Cuando Marlon Jarquín mira con satisfacción todas las frutas y verduras que cosecha en su finca llamada El Ojochal, recuerda también todas las vicisitudes que ha enfrentado, que van desde sequías hasta inundaciones.

En el centro de Nicaragua, en la comunidad El Aguacate, municipio de Teustepe, Boaco, donde la temperatura en el día oscila entre 37 y 39 grados Celsius; con mucho esfuerzo y compromiso Marlon ha logrado cultivar y cosechar en casi 3 hectáreas, más de 50 especies de frutas y verduras, entre las que se destacan: plátano, papaya, cacao, café, limón, naranja, aguacate, guayaba, piña, pitahaya, jocote, yuca y camote.

Con hablar pausado y muy orgulloso de sus logros este #HéroeDeLaAlimentación de 38 años, relata que algunas amistades le han dicho que tiene “un paraíso en el desierto”, ya que ha cultivado variadas especies en una zona muy árida. Y, ¿Cómo lo ha hecho?  Marlon vive con su esposa María Teresa y sus dos hijos: Vielkys de 14 años y Elder de 17 años. Su jornada empieza cada día a las 5:00 am cuando se levanta, desayuna y se va caminando hacia su pequeña finca. Comenta que generalmente va a trabajar con su hijo, cuidando que esto no afecte sus horarios de estudio, y que a veces trabaja con sus vecinos.

Expresa que su esposa la mayor parte del tiempo permanece en casa y realiza las labores domésticas, mientras su hija va a la escuela. Cuando se acerca la hora del almuerzo retorna para compartir tiempo con la familia y por las tardes, vuelve a la finca para continuar con las labores de limpieza, siembra y riego (a través de pozo artesanal).

Relata que cuando lo invitan a capacitaciones viaja en autobús a diversas partes del país, generalmente asumiendo él los costos de transporte y alimentación. En este contexto dice: “la capacitación es conocimiento y por eso siempre las aprovecho”.

Cuando sale de casa para ir a hacer gestiones personales o asiste a esas capacitaciones, el cuido de la finca queda a cargo de su hijo y sus vecinos. Con seguridad, comparte: “le digo a mi hijo que lleve la misma línea que yo, para que también pueda tener amor a las plantas, porque nos dan vida y el oxígeno que respiramos. Esta es nuestra fuente de vida, entonces por eso la cuidamos”.

Proyecto Agriadapta promueve consumo de frutas y verduras y sostenibilidad agroambiental

El Ojochal se encuentra en el Corredor Seco de Nicaragua, una zona vulnerable ante los eventos climáticos. Esa es una zona de acción del proyecto: Innovación y difusión de tecnologías de adaptación de la agricultura al cambio climático (Agriadapta), el cual inició en 2018 y es implementado por FAO, el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (MARENA), con financiamiento de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE). Marlon ha participado activamente en el proyecto desde sus inicios.

Durante la implementación de Agriadapta en los 10 municipios del Corredor Seco 5,162 familias participantes del proyecto, han sembrado un total de 449,983 plantas forestales y frutales , así mismo, se ha provisto a las familias con semillas, materiales e insumos para la implementación de tecnologías de adaptación al cambio climático y se ha brindado asesoría técnica a productores y productoras. También se han impartido más de 60 talleres prácticos sobre manejo agroecológico de cultivos, huertos biointensivos y elaboración de bioinsumos, con el fin de promover la sostenibilidad agroambiental y el consumo de frutas y verduras.

Frutas y verduras para mejorar la calidad de vida

En este contexto, Marlon afirma que las frutas y verduras son importantes porque, permiten llevar una dieta balanceada, contribuyen a evitar muchas enfermedades y aportan vitaminas y calcio. Consciente de eso, argumenta que en la actualidad su cosecha la utiliza para el consumo familiar y para comercializar en el mercado local, por lo que el cultivo de frutas y verduras contribuye a mejorar su calidad de vida como agricultor familiar y también aporta al desarrollo y sostenibilidad ambiental de su comunidad.

Este #HéroeDeLaAlimentación manifiesta que siente agradecimiento con lo que le ha aportado el proyecto: “lo que ellos nos dan, nosotros se los devolvemos con nuestro trabajo, a veces somos ejemplo y orgullo de estas comunidades y seguiremos con esto por nuestra seguridad alimentaria”.

Marlon expresa que va a continuar sembrado y cultivando frutas y verduras e implementando tecnologías de adaptación al cambio climático para crecer como productor agroambiental, tener alimentos sanos en su mesa y generar trabajos que aporten al desarrollo económico de su comunidad.

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