FAO en El Salvador

Desarrollan proceso de formación e intercambio de experiencias municipales

18/09/2020
Equipos técnicos de las Unidades de Agricultura y Seguridad Alimentaria de trece gobiernos locales del oriente de El Salvador y de la municipalidad de San Salvador participan en un proceso de capacitación e intercambio de experiencias y buenas prácticas sobre agricultura, nutrición y comunicación para el desarrollo, en el marco del programa “Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO” -una iniciativa conjunta del Gobierno de México, a través de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)- y en coordinación con el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA). 
 Más de treinta técnicos extensionistas participan en diez jornadas, a través de una plataforma virtual para profundizar sobre temáticas agrícolas, prácticas de alimentación saludable, nutrición y comunicación familiar, para su réplica y transferencia de conocimientos a las familias, según la metodología que defina cada gobierno local, en el nuevo contexto por COVID-19.

Durante las primeras jornadas, se abordaron los conceptos básicos en Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN) y su interrelación para acabar con el hambre; así como los conceptos y procesos para el establecimiento de parcelas integrales.  

Asimismo, la municipalidad de Nueva Granada presentó su experiencia en parcelas diversificadas, mediante la cual se identificaron las ventajas y los resultados de esta buena práctica. En tanto, el gobierno local de Jucuarán destacó su experiencia en la construcción y ejecución de su “Plan en SAN”, apoyado por el Programa y que ha arrojado importantes resultados, tales como el establecimiento de un vivero municipal con 10 mil árboles frutales y forestales, de 80 huertos familiares y la entrega de insumos y asistencia técnica a 3 mil productores agrícolas.  

 Esta acción corresponde además al trabajo previo concertado por “Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO”, a través de la estrategia de co financiamiento, ejecutada por más de quince gobiernos locales para invertir en acciones que fortalecen la agricultura familiar diferenciada e impulsar el desarrollo local. En este contexto, el Programa ha desarrollado diversos procesos de capacitación para mejorar las habilidades técnicas de los municipios y, por consiguiente, la atención a las familias.  

 Este proceso de fortalecimiento preparó a los municipios y a las familias participantes del Programa para hacer frente a la pandemia por el virus COVID-19, pues lograron adaptarse de manera rápida y eficaz a la nueva normalidad y mantuvieron a flote su alimentación y economía, mediante la producción de huertos, hortalizas y crianza de aves, acciones apoyadas técnica y financieramente por la AMEXCID y FAO.  

 “Como FAO creemos en el fortalecimiento de capacidades de los recursos humanos de los gobiernos locales, en procesos de producción agrícola y nutricionales. Además de mejorar la coordinación, trabajamos con las municipalidades bajo la misma visión de desarrollo y con el propósito de mejorar los medios de vida y la seguridad alimentaria y nutricional de la población más vulnerable, sobre todo de cara a los retos que nos plantea la nueva normalidad por COVID-19", consideró el representante de la FAO en El Salvador, Diego Recalde. 

 Por su parte, los alcaldes de los municipios de Estanzuelas, Nueva Granda, Alegría y Jucuarán, del departamento de Usulután, participaron activamente en la inauguración del proceso formativo y reiteraron que el acompañamiento brindado por “Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO” ha sido fundamental para mejorar la seguridad alimentaria y nutricional de las comunidades y apoyar a más de mil familias, incluso durante la emergencia por COVID-19. 

  “Como alcaldía tenemos un plan agropecuario y con la pandemia hemos invertido aún más; con el apoyo de Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO hemos entregado insumos, plantines para que la gente siembre su propio huerto y en estos cinco meses (período de cuarentena por el virus en El Salvador) hemos visto a la gente trabajando por su alimentación”, indicó el alcalde de Nueva Granada, Aquilino Rendón.   

 “El alcalde de Estanzuelas, José Efraín Guzmán, atribuyó al Programa y al compromiso del gobierno local, los avances en la erradicación del hambre. “Las personas que tienen huertos caseros ya no tienen que ir hasta el pueblo a comprar los productos que se van a comer, así se reducen gastos en los hogares. Por eso para nosotros “Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO” es importante, para erradicar la pobreza, y alimentar a nuestra gente”, consideró el edil.       

Al finalizar el intercambio de experiencias, los equipos municipales contarán con herramientas técnicas y de comunicación para fortalecer el trabajo con las familias participantes del Programa y replicar las buenas prácticas que contribuyan a mejorar la seguridad alimentaria y nutricional de las comunidades.   

De acuerdo a la FAO, erradicar el problema del hambre requiere del trabajo conjunto de diferentes actores locales y estratégicos, capaces de aumentar la conciencia, promover el debate y movilizar la voluntad política necesaria para avanzar en la SAN.