Primeros pasos
En esta sección se ofrece una descripción de la lógica general de la cartera de servicios digitales y orientación sobre cómo implementarla, así como material pertinente para ello. El conjunto de documentos integrado en las distintas subsecciones siguientes que se han elaborado facilitará las funciones, las responsabilidades y los enfoques de implementación, así como la configuración necesaria para mantener la cartera de servicios digitales en el país a corto, medio y largo plazo.
Los usuarios previstos son gobiernos, ministerios, expertos, profesionales del ámbito de la alimentación y la agricultura y proveedores de servicios de extensión sobre el terreno, que trabajen en los sectores de la alimentación y la agricultura y estén interesados en aprender cómo implementar con éxito la cartera de servicios digitales de la FAO. Este conjunto de herramientas pretende ayudar a negocios locales y pequeños agricultores a mejorar su ventaja competitiva, al mismo tiempo que adoptan estrategias y soluciones eficaces gracias al acceso directo a información actualizada y oportuna. Además, la información que figura en esta sección puede ser empleada por las oficinas de la FAO en los países para su labor programática, así como por organismos de desarrollo y autoridades nacionales para la formulación y ejecución de programas de asistencia técnica a fin de mejorar la eficiencia, la gestión y la planificación de los recursos nacionales y locales en el sector agrícola.
Cabe señalar que la implementación de la aplicación de la cartera de servicios digitales debería guiarse por las necesidades del país y su situación de referencia inicial y, por tanto, algunas medidas pueden aplicarse en diferentes grados de complejidad y profundidad, adaptadas a cada situación concreta y en consonancia con las visiones y metas de las partes interesadas nacionales y locales.
Las siguientes presentaciones de módulos para la gestión de la cartera de servicios digitales corresponden a los módulos concebidos para ofrecer a los países independencia y mayor flexibilidad a la hora de gestionar la estructura de la aplicación y la definición de los mensajes de asesoramiento clave basándose en sus necesidades locales (administrativas y de otro tipo), así como de gestionar el contenido y los temas. Deberían ser capaces de hacerlo y seguir avanzando de manera autónoma, después de recibir una primera orientación de la FAO o incluso sin ella.