FAO en Costa Rica

Promueven el uso y desarrollo del bambú para lograr un futuro más sostenible en Costa Rica

05/11/2018

El bambú ofrece alternativas para mejorar los medios de vida de las poblaciones rurales y generar nuevas fuentes de empleo e ingresos

 

Actores empresariales, profesionales e investigadores compartirán con expertos nacionales e internacionales, diferentes alternativas de uso y desarrollo del bambú en el primer Simposio Internacional que se realizará el 6, 7 y 8 de noviembre en el país.

Este tipo de cultivo representa una alternativa agrícola resiliente, que contribuye al mantenimiento de los ecosistemas, fortalece la capacidad de adaptación y mitigación frente al cambio climático, a los fenómenos meteorológicos extremos y permite mejorar progresivamente la calidad del suelo.

El simposio se llevará a cabo en el Campus Omar Dengo de la Universidad Nacional de Costa Rica (UNA) en la provincia de Heredia, con el objetivo de promover el uso y cultivo del bambú, conocer nuevos avances tecnológicos, emprendimientos productivos, procesos de transformación e impulsar el desarrollo de la economía verde como herramienta para lograr el desarrollo sostenible social, económico y ambiental.

Según Octavio Ramírez, Coordinador Residente de la FAO en Costa Rica, la producción de bambú es una oportunidad para potenciar el desarrollo rural, en zonas económicamente deprimidas, gracias a su alta capacidad adaptativa en diferentes terrenos. Además, porque el cultivo genera nuevas fuentes de empleo, permite la creación de materiales para la construcción entre otros y promueve la economía verde con productos de alto valor que permiten reducir la pobreza rural.

La demanda creciente por el consumo de productos del bambú, cada vez es mayor como resultado de la innovación y el descubrimiento constante de diversos productos basados en la extracción de materiales de esta planta que posee registradas alrededor de 1301 especies, según la Organización Mundial del Bambú.

“El desarrollo del bambú es una excelente  alternativa productiva para generar sinergias y brindar respaldo a los emprendimientos que se desarrollan en diferentes áreas del territorio nacional, mediante esfuerzos innovadores relacionados con el procesamiento de fibras, agregados para la construcción, artesanías, producción de muebles, industria alimenticia, culmos en la construcción para exportación y los chips para biomasa en energía, entre otros aspectos relacionados con el uso racional del bambú”, comentó Marilyn Rojas, investigadora del Proyecto de Desarrollo del Bambú de la UNA.

Beneficios del Bambú

Los avances tecnológicos transforman las expectativas de los consumidores y el mercado, ya que se calcula que el comercio internacional representa un valor aproximado a los 2 mil millones de dólares, donde una cuarta parte corresponde productos industrializados de bambú.

También, el cultivo se aprovecha como alimento, a nivel mundial, los brotes tiernos del bambú son consumidos por al menos un tercio de la población.

Cabe resaltar, que la producción de bambú contribuye a la consecución de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, mediante los Objetivos relacionados a erradicar la pobreza, poner fin al hambre, adaptar medidas para combatir el cambio climático, garantizar la disponibilidad de agua y el saneamiento para todos, promover el trabajo decente, el crecimiento económico, producción y consumo responsable, entre otros.

Según Rojas, las plantaciones de bambú brindan servicios ambientales que van desde el control de la erosión hasta la restauración de zonas degradadas, constituyéndose en áreas con hábitat de condiciones diversas para la flora y fauna. También, eliminan grandes cantidades de CO2 de la atmósfera, mejoran la calidad y abundancia del agua, el aporte de materia orgánica, el embellecimiento del paisaje, así como la protección de márgenes de ríos y restauración de cuencas hidrográficas.

El bambú tiene la capacidad de adaptarse a climas variados, asimismo es una barrera efectiva contra el viento y sus raíces resistentes regulan los flujos de agua y evitan la erosión.

Por otra parte, el cultivo representa un recurso estratégico de biomasa que se puede utilizar como leña o  convertirse en gas para la generación de energía térmica.  Al mismo tiempo, ofrece una alternativa para mejorar los medios de vida de las poblaciones rurales que tradicionalmente han sido dependientes de los bosques, por lo que permite disminuir así la presión hacia los bosques.

Actualmente, en el país se promueve una estrategia para impulsar el desarrollo del bambú y fortalecer los emprendimientos existentes en la producción e industrialización del bambú, hacia un mayor crecimiento productivo y competitivo.

El simposio es organizado por la UNA, la Fundación para el Desarrollo del Bambú en Costa Rica (FUNDEBAMBÚ), con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la Red Internacional del Bambú y el Ratán (INBAR).