30/08/2023 El 25 de enero de 2023 visité Pandiénou, una aldea de la región de Thiès, en el Senegal occidental, junto con la Sra. Martine Biron, Ministra de Relaciones Internacionales y Francofonía de Quebec. Durante esta visita a una escuela de campo para agricultores, nos reunimos con mujeres y jóvenes de la localidad que a diario se enfrentan a los efectos del cambio climático. Escuché sus historias y comprobé los beneficios del aprendizaje práctico en grupo. Pandiénou es más que una aldea: resume tanto los retos a los que se enfrentan los pequeños agricultores del Senegal como las soluciones que tienen en las comunidades para hacer frente a la crisis climática. Fui testigo de cómo el proyecto de la FAO de Refuerzo de la adaptación agrícola (SAGA, por sus siglas en inglés) fomenta la participación comunitaria, la agricultura resiliente y el desarrollo sostenible.
La agricultura es la columna vertebral de las comunidades rurales del Senegal. El sector agrícola emplea a más del 27 % de la población activa, pero este sustento vital está amenazado. Pandiénou, al igual que sus aldeas vecinas, es un exponente de la profunda relación entre las personas y el medio ambiente. El ritmo de vida aquí está marcado por el cultivo del mijo, el maní y el sorgo. Sin embargo, los cambios en los patrones meteorológicos —caracterizados por una pluviosidad cada vez más variable, el alza de las temperaturas y el avance de la desertificación—, han ejercido una presión creciente sobre los medios de vida y los ingresos de los pequeños productores de alimentos. Con la crisis climática ensombreciendo el futuro de la seguridad alimentaria en estas zonas, la necesidad de empoderar a estos pequeños productores para que se adapten se ha convertido en una necesidad acuciante.
Tender puentes entre las comunidades y los responsables de las políticas
La experiencia del proyecto SAGA ha demostrado que muchas respuestas se encuentran en las propias comunidades. A medida que el impacto del proyecto se va extendiendo por todo el Senegal, los éxitos conseguidos ofrecen algo más que soluciones: brindan conocimientos e inspiración para el desarrollo de vías normativas y estrategias de adaptación, tendiendo puentes entre las comunidades y los responsables de las políticas.
Los resultados y las enseñanzas extraídas documentados a través de estas iniciativas están sirviendo de base para la planificación de la adaptación en todo el Senegal, que el proyecto está apoyando de forma paralela, y construyendo unos cimientos sólidos para el futuro. Por ejemplo, el proyecto SAGA apoyó el desarrollo de un plan de ejecución para la contribución determinada a nivel nacional, dos planes de acción regionales de adaptación (regiones de Kolda,Louga y Thiès) y la formulación del plan nacional de adaptación para la agricultura. El proyecto ha facilitado también la realización de nueve evaluaciones sobre vulnerabilidad al cambio climático; escenarios y potencial de resiliencia en los ámbitos del agua, la ganadería y la agrosilvicultura; y opciones de adaptación en la agricultura.
Coordinar esfuerzos para un mundo sostenible y con seguridad alimentaria
El enfoque integrador de la FAO y su experiencia en crear asociaciones estratégicas son fundamentales para el éxito del proyecto SAGA. Al unir a las comunidades locales, las instituciones de investigación, las organizaciones civiles y los organismos gubernamentales, se elimina la compartimentación sectorial. Las sinergias formadas entre las diferentes partes interesadas amplifican la repercusión del proyecto, garantizando un legado de cambio y sostenibilidad duraderos mucho después de que concluya el proyecto.
En mi opinión, la esencia del Marco estratégico de la FAO y de sus cuatro mejoras radica en su profunda interconexión. Un medio ambiente mejor forma un intrincado tapiz tejido con los hilos de una producción, una nutrición y una vida mejores. Este proyecto supone un testimonio de que estos pilares dependen unos de otros para su éxito. Para alcanzar nuestros objetivos, debemos trabajar juntos para mejorar todos los aspectos del ecosistema agrario y garantizar amplios beneficios económicos, sociales y medioambientales en todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), sin dejar a nadie atrás.
SAGA: Un llamamiento a la acción para las regiones que afrontan retos similares
En el Senegal, las historias de transformación son innumerables. Pero todas tienen un mismo hilo conductor: una historia de colaboración, resiliencia y esperanza en un futuro más brillante y respetuoso con el medio ambiente. Ha llegado el momento de actuar a gran escala.
El proyecto SAGA se encuentra en una coyuntura emocionante, ya que se prepara para embarcarse en su segunda fase en el Senegal, Haití y Côted’Ivoire. Hay esperanzas y evidencias palpables para inspirar a otras regiones, tanto dentro como fuera de las fronteras del Senegal.