FAO en Honduras

FAO: Agricultura comercial generó casi el 70 % de la deforestación en América Latina

Honduras junto a países del área registran pérdidas netas del bosque y aumento de terrenos agrícolas.
19/07/2016

En América Latina, la agricultura comercial es la principal causante de la deforestación, según el nuevo informe de la FAO, El estado de los bosques del mundo 2016 (SOFO, por sus siglas en inglés).

El SOFO señala que la agricultura comercial generó casi el 70 % de la deforestación en América Latina entre el periodo 2000-2010, pero solo un tercio en África, donde la agricultura a pequeña escala constituye un factor más significativo de la deforestación.

En la Amazonia en particular, la producción de agronegocios para los mercados internacionales fue el principal factor de deforestación posterior a 1990, producto de prácticas como el pastoreo extensivo, el cultivo de soja y las plantaciones de palma aceitera.

“La agricultura comercial de la región no puede continuar creciendo a expensas de los bosques y recursos naturales de la región” explicó Jorge Meza, Oficial Forestal Principal de la FAO.

Meza -quien dirige la iniciativa regional de la FAO de uso sostenible de los recursos naturales- destacó que políticas como la vinculación de incentivos agrícolas asociados a criterios ambientales, la adopción de prácticas silvopastoriles, el pago por servicios ambientales y la recuperación de las pasturas degradadas pueden evitar la ampliación de la frontera agrícola a costa de los bosques.

"La seguridad alimentaria puede lograrse mediante la intensificación agrícola y medidas como la protección social, en lugar de a través de la expansión de las áreas agrícolas a expensas de los bosques", explico Meza.

Aunque la deforestación sigue siendo alta en la región, a 2015 su tasa se ha reducido en casi 50% comparada a 1990. Esta reducción también ha sido significativa en el Amazonas, producto de las políticas de desarrollo sostenible impulsadas por los países que comparten la cuenca amazónica.

Según el SOFO, desde 1990 más de 20 países a nivel global mejoraron su seguridad alimentaria y mantuvieron o aumentaron su cobertura forestal, demostrando que no es necesario cortar bosques para producir más alimentos.

Honduras: pérdidas netas de superficie forestal

De acuerdo el SOFO, en su conjunto Honduras, El Salvador, Haití y Panamá registraron una pérdida neta de bosques que superó 1.4 millones de hectáreas entre 2000 y 2010, y vieron un aumento neto de sus terrenos agrícolas de 545 mil hectáreas.

En el mismo periodo, a nivel global se registró una pérdida neta de bosques de 7 millones de hectáreas anuales en los países tropicales y un aumento neto de los terrenos agrícolas de 6 millones de hectáreas al año.

La mayor pérdida neta de bosques y el mayor incremento neto de terrenos agrícolas durante este período se produjeron en el grupo de países de ingresos bajos, donde las poblaciones rurales están aumentando

Vincular las subvenciones agrícolas a las normas ambientales

En varios países del mundo, las subvenciones agrícolas a gran escala han fomentado la deforestación ya que aumentan la rentabilidad de la producción agropecuaria y generan presión por ampliar la frontera agrícola. Ejemplos de ello en la región son el pastoreo extensivo y la producción de soja a escala industrial.

Una opción de política para evitar esto es vincular los incentivos y mecanismos de fomento público que recibe la agricultura comercial al cumplimiento de normas ambientales.

El SOFO destaca que sólo una reforma de este tipo en Brasil, que vinculó las subvenciones al crédito rural con criterios ambientales, evitó la pérdida de 270 mil hectáreas de bosques que habrían sido deforestadas para incrementar la producción de carne de vacuno.

La iniciativa “Bolsa Verde” de Brasil es otro ejemplo: un programa de transferencia condicionada de efectivo que entrega recursos a miles de familias pobres a cambio de que mantengan la cubierta vegetal y gestionen de forma sostenible sus recursos naturales.