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Un agricultor de San Marcos recolecta cultivos en su parcela. © FAO/Jorge Rodríguez
Cada año, 220 millones de toneladas de alimentos se pierden en América Latina y el Caribe, lo que equivale al 11,6% de los alimentos producidos, o 330 kilogramos per cápita. Según datos de la FAO, esto representa 150 mil millones de dólares cada año en la región. Este fenómeno tiene repercusiones significativas, no solo en la economía, sino también en la seguridad alimentaria y el medio ambiente, especialmente en un contexto de creciente cambio climático.
Panorama de la canasta básica en Guatemala
El estudio Estimación de la pérdida de alimentos de 10 cadenas de la canasta básica de Guatemala realizado por la FAO en colaboración con el Observatorio Económico Sostenible (OES) de la Universidad del Valle de Guatemala, ofrece un primer análisis de este fenómeno en el país. El informe examina productos clave en la canasta básica, como maíz, frijol, arroz, tomate, cebolla, papa, banano, azúcar, huevos y leche, proporcionando una visión clara del impacto de la pérdida de alimentos en la economía guatemalteca.
Frutas recuperadas tras ser arrojadas a la basura por su apariencia. © FAO/Rosa Borg
Resultados del estudio en Guatemala
El estudio en Guatemala permitió analizar las pérdidas de diez alimentos representativos de la canasta básica mediante el Índice de Pérdidas de Alimentos (FLI, por sus siglas en inglés), desarrollado por la FAO. Los resultados muestran que el porcentaje de pérdida de alimentos en el país alcanzó un promedio de 13,83%, superior a la media regional (12,3%) y mundial (13,3%). Entre los productos analizados, el banano presentó la mayor pérdida (20%), mientras que la del azúcar fue prácticamente nula. Estas cifras evidencian la necesidad de implementar soluciones concretas, enfocadas en mejorar la tecnología y la infraestructura a lo largo de toda la cadena agroalimentaria.
Este estudio marca un hito para Guatemala, al integrarse al grupo de 11 países de la región que está desarrollando mediciones para reportar datos a los índices de pérdida o desperdicio de alimentos en pro de reducir las pérdidas de alimentos. La investigación, realizada en colaboración con instituciones gubernamentales, el sector privado y organizaciones académicas, con el apoyo de la FAO y el OES, representa un avance clave para el desarrollo de políticas y estrategias basadas en evidencia, alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible del país.
Agricultura en el departamento de San Marcos, Guatemala © FAO/Valentina Stutzin y Guadalupe Gómez Verdi
Frutas y verduras dejadas como basura por su estado de maduración, apariencia y daños menores en una feria libre del Uruguay. © FAO/Victoria R. Porras
Resultados del estudio en Guatemala
El estudio en Guatemala permitió analizar las pérdidas de diez alimentos representativos de la canasta básica mediante el Índice de Pérdidas de Alimentos (FLI, por sus siglas en inglés), desarrollado por la FAO. Los resultados muestran que el porcentaje de pérdida de alimentos en el país alcanzó un promedio de 13,83%, superior a la media regional (12,3%) y mundial (13,3%). Entre los productos analizados, el banano presentó la mayor pérdida (20%), mientras que la del azúcar fue prácticamente nula. Estas cifras evidencian la necesidad de implementar soluciones concretas, enfocadas en mejorar la tecnología y la infraestructura a lo largo de toda la cadena agroalimentaria.
Este estudio marca un hito para Guatemala, al integrarse al grupo de 11 países de la región que está desarrollando mediciones para reportar datos a los índices de pérdida o desperdicio de alimentos en pro de reducir las pérdidas de alimentos. La investigación, realizada en colaboración con instituciones gubernamentales, el sector privado y organizaciones académicas, con el apoyo de la FAO y el OES, representa un avance clave para el desarrollo de políticas y estrategias basadas en evidencia, alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible del país.