en otras partes del mundo, debido a las característica geográficas y climáticas del país.

Según la Organización Internacional del Cacao (ICCO), 50 millones de personas a nivel global dependen de este cultivo para subsistir con un negocio que mueve más de USD 200.000 millones anuales, como una de las 6 principales actividades más lucrativas del mundo.

En el Ecuador existen alrededor de 120 mil productores de cacao que frecuentemente combinan el cultivo con café. El 96 % se produce en pequeñas fincas menores a 10 hectáreas.  

Por la condición geográfica ecuatorial, los cultivos de cacao tienen más horas luz que en otros países, y gracias a otros fenómenos climáticos, como la corriente marina fría del Humboldt y la cálida de El Niño, generan ambientes favorables para la agricultura y especialmente para el cacao y café porque influyen en la maduración lenta del fruto y la fijación de azúcares, aromas y sabores.

Si bien las mejores condiciones agroecológicas para la producción del cultivo están en África Central, produciendo un 80% del cacao del mundo; Ecuador ocupa el cuarto lugar como productor de cacao en volumen, antecedido por Costa de Marfil (primer lugar), Ghana (segundo lugar) e Indonesia (tercer lugar).

Pero lo más destacable es que el Ecuador ocupa el primer lugar en calidad de cacao; porque además de producir cacao fino, es cacao de aroma. Esta doble connotación lo convierte en el mejor del mundo a criterio de los más reconocidos chocolateros internacionales.

Por otra parte, su producción se lleva a cabo en medio de la bio-diversidad del país, que aporta sabores complejos y exóticos al cacao y al café. La evidencia científica ha demostrado que se puede utilizar semillas de cacao ecuatoriano para producir en otras latitudes, pero no se han podido reproducir los sabores y aromas propios del terruño ecuatoriano.

 

La Chakra: una contribución desde la cultura indígena a la producción agrícola sostenible

La cultura Kichwa de la Amazonía occidental, con su sistema productivo agroforestal (chakra), maneja un concepto que va mucho más allá de los aspectos agronómicos, constituyendo un espacio de recreación, transmisión del conocimiento agrícola y valor cultural, en el que se establecen roles y se visibiliza la complementariedad entre los miembros de una familia.

En estos espacios se desarrollan procesos de reproducción de la cultura Kichwa, armoniosa con los bosques y los ecosistemas; el rol de la mujer plasmada en las chacramamas es fundamental para el desarrollo y transmisión de los conocimientos y principios de la chakra. Las manifestaciones culturales vinculadas a este espacioson sumamente amplias tanto en lo ritual, lo festivo, la alimentación y la medicina.

La chakra no produce un solo cultivo, produce más de un ciento, que garantizan por sobre todo la seguridad alimentaria de las familias.  Por lo tanto, el café y el cacao producido bajo este sistema posee una diferenciación holística; debido a que, en la chakra, el pueblo kichwa amazónico mantienen dichos espacios de cultivo que se complementan desde su cosmovisión como una integración paisajística del territorio y con base a la transmisión intergeneracional de saberes y tecnologías ancestrales. Así mismo, se promueve la conservación de los recursos naturales, asignando un espacio para el bosque (Sachawa), uno para la chakra (Chakrawa) y uno para la vida familiar y comunitaria (Runawa).

 

Proyecto Cacao Climáticamente Inteligente

En el marco de la Alianza Internacional para la Agricultura Climáticamente Inteligente, la FAO junto al Ministerio de Agricultura y Ganadería el Ministerio de Ambiente y Agua y el Gobierno Provincial de Napo con el financiamiento del Ministerio de Ambiente de Italia, están implementando el proyecto denominado Cacao bajo sistemas agroforestales en la provincia del Napo. El proyecto promueve el aumento sostenible de la productividad y los ingresos agrícolas; la adaptación y la creación de resiliencia ante el cambio climático; y la reducción y/o absorción de gases de efecto invernadero, a fin de que los sistemas agrícolas contribuyan al desarrollo de las comunidades y a garantizar la seguridad alimentaria en el contexto de un clima cambiante.

Datos de interés

  • Varias revistas de salud y belleza recomiendan al cacao como un superalimento que además de alimentar tiene propiedades medicinales como: prevenir infartos, controlar la presión arterial, reducir el riesgo de diabetes, controlar el peso, reducir el riesgo de Alzheimer, brindar una sensación de felicidad y muchos beneficios más.  
  • El cultivo de cacao tiene una historia relevante en la economía del Ecuador; este producto conocido como la pepa de oro, dominó varios siglos en la generación de divisas para el país, desarrollando sectores importantes como la banca, la industria y el comercio.
  • Desde la antigüedad, las culturas precolombinas le dieron la connotación de sagrado; la leyenda dice que Quetzalcóatl (la Serpiente Emplumada) dios de la sabiduría y la agricultura, obsequió el cacao a los humanos. Hasta hace poco, se lo creía originario de la península de Yucatán, México, desde los registros históricos cuando Hernán Cortez se fijó en la bebida caliente, amarga y espumosa que frecuentaba Moctezuma llamada Xocoalt; Cortez tuvo la oportunidad de probarla y se cautivó con su sabor. En la actualidad, varios estudios demuestran que el origen genético más antiguo del cacao se ha descubierto en las riveras del Alto Napo, además su presencia más antigua se ha descubierto en la Cultura Mayo-Chinchipe (Palanda -Zamora) 3.300-3.800 años AC, incluso más antiguo a los Aztecas -Tolteca y Mayas (1.200AC).