FAO en Uruguay

Evaluación global reveló alto nivel de compromiso de Uruguay con la FAO y sus objetivos

Reunión de presentación y lanzamiento de la encuesta en setiembre. Foto: FAO/Marina González
22/12/2017

“Uruguay completó el trabajo en tiempo y forma y eso se debió a una alianza beneficiosa entre la oficina y los entrevistados”, según Jimena Pérez Rocha, consultora a cargo de la encuesta en Uruguay.

En 2017, la oficina de la FAO en Uruguay, al igual que en más de 90 países, realizó una Evaluación de Resultados Corporativos, para al cual se identificaron 72 informantes de alto nivel de los cuales finalmente 65 respondieron exitosamente un formulario en línea. Una vez procesadas, sus respuestas van a brindar datos que permitan establecer los avances logrados por Uruguay en su colaboración con la FAO y también permitirá saber cómo se sitúa el país respecto a los demás que participaron

Los objetivos estratégicos de la FAO y la tercera encuesta

La FAO definió en 2014 cinco Objetivos Estratégicos: contribuir a la eliminación del hambre, de la inseguridad alimentaria y la malnutrición; lograr una agricultura y una actividad forestal más productivas y sostenibles; reducir la pobreza rural; fomentar sistemas agrícolas y alimentarios más eficientes; incrementar la resiliencia de los medios de vida ante las amenazas y las crisis.

Estos objetivos son los que sustentan la encuesta realizada en 2017, porque la idea es establecer el grado de avance hacia su cumplimiento. “Para eso se recaba información sobre los indicadores que están en el marco estratégico de planificación y se cuantifican los avances, las buenas prácticas y se  identifican aquellos lugares donde todavía no hay avances o donde las coordinaciones todavía no son suficientes para lograr los resultados que se requieren”, detalla Jimena Perez Rocha, la consultora nacional en apoyo al proceso de evaluación de logros corporativos realizado a nivel global. La FAO pretende recopilar datos cada dos años para tener esa información.

En 2014 y 2015, ya se hicieron evaluaciones. La primera fue para establecer una línea de base y la segunda para hacer una primera medición de avances. De ambas participó Uruguay, junto a otros 80 países.

La de 2017 es la tercera instancia de la que Uruguay participa. Esta última encuesta se aplicó por igual en más de 90 países y fue diseñada desde la sede de la FAO en Roma que también estableció la metodología. Respecto a las encuestas de 2014 y 2015, se duplicó la cantidad de entrevistados requeridos y en Uruguay, se entrevistó con éxito a 65 personas, una cifra que está dentro del margen de error fijado, con un ideal marcado en 72.

“La idea era trabajar  según  la propuesta metodológica definida por la Sede en Roma. No se trataba sólo de  la encuesta, también se trataba de cómo llegar a la persona entrevistable, que esta entendiera su responsabilidad en cuanto a la información que se le solicitaba, se comprometiera y de poder darle apoyo para lograr un formulario de calidad”, explica Perez Rocha.

Sobre la encuesta, la consultora agrega que “en Uruguay fueron contactados 72 informantes calificados, en el sector público correspondieron a directores nacionales, asesores de las direcciones nacionales; en la Universidad, profesores agregados o titulares de cátedra. Cuando se consultó al sector privado, en las gremiales rurales, hablamos con la gerencia y en las empresas también, se apuntó al nivel de gerencia o presidencia. En las organizaciones no gubernamentales  fueron contactados  los informantes delegados por las directivas. En las agencias de Naciones Unidas, participaron los representantes en el país y en las agencias financieras internacionales y los oficiales a cargo de los temas específicos a los objetivos de FAO para Uruguay”.

La devolución está prevista a nivel global a partir de abril. En Uruguay se trabajó durante dos meses en lo que fue el trabajo de campo, para recolectar lo que es la información de Uruguay y ahora se está cumpliendo con todo un proceso de análisis y revisión de resultados.

La preparación de la consulta y el compromiso mutuo

Una parte importante del trabajo consistió en identificar a las personas adecuadas para dar la información solicitada. No sólo definir a qué sector pertenecían, tener experiencia en su área y componer un espectro amplio, integrando todas las visiones para lograr una evaluación objetiva.

“El proceso de consulta no fue solo enviar la encuesta para que el entrevistado se siente y lo llene, incluyó un proceso de inducción sobre el Marco de Resultados Corporativos”, recuerda la consultora a cargo de la encuesta. En ese marco se realizó un evento de lanzamiento durante el cual se recordaron los vínculos entre las partes interesadas, en este caso la FAO y aquellos de los que se esperaba que compartieran su conocimiento, para explicarles por qué ese trabajo es relevante, qué se esperaba de ellos, qué características debía tener la información.

Los objetivos a alcanzar y que se plantearon en ese encuentro fueron que la encuesta fuera de buena calidad, que se entendieran casi todas las preguntas, que se contestaran todas, que consultaran en caso de duda.

“Era importante ese compromiso mutuo, no sólo enviarle un correo comentándole al entrevistado de la encuesta, si no hablarle, explicarle lo que se quería, por qué eso era importante, qué implicancias tiene eso para las áreas de común interés, que tienen que ver con las cinco metas planteadas a nivel institucional”, relata Perez Rocha, respecto a su trabajo en la coordinación.

Esto también implicó dar un apoyo y seguimiento a los encuestados en cuanto a las dificultades técnicas y de fondo que surgen en una encuesta en línea. El hecho de que estuviera hecha para cubrir situaciones muy diferentes, con las mismas preguntas para todos los países fue un desafío más y la consultora estuvo a disposición de los informantes a toda hora, para evacuar dudas.

“Las preguntas podían quizás no reflejar la institucionalidad de cada uno de los países, pero la particularidad que tuvo la encuesta en Uruguay es que hicimos la opción de estar muy cerca de los entrevistados, junto a Vicente Plata, el oficial a cargo de la Representación y la oficina de la Representación de la FAO en Uruguay”, destaca Perez Rocha.

La encuesta en Uruguay: particularidades y logros alcanzados

“En Uruguay hay un pool bastante interesante de informantes calificados”, dice la consultora que supervisó la encuesta.

“La idea que tuvimos fue la de entrevistar a gente que tuviera esa visión hacia atrás, que entendiera lo que habrá pasado en 2014, y nos diera una visión del punto en el que nos encontramos ahora y que también tuviera un punto de vista del contexto global, para poder poner el tema en perspectiva y ver si nos estábamos moviendo en la dirección adecuada y qué trabas relevantes no se habían movilizado. Un factor importante fue el definir que era importante una experiencia de trabajo en el área de al menos 10 años”, para ser entrevistable, relata Pérez. Explica que eso permite obtener información por parte de personas que ya tienen cierta trayectoria, que no están recién llegadas al cargo o al área evaluada.

Por otro lado, la consultora valoró que la Representación de la FAO en Uruguay cuenta con una conducción que “trasmite liderazgo y compromiso a las partes interesadas” y “tiene una cercanía que es fundamental para lograr un feed back comprometido”. “Yo lo destaco porque realmente hizo la diferencia: que alguien le dedique 40 minutos, o hasta 2h en algunos casos, a completar una encuesta sobre temas complejos que quizá no son los más urgentes para él en ese momento, no es tan fácil”, agrega.

La consultora también destaca que en algunos casos, debido a que se aplica en 90 países distinto, el formulario resulta “rígido”, que hubo que aprender a lidiar con eso y lograr que los entrevistados también lo comprendieran. “Debido a eso quizá se va a perder parte del detalle de los avances de Uruguay, parte de la información quizá que no esté perfectamente reflejada y se pierda parte de la especificidad a nivel del país”, advierte. Sin embargo, esto permitirá comparar los resultados de Uruguay con los de otros países y tener datos globales que en el caso de una encuesta diferenciada no se hubieran obtenido.

Jimena Perez  Rocha está satisfecha con el trabajo realizado: “Tenemos formularios de buena calidad, realmente. Uruguay completó el trabajo en tiempo y forma y eso se debió a una alianza beneficiosa entre la oficina y los entrevistados, algunos de los cuales nunca habían trabajado con la FAO, aunque sí estaban trabajando en las áreas de interés de la FAO, y eso muestra también el compromiso que hay en el país respecto a estos temas”.