Detener la deforestación, la degradación y las emisiones

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Detener la deforestación y la degradación de los bosques: una solución clave para el clima, el desarrollo y los medios de vida

Los bosques desempeñan un papel insustituible como enormes sumideros de carbono; son reservorios naturales que absorben y almacenan dióxido de carbono (CO₂) de la atmósfera en su biomasa vegetal y sus suelos. Según las estimaciones actuales, la deforestación y la degradación de los bosques son responsables de aproximadamente el 11 % de las emisiones mundiales de CO₂. Esto subraya la urgencia y la importancia de abordar la deforestación para alcanzar los objetivos climáticos, de desarrollo y de seguridad alimentaria.
Más allá del carbono, los bosques son recursos clave para mejorar los medios de vida de los pueblos indígenas, los pequeños productores y las comunidades locales, permitiéndoles asegurar ingresos y garantizar la seguridad alimentaria. Como focos mundiales de biodiversidad, los bosques tropicales son esenciales para garantizar servicios ecosistémicos vitales: regulan el clima local, proporcionan agua dulce, así como recursos alimentarios y energéticos.
A pesar de su importancia, la deforestación es generalizada, con una preocupante pérdida anual de 10 millones de hectáreas. Detener la deforestación podría evitar, de forma rentable, la emisión del 14 % del total necesario entre 2020 y 2050 para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 °C, y, de lograrse, aportaría una amplia gama de beneficios colaterales para las personas, la productividad agrícola y la biodiversidad.
Nuestro trabajo

Desde 2008, la FAO ha apoyado a los países en el desarrollo e implementación de agendas nacionales para la Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de los bosques (REDD+). De manera creciente, el trabajo de la FAO ha evolucionado de la preparación para REDD+ hacia abordar las causas subyacentes de la deforestación en los sectores de agricultura, silvicultura y uso de la tierra (AFOLU), apoyando a los países en la implementación de medidas para hacerles frente.
Actualmente, la FAO apoya a más de 40 países en el fortalecimiento y alineación de acciones y políticas, incentivos e inversiones para detener la deforestación, la degradación de los bosques y las emisiones, al tiempo que contribuyen a sistemas agroalimentarios sostenibles y al cumplimiento de compromisos internacionales en materia de REDD+ y otros marcos relacionados con los bosques y el clima.

Aprovechar las oportunidades relacionadas con el clima y la financiación basada en los resultados

Apoyar el diseño de políticas, la financiación inicial, los mecanismos de financiación basados en resultados y los pagos, así como REDD+.

Transformar los sistemas agroalimentarios

Fomentar la sostenibilidad en las cadenas de suministro agrícola y en las prácticas de uso de la tierra, promoviendo al mismo tiempo la conservación y la producción para bosques saludables y medios de vida sostenibles.

Aprovechar los bosques para la mitigación del cambio climático

Impulsar la gestión sostenible de los bosques como solución climática, con beneficios colaterales para los medios de vida, la biodiversidad y la resiliencia.

Áreas de acción en detalle

Pagos/resultados basados en desempeño y financiamiento internacional público y privado:

+  La FAO ayuda a los países a desenvolverse en el complejo panorama de los mercados de carbono, los derechos de carbono y el financiamiento basado en resultados, apoyándolos en la preparación de sus propuestas y en las negociaciones con fondos internacionales públicos y privados, como el Fondo Verde para el Clima (GCF) y otras iniciativas de financiamiento REDD+.

Fomento de cadenas de suministro agrícolas sostenibles y desvinculación de la agricultura de la deforestación:

+  Reconociendo la conexión crucial entre bosques y agricultura, la FAO apoya cambios sistémicos fomentando cadenas de suministro agrícolas sostenibles y desvinculando la producción de productos agrícolas de la deforestación. Se abordan barreras estructurales, desafíos de gobernanza y políticas de uso de la tierra para promover prácticas más sostenibles.

Paisajes integrados y transformación de los sistemas alimentarios:

+  La FAO promueve enfoques integrados de uso del suelo y la transformación de los sistemas agroalimentarios como estrategias clave para reducir la deforestación y conservar los bosques. Al equilibrar objetivos de conservación y producción, se fortalece la resiliencia y se promueven prácticas sostenibles de uso del suelo.

Acción climática local y cadenas de valor forestales sostenibles y legales en las estrategias REDD+:

+  La FAO cataliza acciones climáticas locales e integra cadenas de valor forestales sostenibles y legales en las estrategias REDD+, reconociendo los múltiples roles de los bosques tanto en la mitigación del cambio climático como en el sustento de las comunidades.

Costo-efectividad de las medidas para detener la deforestación y degradación:

+  Una parte central de nuestra misión es evaluar la rentabilidad y escalabilidad de las medidas para detener la deforestación y la degradación, asegurando que las estrategias generen impactos tangibles y duraderos en línea con los compromisos climáticos y de biodiversidad nacionales e internacionales.

Sistemas nacionales de monitoreo forestal (SNMF):

+  La FAO brinda apoyo técnico a los países para desarrollar SNMF sólidos y transparentes, esenciales para monitorear los cambios en la cobertura forestal, realizar inventarios forestales nacionales exhaustivos y reportar las existencias de carbono y las reducciones de emisiones. Estos sistemas sustentan la toma de decisiones basada en evidencia y la implementación de REDD+.

Niveles de referencia de emisiones forestales (FREL) y reporte de resultados REDD+:

+  La FAO apoya a los países en el establecimiento de FREL y en la presentación de informes sobre sus emisiones históricas y actuales de gases de efecto invernadero en el sector forestal. Estas actividades son esenciales para crear puntos de referencia que permitan medir el progreso en los compromisos climáticos nacionales e internacionales.

Salvaguardas y Sistemas de Información de Salvaguardas:

+  La FAO apoya a los países en el desarrollo de salvaguardas REDD+ y Sistemas de Información de Salvaguardas, garantizando el cumplimiento de las “salvaguardas de Cancún”. Estas salvaguardas ayudan a minimizar los riesgos sociales y ambientales al tiempo que se maximizan los beneficios para las personas y la biodiversidad.

Gobernanza, políticas y marcos legales:

+  La FAO apoya a los países en la creación de un entorno propicio para la implementación de actividades REDD+. Esto incluye el fortalecimiento de sistemas de gobernanza, el desarrollo de políticas eficaces y marcos legales, la resolución de cuestiones de tenencia de la tierra y la promoción de la participación de múltiples partes interesadas.

Igualdad de género y equidad:

+  La FAO promueve enfoques sensibles al género en la conservación de los bosques y la acción climática, garantizando que tanto mujeres como hombres participen y se beneficien por igual de las acciones para detener la deforestación, la degradación forestal y las emisiones.

Participación de actores locales, regionales y nacionales:

+  La FAO anima a los países a garantizar que las acciones para detener la deforestación sean participativas e inclusivas, involucrando a actores locales, regionales y nacionales en los procesos de planificación y toma de decisiones. Este enfoque mejora la coherencia de las políticas, la transparencia y la elaboración de soluciones impulsadas por las comunidades.

Gestión del conocimiento y cooperación Sur-Sur:

+  La FAO desarrolla y difunde productos y herramientas de conocimiento innovadores para abordar los factores subyacentes de la deforestación. Facilitamos la cooperación Sur-Sur y las iniciativas de intercambio de conocimientos, permitiendo que los países compartan buenas prácticas y amplíen políticas eficaces de uso del suelo y conservación forestal.