Instrumento de contribuciones voluntarias flexibles (FVC)

Dimitra: Reducción de la pobreza rural mediante la movilización comunitaria participativa

Principales repercusiones

  • Existen 1 900 clubes Dimitra con 57 000 miembros que están transformando su entorno, lo cual repercute positivamente en más de 1,5 millones de personas.
  • Se han mejorado las dotes de liderazgo de 38 000 mujeres y niñas.
  • Se crearon 133 clubes Dimitra con casi 4 000 miembros en 100 aldeas aisladas y pobres de la República Democrática del Congo en el marco de un proyecto conjunto FAO-UNICEF financiado por la Unión Europea.
  • El 30 % de los clubes ha establecido campos agrícolas comunitarios.
  • Se prevén 1 500 nuevos clubes Dimitra en 2018.

El proyecto Dimitra de la FAO lleva más de 20 años en marcha en África y ha llegado a ser un sello de calidad para mejorar la igualdad de género y la visibilidad de las mujeres como productoras agrícolas y agentes del cambio. El enfoque de los clubes del proyecto Dimitra, desarrollado en los últimos 10 años, es un enfoque emblemático que une a mujeres, hombres y jóvenes en la acción colectiva de crear mejores vidas.

Para finales de 2017, unas 57 000 personas, dos terceras partes de ellas mujeres, participaban en un total de 1 900 clubes, que se reúnen periódicamente para decidir cómo afrontar retos clave, lo cual ha repercutido positivamente en una cifra estimada de 1,5 millones de personas que se han beneficiado de las actividades de los clubes.

Por ejemplo, en el noreste de la provincia de Tshopo, en la República Democrática del Congo, el Gran Jefe tradicional del territorio de Kombe percibe los efectos positivos que han tenido los clubes en las cuestiones de género y el liderazgo de las mujeres.

“Los jóvenes están participando en los clubes y se incluye a las mujeres en la adopción de decisiones. Ahora las mujeres pueden ser candidatas para las elecciones al consejo local, lo cual ilustra cómo se ha progresado en el liderazgo femenino”, afirma. “En lo que respecta a las tareas del hogar, se ha empezado a producir un cambio en la división del trabajo. Los hombres están comenzado a desempeñar una función más importante, lo cual alivia la carga de las tareas diarias de las mujeres.”

Esto ha conllevado también una reducción ampliamente documentada de la violencia de género.“Ahora es poco frecuente ver violencia física o verbal en la aldea,” afirma un ama de casa de Kwadarawa (Níger).

“Además, las mujeres participan en las empresas más que los hombres; dedican todo su tiempo a actividades que generan ingresos”.

Se están produciendo cambios similares en la totalidad de África, lo cual ayuda a las comunidades a participar en nuevas dinámicas sociales que han aumentado su resiliencia ante el cambio climático y la inseguridad alimentaria.

En Saré Boubou (Senegal), por ejemplo, los miembros del club debatieron técnicas de agricultura climáticamente inteligente y adoptaron medidas de protección del suelo. En general, el 30 % de los clubes ha establecido campos agrícolas comunitarios, cuyos productos se consumen o se venden en los mercados locales.

En otras zonas se están produciendo cambios positivos, por ejemplo, en materia de infraestructura, educación y salud, así como la reducción de prácticas culturales perjudiciales como el matrimonio infantil.

“Ahora todas las mujeres pueden expresarse, podemos hacerlo, pero también el resto de la aldea nos escucha y valora nuestras propuestas e ideas”, señala Rougui Ba, una joven líder de un club Dimitra en Senegal. “Es estupendo poder participar en las decisiones y acciones de la comunidad.”

En 2018 se prevé un marcado aumento de los clubes, ya que otros organismos y donantes han seleccionado el enfoque Dimitra como instrumento de empoderamiento y movilización de comunidades. Se prevé la creación de al menos 1 200 nuevos clubes para 2018.

Compartir esta página