La gestión forestal sostenible para el desarrollo económico
En muchos países, el ritmo actual de aprovechamiento maderero de los bosques es inferior al crecimiento anual de los árboles. El aumento de la producción mediante mejores prácticas de gestión forestal y salvaguardas adecuadas puede liberar el potencial económico de los bosques, beneficiando a las economías nacionales y locales. Asimismo, hay oportunidades para aumentar los ingresos a través de productos forestales no madereros (PFNM) y la comercialización de servicios de los ecosistemas forestales. Sin embargo, hay barreras que impiden realizar este potencial, entre otras, oportunidades de mercado inadecuadas, capacidad limitada para la GFS y falta de inversiones en bosques. Sin embargo, en algunos casos, están surgiendo como solución esquemas de pago por servicios ambientales (PSA).
Se necesitan inversiones sustanciales para satisfacer la demanda futura de madera en rollo industrial y biocombustibles de origen forestal, lo que podría ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. La implementación de los principios de la GFS en los bosques y en el procesamiento posterior generaría múltiples beneficios económicos, incluyendo mejores medios de vida, redes de seguridad fortalecidas y una mayor conservación ambiental.
Los propietarios y administradores de bosques tienen diferentes perspectivas temporales que influyen en su toma de decisiones sobre cómo se utilizan las tierras forestales. Para que la tierra siga siendo bosque, el valor real neto de la gestión forestal debe ser mayor en comparación con otros usos potenciales de la tierra. El plazo más largo en el sector forestal puede complicar la toma de decisiones, particularmente cuando se consideran los riesgos asociados con la producción biológica a largo plazo.
Las estrategias de GFS también deberían considerar la integración del sector informal, ya que estos usuarios de los bosques desempeñan funciones importantes en los países en desarrollo al generar empleo local en la extracción en pequeña escala, el procesamiento de la madera, el ecoturismo y la prestación de servicios ambientales.
En los países emergentes, el comercio de productos forestales ha contribuido al crecimiento económico y la mitigación de la pobreza. Sin embargo, algunos casos de comercio de productos forestales se caracterizan por monopsonios y cadenas de mercado explotadoras, lo que margina aún más a las personas desfavorecidas. Se deben implementar salvaguardas, condiciones de trabajo justas y una distribución equitativa de derechos, responsabilidades y beneficios para garantizar el uso legal y sostenible de los bosques. La buena gobernanza es esencial para permitir una producción y un comercio sostenibles y equitativos.
