Director General QU Dongyu

Declaración de apertura del DÍA INTERNACIONAL DEL TÉ de 2024

del Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO

21/05/2024

Excelentísimos señores y excelentísimas señoras,

estimados y estimadas colegas,

señoras y señores:

Buenos días desde Roma.

Me complace dar comienzo a la celebración del Día Internacional del Té de 2024.

En este año celebramos su quinta edición desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 21 de mayo Día Internacional del Té en reconocimiento del importante papel que la industria del té puede desempeñar en la lucha contra el hambre y la pobreza, el empoderamiento de las mujeres, la promoción del desarrollo rural y la restauración de los ecosistemas, así como el fomento del ecoturismo, juntos.

Hoy, rendimos homenaje no solo a una bebida, sino a un patrimonio mundial de tradición y civilización.

El té es un símbolo de hospitalidad, un puente entre generaciones y un catalizador de la conexión.

Trasciende fronteras y nos une a todos, de Xian (antigua capital de China) a Roma pasando por Samarcanda desde hace más de 2 000 años.

Me siento muy orgulloso de decir que el té se originó en mi tierra natal, en Hunan, Hubei y Sichuan, y que es la contribución de China al mundo.

Hoy también rendimos homenaje al café, que se originó en Etiopía, si bien el mayor productor mundial es el Brasil, que representa el 30 % de toda la producción mundial.

Esta es la mentalidad inclusiva de la FAO; no solo promovemos el té, sino también el café como un bebida importante a escala internacional y, en este sentido, espero vivamente celebrar un Día Internacional del Café en un futuro próximo.

Es en estos tiempos difíciles, cuando el mundo se enfrenta a múltiples crisis, que el té reúne a las personas a fin de encontrar soluciones mutuas para construir un mundo mejor, donde prevalezcan la paz y la solidaridad.

Además de su larga y rica historia, el té puede ayudar a lograr nuestros objetivos comunes.

La producción de té es una actividad económica que sustenta a millones de familias pobres de todo el mundo y representa una fuente de subsistencia para las comunidades rurales de muchos países.

La producción mundial de té se valora en más de 18 000 millones de USD y se estima que el comercio internacional de este producto sitúa alrededor de los 10 000 millones de USD anuales, por lo que representa una fuente fiable de ingresos de exportación.

Por ejemplo, las exportaciones de té representan el 19 % del total de las exportaciones de bienes en Kenya, el 11 % en Burundi y el 10 % en Sri Lanka.

Hace 150 años, el principal producto básico de exportación en China era el té, no la seda. Durante muchos años, el té tuvo un papel decisivo para las exportaciones en China y aunque en la actualidad es un producto comparativamente pequeño, tiene una profunda significación histórica.

Asimismo, el té siempre ha sido importante para los países de Oriente Medio alrededor de China, que se beneficiaban de los efectos saludables del té negro comprimido exportado de este país.

Existen más de seis categorías de té, aunque las principales son el té negro, el té verde y el té rojo.

Para muchos países de ingreso bajo productores de té, los ingresos obtenidos de la exportación de este producto permiten sufragar gran parte del costo de las importaciones de alimentos.

El té es un cultivo perenne y, por lo tanto, constituye una fuente de ingresos para los agricultores sin la necesidad de replantar cada año; este también es el motivo por el que es bueno para la restauración de los ecosistemas y, como crece en zonas de media y alta montaña, contribuye al turismo ecológico de estas zonas.

El cultivo de té no solo contribuye a la economía agrícola, sino que también promueve las prácticas agrícolas sostenibles y la conservación del medio ambiente.

Las plantaciones de té pueden actuar como sumideros de carbono, ya que absorben dióxido de carbono de la atmósfera y ayudan a mitigar los efectos del cambio climático.

Las mujeres desempeñan un papel crucial en la industria del té, ya que contribuyen considerablemente a su sostenibilidad y productividad y al desarrollo comunitario, sobre todo porque la producción de té requiere mucha mano de obra y proporciona numerosos puestos de trabajo decente, que son los que suelen preferir las mujeres.

Las mujeres constituyen una gran parte de la fuerza de trabajo en las plantaciones de té y, a menudo, llegan a ser la mayoría de los trabajadores.

Sus contribuciones sustentan la viabilidad económica de la industria, el tejido social y el desarrollo sostenible.

Reconocer y respaldar la función de las mujeres en el sector del té es fundamental para impulsar un futuro más equitativo y próspero para el sector.

Esta es la razón por la que la celebración de este año se dedica a los millones de mujeres que trabajan en la industria del té.

Sin embargo, este sector y, en particular, las mujeres que trabajan en él se enfrentan a dificultades importantes.

Algunas de ellas son los cambios en las pautas climáticas, las difíciles condiciones de trabajo, las plagas y enfermedades, los precios bajos e inestables, el aumento de los costos de producción y el escaso acceso al crédito y la tecnología, entre muchas otras.

Como digo siempre: las dificultades se pueden superar y transformar en oportunidades.

No obstante, para ello es necesario que todos los asociados trabajen conjuntamente para coordinar los esfuerzos.

La innovación, la digitalización y la ciencia también son clave para transformar el sector del té.

La sostenibilidad ambiental es crucial para conservar nuestros recursos, que son limitados, a fin de garantizar la prosperidad del sector del té, tanto para los productores como para los consumidores.

También deseo mencionar que ayer fue el Día Mundial de las Abejas. Las abejas son polinizadores importantes que ayudan a que las plantaciones de té conserven su biodiversidad para proporcionar el aroma característico del té.

En su última reunión, el Grupo intergubernamental sobre el té de la FAO señaló la necesidad de elaborar estrategias y políticas de gran repercusión encaminadas a preparar el sector para la transición energética dirigida a adoptar sistemas de producción verdes.

La sostenibilidad también implica que hemos de considerar la vertiente social del sector, empoderando a las mujeres y los jóvenes, y garantizando que la producción de té sea respetuosa con las normas y los estándares sociales.

Es igualmente importante asegurar que la actividad económica a lo largo de toda la cadena de valor del té sea rentable para todos, en particular para las mujeres.

Todos debemos trabajar juntos y aprovechar todos los medios a nuestro alcance, en especial aumentar las inversiones públicas y privadas y orientarlas mejor.

Las soluciones transformadoras traen consigo un enfoque holístico que permite abordar los aspectos ambientales, económicos y sociales.

En el Marco estratégico de la FAO para 2022-2031 se reserva un lugar destacado para la transformación de los sistemas agroalimentarios mundiales, con vistas a garantizar que se vuelvan más eficientes, más inclusivos, más resilientes y más sostenibles.

Para las cuatro mejoras: una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor, sin dejar a nadie atrás.

El té y la industria del té pueden ser uno de los motores para aplicar las cuatro mejoras.

Queridos amigos:

La celebración de este año del Día Internacional del Té es una ocasión para renovar nuestro compromiso de trabajar juntos y encontrar soluciones concretas, prestando especial atención al empoderamiento de las mujeres en la industria del té.

Les invito a que visiten la exposición en el Atrio dedicada al té, que comprende los lugares de producción de té que han sido designados como Sistemas importantes del patrimonio agrícola mundial (SIPAM) y que disfruten de una buena taza de té de países diferentes.

Este año también hemos destinado un espacio al café, con la intención de establecer un Día Internacional del Café para este producto tan importante e impulsar la mejora de los medios de vida en las zonas rurales, en especial en las regiones tropicales.

Agradezco encarecidamente que los países participantes hayan ofrecido su té y su café; ¡de la cosecha a la comodidad de su hogar en una taza!

Les deseo un feliz y saludable Día Internacional del Té de 2024.

Disfruten de su tipo favorito de té, prueben diferentes mezclas y no olviden tomar un café; si son innovadores, incluso pueden tomarlos juntos en la misma taza.

Gracias.