FAO en Perú

Beneficios económicos, sociales y ambientales de plantar árboles en las ciudades

24/04/2017

Construir ciudades más verdes con árboles que enfrían el aire, elevan el precio de las propiedades, reducen el gasto en aire acondicionado y calefacción, filtran los contaminantes que respiramos, aumentan la biodiversidad urbana y reducen el estrés, entre otros beneficios. 

Lima.- Recientemente, una investigación realizada por el observatorio Lima Cómo Vamos y el diario El Comercio identificó las zonas de Lima Metropolitana que reúnen los factores que más estrés generan en sus habitantes y que, por lo tanto, más afectan su estado emocional.

Además de factores como la falta de acceso a servicios públicos de calidad, la inseguridad ciudadana y la vulnerabilidad ante desastres naturales, la investigación destaca la falta de áreas verdes como un factor que incrementa el nivel de estrés de las poblaciones urbanas.

Por primera vez en la historia, más del 50 por ciento de la población mundial vive en ciudades. En 2050, se espera que este número aumente a cerca del 70 por ciento. Esta rápida expansión de las ciudades nos obliga a pensar “ciudades más verdes”. Una ciudad con una infraestructura verde bien planificada y bien manejada se vuelve económica y socialmente sostenible y equitativa en términos de nutrición y seguridad alimentaria, mitigación y adaptación al cambio climático, reducción del riesgo de desastres y conservación de ecosistemas.

A lo largo de su vida, los árboles pueden proporcionar un paquete de beneficios económicos, sociales y ambientales que valen dos o tres veces más que la inversión en plantación y cuidado.

  1. Un árbol maduro puede absorber hasta 150 kg de CO2 al año. Como resultado, los árboles juegan un papel importante en la mitigación del cambio climático. Especialmente en ciudades con altos niveles de contaminación, los árboles pueden mejorar la calidad del aire, haciendo de las ciudades lugares más saludables para vivir.
  2. La ubicación estratégica de los árboles en las ciudades puede ayudar a enfriar el aire entre 2 y 8 grados Celsius, reduciendo así el efecto de "isla de calor" urbano y ayudando a las comunidades urbanas a adaptarse a los efectos del cambio climático.
  3. Los árboles grandes son excelentes filtros para contaminantes urbanos y partículas finas. Absorben gases contaminantes (tales como monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno, ozono y óxidos de sulfuro) y filtran partículas finas como polvo, suciedad o humo del aire atrapándolos sobre las hojas y la corteza.
  4. Los árboles pueden contribuir al aumento de la seguridad alimentaria y nutricional local, proporcionando alimentos como frutas, frutos secos y hojas tanto para el consumo humano como para el forraje. Su madera, a su vez, se puede utilizar para cocinar y calentar.
  5. Los árboles juegan un papel importante en el aumento de la biodiversidad urbana, proporcionando a las plantas y animales un hábitat, alimento y protección.
  6. Las investigaciones demuestran que vivir cerca de los espacios verdes urbanos y tener acceso a ellos puede mejorar la salud física y mental, por ejemplo disminuyendo la tensión arterial alta y el estrés. Esto, a su vez, contribuye al bienestar de las comunidades urbanas.
  7. Los árboles maduros regulan el flujo del agua y desempeñan un papel clave en la prevención de inundaciones y en la reducción de riesgos de desastres naturales. Un perennifolio o árbol maduro de hoja verde permanente, por ejemplo, puede interceptar más de 15 000 litros de agua al año.
  8. La colocación correcta de los árboles alrededor de los edificios puede reducir la necesidad de aire acondicionado en un 30 por ciento y reducir las facturas de calefacción en invierno entre un 20 y 50 por ciento. En otras palabras, los árboles también ayudan a reducir las emisiones de carbono ayudando a conservar la energía.
  9. La planificación de paisajes urbanos con árboles puede aumentar el valor de una propiedad en un 20 por ciento y atraer turismo y negocios.

 

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