La producción orgánica y sostenible está particularmente indicada para realizarse dentro de los parques puesto que no daña los ecosistemas locales, no utiliza pesticidas y fomenta la biodiversidad, mejorando las cadenas tróficas y creando hábitats para la vida animal. Además, facilita el acceso a subvenciones para los productores que actúan de "guardianes" de la naturaleza.

Un estudio de la Asociación Italiana para la Agricultura Orgánica (AIAB) para el Ministerio del Medio Ambiente analizó diferentes experiencias de producción orgánica dentro de los límites de Parques Nacionales. El objetivo del estudio era elaborar recomendaciones para el desarrollo de la producción orgánica en el sistema italiano de áreas protegidas. Asimismo, se identificaron las mejores prácticas (es decir, aquellas que generan un impacto beneficioso tanto en la producción orgánica como en la sostenibilidad ambiental, social y económica del parque) para la integración de dichas prácticas con el desarrollo del entorno.