La guerra de Ucrania afecta a millones de personas y provoca desplazamientos masivos de población. La destrucción de infraestructuras y mercados agrícolas o los daños causados en ellos, así como las perturbaciones en las cadenas de suministro de alimentos, está amenazando la seguridad alimentaria de poblaciones ya de por sí vulnerables. Los medios de vida basados en la agricultura, una fuente esencial de ingresos para el 30 % de la población, se ven gravemente afectados. Aunque muchos ucranianos están huyendo de sus comunidades o del país, una proporción considerable de la población permanece en el lugar, por lo que afronta desafíos extremos y, por lo tanto, necesita asistencia humanitaria multisectorial. Las importantes intervenciones agrícolas de emergencia dirigidas a los pequeños productores, que desempeñan una función decisiva en la contribución a la seguridad alimentaria del país, ayudan a mantener las vidas y los medios de subsistencia. 

La FAO está profundamente preocupada por las repercusiones que puedan tener el derrumbe de la presa de Kakhovka y el drenaje parcial de su embalse en la agricultura, la pesca, la silvicultura y las comunidades y medios de vida rurales. El embalse de Kakhovka y el sistema fluvial del río Dniéper son los principales recursos hídricos para la agricultura de la zona, y el considerable descenso de los niveles de agua puede afectar a la producción de cultivos de la provincia de Khersonska y las zonas vecinas del sur de Ucrania. El embalse y las zonas fluviales que se encuentran curso arriba del río Dniéper también eran recursos pesqueros esenciales para la región.

La FAO participa en la evaluación de las necesidades después de desastres, bajo la dirección de la Coordinadora Residente de las Naciones Unidas para Ucrania. La oficina de la FAO en Ucrania está llevando a cabo una evaluación rápida de los daños y pérdidas detectados en el sector agrícola, en estrecha coordinación con las autoridades nacionales y los demás asociados de las Naciones Unidas.

Además, la FAO presta apoyo a la intervención nacional en situaciones de emergencia para dar respuesta a las necesidades agrícolas, que será reforzada por esta evaluación. Esta labor también se está coordinando estrechamente con las autoridades nacionales y los asociados de las Naciones Unidas.